Número 22
Suplemento deportivo El club de mi barrio - Año 4 - Núm. 22 - Julio - Agosto - Revista Comunicarnos - Arzobispado de Bs. As.
de mi Barrio Staff Director
Pbro. Adrián Bennardis
Secretario de redacción Nicolás Soria
Diseño
Florencia Laje
Catecismo deportivo ilustración
Betina Spigariol
El Libro de mi Barrio
Después de mucho tiempo por fin el libro “El Club de mi Barrio”, se publicó en estos días. El catecismo deportivo de los clubes parroquiales trata de una serie de relatos protagonizados por Jesús para que los pibes y pibas conozcan la vida de Cristo. Los textos de la catequesis deportiva que se vienen publicando en la contratapa del suplemento deportivo son parte de este libro que busca poder brindar un material completo y eficaz a cada uno de los profes de nuestros clubes tanto del gran Buenos Aires como en el interior de la Argentina. Después de muchos preparativos y de pensar bien cada paso, el tan esperado libro vio la luz, bajo la editorial Santa María de la mano del Padre Damián Reynoso, autor del mismo, y se presentó el libro el día 25 de mayo por la tardecita en vivo por el canal oficial de la Editorial y por todas las redes sociales de nuestros barrios y de la Unión de Clubes Parroquiales. Los exponentes de la presentación fueron: el Padre Damián Reynoso (Autor del libro),
Monseñor Gustavo Carrara, Padre Pepe Di Paola, Padre Adrián Bennardis, Nidia González (Club San José), Juan Manuel Gauna (Representando la Unión De Clubes) y Gustavo Escobar. Se distribuyeron ejemplares del libro, tanto en los clubes del interior del país, como en el Gran Buenos Aires y la Capital Federal. En el correr de los próximos meses el objetivo es lograr hacer visitas a los diferentes clubes que integran la Unión para poder hacer charlas informativas acerca del libro y de la catequesis deportiva. Se está trabajando en un proyecto que complementará el primer libro “El Club de mi Barrio”; es la secuela que se está armando y editando, se tratará de actividades y dinámicas para jóvenes líderes de nuestros barrios. Un proyecto que está a cargo
de Juan Manuel Gauna, uno de los pilares de la Unión de Clubes. Este proyecto estará viendo la luz en los próximos meses. La Unión de Clubes Parroquiales sigue en plan de capacitar a sus profes, el día 19 de junio se realizó una charla que
estuvo a cargo de la Doctora Ma. Lourdes Molina, abordando el tema: “Bullying en los clubes” un tema que azota no solo nuestros clubes sino todos los extractos de nuestra sociedad, y golpea de mala manera a la niñez de muchos de los chicos y chicas que lo sufren en carne propia.
Unión de Clubes Parroquiales
La iglesia y la cancha nacieron juntos
ia c n i ProvSalta CLUB SANTA TERESITA de
Al costado de la parroquia Santa Teresita siempre existió un espacio destinado para el deporte, los vecinos que querían se reunían los fines de semana para jugar el fútbol. Pronto se cerró el lugar con una tapia con el trabajo y aporte económico de la comunidad en general. Se siguió, todos los fines de semana los vecinos venían a jugar a la pelota y un mes antes a la fiesta patronal de la Parroquia se hacía un torneo en torna a Santa Teresita con los chicos de los distintos barrios. Este espacio destinado al
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deporte existe junto con la parroquia Santa Teresita, año 1978. Podríamos decir que nacieron juntos, la iglesia y la cancha de fútbol. Los frailes franciscanos que pasaron por esta fraternidad soñaron con la realización de un polideportivo, pero por diferentes motivos no pudieron realizarlo. Pero en la cancha siempre se venía a jugar y las escuelas del pueblo solían venir a realizar la hora de educación física y los ensayos de las destrezas físicas que los colegios realizan a fin de año. Desde el año pasado 2020 comenzamos a realizar el polideportivo Santa Teresita: una cancha de fútbol, una cancha vóley y básquet y un espacio para correr. Con tribunas e iluminación para poder realizar