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«AÑO NUEVO, ESPERANZA y COMPROMISO para una ARGENTINA MEJOR» MONS. HÉCTOR AGUER
Estamos llegando al fin de otro año. ¿Qué sentimiento surge espontáneamente en nuestro corazón, cuando se cumple este cambio de calendario? Yo diría que, por lo general, lo que abrigamos en este momento es una cierta esperanza. Porque todo comienzo nuevo nos invita a que uno se forje ilusiones, o proyecte deseos irrealizables, pero sí que uno nutra una cierta y saludable esperanza. La esperanza puede ser entendida en un sentido muy humano, natural, inmediato. En realidad, la vida está nutrida de esperanza. Por eso se dice vulgarmente «mientras hay vida y hay esperanza». Y podríamos decir también, al revés, mientras hay esperanza hay vida; de lo contrario ¿qué vida sería esa? Depositamos esperanzas en que ciertas cosas van a ir mejor, que nos va a ir mejor personalmente, que podemos hacer cosas que no hemos logrado cumplir o acabar en el año que termina, y tantas cosas por el estilo. Pero es bueno recordar que en sentido propiamente cristiano, la esperanza es una virtud teologal. Quiere decir que es un don de Dios, que tiene que ver con la gracia, lo mismo que la fe y la caridad. Es una gracia que Dios nos comunica y tiene como objeto la vida eterna. Es bueno en todo caso ligar esos dos planos de la esperanza: la esperanza humana y la esperanza teologal, cristiana, sobrenatural, porque en el fondo estos plazos que vamos cumpliendo, año tras año, algún día se acabarán para nosotros y llegaremos al plazo
definitivo, al momento del paso por excelencia. ¿Qué es lo que nos espera allí? Nos espera Dios, nos espera la vida eterna. Santo Tomás de Aquino dice una cosa muy bella cuando trata, en la Suma Teológica, acerca de la esperanza: «que no podemos esperar de Dios menos que a Dios mismo». Es decir que el objeto de nuestra esperanza es Dios. Sí la esperanza cristiana es este don de Dios, una gracia que nos pone de algún modo en el nivel de Dios para desear la vida eterna y para poder encomendarnos a ella. Es decir, el premio es Dios, precisamente Él mismo; el que nos sostiene con la gracia de la esperanza, se nos promete como premio. El objeto de la esperanza cristiana es el encuentro pleno y definitivo con Dios para siempre. Hay entonces una vinculación entre esos dos planos, esas dos dimensiones de la esperanza humana: la esperanza natural y la esperanza sobrenatural. ¿Por qué? Porque la gracia de la esperanza en la vida eterna nos ayuda a ubicar bien nuestras esperanzas terrenas, temporales, y nos impulsa a que afrontemos las dificultades concretas de la vida temporal con otro ánimo, con otro espíritu, con una elevación más grande del corazón. Esto me parece fundamental: todos deseamos para el año que viene que nos vaya mejor, en el orden personal, en nuestros emprendimientos, en nuestra familia. Y todos deseamos también que a la Argentina le vaya mejor, que al país, que a nosotros todos como sociedad, nos vaya mejor. Podemos esperarlo, pero esa esperanza no consiste simplemente en sentarnos a esperar, sino que debemos cooperar activamente para que suceda. Así como en el orden de la vida eterna, como nos enseña San Agustín, Dios que nos creó sin nosotros no nos salvará sin nosotros, y además de esperar la salvación es fundamental nuestro empeño, es decir nuestra búsqueda y obediencia a la voluntad de Dios; así también en el orden colectivo, cuando esperamos una Argentina mejor, una Argentina posible y futura El Papa Francisco. mejor, debemos comprometer nuestra decisión y cada Convengamos que fue y sigue siendo una sorpresa. En verdad, no estaba en los «cálculos» de nadie. uno hacer su parte en la obra común. Parecía que ya se le había pasado su «cuarto de hora». Ya mayor, cansado, esperando retirarse (de hecho Tenemos que colaborar, cada uno de nosotros hacer ya había armado su cuarto en el Hogar Sacerdotal). bien lo suyo, y en este campo hay una escala muy Pero... «Mis caminos no son vuestros caminos», pareció querer recordarnos el Espíritu Santo en el Cónclave grande de responsabilidades. Algunos