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FACEBOOK.COM/ CATHOLIC NEWS HERALD ESPAÑOL

January 1, 2021 | catholicnewsherald.com

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Rafael Prieto

La nostalgia que llega con los años

La vejez es complicada. Aún más con la vaina del Covid-19. Los tiempos de la piel de bronce dorada, con Australian Gold y Hawaiian Tropic, han dejado un legado de pecas y marcas imposibles de borrar en la cara y las manos.

Las libras de más que antes se eliminaban rápidamente con una dieta temporal de granos (menestra en mi adorado Ecuador), se resisten a desaparecer.

En las orejas y las cejas se empiezan a desarrollar unos cabellos que se transforman en gruesos alambres. Ese fenómeno obliga a aprender con paciencia la ciencia del depilador, los peines y las tijeras.

Los ojos que lograban descifrar la letra más diminuta a distancia, para la copialina y otros menesteres, ya no ven lo mismo y se requiere inundar de gafas todos los anaqueles y rincones de la casa. La operación lupa es “mandatoria”, como decimos los hispanohablantes de Estados Unidos.

Aquí en la tierra de libertad donde, con toda razón, en una emergencia parar en la autopista para orinar en un potrero está prohibido, unos pañales modelo calzoncillo se hacen indispensables cuando se hacen largas jornadas.

Uno tiene que estar pendiente diariamente del azúcar en la sangre, la presión arterial y los triglicéridos. Ahora, en tiempos de pandemia, la toma de temperatura se me ha convertido en obsesión. Igual me ha dado, por razones sanitarias de prevención, mantener las fosas nasales repletas de Vick VapoRub, que me da el aspecto desagradable de tener mocos colgando perennemente. Un frasco repleto de cápsulas de Ricola para conservar la garganta limpia y fresca es mi compañía inseparable.

A mí se me dañaron las piernas después de mover unos pesados parales de unas carpas en la Coalición. Fue en la hermosa celebración novembrina de Panamá en 2018, pletórica de murgas, tambores y cumbias. Sentí un corrientazo que llegó a la columna vertebral. El asunto derivó en una ciática, que en mi absoluta cobardía de contender el dolor me lanzó a refugiarme en mi futón gris, y convertirme en un sedentario inmarcesible.

Mis sicólogos de cabecera siguen siendo Sabina, Serrat, el fallecido Aute, Ana Belén, Pablo, Silvio, Natalia, Ana y Jaime. Mis héroes de la pubertad, la mayoría se han ido, Leonardo Fabio (‘Quiero aprender de memoria...’), Sandro (‘Por ese palpitar que tiene tu mirar’…), José José (‘Hay que ver cómo es el amor que vuelve a quien lo toma gavilán o paloma’…). La lista es interminable.

Los genes de mi madre me han protegido de desentejarme y quedar con la testa como una bola de billar. De la misma forma, la dentadura firme que heredé de ella, se mantiene bien.

Lo que no me legó mi madre es una fórmula para combatir la nostalgia. Ese duelo eterno por no haber permanecido en Paipa, mi pueblo querido, para evitar su metódica destrucción. Me hace falta estar con mi padre, que en su noveno piso de existencia se mantiene, bello, lúcido y entero como los urapanes del parque Jaime Rook.

Veo los árboles en mis recorridos frecuentes que hago con Google Maps, en los que me apabulla la tristeza. Tengo necesidad de abrazar a mi hermana menor y a Sonita. Quiero estar con mis hermanos extendidos, los Prieto Neira, los Prieto García y los LaRotta, que siempre están en mi corazón.

Quisiera encontrarme con mis primos franceses, los descendientes de Pablo Solano y Jeanne Vassas. Ir como intruso, como lo hacía de niño, y departir con Nathalie, Pablito y Quique, con el precioso lago Sochagota de panorámica. Disfrutar del cariño y el buen humor de la matrona de la familia.

‘Todo vuelve a Jesus’

El Obispo Jugis conmemoró la Solemnidad de María, Santa Madre de Dios, el 1 de enero

SUEANN HOWELL REPORTERA SENIOR

CHARLOTTE — Conmemorando que en el octavo día después del nacimiento de Cristo, San José pronunció públicamente el nombre de Jesús por primera vez, el Obispo Peter Jugis recordó a los reunidos en la Catedral San Patricio por la Misa del 1 de enero, la distinción de Nuestra Señora como Madre de Dios y que el llevar el nombre de cristianos es “todo por Jesús”.

“Al octavo día después del nacimiento del Niño, se le da el santo nombre de Jesús al niño nacido de María. Eso es lo que estamos conmemorando en este, el octavo día de Navidad, un evento muy significativo en la vida de Jesús según la ley judía”, explicó el Obispo Jugis durante su homilía en la Misa a capacidad reducida, transmitida ‘en vivo’ desde la catedral para los fieles de la Diócesis de Charlotte. (El 1 de enero es normalmente un día sagrado de obligación, pero el obispo continúa dispensando la obligación de asistir a Misa en persona).