las actividades deportivas preferentemente por las noches por las altas temperatura que hace en la zona. Esto será el centro de las actividades deportivas. Pero a la vez, tenemos pequeñas escuelas deportivas en los parajes (Algarrobal, Campo Durán, Carapari, Capiazuti, Tuyunti y Piquirenda Estación); en cada uno de estos parajes ya están funcionando escuelitas de fútbol con cinco categorías, para chicos y chicas. Aproximadamente ciento veinte chicos y chicasas en cada escuelita de estos parajes. Por ahora estamos acompañando de cerca a estos parajes, pero tenemos pensado de promover progresivamente en cada uno de los parajes de nuestra parroquia el fútbol, vóley, el hockey. Fray Juan V
Una vida dedicada al servicio Entrevista a Juan Manuel Gauna quien es profe en el Club San Juan Bosco en La Carcova y también parte del equipo que coordina la Unión de Clubes Parroquiales. Contamos un poco de vos, ¿dónde naciste?, ¿cómo estaba compuesta tu familia en la infancia?, cómo para tener un panorama y conocerte un poco más. Nací en Palermo, en 1985 junto con mi hermano mellizo, y tengo tres hermanos más. En mi niñez vivía con mis hermanos y mis padres, ambos docentes de profesión, una familia de clase media. Fui al colegio de San José
de la Palabra de dios en villa Crespo. Desde chico me gustó mucho el deporte, especialmente el fútbol. Entre de pequeño en Argentinos Juniors y el club de barrio Villa Malcom. Seguí jugando hasta que a los 19 años me llegó la posibilidad de jugar en la primera de excursionistas pasando por Boca y All Boys. Convivo con mi pareja Micaela, ten-
go dos hijos Joaquina de 7 años y Felipe de 5 meses. ¿Cómo empezaste a trabajar en sector social? Durante mi adolescencia conocí la vida parroquial y empecé a ir a la iglesia San Bernardo de villa Crespo. Allí junto a mis compañeros de la escuela comenzamos a colaborar en Acción Católica, catequesis, armábamos las misiones a Santiago del estero. Ese fue el puntapié inicial de una vida dedicada al trabajo social. ¿Dónde nació tu vínculo con los curas villeros? Uno de nuestros amigos del colegio es el Padre Tano, de esta manera comenzamos a ligarnos a este maravilloso mundo social de los curas villeros. Entonces desde muy chico tuviste esas ganas de ayudar acompañar al prójimo Si, desde pequeños tuvimos una fundación que se llama “Locos Bajitos” que sigue ayudando ac-
¿Qué necesidades viste durante la pandemia en los clubes? En esta pandemia se vio la necesidad de conformar una Unión de Clubes Parroquiales, una fuerza que traccionara todos los pedidos colectivos que se iban dando por cada club y hacer unidad para que nos de una fuerza representativa y una unidad en función de recursos de pensamiento y de mística. Por esto la Unión de Clubes en el 2020 y en el 2021 trabajando junto a Cáritas Nacional nos permite realizar un trabajo territorial en toda la República Argentina. ¿Cómo ves el futuro, qué proyectos se aproximan en el horizonte? Se vienen nuevos desafíos, se sigue pensando en la capacitación de los profes y de los jóvenes que tenemos en nuestros barrios, seguir acompañando a los clubes en este desarrollo, crecimiento y mirada social, acompañar a los niños, niñas y adolescentes de nuestros barrios más vulnerables, ofrecerles un club, un espacio de contención que los acompañe en su crecimiento y proyecto de vida, es un desafío que tenemos como docentes y comunidad de la iglesia, siempre creyendo en el amor de Jesús para cada uno de del chicos.
tualmente a diferentes sectores de la sociedad. Desde esa época también se fundó el hogar “madre Teresa”, donde los chicos realizan su rehabilitación contra las adicciones y que fue dado posteriormente al Hurtado. De esta manera comenzamos nuestro trabajo comunitario con la fundación “Locos Bajitos”, también hace 12 años más o menos iniciamos el deporte en el barrio 1-11-14 actualmente Barrio Ricciardelli, con las primeras escuelas de líderes deportivos, creamos las “Leonas del Bajo Flores”.
