Maye Bajo el Mar Clain CortĂŠs Presenta
Cuando protegemos nuestros ocĂŠanos protegemos nuestro futuro. BILL CLINTON
Maye es una niña con mucha curiosidad y mientras un libro de tortugas leía.
Quiso saber la verdad, sobre todo lo que allí decía.
Entonces, se convirtió en sirena para así llegar al fondo del mar.
Tenía tantas preguntas, que por todo el océano se puso a buscar.
Se encontró con Remi, una Tortuga Marina, a quién le preguntó...
Cómo era su vida en el mar?, Remi muy amable le contestó....
Mi vida es muy tranquila. Somos reptiles y como los de mi clase nacemos de huevos, pero en la arena y luego volvemos al mar.
Habitamos en mares tropicales, al rededor del mundo y cerca de la costa para anidar.
Este es nuestro ciclo de vida.
Nos alimentamos de corales, algas, medusas y pulpos pequeĂąos, aunque no poseemos dientes, tenemos una mandibula que parece sierra.
Entonces, Maye pregunto... Pero, ¿cómo te desplazas por el mar?
Es muy fácil, gracias a mis 4 aletas aplanadas que tienen forma de remos pequeños, puedo nadar. Además me ayuda mi caparazón aplanado y mi hocico corto.
Remi, las tortugas terrestres y las marinas son iguales?
Nooo. Maye, nos diferenciamos en 5 aspectos, los cuales son:
1.El hábitat. 2.Las tortugas terrestres viven hasta los 150 años. 3. El caparazón de las tortugas terrestres es más alto y rugoso. 4.Las patas de las tortugas terrestres no poseen membrana y son más fuertes. 5.Las tortugas terrestres son hervíboras, es decir, comen plantas.
Remi, ¿Cómo preservamos tú especie? Es muy fácil... Contesto Remi. No arrojando basura al mar, ni a la playa. No a la pesca y al consumo de huevos de tortugas. No somos mascotas, por eso déjanos en nuestro hábitat. Así podremos vivir 50 años.
Al final Maye resolvió todas sus preguntas y descubrió, que todo lo que decía el libro era verdad.
Luego la pequeña a su casa regresó, esta vez un libro de abejas leyó y en su imaginación, muy entusiasmada voló.
Colorin coloretas, este cuento no tiene mรกs letras
FIN