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Filomena, una nevada histórica en Madrid
cáncer de pulmón que precisó la administración del radiofármaco 18FDG, elaborado en el Laboratorio de Radiofarmacia de la propia Clínica, que permitió evaluar todos los nódulos tumorales existentes y ofrecer al paciente el mejor tratamiento posible.
Para llegar a esta meta, además del ciclotrón necesario para producir isótopos radiactivos, la Clínica había edificado el Laboratorio de Radiofarmacia, donde se comenzaron a elaborar los radiofármacos. Asimismo, las instalaciones añadían un equipo PET que permitía observar la imagen molecular del organismo del paciente y la actividad tumoral en caso de existir. En total, el conjunto de las instalaciones supuso una inversión aproximada de 250 millones de pesetas (1,5 millones de euros).
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Equipos, precisión diagnóstica y docencia
Aquel primer Servicio PET estuvo integrado por nueve personas: dos médicos, un radiofísico, un radiofarmacéutico, cuatro enfermeras y una secretaria. En la actualidad, el Servicio de Medicina Nuclear-PET está integrado por 46 profesionales entre ambas sedes.
Además, el Departamento de Medicina Nuclear destacó desde el principio por su fuerte carácter docente. Por entonces, los especialistas del departamento publicaron el primer libro en español sobre las posibilidades diagnósticas que ofrecía la imagen molecular PET. Durante estos 25 años se han impartido 21 ediciones del curso teórico-práctico PET al que han asistido miles de especialistas de medicina nuclear de España y de otros países de Europa y Latinoamérica.
Unidad de MicroPET
La puesta en marcha del PET y del Laboratorio de Radiofarmacia en la Clínica sirvió también para que muchos otros centros comprobasen las bondades de este procedimiento en cuanto a la mejora en el manejo clínico de los pacientes, que aseguraba una mejor asistencia porque permitía tomar decisiones de una manera mucho más rápida y aportando muchísima información. En la actualidad, la técnica de imagen PET está viviendo, en general, un momento bueno porque ya está muy consolidada. En 2004-2005 se instaló en la Clínica la Unidad de Investigación MicroPet, que permitió hacer estudios de enfermedades humanas en modelos animales. «Gracias a este equipamiento se han podido realizar muchos proyectos de investigación en colaboración con diversos grupos de la Clínica, del Cima, de la Universidad, de otras universidades, extranjeros, europeos. En estos 15 años han sido más de 11.000», subraya el Dr. Iván Peñuelas, director del Laboratorio de Radiofarmacia y de la Unidad de MicroPET de la Clínica.
Filomena puso de manifiesto la profesionalidad y entrega de los profesionales, que superaron las adversidades para seguir cuidando de los pacientes
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Escuchar “Filomena” y nuestra mente nos sitúa rápidamente en enero de 2021. Esta palabra engloba muchas otras, como nevada histórica, colapso en las principales carreteras y calles, árboles caídos, tiendas cerradas durante muchos días, supermercados sin productos por la falta de abastecimiento…
Sin embargo, las enfermedades no pararon esos días. Por eso, para los profesionales de la sede de Madrid, Filomena se tradujo, además, en profesionalidad y en entrega. También en pensar soluciones (en algunos casos muy creativas) para seguir ofreciendo asistencia a los pacientes que lo necesitaban. En tiempo récord, los equipos se reorganizaron y trabajaron unidos para despejar los principales accesos al hospital y cumplir con turnos extra para que ningún paciente se quedase desatendido.
Es el caso de Mercedes Gutiérrez, supervisora de enfermería del bloque obstétrico, que esos días estaba de guardia. “Sobre las 18:00 horas del viernes me empezaron a llamar enfermeras, auxiliares…. Que estaban atrapadas en M40 o M30 y no podían avanzar ni retroceder. Nunca me imaginé la que se nos venía. No paraba de sonar el teléfono: decenas de profesionales me llamaban diciendo que no podían llegar”. “Lo mismo le sucedió a muchos pacientes, por lo que les atendimos por teléfono para estar a su lado”, indica Mercedes Gutiérrez. Pero, ¿qué pasaba con los pacientes ingresados o que tenían que ir al hospital? Desde la Dirección, se organizó un “Comité Filomena” online para mantener la asistencia. Se reorganizaron los profesionales que estaban en ese momento en el hospital para atender los diferentes servicios, como la zona obstétrica, urgencias o la planta de hospitalización y, de esta forma, que los pacientes estuviesen atendidos. Gran parte de los profesionales que estaban aquí el viernes, no pudieron volver a su casa hasta el domingo.