Fue al octavo día después del nacimiento de Jesús que San José le dio el nombre que el ángel le había señalado antes que fuera concebido.

En su homilía, el Obispo Jugis recordó que durante esa ceremonia religiosa judía, Jesús fue incorporado al pacto de Dios con Israel.

También señaló que, “Es por Jesús que FOTO PROVISTA POR JAMES SARKIS María tiene el título de Madre de Dios. Si no El Obispo Peter Jugis celebró una Misa transmitida ‘en vivo’ por redes hubiera Jesús, no habría razón para el título sociales el 1 de enero, conmemorando la Solemnidad de María, Santa de Madre de Dios”. Continuó, “Es por Jesús Madre de Dios, desde la Catedral San Patricio en Charlotte, para los fieles que San José tiene su vocación como padre de la diócesis. adoptivo (de Jesús)”.

“Todo vuelve a Jesús. Todo depende de Jesús”. asumimos la gran responsabilidad de vivir nuestra

“La Santísima Madre y San José tienen el vida diaria en fiel testimonio de ese nombre que privilegio extremo que Dios les dio de recibir a llevamos”. Jesús en el mundo y elevarlo a la edad adulta. ¡Qué El Obispo Jugis animó a las personas a pronunciar inmenso honor les otorgó Dios!”. el nombre de Jesús como una bendición para sus

Y, luego continuó, “Qué tremendo honor nos familias por el Nuevo Año, basándose en la antigua ha otorgado Dios. También es debido a Jesús que oración: “El Señor te bendiga y te guarde. Que el llevamos el nombre de cristianos ... Nuestro nombre rostro del Señor brille sobre ti y tenga piedad. El como pueblo toma su nombre de Cristo: ‘cristiano’. Señor te mire con bondad y te dé paz. Entonces Somos conocidos en esta vida como seguidores de invocarás Mi nombre y yo los bendeciré”. Jesús el Salvador”. Al concluir su homilía, el Obispo Jugis dijo:

El nombre Jesús significa “Dios salva”, señaló. “Comencemos este Año Nuevo con esa bendición

“Así como San José y la Santísima Madre del Señor, junto con San José, junto con nuestra asumieron una gran responsabilidad, así también Santísima Madre, la Madre de Dios, pronunciando nosotros, como cristianos, que llevamos Su nombre, ese santísimo nombre, Jesús”.

Ministerio Hispano ofreció saludo por fiestas decembrinas

CHARLOTTE — El Padre Julio Domínguez, a nombre del Obispo Peter Joseph Jugis; el canciller y vicario general, Padre Joseph Winslow; el equipo de coordinadores de vicariato y suyo propio, envió dos mensajes en video a la comunidad católica hispana de la Diócesis de Charlotte con motivo de la celebración de las fiestas de Navidad y Año Nuevo a través de redes sociales.

n El mensaje del 25 de diciembre lo puede encontrar en www.facebook.com/CNHEspañol y www.youtu.be/2izl3IClpQ n El saludo por Año Nuevo, publicado el 31 de diciembre, está disponible en la misma página de Facebook y en https://youtu.be/IBKvUydhfq0

El Padre Domínguez, director del Ministerio Hispano de la Diócesis de Charlotte, destacó los aspectos positivos de este difícil año y la esperanza de mejores tiempos para 2021. — César Hurtado, reportero

El Obispo Peter Jugis celebró la Misa navideña de medianoche a capacidad reducida en la catedral San Patricio. La liturgia se transmitió ‘en vivo’ online para los fieles de la Diócesis de Charlotte.

PATRICIA L. GUILFOYLE | CATHOLIC NEWS HERALD

El verdadero significado de la Navidad es el amor de Jesucristo, dijo el Obispo Jugis

PATRICIA L. GUILFOYLE EDITORA

CHARLOTTE — El verdadero significado de la Navidad se encuentra en el amor de Jesucristo, dijo el Obispo Peter Jugis a una reducida congregación durante la Misa de Gallo.

La Catedral San Patricio, como muchas otras iglesias en la Diócesis de Charlotte, ofreció festivos pero sobrios servicios navideños del 24 al 25 de diciembre debido a la pandemia de COVID-19. Las precauciones de salud implementadas para reducir la propagación del coronavirus incluyeron la reducción de la asistencia presencial a Misas y la transmisión ‘en vivo’ para quienes no podían asistir en persona.

En la tradicional Misa de Gallo, celebrada la medianoche del 24 de diciembre, poco más de 100 personas que se habían inscrito con anticipación se sentaron socialmente distanciadas, mientras que cientos vieron la misa transmitida ‘en vivo’ por YouTube. Los arreglos florales de Pascua contrastaban con la escasa congregación, cubiertas faciales y estaciones de desinfección de manos.

El Obispo Jugis bendijo a los presentes y espectadores de la transmisión. Les dijo que habían “venido al lugar correcto” para celebrar el verdadero significado de la Navidad.

El significado de la Navidad se encuentra en la palabra misma, dijo. “El verdadero significado de la Navidad es Jesús. Es así de simple. Una palabra simple, una palabra: el nombre del Hijo de Dios”.

