Cletofilia vol 3 no 1

CLETOFILIA AMAMOS LO QUE A TI TE MUEVE

CICLISMO URBANO | ESTILO DE VIDA VOL. 3 Nยบ 1 | MAYO 2017

¡Energía renovada!

Hace un mes se realizó el Foro Mundial de la Bicicleta en la Ciudad de México, un encuentro donde activistas, emprendedoras y funcionarios compartieron experiencias y proyectos con un público que llegó de muchas partes del mundo.

Este Foro se organiza cada año en diferentes países, con la participación voluntaria de ciudadanas y ciudadanos. Hacerlo posible no es cosa fácil.

En esta edición compartimos pequeños fragmentos de lo que ocurrió del 19 al 23 de abril.

Entrevistamos a Joy y Agus, coordinadores del FMB6, la punta del gigantesco iceberg de más de 160 personas que hicieron posible este foro.

También recibimos la colaboración de María Paz “Mapapo” Castillo, ciclista y emprendedora chilena quien nos comparte su visión de la Ciudad de México. “Es como un Santiago de Chile del 94”, señala. En el texto podrás ver qué fue lo que le enamoró de la ciudad donde editamos CLETOFILIA. Aprovechamos el FMB6 para escuchar a Gary Fisher, entrevistar a Sylvie Banoun y crear nuevas redes de colaboración con colectivos ciclistas de otras latitudes, como Venezuela.

En fin, nos llenamos de energía renovada y le dimos vuelta a la hoja a la historia de CLETOFILIA. Con esta edición retomamos el formato con el que nos dimos a conocer en 2011. La versión en PDF gratuita.

Espero de todo corazón la disfruten y la difundan.

Juan Pablo Ramos Monzón

Cletofilia es una edición bajo la responsabilidad de Juan Pablo Ramos Monzón. El número de Certificado de Reserva de Título es 04-2013-071813150100-102. El contenido de las imágenes y artículos es responsabilidad de sus propios autores y anunciantes y no representa necesariamente el punto de vista de la publicación. Número de Certificado de Licitud de título: en trámite. Número de Certificado de Licitud de Contenido: en trámite. Aún y cuando se ha cuidado cada detalle durante la producción de esta publicación, el editor no se hace responsable de la veracidad de la información o de cualquier consecuencia derivada de la misma. La información presentada en esta revista es un recurso educativo y no debe ser un sustituto de consejos médicos. Ni el autor de la información ni el productor ni los distribuidores de dicha información dan garantías de ningún tipo en relación con el contenido de la información presentada en esta revista. ¡Viajar en bici es un placer!

CONTENIDO

Navega dando clic sobre las miniaturas.

UrVanidades. Cada edición, una muestra de los mejores accesorios para ciclistas urbanos.

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El creador de la marca de ropa para ciclistas, Da’Bicis, nos presenta su primera colección.

P. 5

Traer el FMB6 a México sonaba atractivo, organizarlo, fue un reto que no imaginaban.

P. 12

Ella es la encargada de promover el uso de la bici y defender a los peatones en Francia.

P. 19

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Fue de los creadores de las bicis de montaña, hoy su interés es mejorar las ciudades.

P. 9

Areli Carreón, Alcalde de la Bicicleta nos invita a rescatar nuestras ciudades.

P. 23

#DesafíoGoogleOrg

Si tienes una gran idea y crees que puede tener un impacto social positivo, esta convocatoria de Google será de tu interés. #DesafíoGoogleOrg invita a las organizaciones no gubernamentales (ONG) a inscribir propuestas de proyectos que incorporen tecnología con el fin de resolver problemas sociales.

Está destinando 5.75 millones de dólares que los va a distribuir en 15 ONG seleccionadas.

Pueden participar organizaciones de México, Colombia, Chile y Perú. Se elegirán tres proyectos de cada uno de esos países, a los que se les otorgará un fondo de 350 mil USD. Puedes participar con temas como movilidad, educación, medio ambiente, seguridad, género y otros más que resuelvan problemas sociales.

Las bases completas y formulario para inscribirte las encuentras en el sitio de #DesafíoGoogleOrg, y tienes hasta el 24 de mayo para hacerlo.

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UrVanidades

Nuestra selección de accesorios para ciclistas. Cada edición te mostramos productos que vale la pena compartir, por su innovación y alta calidad.

GROPES El diseñador Akari Chantai confecciona estas cintas para manubrio en Londres, Reino Unido. Hay opciones para manubrios cortos o largos. Vienen con dos cintas, dos pares de corchos y un par de agujetas para atarlos.

Precio aprox. Cortos: $880 MXN Largos: $1,050 MXN De venta en Distrito Fijo Club de Ciclismo.

MOVIGO Desde Tijuana, México, llegan estas riñoneras que también se convierten en bolso y en una pequeña alforja para colgar en el manubrio de tu bicicleta. Llevan un cierre para guardar tu teléfono o cartera.

Precio aprox. $300 MXN De venta en Vereda

AVENTURAS EN BICICLETA Escribe tus viajes en bicicleta en esta bitácora ciclista creada por la marca mexicana DaBici’s. Puedes anotar cómo estuvo el clima, el lugar que visitaste, la distancia recorrida, cómo te sentiste y por supuesto una reseña de tu viaje. Está hecha de envases de “tetrapack” reciclados.

Precio aprox. $250 MXN De venta en Vereda

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JORDI MANZO

CREATIVO QUE RUEDA Economista de profesión y alguna vez entregado al triatlón, Jordi lleva año y medio acercándose a la camisa perfecta para rodar por la ciudad con mucho estilo y frescura. Su propuesta está cargada de buen gusto e innovación.

Originario de Tulancingo, Hidalgo, una región mexicana donde la confección ha sido reconocida a nivel mundial, Jordi lanzó este año su marca DaBici’s. En próximos meses saldrá la línea para mujer y más adelante los suéteres y sacos.