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Pquia San Saturnino y San Judas Tadeo
Pquia Beato “Enrique Angelelli y compañeros mártires
Pquia San Pablo Apóstol
Pquia Santa María Madre del Pueblo
Pquia Nuestra Sra de la Guardia
Pquia Patriarca San josé Pquia San Juan Bosco
Pquia Club Espacio María Puentes Cura Madre de Brochero Dios
Pquia San Roque González y compañeros Mártires
Pquia San josé
Pquia Sagrado Corazón
Pquia San Juan Diego
Pquia Sagrado Corazón Club y Escuela Deportiva “Cheru Roque Chielli
Pquia María Madre de la Esperanza Pquia San Jorge
Pquia. San Alberto Magno
Pquia Nuestra Señora de Fátima
Club “María Madre
Pquia Virgen Inmaculada
Pquia Nuestra Señora de Luján
Club “Palentini”
Pquia Virgen de Caacupé
Pquia San Francisco Solano
Pquia San Francisco de Asís Pquia Virgen del Carmen
Pquia Cristo Obrero
EL CASAMIENTO EN CANÁ
Volver a empezar cismo Cate tivo depor
Pquia Sagrado Corazon de Jesus.
Pquia Nuestra Señora de la Guardia
pacitar. Nos dijo que nosotros estábamos en una fiesta, en la de Dios, donde somos hermanos y no enemigos. Para nosotros también fue un milagro. Nos dimos la mano, nos miramos como amigos y empezamos de nuevo el partido de la vida, esta vez en serio. Jesús nos había cambiado el odio por amor, la bronca por amistad, la violencia por buen fútbol. DIOS NOS ALIENTA
Las bodas de Caná (Jn2, 1-10)
Esta vez nos tocó jugar en Galilea, en el Club Deportivo Caná (CDC). Nos habían dicho que iba a ser una fiesta. Fue una noche inolvidable. El partido arrancó muy picante. Ya de entrada, los locales nos miraban mal. Y nosotros, para no ser menos, también. Ellos pegaban mucho, el partido se iba calentando. Carlitos, nuestro defensor, le pegó a uno una patada terrible que lo levantó por el aire. 4
Ahí nomás todo se descontroló, ¡se armó una guerra! Piñas, gritos, corridas, insultos y llantos. Parecía que habíamos perdido la alegría, que nos habíamos quedado sin ganas de ser compañeros, amigos, y, sobre todo, nos pareció que la fiesta se iba apagando. El árbitro nos calmó y nos juntó a todos en la mitad de la cancha. Nos contó lo que le pasó a una pareja del barrio que se había casado la
semana anterior. Que en medio de la fiesta, se habían quedado sin bebida, sin vino, y no tenían qué darles a los invitados. Pero Jesús, nuestro Salvador, que había ido a la fiesta, hizo un milagro: convirtió mucha agua en mucho vino y así les devolvió la alegría, les dio esperanza y les sacó la tristeza. Así la fiesta pudo continuar. Esto que el árbitro nos contó nos hizo reca-
1. Tres días después se celebraron unas bodas en Caná de Galilea, y la madre de Jesús estaba allí. 2. Jesús también fue invitado con sus discípulos. 3. Y como faltaba vino, la madre de Jesús le dijo: «No tienen vino». 4. Jesús le respondió: «Mujer, ¿qué tenemos que ver nosotros? Mi hora no ha llegado todavía». 5. Pero su madre dijo a los sirvientes: «Hagan todo lo que él les diga». 6. Había allí seis tinajas de piedra destinadas a los ritos de purificación de los judíos, que contenían unos cien litros cada una. 7. Jesús dijo a los sirvientes: «Llenen de agua estas tinajas». Y las llenaron hasta el borde. 8. «Saquen ahora, agregó Jesús, y lleven al encargado del banquete». Así lo hicieron. 9. El encargado probó el agua cambiada en vino y como ignoraba su o rigen, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo 10. y les dijo: «Siempre se sirve primero el bu en vino y cuando todos han bebido bien, se trae el de inferior calidad. Tú, en cambio, has guardado el buen vino hasta este momento».
Propuesta con fe: “La mejor jugada”. Momento para ver las debilidades y las fortalezas del grupo.