Luego continuó, “el mundo busca y busca y busca el verdadero significado de la Navidad”.

Las redes sociales, dijo, nos dice que “el verdadero significado de la Navidad es la familia. El verdadero significado de la Navidad son los amigos. Sonrisas, salud, bienestar y alegría”.

Luego recordó las palabras de San Agustín: “Nos has hecho para ti, oh Señor, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti”.

Eso, señaló, “describe el mundo a la perfección: la búsqueda incansable de una manera de darle un significado secular a la Navidad sin hacer referencia a Jesús”.

“Sin Jesús”, dijo el Obispo Jugis, “todo lo que te queda son unas ‘felices fiestas’, pero no la Navidad”.

Animó a las personas a demostrar el verdadero significado de la Navidad al compartir el amor de Cristo con los demás.

“Dios Padre le dio al mundo el regalo de Su Hijo, y ese es el regalo más grande que podemos dar a los demás”, dijo. “Vivir, practicar nuestra fe y llevar el amor de Cristo a los demás”.

Saludando a los presentes y espectadores de toda la diócesis, el Obispo Jugis dijo: “Mis mejores deseos para todos ustedes en la celebración de la gran fiesta de Navidad. Que Cristo los bendiga a ustedes y sus familias, con Su paz y amor, hoy y siempre”.

Más online

En www.catholicnewsherald.com: Vea un video de la misa y la homilía del obispo Jugis

FE FAMILIA FRATERNIDAD

Caballeros de Colón

Considere unirse a los más de 2 millones de miembros de la organización fraternal católica más grande del mundo y registrándose en línea hoy en: www.kofc.org/es

Celebremos la adoración del Niño Dios

El seis de enero, con la llegada de los Reyes Magos

CÉSAR HURTADO REPORTERO

CHARLOTTE — Melchor, Gaspar y Baltazar, los tres reyes magos de Oriente que la tradición nos cuenta llegaron a celebrar el nacimiento de Jesús en Belén, son los símbolos de una arraigada tradición hispanoamericana que los señala como los infaltables visitantes que llegan a los hogares cada seis de enero, a entregar regalos y dulces a los niños que se han portado bien durante el año.

En Pátzcuaro, Michoacán, una pequeña ciudad en México, de donde es originario el artista mexicano Luis Abúndez, la costumbre era esperar que los Santos Reyes dejaran los regalos.

“Por la noche del 5 ya teníamos listos, bien alineados, nuestros zapatos al lado de la cama. Si nos habíamos portado bien durante el año, a la mañana siguiente encontrábamos los juguetes junto a nuestros zapatos”, relató.

Lázaro García, natural de Santa Ana, Oaxaca, una zona rural de México, dijo que en su pueblo la celebración tenía un carácter netamente religioso. “No recuerdo regalos, pero si el fervor con el que asistíamos a las representaciones de las Posadas y luego a la fiesta de Reyes”.

En España la fiesta iniciaba con la cabalgata de la víspera. El cinco de enero por la tarde los Reyes Magos recorrían las calles principales entregando caramelos y golosinas a niños y adultos que aguardaban su paso.

La fiesta concluía el seis por la tarde, cuando la familia se reunía con amigos para partir la tradicional ‘Rosca de Reyes’, un pan de dulce adornado con frutas confitadas, miel e higos, simulando las joyas de una corona real, y en cuyo interior se hallan pequeños ‘Niños Jesús’. Las personas que los encuentran deben ofrecer tamales y atole el día de la Candelaria, fiesta que se celebra el 2 de febrero, cuando se levanta del pesebre al Niño Dios.

UN AÑO DIFERENTE

Muchas iglesias de Charlotte incluían la presencia de los Reyes Magos en la celebración de sus Posadas y Pastorelas,

CORTESÍA MANOLO BETANCUR Alrededor de la Rosca de Reyes celebraremos la adoración del recién nacido Niño Jesús.

pero en el año 2020 todo ha sido diferente.

La pandemia de COVID-19 obligó a reducir el número de asistentes a las Misas y actos celebratorios. Rosarios, posadas y pastorelas se celebraron en la intimidad del hogar y por redes sociales. Las Misas se han presenciado mayoritariamente a través de transmisiones online por Facebook y YouTube.

Manolo Betancur, propietario de la panadería Manolo’s Bakery, espera preparar la tradicional Rosca de Reyes en un número más limitado. La pandemia ha afectado a todos los pequeños negocios y el suyo no es la excepción.

Más allá de la preparación con insumos de calidad, explica que el secreto del sabor es mantener la tradición en la preparación. “Le ponemos amor y mucha dedicación, aunque tengamos que venderla al mismo precio que otros”.

“Mi negocio no gira alrededor del dinero sino de las personas”, dice y explica que el 10 por ciento de los ingresos de la venta de Roscas de Reyes este año será destinado a una obra benéfica en ‘Tent City’, una zona de la ciudad en la que se han instalado, bajo carpas, decenas de personas sin hogar.