CREATIVO QUE RUEDA

“Queremos ofrecer soluciones a los problemas de movernos con libertad en bicicleta por la ciudad, con un gusto elegante y formal para vestir. Nuestros diseños se inspiran en la funcionalidad para tener un confort a la forma natural del cuerpo al rodar, y ventilaciones que otorgan un alivio en la transpiración. También aplicaciones de reflejantes que convergen con el diseño para usar las señalizaciones de izquierda y derecha, así como compartimentos específicos para tener accesibilidad a nuestras pertenecías mientras vamos rodando”.

“La marca Da Bici´s está inspirada en el polímata Leonardo Da Vinci, que con su ingeniería mecánica resolvía de un forma pragmática problemas cotidianos para hacer el día a día más sencillo.

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CREATIVO QUE RUEDA

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CREATIVO QUE RUEDA

“Da Bici´s se vende en la Ciudad de México. Por ahora la encuentras en la boutique ciclista VEREDA. La proyección es armar la línea casual con camisas, suéteres y sacos que serán exclusivos por cada temporada. Buscamos expandirnos a Guadalajara, Monterrey y Cancún, y después tocar el extranjero. También nos interesa colaborar con diseñadores emergentes que tengan el chip de fluir con el entorno”. - Jordi Manzo

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PERFIL DE CICLISTA

GARY FISHER Un rockstar de la bici en busca de mejores ciudades. Fue uno de los inventores de la bicicleta de montaña al final de los años 70, junto con Charley Kelly, Tom Ritchey y otros entusiastas más que ahora forman parte de la historia del Mountain Bike.

Marin County, Colorado, fue el lugar donde hicieron sus primeros prototipos. Ahí, Gary Fisher, un espigado muchacho con cabello hasta los hombros se dejaba ir cuesta abajo en bicicletas Schwinn con algunas modificaciones.

“Viví en la época de Grateful Dead. Viajé con ellos, pero después de un tiempo me di cuenta que era demasiada droga. Si alguien sabía consumir LSD, era Jerry Garcia. Así que regresé a la bicicleta. Con cabello largo, eso sí”.

Con estas palabras Gary Fisher hacía un repaso por su vida, frente a un puñado de espectadores que se reunieron en el patio del Centro Cultural del México Contemporáneo, durante el Foro Mundial de la Bicicleta.

“Actualmente vivo en San Francisco. Y ahí está el puente de San Francisco donde todo mundo se detiene a tomar fotos y donde todos los días hay tráfico.

“Hay un exceso de automóviles. Ni siquiera es posible andar en bicicleta. Entonces se les ocurrió hacer un proyecto para construir más carriles para autos debajo de los que ya existen. Y yo les dije, por qué no construimos carriles para bicicletas sobre los que ya tienen construidos para los autos”.

Gary Fisher trabaja ahora para la marca de bicicletas Trek. Pero gran parte de sus actividades personales están enfocadas al activismo por mejores ciudades.

“Quiero ver ciudades más verdes, con más personas en bicicletas. Quiero reverdecer las ciudades, que un tercio de ellas sean verdes y se pueda sembrar en ellas. Y que el resto sean caminos para bicicletas y peatones”.

INSTANTES DEL FMB6

CICLISTA PORTA LA TÍPICA MÁSCARA DE LUCHADOR, CON EL LOGO DEL FMB6.

A PUNTO DE INICIAR LA PRIMERA RODADA DEL FMB6. PLAZA DE SANTO DOMINGO. 11

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joy

Agus

El reto de lo Colectivo TEXTO Y FOTOS: JUAN PABLO RAMOS MONZÓN

AGUS Y JOY LEVANTARON LA MANO PARA TRAER EL FORO MUNDIAL DE LA BICICLETA A LA CIUDAD DE MÉXICO. LA ILUSIÓN DE ALBERGAR LA FIESTA MUNDIAL DEL ACTIVISMO POR LA BICICLETA ERA UN DULCE ATRACTIVO, PERO TAMBIÉN MISTERIOSO. La trama de este complejo tejido inició en 2015, cuando Agustín propuso presentar a la Ciudad de México como candidata para el quinto Foro Mundial de la Bicicleta. La solicitud se presentó en Medellín, Colombia, en la sesión plenaria del último día del FMB4.

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“Fue una propuesta solitaria. Se armó un par de meses antes. Solicitamos una carta al Fideicomiso del Centro histórico y a otras autoridades para que apoyaran nuestra iniciativa. ¡Gracias a dios no ganamos!

Por 20 votos ganó Santiago de Chile”, recuerda Agustín Martínez, presidente de la asociación civil Bicitekas.

EN SANTIAGO SE GANÓ Al regresar de Medellín más gente se unió al entusiasmo de traer el Foro a la Ciudad de México.

La idea se presentó un mes después, en el Campamento

de Planeación que cada año celebra la red de colectivos en pro de la bicicleta BiciRed, que en 2015 tuvo lugar en La Paz, Baja California Sur. A ese encuentro asistió Joy Nuño, quien sin pertenecer a algún colectivo ciclista, ya tenía sembrada la idea de que el Foro Mundial debería ser en México.

La propuesta se trabajó con mucho más tiempo que cuando se fue a Medellín.

Un grupo amplio de ciclistas de México fueron a Santiago de Chile para votar a favor en el último día del FMB5.

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“En Santiago yo llevaba un texto para presentar la candidatura. Lo compartí con la gente de México que fue a Chile: Pepe Arévalo, Ale Leal, Bernardo Herrera, Mario Delgado y otras más.

“Rebotamos ideas y de pronto, en un momento y un lugar únicos, un tipo de cafetería que no existe en México, vino la idea”, rememora Agustín con una risa en el rostro.

Rodar, amar, transformar.

Esos fueron los conceptos que abrazaron la presentación de la candidatura. Así se presentó y se ganó la sede del FMB6.

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EL RETO DE LA COLECTIVIDAD Ocho meses antes de esta entrevista se tuvo la primera asamblea para comenzar a organizar el Sexto Foro Mundial de la Bicicleta con sede en la Ciudad de México.

El tema de la horizontalidad y la colectividad fue un reto constante. Desde las primeras asambleas hubo gente que sintió que sus opiniones o ideas no fueron tomadas en cuenta y se molestaron. Y faltaban aún ocho meses de trabajo.