de los que nos de Cardenales. E irrumpió en el panorama de la Iglesia y del mundo un Bergoglio renovado, cambiado, están viendo dirán ¿y yo que puedo hacer? Usted rejuvenecido... como un impetuoso huracán. Y lo sigue siendo. Convocando a la Iglesia a una profunda puede hacer mejor lo que tiene que hacer. Por su renovación, a una radical conversión. Para todos (nadie debería hacerse el distraído) pero sobre todo, para parte, aquellos que tienen responsabilidades mayores el «mundo clerical». Menos «príncipes» y «funcionarios», y más pastores «con olor a oveja». tendrán que esmerarse más en hacer mejor las cosas que son propias de su cargo y sobre todo superar los Reconozcamos que «el nuevo intereses privados, individuales, de grupo, de sector, Bergoglio» nos descoloca. Nos para trascender al gran interés nacional. A nosotros perturba. Pero... ¿No estábamos nos ayuda la gracia cristiana de la esperanza, que nos acaso demasiado acostumbrados a anima a emprender todo aquello corresponda a un modo de ser Iglesia, de intentar nuestra vocación, a nuestra responsabilidad, a nuestro ser cristiano, demasiado «mundano», papel en la sociedad, como para que las cosas nos domesticado, sin confrontarnos con vayan mejor. el Verdadero Jesucristo, con el 29-12-12 * FUENTE: CLA VES P ARA UN MUNDO MEJOR CLAVES PARA verdadero cristianismo, el del Evangelio, y no el de hábitos y costumbres cuasi monárquicas o PERIÓDICO principescas, que se habían «EL PODER DEL ESPÍRITU» pegoteado en la «estructura eclesiástica»? Una última observación: ¿No sucede tal vez que aquellos que se incomodan con el Papa Francisco, *Dirección General: son aquellos que han dejado de Juan Carlos Hovhanessian sentirse «descolocados por el Diego Hovhanessian Evangelio?
UNA PRESENCIA PERTURBADORA
STAFF
P. Francisco Delamer
*Asesor Espiritual: Monseñor José Guido Pesce *Redacción: Alba Acosta Carmen Alviña Miriam B. de Mavilian Lourdes Chiappetta Liliana Escouteloup Laura Gómez Lucía Hovhanessian Milagros Hovhanessian Lidia I. de Papazian Geraldine Miguel Lic. Anahí Raggio Lic. Valeria Salinas Agustina Spegazzini *Diseño: Roxana B. de Hovhanessian Lucía Hovhanessian Geraldine Miguel Agustina Spegazzini *Coordinación de contenidos: Dra. Mónica V. de Adanalian *Coordinación General: Roxana B. de Hovhanessian PUBLICACIÓN MENSUAL GRATUITA LA COMUNIDAD «SANTA MARÍA» NO ES RESPONSABLE DE DISTRIBUCIÓN ALGUNA HECHA POR TERCEROS
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Miércoles 20:30hs.
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«Jerusalén, quítate tu ropa de duelo y aflicción, y vístete para siempre el esplendor de la Gloria que viene de Dios. Envuélvete en el manto de la justicia que procede de Dios, pon en tu cabeza la diadema de gloria del Eterno. Porque Dios mostrará tu esplendor a todo lo que hay bajo el cielo. Pues tu nombre se llamará de parte de Dios para siempre: «Paz de la Justicia» y «Gloria de la Piedad». Levántate, Jerusalén, sube a la altura, tiende tu vista hacia Oriente y ve a tus hijos reunidos desde oriente a occidente, a la voz del Santo, alegres del recuerdo de Dios. Salieron de ti a pie, llevados por enemigos, pero Dios te los devuelve traídos con gloria, como un trono real. Porque ha ordenado Dios que sean rebajados todo monte elevado y los collados eternos y colmados los valles hasta allanar la tierra, para que Israel camine seguro bajo la Gloria de Dios.» (Baruc 5:1-7). ¡Sí! «Israel -ahora, la Iglesiacaminará bajo la Gloria de Dios». Dice «...para que camine seguro bajo la Gloria de Dios.» En nuestra Comunidad recibimos esta Palabra Profética, como «visión» para el año 2014. ¿Quieres unirte...? Siempre recuerda que «¡SOMOS UNO EN CRISTO!», ¡Gloria a Dios! El año que pasó, nos recordaba la Palabra de Dios en Isaías 60: 1 y siguientes que «si bien hay oscuridad sobre los pueblos, sobre el creyente -la Iglesia- amanece el Señor y su Gloria resplandece...». Lo llamamos: Año del «Divino Amanecer». Lo mismo con el 2014, en cuanto al «Caminar bajo la Gloria de Dios», es únicamente por la Gracia y la Misericordia del Altísimo. El