“Si van a comprar una Rosca de Reyes para celebrar en la casa, no les pido que únicamente me compren a mí sino que también a cualquier otro pequeño negocio. Necesitamos apoyarnos como comunidad”, puntualizó.

Este seis de enero, con o sin Rosca, los católicos nos reuniremos en el calor del hogar a adorar al recién nacido Niño Jesús, Dios hecho hombre.

Lecturas Diarias

ENE. 3-9

Domingo (Epifanía del Señor): Isaías 60:1-6, Efesios 3:2-3a. 5-6, Mateo 2:1-12; Lunes (Santa Isabela): 1 Juan 3:22–4, 6, Mateo 4:12-17. 23-25; Martes (San Juan Nepomuceno Neumann): 1 Juan 4:7-10, Marcos 6:34-44; Miércoles: 1 Juan:4, 11-18, Marcos 6:45-52; Jueves: 1 Juan 4:19–5, 4, Lucas 4:14-22; Viernes: 1 Jun 5:5-13, Lucas 5:12-16; Sábado: 1 Juan 5:14-21, Juan 3:22-30 ENE. 10-16

Domingo (Fiesta del Bautismo del Señor): Isaías 42: 1-4. 6-7, Hechos 10:34-38, Marcos 1:7-11; Lunes: Hebreos 1:1-6, Mc 1:1420; Martes: Hebreos 2:5-12, Marcos 1:21-28; Miércoles: Hebreos 2:14-18, Marcos 1:29-39; Jueves: Hebreos 3:7-14, Marcos 1:40-45; Viernes: Hebreos 4:1-5. 11, Marcos 2: 1-12; ‘Bautismo de Cristo’ (1585), óleo en liezo de Domenico Tintoretto. Venecia (15601635). Imagen cortesía del Museo del Prado, Madrid. Sábado: Hebreos 4:12-16, 54-60, Marcos 2:13-17 ENE. 17-23

Domingo: 1 Samuel 3:3b10. 19, 1 Corintios 6:13c-15a. 17-20, Juan 1:35-42; Lunes: Hebreos 5:1-10, Marcos 2:1822; Martes: Hebreos 6:10-20, Marcos 2:23-28; Miércoles: Hebreos 7:1-3. 15-17, Marcos 3:1-6; Jueves (Santa Inés): Hebreos 7:23–8, 6, Marcos 3:712; Viernes (Día de Oración por la protección legal de los niños no nacidos): Hebreos 8:6-13, Marcos 3:13-19; Sábado: Hebreos 9:2-3, 11-14, Marcos 3:20-21

CORTESÍA ESCUELAS CATÓLICAS DIÓCESIS DE CHARLOTTE Grupo de padres de familia de la escuela St. Michael en Gastonia, voluntarios del programa ‘Madrinas y Padrinos’, durante un servicio de información realizado en su parroquia al término de una Misa dominical. En 2021 se espera que el programa de asistencia a la comunidad latina se extienda a 6 de las 19 escuelas diocesanas.

Programa ‘Madrinas y Padrinos’ de Escuelas Católicas promete extenderse en 2021

CÉSAR HURTADO REPORTERO

CHARLOTTE — Para alcanzar con efectividad a la comunidad latina en las escuelas católicas de la Diócesis de Charlotte, el programa ‘Madrinas y Padrinos’, una iniciativa lanzada a inicios de 2019, planea extender su alcance a 6 de las 19 escuelas con las que cuenta el sistema, tres más de las que ahora atiende.

El proyecto recluta voluntarios que ayudan a las escuelas en su tarea de comunicación con familias hispanas que solicitan información sobre el sistema y se sienten más cómodos hablando en su propio idioma.

Los participantes reciben un entrenamiento que les permite conocer a fondo el funcionamiento del sistema escolar y las ayudas financieras disponibles. Al transmitir esta información de manera correcta se brinda una ayuda invalorable a los padres de familia que buscan registrar a sus hijos en las escuelas.

“Las ‘Madrinas y Padrinos’ no son un grupo separado, son parte integrante de la escuela, embajadores latinos que apoyan en eventos, open houses y como representantes de la escuela donde quiera que se les necesite”, aseguró Angélica Hurtado, coordinadora de reclutamiento de estudiantes.

El programa fue creado por el Latino Enrollment Institute de la Universidad Notre Dame en Indiana, con la finalidad de promover los valores y el acceso a la educación católica de calidad, abrazando la universalidad de la Iglesia, aumentando la inscripción de latinos, educando cultural y lingüísticamente en la diversidad a los alumnos a través de una excelente formación académica.

En el verano de 2018, gracias al interés de los líderes de las escuelas católicas de Charlotte, personal de reclutamiento recibió el entrenamiento para aplicar el programa en Charlotte, dando sus primeros frutos en la escuela St. Michael en Gastonia, donde el primer grupo de Madrinas y Padrinos concluyó su preparación y ya ha participado en diversos eventos dentro y fuera de la escuela.

En la escuela Our Lady of Assumption un grupo completará su formación en marzo de 2021, pero ya colabora en diversas actividades de la escuela.

