Salud e información por México
Redactar un escrito de salud no es simple: actualmente estamos inundados de información que promueven la buena salud, y sin embargo, estos parecen no tener un impacto profundo en nuestra sociedad. En la Región de las Américas ha existido, en las últimas décadas, un notable incremento de las enfermedades crónicas no trasmisibles (ECNT) asociadas a estilos de vida no saludables. En esta ocasión, nos enfocaremos en la obesidad, ya que es en sí misma una enfermedad crónica y a la vez un reconocido factor de riesgo de muchas otras. El estudio y abordaje de la obesidad no pueden desligarse de los de otras ECNT por diversas razones: 1) comparten algunos factores causales y subyacentes comunes, como la alimentación inapropiada y el sedentarismo; 2) al identificar a los sujetos obesos se está identificando a una alta proporción de los sujetos en riesgo de padecer otras ECNT; 3) al prevenir la obesidad (mediante la promoción de estilos de vida saludables) se previenen la mayoría de las ECNT; y, por último, 4) al tratar al obeso se disminuye el riesgo de que sufra complicaciones y también se reduce el efecto mediador que tiene la obesidad en relación con otros factores de riesgo1 Un estudio realizado en Europa2, sugiere que la percepción del estado de nuestro peso se basa en comparaciones entre un grupo social, más que en datos fidedignos, como el índice de masa corporal. (Medida de asociación entre el peso y la talla de un individuo), es decir, si una persona con sobrepeso pertenece a un grupo donde la mayoría tiene sobrepeso u obesidad, puede considerar su peso adecuado, o normal. En el estado de Querétaro, para 2006, una quinta parte de los niños y niñas en edad escolar, y un tercio de los adolescentes presentan exceso de peso, seis de cada 10 adultos mayores de 20 años en Querétaro presentan exceso de peso y el 70% de este grupo de población tiene obesidad abdominal3. En un estado y país donde más del 50% de la población tiene sobrepeso: ¿es posible que el problema, además de una raíz de salud pública, tenga una razón social? Dada la evidencia, se puede inferir que la obesidad no se puede resumir en un problema de salud, es también un problema social, donde todos tenemos responsabilidad. Ser obeso no debería ser pretexto de evitar el tema, y ser delgado no debería de permitir que la obesidad sea “problema de otros”, es importante que como sociedad actuemos desde nuestro grupo social y nos activemos, sigamos atentos de espacios como este, que permiten una difusión de temas de salud, y atrevámonos a discutirlo sin miedo a ofender a terceras personas. En pocas palabras: La obesidad es un riesgo de salud; si tienes un familiar o amigo con el problema, hay que buscar el momento adecuado y hacérselo saber, por su bien. Actualmente existen muchas opciones por parte de profesionales de salud para solucionar el problema e impedir que siga siendo un tema más de la agenda nacional. Si en México el 2010 es un año de celebración, celebremos convirtiéndonos en una sociedad proactiva, decidida a mejorar poco a poco nuestro país desde su cimiento: nosotros. El conocimiento y difusión de buena información en salud puede ser un gran apoyo para lograr esta meta. Dr. Carlos Miguel Sandoval Roldán. drsandoval@vitae-mx.com
1 PENA, Manuel and BACALLAO, Jorge. La obesidad y sus tendencias en la Región. Rev Panam Salud Publica [online]. 2001, vol.10, n.2 [cited 2010-04-30], pp. 45-78 . 2 "Imitative Obesity and Relative Utility", with David G. Blanchflower and Bert Van Landeghem, Journal of European Economic Association, 2009, 7(2-3), 528-538 3 Instituto Nacional de Salud Pública. Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2006. Resultados por entidad federativa, Querétaro. Cuernavaca, México: Instituto Nacional de Salud Pública-Secretaría de Salud, 2007