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CONCIERTO EN EL APOLO o
ELlunes por la noche inauguró su salón de conciertos en el Teatro Apolo la Sociedad «Club Armomco) robusta conjunción de artistas y de espíritus preparados para el glorioso Arte de la música.
El programa ejecutado, como se verá no pudo ser mas sugestivo:
1. Discurso del Lcdo Rafael Monagas. Theo. Bendix, <Sweet Jasmine» vals tocado por la orquesta. 3 Alfred Margis <Sú zette» vals, tocado por la orquesta. 4. Donizetti, sextero de «Lucia de Lammermoor», arreglado por Gustav - Saonger, tocado por mandolinas. 5. Canción húngara de la zarzuela <Alma de Dios», cantada por el orfeón del Club Armónico, acompañada por la orquesta.
Z. Intermedio de ro minutos.
6. Joseph Haydn, Minuetto de la Sinfonía Militar, tocado por la orquesta.
7. Pablode Sarasate, Romanza andaluza, tocada por el señor Martinez Plée. 8 Pablo de Sarasate, Tarantela, tocada por el señor Martinez Plée9. Pablo de Sarasate, Aires bohemios, tocado por el señor Martinez Plée. 10. G. Meyerbeer, marcha de coronación de la ópera <El Pi0ofeta» tocada por la orquesta: Además del número que correspondió' al Orfeón y de aquellos encomendados á la orquesta,q. fueron interpretados con exquisita y suprema maestría, merecen punto aparte los ejecutados al violín por el Sr. Martínez Plée.
Nuestro gran virtuoso, á no haber tenido ya bien cimentada su fama de artista en este país y en el extranjero, la brillantez, el alma y la exquisita ternura, que puso esa noche en las notas que arrancó á su arco privilegiado, le hubieran bastado para agigantarse Como un genio ante aquel público selecto que se deleitó oyéndole.
En cuanto á los demas numerosdelprograma, todos se cumplieron atinadamente.
El discurso del Lcdo. Monagas fué de tonos alentadores para los socios del Club, á quienes exhortó pira que se aprestaran solícitos y g¿n%rosvs á sostener esa sociedad que hace honor á sus iniciadores y sostenedores.
La Junta Directiva de la Socie lad «Club Armónico» la componen elementos tan entusiastas y progresistas como el Sr. A Frasqueri, presidente, joven cultode relevantes prendas personales, que ocupa un puesto de confianza en lá casa Fritze Lundt á Co y cuyo retrato publicamos en la portada de este número.
Otros elementos, tambien distinguidos y de excelentes dotes de caráct:r cubren los otros puestos de la directiva: de ellos nos ocupare mos sucesivamente, porque queremos que el pais conozca á los hombres que están al frente de una iostitución tan simpática. á la que queremos nosotros y tolos debemos sostener,no ya como una nota de v:rdadero arte regional, Sino como una manifestación de cultura de nuestro país.
Notas De Duelo
La tarde del martes último falleció en esta ciudad el que fué estimado am¡go nuestro Sr. Bernardo Blandino.
Nació en España, pero hace largos años que residía en este pais al que quería como á su propia patria.
Era hombre de cultura é ilustración y ocupó algunos cargos, entre ellos que recordemos, el de Secretario del Ayuntamiento de Manatí en tiempos del partido liberal, el de Administrador de «La Correspondencia» y el de Inspector de Sanidad durante la peste.
Fué hombre de ideas avanzadas: un gran li- bre pensador y un partidario vehemente de la independencia de Pto. Rico.
Descanse en paz el buen ciudadano y reci ban sus deudos nuestro massentido pésame.
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Tambien dejó de existir el jueves de la semana pasada en Santurce el señor Antonio Salas Pozuelo, rezagador que fué por muchos años de <«La Colectiva.»
Fué un obrero laborioso -y un elemento social muy estimado y popular en esta ciudad y sus barrios.
Paz á sus restos.
%i para ser honrado no fuera necesario. más que serlo, parecerlo, la honradez no sería el áarma que públicamente esgrimen mu. chos ladrones para combatir á hombres verdaderamente honrados.
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La vida es un mar en que la felicidad es una ola que, cuando nos toca, nos baña desde la cabeza hasta los piét, pero que casi siempre pasa cerca de nosotros con un murmullo extraño......
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- La vergiienza es un cristal que, si se rompe una vez, los pedazos en que queda convertido se rompen tambien sucesivamente hasta que sólo resta de ellos un polvillo imperceptible que para nada sirve.
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Las debilidades de un hombre enamorado de uma mujer hermosa son los peldaños de la escala invisible por donde élla sube á la Gloria y él baja al Iofierno.
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La vida de los pueblos, como la de los individuos, tiene siempre épocas tristes en que el ánimo decae, la voluntad se pierde, la energía desaparece y sólo queda un menguado esceptisismo, Estas épocas llegan para los pueblos cuando, víctimas de un gobierno tiránico por muchos conceptos fuerte, pierden la espe ranza de redimirse y se resignan extenuados oOO
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por una lucha inútil. como mansas ovejas, á sufrir sin protesta las arbitrariedades y las injusticias de sus mandones. En tal estado, los pueblos lo confían todo á la Providencia y se convirten en juguete de sus gobernantes,
Oh, yo quiero ser feliz eternamente!
-Hacedme creer que aquí no acaba todo, q1e existe un mas allá; ese más allá que hoy no me preocupa.
Yo quiero ser un convencido en el templo de vuestra religión.