Luisa Iveth García Morales, voluntaria de esta escuela, afirma estar feliz de ser parte del proyecto. “A pesar de la pandemia de COVID-19 y el cambio de vida tan drástico que todos tuvimos que hacer, no nos rendimos, seguimos con nuestras clases por video llamadas y esperamos estar listas y muy bien preparadas para poder responder a cada una de las dudas de los padres de familia y ayudar a sus hijos para que ingresen a estas hermosas escuelas de fe”, añadió.

En la actualidad, además de St. Michael y Our Lady of Assumption, la iniciativa se está implementando en la escuela secundaria Christ the King en Huntersville y Our Lady of Mercy en Winston Salem, bajo la aceptación, apoyo y supervisión de los directores de esos centros educativos.

Allana-Rae Ramkissoon, M.Ed., directora de la Escuela Católica Nuestra Señora de la Asunción, dijo que “el papel de las Madrinas como defensoras de la comunidad latina ha sido sustancial y sin precedentes”.

Destacó que existe gran “entusiasmo

Father Casey Coleman at St. Mary Mother of God Church in Sylva said hello to parishioners as he and volunteers passed out blessed palm branches and bottles of holy water during a ‘“drive-through” procession in the church’s parking lot for Palm Sunday. Proper face masks notwithstanding, the joy everyone had was evident on their faces despite the restrictions the coronavirus pandemic has placed on people’s ability to gather for worship.

DELLA SUE BRYSON | CATHOLIC NEWS HERALD

2020: Responding in faith to a challenging year

CATHOLIC NEWS HERALD

This past year has certainly been anything but ordinary – in almost every part of our lives. And nearly every aspect of the work of the Church – everything from the celebration of the sacraments, to outreach to the sick and the poor, to pastoral outreach and care – was affected by the COVID-19 pandemic.

Nevertheless, thanks to the many blessings from God and reliance on each other, the people of the Diocese of Charlotte have responded to the challenges posed by the pandemic with charity, hope and faith in God’s providence – striving for holiness as missionary disciples of Christ.

The inspiring efforts documented in each edition of the Catholic News Herald throughout 2020 are many. The diocesan offices and most of the 92 parishes and missions across western North Carolina transitioned to working remotely with minimal interruption in services. People turned to livestreamed Masses, online giving, Zoom calls and email prayer chains to support their parish and one other. And all of the diocese’s 19 schools successfully shifted to remote learning in March – then, through careful planning and collaboration with families and public health officials, returned to in-person instruction in the fall.

When the pandemic forced churches to cancel most public Masses and parish activities in March, then carefully reopen with safety measures in place, clergy and parish staffs adapted with creativity and inspiration – finding new ways to connect in the digital sphere. Masses streamed live on Facebook and YouTube. Email newsletters instead of paper bulletins. Phone calls and porch visits. Drive-through Eucharistic Adoration, rosaries and outdoor confessions. Whatever it took to help keep people connected to their faith and to their parish family.

Temporarily waiving the obligation to attend Sunday Mass, Bishop Peter Jugis entreated the faithful to rely on the Holy Spirit to strengthen and guide them through the difficult times. “Be holy,” he reminded people in numerous homilies, entreating everyone to exercise the fruits of the Holy Spirit: among them charity, patience, kindness, gentleness, self-control, faithfulness and peace.

As the pandemic ravaged families and local economies, the Church in western North Carolina also redoubled its efforts to provide charitable outreach.

Catholic Charities Diocese of Charlotte quickly adapted to respond to increased requests for food, clothing, financial help and burial assistance. Food pantries in Asheville, Charlotte and Winston-Salem shifted to curbside food distribution when pandemic restrictions prevented people from coming inside to receive emergency food assistance. Catholic Charities’ burial assistance program provided more than a hundred dignified burials for the especially destitute, including four children.

When the pandemic shut down most in-person services, Catholic Charities also successfully converted its counseling program to a telehealth service to serve hundreds of people remotely through what has been an anxiety-filled time for so many.

Catholic Charities also provided emergency rent and utility assistance to families economically affected by the pandemic, to help them avoid utility shut-offs or eviction. This was made possible thanks to financial support from the people of the diocese as well as two grants totaling $115,000 from the Charlotte-Mecklenburg COVID-19 Response Fund.

Across the diocese, parish food pantries also continued their vital work to meet the needs of the underserved in their communities. Besides providing food and emergency aid, parishes also partnered with local

GIULIANA RILEY | CATHOLIC NEWS HERALD Father Jason Christian, pastor of St. John the Baptist Church in Tryon, delivers his homily to parishioners in their cars during an outdoor Mass at Harmon Field in March, after most churches had stopped indoor worship services.

Homebound parishioners watch as Father Richard Sutter delivers his homily for a March 22 Mass that was streamed online from St. Gabriel Church in Charlotte.

PHOTO PROVIDED PHOTO PROVIDED Catholic schools opened last fall for in-person instruction using an extensive protocol of health screenings, frequent cleaning and handwashing, face coverings, safe distancing, protective barriers and other measures to keep students and staff healthy and safe. Remote learning options were also offered for students who opted to stay at home due to health concerns.

