Adolescentes disfrutaron de campamento

CÉSAR HURTADO rchurtado@charlottediocese.org

ASHEVILLE — El Ministerio Católico Hispano de la Vicaría de Asheville organizó el primer campamento juvenil de 2023 del 14 al 16 de julio pasado en el centro de campamentos Hot Springs, ubicado en la localidad del mismo nombre.

Según informó Antonio García, coordinador del ministerio hispano de ese vicariato, alrededor de 55 jóvenes adolescentes de ambos sexos, entre 13 y 17 años de edad, participaron de esta hermosa experiencia en compañía de adultos y chaperones comprometidos en la labor de la pastoral juvenil. Los jóvenes llevaron sus tiendas de acampar, cobijas, elementos de aseo y cuidado personal, pero sobre todo muchas ganas de pasarla bien.

Las actividades programadas incluyeron la práctica de varios deportes, juegos, dinámica de grupos, convivio y otros, además de charlas en las que se abordaron diversos temas religiosos con un enfoque juvenil. La jornada concluyó con la celebración de la Santa Misa el domingo a las 11 de la mañana, a la que pudieron asistir los participantes acompañados de sus padres, familiares y amigos.

“Fue un tiempo de recreación y reflexión donde tuvimos la oportunidad de contar con la presencia del Padre Francisco Arredondo OFM Cap., quien viajó desde Fort Lauderdale, Florida, para estar con nosotros”, dijo García.

El Padre Arredondo es director de vocaciones de la provincia Stigmata de la Conferencia de Capuchinos de América del Norte y el Pacífico, que cubre los estados de Alabama, Delaware, Florida, Georgia, Mississippi, New Jersey, Las Carolinas, Tennessee y Virginia.

En 2018, el Padre Arredondo, quien tiene un especial carisma y cercanía con los jóvenes, participó junto a otros sacerdotes designados para el Ministerio de la Divina Misericordia en una Misa celebrada en Roma por el Papa Francisco, durante el Año

Jubilar de la Misericordia.

“Éste es el primer campamento del 2023, pero ya hemos hecho otros anteriormente en el mismo lugar. Los jóvenes que participaron pertenecen únicamente a las diferentes parroquias de la vicaría de Asheville. Nuestra idea de realizar estos campamentos es reanimar la pastoral juvenil en nuestra vicaría a través de experiencias con la naturaleza y encuentros fraternos, donde los jóvenes puedan hacer nuevos amigos, así como escuchar temas que los motiven en su desarrollo personal y humano”, señaló García.

Respecto al Padre Arredondo, el coordinador dijo que, “es un sacerdote que nos ha acompañado en diferentes actividades en los últimos años” y que espera en Dios pueda continuar asistiéndolos en la hermosa tarea de guiar el desarrollo espiritual de los jóvenes.

También el coordinador señaló que espera darle seguimiento a esta experiencia, aunque reconoció que todavía no tienen un plan completamente diseñado. Sin embargo, anunció que el equipo que organizó el encuentro continuará con las reuniones de jóvenes para formalizar progresivamente un programa bien articulado.

¿Tengo los dones y carismas del Espíritu Santo?

Cuando hablamos de los dones del Espíritu Santo, reconocemos estos siete que nos enseña el Catecismo de la Iglesia Católica: Sabiduría, Entendimiento, Consejo, Ciencia, Piedad, Fortaleza y Temor de Dios. Estos son regalos para siempre, nos hacen santos y semejantes a Jesús. Son gracias santificantes. Pero ¿ahí se quedan?

Bueno, primero que todo, estos dones nos producen muchos frutos como el amor, la caridad, alegría, gozo, paz, paciencia, bondad. Y todo esto, para nosotros los cristianos, se desarrolla al tener un encuentro personal con Jesús Resucitado. Entonces, además de estos siete, ¿qué hay? Tenemos que reconocer que Dios nos invita a participar en Su tarea. Estamos llamados a una vocación que nos va a transformar y que transformará al mundo junto con Él. Todos hemos recibido carismas del Espíritu Santo para poder realizar nuestra habilidad particular. El don del Espíritu es una gracia que nos hace santos y el carisma es una gracia que nos permite hacer santos a los demás. El Espíritu nos eleva más alto de lo que habíamos previsto, pero en la línea de aquello que somos.