Yo quiero ser un ferviente defensor de vuesra fé, con la cual se vive en un mundo adora- ble que no se parece á este en que me revuel- vo impotente para hacer triunfar mis ideales, sin esperanzas ni ilusiones, mordido sirmpre el corazón por los implacables canes de la Duda.
Soy todo oidos para escuchuros, porque deseocreer en alguien ó en algo y gozar la dicha de que me hablais.
Convencedme, os lo ruego, seres ingénuos ó videntes, de que la muerte aqui es el prólogo de una gloriosa resurrección en otro mundo mejor, donde comenzamos á ser perfectos yá parecernos á ese Dios informe que con tanto calor defendeis ¿onsiderándolo como el mon _f'us ultra de la perfección, y hasta cuyo trono, segun decís, sólo se llega cuando mos hayamos igualado á él en virtud de una larga evolución á través de un número incalculable de mundos sospechados por vuestros sencillos corazones y cuya existencia asegurais...
Os escucho.
Nota Teatral
URANTE esta semana ha venido trabajando en el Municlpal la compañía dra mática de Miguel Muñoz.
Las obras puestas en escena hau sido de lo mas notable y de lo mas nuevo del teatro contemporáneo.
Es sensible de que los intelectuales, la gente que gusta de lo bueno, haya mirado esus veladas con marcado indiferentismo. .No parece sino que las rumbas de los bufos y los
C. MAaARTINEZ ACOSTA.
-tros sentimientos artisticos y ya naca nos ad- mira.
No ubstante para losque han visitado el teatro en estas noches ha sido-una satisfacción inmensa admirar la hermosa labor del gran artista Miguel Muñoz.
En «La Garra», en <Tierra Baja», en <Arlequín» y en otras muchas obras Miguel MuBoz ha estado á gran altura.
Difícilmente podremos ver otra vez en nuestro teatro un Borrás á feso luneta cozapateos de las bailarinas han atrofiado nues. mo á Miguel Muñoz.
BANDERA BLANCA o
AJABA yo lentamente, una mañana primaveral, por la ruda y áspera curva del camino, aspirando con delicia el aire embalsamado de las cumbres de los montes envueltos en las nieblas azules del naciente día.
A un lado y otro del camino la vegetación espesa y abigarrada amor y caridadevangélica, En todo pensaba:; en la neurasténia que nmos devora como un cáncer del espíritu. en el odio ceñudo y encarnizado que como un buitre interior nmos roe las entrañas, y en el negro egoismo, implacable y feroz que agarrota las conciencias y ahonda el abismo Adinabdao be Y O de la irritante desi i ualdad que existe dos efluvios que al MA RF1L Entre pob1esy ricos, penetrar por los "7 P eu - humildes y podero- l de N ol Eres pálgdg 1 triste.. .I sin embargo sos de la tiecra, aún po , P adoro con mis ímpetus sinceros u Ds hlhores de enardecían la san- tus románticos ojos de letargo dus -aneva vida. gre precipitándola i tu voz de sollozos lastimeros.
Cuuala eñ la imen oleadas de luz potencía del justo sobre el cerebro En este de la vida oscuro y largo para realizar el perezoso y soñolien más que todos los áridos senderos, bl'º:.e7;: º¡la b¡l;:;íºf to. El mar, á lo parece que el dolor ver.tió su amargo g¡ñd)ad humana que lejes tez=día sobre cáliz sobre tus sueños lisonjeros. hace más amarga la arena capricho- la vida p¡:olon_gando sos bordados Por eso es la ternura que me ofrecen el dolor infinito de de espuma y más tus ojos en su triste lejanía las almas que sulejos aña, aliá en el itu voz en sus giros que enternecen. fren. , 000 confin del horizon- I e i s te destacábanse, < e:;o m o A r Estaba ya en plecomo dos grandes " oee p . na calle. Era un nl lós Sliencai ve en el jardín de tu melancolía.... gran día de fiesta lar y las casas las de u . popu ; ción PRIMITIVO HERRERA. aparecían engala le ! - Bajaba solo, por la rápida pendiente cou la vista fija en el -paisaje que tenia delante; un paisaje encanta dor, trémulo y vaporoso, dorado por el fuego de las primeras hebras del sol. 'I*.
Estaba próximo á llegar á la población; divisábanse las casas de techos rojizos y en el espacio inundado de luz brillaban, como puntos de diamantes, las agujas de los para-rayos de la iglesia. La placidéz de la mañana había despertado en mi ideas graves y sombrías sin saber porqué. Quizás por un contra-golpe psíquico s«En qué pensaba?» Pensaba en el hormiguero humano que se agitaba abajo, en la hondonada; en la crúel.y despiadada lucha por la vida, en el horno siempre encendido de las pasiones bestiales yen la falta de
Q nadas con banderas y gallardetes de diVersos colores que flotaban al aire como emblemas de general alegría. Un grupo de hombres, de hombres del pueblo, bajaba por el extremo opuesto de la calle al són de la música, precedida por una bandera blanca que tenia esta inscripción: «PAZ Y JUSTI- CIA.» Me descubri con respeto al paso de - esta bandera que representa el ideal de los pueblos civilizados; y al extinguirse los últimos acordes de la música y perderse la muchedumbre allá á lo lejos, exclamé: «Lástima grande que no sea verdad tanta belleza'» Hermoso y sublime dia aquel en que, abatidas las banderas nacionales, multicolores, floten airosas en todos los pueblos de la tierra las banderas unicolores, las blancas banderas de la paz y de la justicia, como símbolo inmácu' lado y glorioso de la consagración del amor entre los hombres!
ISIDORO SOTO NUSSA.:
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