2020: Responding in faith to a challenging year

finding new ways to connect in the digital sphere. Masses streamed live on Facebook and YouTube. Email newsletters instead of paper bulletins. Phone calls and porch visits. Drive-through Eucharistic Adoration, rosaries and outdoor confessions. Whatever it took to help keep people

Temporarily waiving the obligation to attend Sunday Mass, Bishop Peter Jugis entreated the faithful to rely on the Holy Spirit to strengthen and guide them through the difficult times. “Be holy,” he reminded people in numerous homilies, entreating everyone to exercise the fruits of the Holy Spirit: among them charity, patience, kindness, gentleness, self-control,

As the pandemic ravaged families and local economies, the Church in western North Carolina also redoubled its efforts to provide charitable

Catholic Charities Diocese of Charlotte quickly adapted to respond to increased requests for food, clothing, financial help and burial assistance. Food pantries in Asheville, Charlotte and Winston-Salem shifted to curbside food distribution when pandemic restrictions prevented people from coming inside to receive emergency food assistance. Catholic Charities’ burial assistance program provided more than a hundred dignified burials for the especially destitute, including four children.

When the pandemic shut down most in-person services, Catholic Charities also successfully converted its counseling program to a telehealth service to serve hundreds of people remotely through what has

Catholic Charities also provided emergency rent and utility assistance to families economically affected by the pandemic, to help them avoid utility shut-offs or eviction. This was made possible thanks to financial support from the people of the diocese as well as two grants totaling $115,000 from the Charlotte-Mecklenburg COVID-19 Response Fund.

Across the diocese, parish food pantries also continued their vital work to meet the needs of the underserved in their communities. Besides providing food and emergency aid, parishes also partnered with local health care providers to host free COVID-19 testing.

Hispanic Ministry, as well as Campus Ministry, RCIA, Youth Ministry, Lay Ministry and other programs across the diocese also shifted to virtual services and video conferencing after the pandemic prevented in-person meetings and classes.

The 2020 Eucharistic Congress was necessarily re-imagined in response to the pandemic. The 16th annual Congress, originally scheduled for Sept. 12-13, 2020, shifted from what would have been a large celebration in uptown Charlotte to parish- and home-based family celebrations. Parishes developed their own worship and educational programs for youth and adults alike, including Eucharistic Adoration and Mass. Bishop Jugis offered a special Mass streamed live from St. Patrick Cathedral in Charlotte, and the Catholic News Herald provided supplemental educational materials for families to deepen their devotion to the Eucharist.

Not even a pandemic could stop the work of the Church in fostering vocations as well, and so on July 24, 2020, Bishop Jugis conferred the sacrament of holy orders on Jacob Mlakar and Jonathan Torres, welcoming them as the diocese’s newest priests. The next month, on Aug. 15, 2020, he instituted as acolytes 12 men in formation for the permanent diaconate. And on Sept. 15, 2020, he formally opened and blessed the new permanent home for St. Joseph College Seminary. The diocese’s growing vocations program now supports 41 men in various stages of formation for the priesthood.

The pandemic also did not stop the Diocese of Charlotte Housing Corp. from continuing its ministry to build affordable housing for vulnerable seniors, adults with developmental and intellectual disabilities, and other vulnerable/underserved populations. Guardian Angel Villa, a three-story, 81-unit community in Charlotte for seniors – the diocese’s largest project to date – opened in December.

As a new year dawns, we pray that God will continue to guide us every step of the way and that we are able to rise to the challenges we face – striving together in faith and holiness, serving as examples of His love and mercy to others. Bishop Peter Jugis surveys the damage after a fire destroyed the office of Our Lady of Lourdes Church in the early morning hours of July 27. The Monroe parish was his last pastoral assignment before being named the fourth Bishop of Charlotte in 2003.

PHOTO PROVIDED

Top stories of 2020

In 2020, 369,106 visitors to www.catholicnewsherald.com viewed a total of 641,036 pages. The top 10 headlines last year were: n 10 facts about Advent....................................................................................................................... 19,560 n Where to watch Mass online ........................................................................................................... 16,906 n Tabernacle containing the Eucharist stolen from Boone Catholic church.........................14,730 n Offering Masses for the dead ...........................................................................................................9,559 n Priest assignments for 2020.............................................................................................................8,381 n View the current print edition of the Catholic News Herald.....................................................7,926 n Fire destroys Monroe church office.................................................................................................7,827 n Most public Masses cancelled; diocesan schools suspend classes........................................ 6,951 n St. Joseph, patron saint of departing souls...................................................................................6,736 n Sunday Mass obligation waived for Catholics of the diocese ..................................................5,745

2020: RESPONDING IN FAITH

PATRICIA L. GUILFOYLE | CATHOLIC NEWS HERALD Atrium Health’s COVID-19 mobile testing bus was out April 29 at Our Lady of Consolation Church in Charlotte, screening 170 people and testing 123 people who drove up throughout the day. Part of Atrium Health’s ongoing effort to address underserved and minority communities in Charlotte that have limited access to COVID-19 testing, healthcare professionals at the Coronavirus Testing Center conducted free screenings and immediate tests for COVID-19 as well as assess other health issues with patients, including the ability to socially isolate and quarantine, and make connections to other resources such as access to food or a pharmacy. The mobile testing event at the church was one of its most successful, Atrium officials said afterwards.