La convocatoria fue abierta, podías asistir y participar fueras o no parte de algún colectivo ciclista. Se elegía a un moderador y se iban tomando en cuenta las opiniones de las personas que quisieran expresarse.

Un reto para la paciencia de muchos.

“Es complicado trabajar en colectividad. Más cuando se tienen tiempos por cumplir.

“Cada uno tiene sus ideas, intereses, gustos y formas de trabajar. Tratamos de ser horizontales pero sí hubo momentos en los que tuvimos que tomar decisiones sin consultar.

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“Algunas fueron buenas decisiones y otras no, pero había ocasiones en las que tenías que hacerlo o esto no caminaba”, cuenta Joy, quien fue nombrado como coordinador general del FMB6.

LO HECHO A MANO Con el paso de las semanas, la idea que se presentó en Santiago de Chile fue tomando más forma.

También el concepto con el que se quería comunicar el foro y cómo querían que lo percibiera el mundo.

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“ CUANDO UNO TIENE UNA BUENA IDEA Y LE DEDICA TODO EL CORAZÓN, SIN DUDA SALE, CON MAGIA”.- JOY NUÑO Luego de diversas juntas creativas, se llegó al título “Ciudades hechas a mano”.

Exaltando el deseo de volver a las ciudades a escala humana y de incluir a otros actores de la urbe.

No hablar únicamente de la bicicleta, fue el consenso.

Al respecto Joy considera que sí se logró un foro hecho a mano.

“Yo creo que sí lo hicimos así, sobre todo por la variedad de gente que participó. En las reuniones de comisiones volteaba y veía a la arquitecta, a la urbanista, al diseñador, al mecatrónico…

“También por el cuidado que se tuvo en la producción. Los palets para hacer los stands, los volumétricos eran reciclados, intentamos no usar botellas de agua de plástico.

“En todo el proceso se sintió una actitud de voluntariado. Inclusive para la actividad Cara a Cara en la Arena Coliseo, no nos cobraron más que el servicio. Sabían que esto era un evento sin fines de lucro.

Los mismos luchadores cobraron mucho menos que lo que normalmente cobran.

Se sentía todo hecho con el corazón y eso fue contagioso”.

UN TRABAJO DE TIEMPO COMPLETO Causa ruido ver juntas las palabras dinero y activismo.

No por ello se puede decir que es malo o es bueno.

Lo que sí fue indiscutible al momento de organizar un encuentro del tamaño del FMB6, fue que para hacerlo se necesitaba gente que le dedicara el cien por ciento de su tiempo. Sobre todo si ibas a ser alguno de los coordinadores.

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Joy recuerda que los primeros meses no se avanzaba.

“Fue hasta que hicimos las primeras asambleas y se crearon las comisiones de trabajo que comenzó a avanzar el proceso de organización. Aún así era muy lento. Nos dimos cuenta que necesitábamos gente que se dedicara a esto al cien por ciento. Yo fui el primero que se sumó a esta propuesta. Acababa de dejar mi anterior trabajo como funcionario público.

“Luego se sumó Agustín. Y en ese momento planteamos un esquema de organización que tuviera un equipo de gente al que se le pagara por dedicar su tiempo a la organización.

“Los meses previos a que esto se aprobara fueron difíciles económicamente.

Sabes que en algún

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momento vas a tener dinero, pero no sabes cuándo. Afortunadamente nunca nos faltó comida o pagar la renta.”

Agus y Joy compartieron un departamento que desde ese momento fungió como oficina de trabajo para el FMB6 y de hogar.

Literalmente vivieron juntos todo el proceso de la organización.

“PERSONALMENTE CRECÍ MUCHO, PORQUE DESCUBRIMOS EL FONDO DE NOSOTROS MISMOS. LO LUMINOSO Y LO OSCURO”.AGUSTÍN MARTÍNEZ

“Tuve que hacer doble turno. Trabajé en producción de cine bajo unos horarios muy exigentes, y durante la noche hacía juntas para organizar el foro; y al otro día me la pasaba pensando en todos los pendientes que quedaban de esas juntas.

“Fueron tres meses de mucha angustia. Saber todo lo que tenía que hacer y no poder hacerlo por cumplir un trabajo que era el que me daba para vivir.

“Esto fue así hasta que finalmente se aceptó que hubiera un recurso para que nos dedicáramos de tiempo completo a organizar el Foro Mundial”.

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Agustín y Joy nos compartieron esta entrevista desde el departamento que rentan en una calle del centro de la Ciudad de México, y donde aún hay una pared pintada con frases, ideas y pendientes que se quedaron como huellas del FMB6.

CRECIMIENTO PERSONAL Intentar hacer consenso entre un grupo tan grande y diverso como el que participó en la organización del Foro Mundial de la Bicicleta tocó emocionalmente a los coordinadores.

“Un reto de esta magnitud, suponía desde un inicio una oportunidad para el crecimiento.

“Yo morí y nací en el Foro.

Fue como una crisálida.

Personalmente crecí mucho, porque descubrimos el fondo de nosotros mismos. Lo luminoso y lo oscuro.

“Fue muy interesante entrarle a la tolerancia, a poner límites, a la negociación de ideas…

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“Descubrí que llevo un estilo mandón, de no aceptar que hay mejores ideas que la mía, encapricharme con algunas decisiones, entendí el liderazgo dentro de lo colectivo.

“También aprendí sobre los micromachismos y el feminismo”, recuenta Agustín Martínez.

El Foro Mundial de la Bicicleta en México “movió una gran ola”, como lo dijera Agustín.

Se crearon nuevos amigos, pero también hubo los que se sintieron defraudados.

primera vez que estás haciendo algo a mano.

Pero lo que es irrefutable, es que para que algo sea hecho

La BiciRed México expulsó a Bicitekas por no haber hecho lo suficiente para que tuvieran más espacio de participación en el Foro.

a mano, debe haber personas.

Algunos miembros de la Liga Peatonal hicieron boicot, también se sintieron ofendidos.

