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by Calacoaya
Por Gilberto Rocha Margáin
Durante el 2021 tratamos temas referentes a los momentos difíciles que vivimos respecto a la pandemia ya los ataques desde órganos nacionales e internacionales en contra de la vida, la familia, la libertad de conciencia y la fe, en donde establecimos nuestra postura como iglesia y dimos pautas de acción para contrarrestar dicha ofensiva
También en el 2021, con amplias medidas de higiene, regresamos a casa para las reuniones dominicales, lo cual es un gran gozo los vernos de nuevo, alabar y escuchar la Palabra de Dios juntos.
En el 2022 regresaremos seguramente a otras actividades de forma presencial y tendremos unas circunstancias de vida más parecidas a las presentes antes de la pandemia.
Pero nosotros ya no somos los mismos, como personasy como iglesia, aprendimos a valorar la vida, a la familia
En este contexto, el 2022 nos presenta nuevos retos y oportunidades para reinventarnos, de ser mejores como personas y congregación. De amar, de servir mejor al prójimo, de ser de impacto a una sociedad que cada día se aleja del Creador.
Indudablemente vivimos tiempos peligrosos, pero es precisamente ahora que el mundo necesita a cristianos que brinden ayuda, orientación y muestren el camino a la verdad.
Es tiempo de dar de todo lo que el Señor nos brinda, de amar con el amor que Jesús nos ama, de entregarnos a los demás como Él lo hizo.
Este año será seguramente de grandes conquistas y victorias como iglesia, en lo familiar y cada uno como individuo. Bienvenido a esta nueva aventura.