PHOTO PROVIDED Mercy Sister Martha Hoyle and Mercy Sister Susie Dandison are pictured at the health clinic they operate in Mocksville. Just like other Sisters of Mercy throughout the order’s history, the sisters responded to the growing need to provide health care to people in need during the pandemic.

PHOTO PROVIDED Churches reopened to in-person worship services after putting in place sanitation and other health measures based on guidance from the U.S. Centers for Disease Control and the N.C. Department of Health and Human Services.

PHOTO PROVIDED BY DARBY MCCLATCHY St. Gabriel Church in Charlotte was among those that held prayer vigils in June, calling for peace and justice and for an end to violence and racism, after several African-Americans were killed in police shootings in 2020 that sparked protests around the country. In a special pastoral letter, Bishop Jugis reminded people of the persistent sin of racism described by the U.S. bishops in “Open Wide Our Hearts: The Enduring Call to Love,” and he urged people to pray “that the Holy Spirit will help us to heal deep wounds and hurts in our society, and help us move toward reconciliation and peace.”

SUEANN HOWELL | CATHOLIC NEWS HERALD Bishop Peter Jugis blessed Guardian Angel Villa, the Diocese of Charlotte Housing Corp.’s largestever affordable housing project, in December. The housing corporation, in partnership with Douglas Development and Schaumber Development, opened the 81-unit apartment building that offers belowmarket rent for seniors in a city with a severe lack of affordable housing. A unique public-private-nonprofit partnership made the nearly $14 million project possible.

Building for growth

Despite the challenges posed by the pandemic, 2020 saw several building and special projects take shape across the Diocese of Charlotte:

n JUNE: St. Paul the Apostle Church in Greensboro completed a renovation that included a new altar and ambo, pews, carpeting and lighting. n SEPTEMBER: The permanent home for St. Joseph College Seminary in Mount Holly was formally opened and blessed by Bishop Peter Jugis. The $20 million project includes 30,000 square feet of living-and-learning space, and serves as home to young men exploring a vocation to the Catholic priesthood while also pursuing undergraduate degrees at nearby Belmont Abbey College.

Also in September, the Sisters of the Poor Servants of the Mother of God broke ground on a state-of-the-art Lillian Congdon Transitional

Other projects under way

n Ground was broken in December on a $21 million, 47,700-square-foot Mecklenburg Area Catholic Schools Fine Arts Center that will be built on the campus of Charlotte Catholic High School. The project is expected to be completed before the start of the 2022-’23 school year. n Christ the King High School’s capital

SUEANN HOWELL | CATHOLIC NEWS HERALD

Rehab Center at Pennybyrn. Pennybyrn is a continuing care retirement community located in High Point operated by the sisters since 1947. n OCTOBER: Immaculata School in Hendersonville officially celebrated the completion of a major renovation effort. The

campaign for a new Athletic & Activity Complex reached important fundraising milestones. Construction is expected to begin next summer. n Asheville Catholic School is building a 12,000-square-foot addition. The $3.9 million project includes six new classrooms, dedicated art room, new restrooms, storage, meeting Dr. Leo Maganares, professor of engineering at Charlotte Catholic High School, models one of the PPE sets that CCHS produced to protect local health care workers during the COVID-19 pandemic.

PHOTO PROVIDED BY CCHS

The opening of St. Joseph College Seminary represented a milestone in the history of the diocese. It is the only college seminary program between Washington, D.C., and Miami, and has been a magnet for young men wanting to discern the priesthood. Enrollment has more than tripled since the program was established in 2016, and upon opening the new seminary building this year, the program is already at two-thirds of capacity with 27 out of 40 seminarian slots filled.

SUEANN HOWELL | CATHOLIC NEWS HERALD

$900,000 remodeling project included a new security vestibule and visitor check-in system, upgrades to the school’s technology infrastructure, the addition of an intercom system, classroom renovations, and lighting Improvements throughout. Restrooms were remodeled, and a prominent canopy was added to the length of the front entrance and sidewalk. n DECEMBER: Guardian Angel Villa, the Diocese of Charlotte Housing Corp.’s largestever affordable housing project, was blessed by Bishop Jugis. Residents began moving into the 81-unit, $14 million project before Christmas.

Also in December, significant renovations were completed on St. Barnabas Church in Arden and on the Curlin Center at Holy Family Parish in Clemmons. In Arden, the renovation included new pews, flooring, finishes and an expansion of the sanctuary. Additional meeting rooms, offices, storage, and a new chapel was part of the Curlin Center’s renovation effort.

rooms, custodial facilities and a common area. n St. Luke Church is building a pavilion, athletic fields and rectory on approximately 30 acres along Fairview Road in Mint Hill. The projects totaling $2.173 million comprise the first phase of a major expansion plan for the growing parish community.