Hacer a mano podría escapar de muchas cosas: de técnica, de precisión, de velocidad; más aún si es la

Y cuando se dice en plural, es cuando nace el reto: tejer a muchas manos, y aceptar que cuando se teje a varias manos, aparecen nudos.

El error, sería abandonar el trabajo por no tener la paciencia y la humildad suficientes para desatar los nudos, y seguir haciendo ciudades hechas a mano.

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INSTANTES DEL FMB6

ASISTENTES AL FMB6 SALEN DE LA ARENA COLISEO, EN EL BARRIO DE LA LAGUNILLA.

FOTO GRUPAL, EL ÚLTIMO DÍA DE ACTIVIDADES DEL FMB6.

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Las bicicletas, sí generan ganancias a los gobiernos

ENTREVISTA A SYLVIE BANOUN TEXTO Y FOTOS: JUAN PABLO RAMOS MONZÓN Francia se ha colocado como un referente en el mundo en cuanto a promoción del uso de la bicicleta. En 2015 publicaron una ley que premia con incentivos económicos a las personas que van a sus trabajos en bicicleta.

También tienen una “coalición por la bicicleta” de 150 miembros que están trabajando dentro del parlamento por mejores condiciones para este vehículo.

Durante el Sexto Foro Mundial de la Bicicleta que tuvo lugar en la Ciudad de México charlamos con Sylvie Banoun, delegada interministerial de Peatones y Ciclistas, y de la oficina de Transporte de Francia.

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LA BICICLETA ATRAE TURISTAS

“Cada vez que tienes la posibilidad de hacer viajes de 10 o 15 días a un país, y en sus diferentes ciudades puedes trasladarte en bicicleta para visitar sus museos, hoteles o restaurantes, le estás dando un retorno de inversión a esas ciudades. Los ciclistas urbanos son un beneficio indirecto para los gobiernos locales”, asegura Sylvie.

“Una ciudad con buenas condiciones para pedalear en ella atrae a más turistas. Países en los que puedes trasladarte de un pueblo a otro en bici también es un atractivo para el turismo”.

Así lo considera Banoun, como uno de los beneficios económicos que la bici puede retornar a los gobiernos que inviertan en ella.

INCENTIVAR EL USO DE LA BICI Para que las ciudades sean un atractivo turístico porque se puede andar en bicicleta en ellas, deben realizarse acciones que así lo propicien. Sylvie (56 años), quien desde 1999 ha sido funcionaria pública, señala algunas acciones precisas para que esto suceda.

“La bicicleta puede ser atractiva para los gobiernos locales cuando identifiquen que es un atractivo para el turismo.

GRENOBLE, FRANCIA. FOTO: ARCHIVO CLETOFILIA 20

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“Hay que comunicar el uso de la bicicleta como algo divertido y festivo. Recuperar el entorno, los espacios públicos y sobre todo, pacificar el tránsito. El mejor incentivo para subir más gente a la bicicleta es ¡reducir la velocidad de los automóviles!”

“Hay gente que tiene ganas de llegar al trabajo en bicicleta pero nunca lo ha hecho, se siente insegura. Si se organizan grupos que vayan juntos al mismo destino, les va a brindar seguridad y una mejor experiencia.

Ese puede ser el inicio para que después lo hagan solos”.

“También puedes organizar traslados grupales.

“EL MEJOR INCENTIVO PARA SUBIR MÁS GENTE A LA BICI ES REDUCIR LA VELOCIDAD DEL AUTO” En algunas ciudades, incluida la Ciudad de México, se hacen experimentos para mostrar cómo serían más seguros algunos cruces viales. Reducen carriles y amplían la zona para peatones usando tambos y conos.

Estacionar el auto en la calle es una práctica muy normalizada, pero muy pocas veces se reflexiona que se trata de una acción en la que se usa el espacio público, para dejar una propiedad privada. Es como si tu vecino guardara un refrigerador en la calle porque no le cabe en su casa, y no tuviera que pagar por ello.

Estas acciones llamadas “urbanismo táctico” las han llevado a cabo organizaciones civiles, pero también algunos gobiernos que quieren experimentar antes de implementar una infraestructura rediseñada.

NO OBLIGAR EL USO DEL CASCO Sobre la eterna discusión de si los ciclistas urbanos deben usar o no el casco, Sylvie tiene una postura clara: “El uso del casco en los ciclistas cotidianos, los que usan la bici en la ciudad no me parece de gran necesidad.

Al respecto Sylvie Banoun apunta que “hay que experimentar con nuevas herramientas para pacificar el tránsito”.

“Es muy importante reducir el espacio de tránsito vehicular visualmente, para que los conductores de automóviles no tengan la sensación de que pueden ir rápido. Y también hay que reducir los lugares de estacionamiento para los carros”.

“Los estudios demuestran que los ciclistas con casco conducen con un comportamiento más arriesgado. Hacer que el casco sea obligatorio es una forma de transferir la responsabilidad de su seguridad al propio ciclista”.

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UNA BICI ELÉCTRICA MÁS, TAMBIÉN ES UN AUTO MENOS El mercado de las bicicletas eléctricas sigue creciendo. A pesar de que muchos ciclistas se resisten al avance de las tecnologías que hay alrededor de las e-bikes y pedalec (bicis con asistencia eléctrica, en las que debes pedalear. No llevan acelerador).

“El uso de la bici eléctrica y las pedelecs es importante que se impulse. La bicicleta convencional es muy buena para trayectos cortos. Pedalear hasta 10 kilómetros en la ciudad con una bici convencional está bien, no te exige demasiado esfuerzo. Las pedalec ayudan a que los traslados largos también se hagan en bicicleta en lugar de usar un automóvil o el transporte público”, explica Banoun.

“Entre más bicis eléctricas haya menos carros habrá en la calle y también menos congestión en el transporte colectivo.

“Hay que promover aún más este tipo de bicicletas. Se deben encontrar personajes icónicos que se suban a las pedalec y que incentiven a más gente a hacerlo”.

Si bien las bicicletas no se perciben como una industria poderosa Banoun considera lo contrario. “La industria de la bicicleta es muy grande, pero es discreta. En Francia se vendieron 3 millones de bicicletas en un año y 140 mil bicis eléctricas. Es un mercado que está creciendo muy rápido”.

CIUDAD DE MÉXICO ES MARAVILLOSA Sylvie Banoun visitó la Ciudad de México para participar en el Sexto Foro Mundial de la Bicicleta. En los días que estuvo en esta ciudad tuvo sus propias impresiones.

“Mi primera impresión es que en la zona centro hay muchos peatones en ciertas horas del día. Es grandioso. Pero también noté que los automovilistas son muy poco corteses con los peatones. Son muy agresivos con el que camina, te hacen sentir que estás invadiendo su lugar y que la calle no te pertenece.

“Es una ciudad maravillosa. Sería interesante tener más espacios públicos para la gente y no sólo para los automóviles.

También más opciones para rentar bicicletas cuando vienes de visita”.

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Repensar colectivamente nuestras ciudades Texto: Areli CarreĂłn Miembro de Bicitekas A.C. y Alcaldesa de la bicicleta por MĂŠxico 2017-2019

El Foro Mundial de la Bicicleta 2017 en la gran Ciudad de México, fue una emocionante fiesta global con más de 137 actividades diversas en las que participa_ ron activistas, expertos y funcionarios de más de 20 países y en donde cerca de 20 mil capitalinos tuvieron la oportunidad de acercarse a la bici como modo de transpor_ te, como herramienta de arte, como oportunidad de una vida más saludable.

Pero sobre todo este Foro fue un ejercicio para repensar colectivamente nuestras ciudades, especialmente la CDMX. Desde los seis siglos de ciu_. dad que yacen bajo nuestros pies elevamos nuestra voz para hablar del futuro.

Aquí, durante 600 años, nuestros gobernantes nunca nos preguntaron cuál era el verdadero anhelo de nuestro corazón.

Acostumbrado a ceder, a so_ portar, a sobrevivir, a dis_. frutar como fuera posible, el corazón del pueblo casi no sabe nombrar lo que quiere.

Aquí y en otras muchas ciu_ dades en el mundo, ciudada_ nos asustados ya no se miran como hermanos, sino como adversarios. Se miran con temor. Con odio.

Ese es el resultado de las ciudades que «siempre han sido: las ciudades hechas para el servicio y la comodidad de unos cuantos.

Desde los macehuales, pa_ sando por los saltapatrás, los peones, los pelones, los “na_ cos”, los “cholos”, los “pan_ chito”, la “raza, la “banda”, los “chairos” hemos sido una mayoría ignorada.

escogimos opciones de vida diversas fuimos tratados du_ rante centurias como anoma_ lías. Las personas con alguna discapacidad fuimos ignora_ das activamente por ser una minoría. No sólo vivimos en la periferia de nuestras urbes; también en la de la economía, la toma de decisiones, lejos de las prioridades presupues_ tales, bajo el total desconoci_ miento y desprecio de quienes nos gobiernan. Hoy en día, en rincones de esta gran Ciudad aún hay hombres, mujeres y niños viviendo sin derechos.

Como si aún la sobrevivencia fuese capricho de los dioses.

Como si la noche virreinal no hubiera cesado. Como si la libertad no fuera de quien la trabaja con sus manos. Esta historia se repite alrededor del planeta.

En la periferia de todo Las mujeres ni siquiera fuimos nombradas. Los indios La inequidad y la exclusión fueron despreciados. Los ne_ han definido a nuestras ciu_ gros agredidos. Todos los que dades durante siglos. Ha sido

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un proceso tan largo y constante que nos parece natural e incuestionable. Pero no es justo, no es aceptable, ni tiene porqué seguir siendo así.

Nuestras ciudades pueden y deben proponerse ser equitativas e incluyentes, simplemente porque es lo justo y sólo así se garantiza paz y gozo para todos sus habitantes. Se ha privilegiado la comodidad de unos cuantos por sobre el bienestar común.

Esto es inaceptable.

Queremos las ciudades que pueden ser, aunque para algunos no parezca razonable, ni económicamente rentable, o aunque no sean las ciudades que «siempre han sido así».

Los desafíos que nos plantea el cambio climático nos obli_ ga repensar la economía, a revisar nuestros marcos regulatorios, a cuestionar nuestros hábitos, a impulsar nuevas tecnologías y en algunos casos recuperar tecnologías apropiadas y revalorar saberes y prácticas milenarias.

Los cambios que requerimos como sociedad no llegarán a la velocidad adecuada si no logramos superar las barreras

mentales que nos lo impiden.

Tenemos que ser más ágiles para aprender a adaptarnos a condiciones cambiantes.

Llamamos a todas las perso_ nas acostumbradas a moverse en auto a que nos ayuden a construir esa ciudad más justa, más incluyente y sostenible simplemente permitiendo la dignificación de las banquetas, la construc_ ción de ciclovías, nuevas líneas de Metrobús, nuevos espacios comunes; respetando a quienes caminamos y pedaleamos. La nuestra es quizás la última generación que puede actuar para mantener el clima seguro para la vida en el planeta. ¡Ayú_ dennos generosamente no oponiéndose a los cambios urbanos que buscan reducir la contaminación y hacer más eficiente el uso del espacio de todos!

ayuden a encontrar modos, a sostener diálogos, a crear alternativas para lograrlo.

Cambiar es nuestra única oportunidad. Si seguimos moviéndonos como lo hemos hecho en las últimas décadas no habrá ciudades, ni planeta para nadie. El suicidio no es una opción.

No podemos reducir la emisión de gases de efecto invernadero sin contar con infraestructura adecuada, con calles seguras e incluyentes, con opciones efectivas de movilidad urbana sustentable.

No podemos generar estilos de vida saludables sin un territorio ordenado y planea_ do para ello.