2020: RESPONDING IN FAITH

SUEANN HOWELL | CATHOLIC NEWS HERALD The Diocese of Charlotte welcomed two new priests in 2020: Father Jacob Mlakar and Father Jonathan Torres were ordained during a Mass celebrated by Bishop Peter Jugis July 24 at St. Mark Church in Huntersville. This year’s ordination Mass was noticeably more subdued due to the COVID-19 pandemic, but still a joyful celebration. “Christ Jesus, the teacher, the priest and the shepherd, is your model to follow as His priest,” Bishop Jugis told the two men, in carrying out the apostolic mission entrusted to them by Christ.

PHOTO PROVIDED BY AMY BURGER Father Alfonso Gámez, parochial vicar, celebrates Mass in commemoration of the feast of the Divine Child Jesus in July at St. Mark Church in Huntersville. Parishes found ways to safely continue devotions, prayer vigils and other religious services despite the restrictions posed by the pandemic.

PHOTO PROVIDED BY LINDSAY M. KOHL AND MARYANN LUEDTKE Fifty children received their first Holy Communion during two Masses celebrated in August at St. Pius X Church in Greensboro by Monsignor Anthony Marcaccio, pastor. Churches across the diocese found ways to continue celebrating the sacraments while respecting public health precautions to prevent the spread of COVID-19.

Leadership changes

Dominguez Reid

Arnsparger Monroe n In February, Father Julio Dominguez was appointed by Bishop Jugis to be the new Vicar for Hispanic Ministry, succeeding Father Fidel Melo. n Growth in the work of the Education Vicariate prompted Bishop Jugis to add a second vicar for education. Father Timothy Reid was appointed Vicar for Education: For Catholic Schools. Father Roger Arnsparger, the current education vicar, became Vicar for Education: For Catechetical Formation. n On June 1, the Catholic Schools Office also welcomed a new superintendent, Dr. Gregory Monroe.

In memoriam

DEACON CHARLES LEE “CHUCK” BRANTLEY SR., who served at St. Philip the

Apostle Parish in Statesville, died Feb. 27, 2020. He was 89.

DEACON PATRICK JOSEPH DEVINE III, who served as a chaplain at Charlotte-

Douglas International Airport, died Dec. 10, 2020. He was 73.

DEACON GORDON LAWRENCE FORESTER, who served at St. Paul the Apostle

Parish in Greensboro, died Aug. 1, 2020. He was 97 and the oldest deacon serving in the Diocese of Charlotte.

DOMINICAN SISTER FLORENCE GAVIN, who guided people in their spiritual lives at St. Jude Parish in Sapphire Valley and Our Lady of the Mountains Parish in

Highlands from 1990 to 1991, died Dec. 8, 2020. She was 91.

SISTER OF MERCY MARY JULIA GODWIN, who served as a Sister of Mercy for 72 years and taught in Asheville, Gastonia, Charlotte and Salisbury, died Dec. 10, 2020.

She was 92.

GLENMARY FATHER ROLAND RAYMOND HAUTZ, who served at St. William

Church in Murphy, St. Francis of Assisi Church in Jefferson and St. Frances of Rome

Mission in Sparta, died March 14, 2020. He was 92.

DEACON JAMES “JIM” RAY JOHNSON, who formerly served at St. Charles

Borromeo Church in Morganton, died March 10, 2020.

DEACON JOSEPH H. MACK, who served at St. John Neumann Parish in Charlotte, died March 22, 2020, aged 95.

SISTER REGIS MCNULTY, who served at Charlotte Catholic High School (1972-’73) and was principal at St. Joan of Arc School in Asheville (1973-’74). died Dec. 4, 2020.

She was 92.

FATHER GABRIEL JOSEPH MEEHAN, who served at St. Gabriel Church in

Charlotte, St. John the Evangelist Church in Waynesville, St. Lucien Church in

Spruce Pine, Holy Infant Church in Reidsville, Our Lady of the Annunciation Church in Albemarle, St. Francis of Assisi Church in Lenoir and Immaculate Conception

Church in Forest City, died Sept. 6, 2020. He was 89.

DEACON THOMAS P. O’CONNELL, who served at St. Leo the Great Church in

Winston-Salem, died Jan. 4, 2020. He was 84.

SISTER MARY ALMA PANGELINAN, who was a Sister of Mercy for 71 years, died

May 24, 2020, at the age of 89.

BENEDICTINE FATHER ARTHUR J. PENDLETON, a monk and priest of Belmont

Abbey, died Feb. 21, 2020, He was 90.

DEACON MICHAEL LEVON STOUT, who served at St. Barnabas Church in Arden, died Feb. 4, 2020, He was 75.

DEACON JOHN OTTO ZIMMERLE, who served at St. Francis of Assisi Parish in

Mocksville from June 2001 to his retirement in October 2014, died Nov. 27, 2020. He was 80.

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