Pero no sólo necesitamos una infraestructura física. No podemos lograr procesos de corresponsabilidad y partici_ Cambiar nuestras ciudades pación activa de la ciudadanía sí es posible sin crear reglas, instituciones De los gobiernos no acepta_ y procesos sociales que remos que nos digan que fortalezcan la autonomía de cambiar nuestras ciudades “es las personas, organizaciones y imposible”. Queremos que nos comunidades. Quienes fungen

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como autoridades encargadas de representar, consultar y. llevar a cabo las decisiones ordenadas por la ciudadanía, deben prepararse para servir, no para servirse a sí mismos o a sus partidos políticos. Este espíritu de servicio debe pre_ valecer en las relaciones entre diferentes ámbitos de gobier_ no.

La toma de decisiones debe ser apartidista. La coopera_ ción debe prevalecer por sobre la competencia.

Es inadmisible seguir toman_ do decisiones urbanas sin sustento científico y técnico, sobre la base de preferencias, prejuicios o presiones de grupos; cambiando cada que hay elecciones el rumbo o las prioridades, sin la medición y evaluación de los resultados de las políticas públicas.

En las ciudades existen bienes tangibles e intangibles que deben permanecer bajo el dominio público para garanti_ zar el bienestar del conjunto de la sociedad, tanto en lo individual como en lo colecti_ vo. Las mejoras urbanas que no contribuyan a hacer más justas las ciudades, no pueden considerarse mejoras. Tanto las inversiones como las polí_

ticas públicas y la gestión ur_ bana deben buscar la eficien_ cia no sólo en términos económicos sino servir a la felicidad de las personas.

Esta Ciudad de México ha sido hecha a mano y a pie, con sudor y sangre de quienes la habitamos. Alfonso Reyes escribió en su Visión del Aná_ huac que la vida de la Ciudad se concentra en tres sitios: la casa de los dioses, el mercado y el palacio del emperador.

Pero olvidó los espacios más importantes: el corazón y los sueños de quienes las vivimos.

Soñamos ciudades más hu_ manas, hechas por nosotros mismos, a nuestra imagen, para nuestro disfrute que sólo puede ser si es de todos. La dicha sólo existe cuando se comparte.

Este es el futuro urbano que soñamos. Estas son las ciudades que luchamos por construir. Esta es la dignidad ciudadana que queremos se haga costumbre.

Para ello los activistas de la bici y la movilidad trabajare_ mos en equipo con funciona_ rios de la bicicleta para hacer ciudad para todos. ¡Aquí vamos!

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Alcaldesa de la bicicleta Areli Carreón fue elegida como “Alcaldesa de la bicicleta”. La iniciativa de nombrar a una alcaldesa o alcalde de la bici, viene de la organización de Los Países Bajos Cyclespace. Y el objetivo es que la persona elegida sea un vínculo entre la iniciativa privada, la sociedad c iv il y e l g o b ie r no , pa r a posicionar el tema de la bicicleta en la agenda pública.

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LA VENEZUELA NO SAUDITA La BiciRed Venezuela comienza a gestarse y se enfrenta a un país que ha depositado históricamente toda su voluntad al modelo de movilidad motorizado y a la gasolina. Así comienza su historia…

Compilación y redacción: Yesenia Sumoza – Coordinadora de BiciCultura Venezuela y parte del equipo de Planificación Estratégica de la BiciRed Venezuela.

Correcciones y colaboración: Equipo de planificación estratégica BiciRed Venezuela.

Venezuela, la tierra de la gasolina más subsidiada del mundo. Porque de “barata” no tiene nada. Tal palabra “barato” no define la situación de la gasolina y los otros combustibles fósiles que se producen a muy bajo costo, pero que finalmente generan un caos vehicular.

Prepárense para conocer un poco de la movilidad en bicicleta en Venezuela.

Para los que no conocen mucho de Venezuela, este es un país lleno de contrastes, naturales, económicos, sociales y culturales, tan ricos y desiguales, como los de cualquier país de nuestra América.

Esta tierra de gracia es un país mega diverso, con bellezas naturales increíbles, con la particularidad de reunir en la puerta de Suramérica, selvas, playas, arrecifes, nieves, desiertos, llanos, montañas, páramos, todo eso combinado con

gente de muchos orígenes, que vinieron a hacer vida y fueron recibidos como propios, durante el fin de la Segunda Guerra Mundial y los años subsiguientes al desarrollo de Venezuela como potencia petrolera.

Y así continuó Venezuela, mientras que otros países vivían las crisis petroleras en Europa y Asia, que los hizo repleantear los temas de movilidad.

Pero no así el caso de Venezuela, que en esa época vivía otra de sus bonanzas, que debieron cumplir aquel pensamiento reflexivo de Arturo Uslar Pietri (Escritor Venezolano) que invitaba en su programa televisivo a “sembrar el petróleo”.

En ese momento se fortaleció el ideal de ciudades siguiendo el modelo estadounidense, diseñando las grandes autopistas, grandes avenidas, elevados, segundos niveles, y mucha 28

velocidad, cada vez más espacio dedicado al auto particular (y no al transporte masivo precisamente), la Venezuela “Saudita”, empezaba a “sembrar su petróleo” o más bien a derramar la maldición del petróleo y de los recursos naturales que nuestra América entera sufre en mayor o menor medida.

Esta “maldición” provocó la casi extinción del uso de la bicicleta como transporte, dejándose en un segundo plano como parte de una actividad deportiva o meramente recreativa, la bicicleta pasaría a ser el regalo favorito de las navidades, y así estuvo hasta que en los años 80, algunos grupos universitarios trataron de emular la experiencia holandesa, al menos desde sus espacios académicos.

Una nueva generación Esto lamentablemente no

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En 2011, en Caracas capital de Venezuela, se retoman las masas críticas, ese maravilloso evento donde se busca de diferentes maneras devolver masivamente a la bicicleta su espacio en la ciudad.

fue debidamente registrado, no obstante lo comentamos en este escrito, como testimonio oral de personas que en esa época empezaban a desarrollar el proyecto que esta nueva generación del 2017, les relata desde la Venezuela no tan saudita, arropada por un mundo interconectado y arrollado por las redes sociales, nueva arma de construcción social.

Sus metas y las nuestras, eran las mismas: tenemos determinación en lograr transformar el paradigma actual de nuestras ciudades, para centrarse en las personas, cuidando al verdaderamente vulnerable (donde entra la movilidad reducida entramos todas y todos sin excepción), peatones, ciclistas; con espacios públicos de prime_

ra, accesibles y hechos para generar encuentro, para generar felicidad y calidad de vida.

La bicicleta siempre ha estado presente en la historia de Venezuela, en cada ciudad y poblado existe ese y esa ciclista que lleva a su familia a la escuela, que trabaja desde la bicicleta y que va a su trabajo en ella, como héroes desconocidos, presentes y dejados de lado, pero resistiendo.

Aproximadamente desde el año 2011 (tal vez unos años antes inclusive, pero no tenemos registros concretos), hay una generación que viene de pasar los atribulados comienzos del siglo XXI, en una nueva Venezuela, con una nueva visión y migrando hacia un modelo económico diferente al capitalismo clá_ 29

sico ya plantado en nuestro continente y con ganas de mutar.

Empieza casi al unísono, en las principales ciudades de Venezuela a conformarse un movimiento ciudadano, que busca cambiar el paradigma de ciudad carrocentrista a la ciudad posible, esa que tiene como protagonista de la movilidad a la peatonalidad y al ciclismo de transporte como medios para generar ese cambio, que también responde a un movimiento mundial, porque hace tiempo que nos dimos cuenta todas y todos, que los recursos no son infinitos y que están muy mal distribuidos.

En 2011, en Caracas capital de Venezuela, se retoman las masas críticas, ese maravillo_ so evento donde se busca de diferentes maneras devolver

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masivamente a la bicicleta su espacio en la ciudad con esos maravillosos paseos que fueron concebidos como coincidencias no organizadas.

Que pasaron por varios formatos, para la participa_ ción de la gente, sin líder definido (todos podríamos turnarnos esa responsabili_ ad). Imagínate un movimien_ to sin una o un mesías de turno, donde cuentan las propuestas de quienes quieran participar. Imagina un paseo nocturno por la ciudad de Caracas, una de las más “peligrosas” de la galax_ ia, según las últimas encues_ tas y estudios al respecto, pero donde se respira un movimiento local, que hace lo que todos pensaban imposible, abrir el interés por la movilidad en bicicleta.

Ese interés luego se traduce en generar una primera infraestructura permanente para movilizarse por Caracas, y el éxito no es que alguna autoridad haya mirado esa oportunidad porque, realmente es su trabajo ser inteligente y aprovechar esas iniciativas ciudadanas, brindarles el apoyo necesario y trabajar en conjunto.

Se contagia el entusiasmo y por toda Caracas cada vez más se ven las bicicletas, surgen los diferentes grupos que hacen vida y organizan las primeras BiciEscuelas, algunas en universidades incorporadas como parte de algún centro de estudio y como programas permanen_ tes (CEMBI de la Universidad Simón Bolívar), otras como la BiciEscuela Caracas (iniciati_ va cien por ciento ciudadana)

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que sigue de forma autoges_ tionada trabajando hasta estos días.

Conocer el patrimonio cultural y arquitectónico de la ciudad de Caracas, con Biciturismos, nos regaló días de mucha bicicleta y de una comunidad más organizada y consciente de la importancia de ser parte de las soluciones a los problemas de movilidad de una ciudad que sólo mide 20 x 4 Km (como Distrito Capital, la ciudad de Caracas es un 45% de esas dimensiones). Entonces ¿por qué pasar tantas horas en una cola en una ciudad tan pequeña?

En la próxima edición de CLETOFILIA más información del movimiento ciclista de Venezuela.

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María Paz “Mapapo” Castillo Desde algún lugar de México

AMAR, FOREAR, PEDALEAR…

AMAR

Mayo, 2017

Vine al Foro Mundial de la Bicicleta desde Chile, con cierta holgura de tiempo y con el corazón abierto a lo que pudiera pasar y me enamoré. Mi noviazgo con México- cual fuera una persona- lleva casi un mes y lo estoy pasando bien. Pensando si me quedo a vivir con él, o si nos amaremos en la distancia…

Pero que es amor y del bueno, no tengo duda. Tengo esa sensación de ansiedad-paz que lo antecede.

Ha sido intenso, he parado poco.

Partiendo por hacer las cosas más obvias, tal como cuando conoces a cualquier persona, ir a las cosas que le gustan: a la Lucha Libre a gritar como una loca, comiendo tortas de jamón como en el Chavo.

Ya fui a la Plaza Garibaldi y me ofrecieron mariachis, ya fui al Zócalo un millón de veces, al Museo de Frida donde lloré con sus corsés tan parecidos a los míos, a las pirámides donde quedé tostada como una papa frita.

Me he estado enamorando de sus contradicciones básicas como la modernidad hispter superlativa y también de sus taquerías con asientos en plena calle. Y pensar que todo el mundo dijo que era un chico terrible... ¿No se fijaron acaso en su ternura al sonreír cuando le preguntas cualquier cosa? ¿En cómo sus ojos se achinan y brillan cuando dice una buena broma?

México como dijo una amiga por ahí, es un Santiago del año 94 y me gusta. Me recuerda a mi infancia, a mi casa de la adolescencia, a los lugares donde iba a comprar, me gusta como me gusta la gente que ama lo que hace. Me gusta mucho.

Y por un lado, lejos de eso no anda. Puede parecer un ejemplo banal, pero eso es la vida y los foros: una fiesta con tu nuevo amor. Y al igual que en cualquier fiesta, se conversa, se abraza, se besa, se admira, se disfruta. Estás con la gente que te gustaría fueran tus vecinos y amantes y armaran la revolución. ¿Cómo no quererlos, querer aprovechar todos los momentos posibles para saber de su trabajo, las ideas en común, las esperanzas? ¿Cómo no querer conversar con las gentes que

imaginaron el primer foro o quien inventó las Masas Críticas o quien está armando pedaleos bailables en Colombia? ¿Cómo no entusiasmarse con los movimientos feministas-ciclistas en Argentina?

FOREAR

Estoy convencida que gran parte de los foros mundiales de la bicicleta, ocurren fuera de la oficialidad del programa. Y con eso no quiero desmerecer en lo más mínimo el tremendo despliegue que se hizo a nivel de producción en esta versión ni cada una de las actividades que seguro tomó muchas voluntades, reuniones, plata, etc. realizar: charlas, paneles, talleres, exposiciones, stands, talleres para funcionarios públicos, etc. De hecho aplaudo las locaciones, la puesta en escena, la infra, el brandeo. ¡Bien ahí!

Quiero decir que lo más importante está en lo más simple, en lo que pasa en los pasillos de las actividades más importantes: Conversar.

n í co son Aqu Carls Chris

Conversar de la vida, como comentaba Chris Carlsson en una de sus exposiciones. Conversar no sólo de bicicletas: conversar

de las ciudades que queremos, de la vida que queremos, de lo que nos pasa.

Ahí está la gracia. Ahí se arman las condiciones para generar actividades que traspasen las fronteras, las colaboraciones, los movimientos ciudadanos.

Así fue como me llevo los recuerdos de las conversaciones con cada una de las personas que crucé camino, con las que me abracé, a las que tomé un poco de atención en lo que me contaban y las que tuvieron la deferencia de escucharme y conocerme también.

PEDALEAR POR LA CDMX

Sin lugar a dudas pedalear un mes por acá ha sido mucho más amoroso que toda mi vida pedaleando en Santiago. Y sí, exagero siempre, pero para explicar mi asombro, lo puedo definir en una sola frase: No me han insultado una sola vez.

Y es extraño: la gente en México suele pasarse por sus partes pudentas las reglas del tránsito. He mirado con asombro como a un taxista no le importa ir a contramano cuadras, cerquísima de la policía, pero en ese caos, de cantidades irrisorias de vehículos y gente y no respetar las reglas, hay como un acuerdo tácito:

Bueno, pasaste primero y está bien. ¿Para qué más problema? ¿Será la cantidad de gente que permite que todo “te valga madre”? ¿Será la idiosincrasia de no preocuparse por tonteras?

Y en ese escenario, me felicito día a día por haber traído a mi máquina maravillosa. A pesar del mar de carros, ciclovías gigantescas en el casco central, vías que obvian la prohibición a bicicletas, dejando un vacío-guiño a que las bicis sí pueden andar por espacios donde transitan preferencialmente el transporte eléctrico.

Bicicleteros, un universo bastante amplio de ciclotrabajadores que bajo las nulas influencias de las leyes de gravedad, aparcan con tremendas armatostes. Por lo tanto, pese a los pronósticos y las distancias, para mí andar en bicicleta en México ha sido una dulzura, más aún de noche. ¡Qué hermoso es conocer la ciudad en bicicleta y de noche!

Lo que por mientras, lo que nubla mi cabeza es saber si mi amor con México es para un tiempo, para un tiempo largo o que sólo sea el principio de mi travesía por recorrer otros amores en una bici plegable que no tengo, que busco más que billete en la chamarra, más que tacos árabes o al pastor luego de bailar toda la noche.

POR QUÉ AMO MI BICI… Enamorado: Marcelo Canteiro Bicicleta: Turbo Urban R700 Nuestra historia empezó allá por 1986 cuando con 3 años los Reyes Magos me regalaron una hermosa BMX amarilla rodada 12, por supuesto con sus respectivas rueditas. De niño andar en bici era ese único momento cuando eras libre totalmente, donde cada decisión era tuya: qué dirección tomar, a qué velocidad ir y toda fantasía que se te ocurría en esa bici, cohete, moto o lo que en ese momento quisieras que fuera.

“Hoy, con una linda bici a mi medida, disfruto mucho del camino”.

El tiempo pasó. Me mudé a una casa donde era el más chico de una gran barra de amigos y que con mis 5 años me aventuraba a mezclarme con ellos. Nadie pasaba los 10 años así que nuestro medio de transporte era la bici. Yo en ese entonces ya sin rueditas nada me impedía irme a grandes aventuras con mis amigos… (una vuelta a la manzana).

Ya adolescente con mi actual barra de amigos seguía siendo la bici nuestro transporte, íbamos de casa en casa y a jugar futbol siempre en bici. Vivir y estudiar en el mismo barrio y casi no tener que salir de él nos permitía eso.

Terminó la prepa y la inseguridad en las calles, el clima y lo aspiracional del auto hicieron que poco a poco la bici se fuera quedando olvidada.

Ya por el 2012 intenté volver a ella y comencé a ir a trabajar en bici, pero en ese momento el clima era mi peor enemigo.

Pedalear en Montevideo, donde la humedad promedia el 75% y que cuando hace frío hace frío y pasa lo mismo con el calor, no es lo mejor para alguien que luego va a estar 8 horas en una oficina.

Ya habiendo superado lo aspiracional del auto y teniendo una conciencia socioambiental mayor a la de unos años atrás, en 2015 me vine a vivir a CDMX y Nadjeli (mi pareja) se movía bastante en bici, y no sólo eso, sino que pertenecía a una banda de amigos que también lo hacían.

En ese momento conseguí una bici prestada, una de montaña de fierro bien pesada rodado 24, que para mi 1.82 de altura era un poco chica, pero igual así conocí un poco esta ciudad perdiéndome día tras día hasta encontrar el mejor camino para mi recorrido diario de 11km hasta el trabajo.

Hoy ya con una linda bici a mi medida, disfruto mucho el camino cada día. Aunque no voy a negar que de vez en cuando la lluvia, el cansancio o alguna tonta excusa me hacen decidir por otro medio de transporte con la ilusión de ir más tranquilo, más rápido, etc. Esa ilusión se rompe cuando no logro entrar a los 2 primeros vehículos que pasan y cuando lo logro voy en uno repleto de gente y llegando tarde….. por todo esto y más, amo a mi bici.

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Prรณximamente, la primera ediciรณn especial para coleccionistas.