contexto del presente de Israel en tiempos de Baruc (quien era portavoz de Jeremías, algo así como su secretario), era un tiempo de aflicción. Los «dos reinos» divididos y en cautiverio. También hoy existen los «dos reinos»: el de Cristo y el mundo. «Luz-tinieblas», «Vida-muerte». Notemos que «Israel» habla del Pueblo de Dios, aquel «Pueblo elegido» para dar testimonio del Señor a todos los pueblos, razas, culturas. Por tanto, «Israel» -bíblico- es actualmente, la Iglesia. No olvidemos que Israel, como Estado, data de mediados del siglo pasado. Recordemos que el Pueblo de Dios, tiene sólo un Rey, el «Rey de reyes» y «Señor de señores»: ¡JESUCRISTO! ¡Gloria a Su Nombre! Y que Dios «no tenía en sus planes» que Israel tuviera rey, pues Él, el Señor es su Rey. ¿Cuántas veces, so pretexto de que «esto va a ser bueno», acabamos por trasgredir la Voluntad de Dios? Piénsalo. A Dios «no le asombra» lo bueno que tú puedas estar haciendo para Él, pues de hecho, si está en Su Voluntad, eso lo hace Él a través de ti. A Dios siempre «le asombra» -usando la misma expresión- el «carácter» de tu obra... Por quién lo haces. Para quién lo haces... En definitiva, la humildad para estar «sintonizados» con el Plan Divino, más allá incluso de lo que pudiera parecer «un propio fracaso»; ya que «perdiendo, con Dios, se gana»... Él nunca deja de poner sus ojos en «un corazón contrito y humillado». Ahora, «los dos reinos» terminan en el cautiverio de Babilonia. Mas el «Reino de Judá» (de ese «desciende» Cristo en el linaje humano), si bien
estaba cautivo, aún así la Profecía de Baruc lo señala como bajo la «cobertura» Divina. Jeremías 24: 1 y siguientes habla de la visión del Profeta de «las dos cestas de higos»... «Higos buenos» e «higos malos». El Reino de Judá -«higos buenos»- con promesa de Consolación y Restauración de parte de Dios. Mirando la situación actual por estas latitudes, descubrimos que en las crisis, todos atraviesan adversidades, morales, económicas, sociales, políticas, etc. mas el creyente, si bien es «cautivo» de la situación: ¡NO ES ESCLAVO DE ELLA! El creyente -la Iglesia verdadera- camina en «la Promesa», por fe en la Palabra del Señor, declarando que «lo mejor está por venir»... Los «dos reinos» fueron «cautivos», mas uno sólo es hecho «esclavo», el otro ¡no! Tenemos un nuevo desafío por delante, como Iglesia de Cristo. ANUNCIAR SU EVANGELIO, CATEQUIZAR, ORAR POR LOS ENFERMOS Y OPRIMIDOS, etc. y «ATENDER LAS NECESIDADES DE TODO EL PUEBLO» pues así lo declara el Evangelio de nuestro Divino Maestro y Señor. El Buen Dios ha abierto «nuevas puertas» para la misión con los ancianos y con los que están privados de la libertad, para que la Palabra y la ayuda al necesitado, niño, joven, adulto, anciano... se extienda; ya que así, el Amor de Jesús, que recibimos sin haberlo merecido, lo reciban todos a quienes por su Gracia, podamos alcanzar. Si podemos llevar Su consuelo, Su esperanza y Su caridad, estaremos «caminando bajo Su Gloria». Lo hacemos en comunión, tú y yo, con toda la Iglesia. En esa «cesta de higos buenos», por fe en la Palabra de Poder, declarando con nuestros labios las Promesas del Todopoderoso, «quitémonos todo vestido de tristeza y revistámonos de las galas de la Salvación: la JUSTICIA, la PAZ, la HUMILDAD, el AMOR...» y será para nuestra Comunidad y para toda la Santa Iglesia, un año de «CAMINAR BAJO LA GLORIA DE DIOS». ¡Que así sea! ¡Feliz Año del Señor, 2014! JUAN CARLOS HOVHANESSIAN
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del nuevo año
DESAFÍOS
EL PODER DEL ESPÍRITU en la
radio
Cada medianoche de martes, al comenzar la «emisión del programa Radial», estamos haciendo una «guerra espiritual» contra las tinieblas. La voz de quienes predican resulta ser «esa voz que clama en el desierto» (Mt. 3,3)... en el «desierto del aire», lugar donde actúan normalmente los «Espíritus del Mal que están en las alturas, esparcidos en los aires» (Ef. 6,12). Las voces que penetran con el Evangelio mediante las ondas radiales los espacios, el mismo éter, llevando a cabo la misión como «embajadores» del Reino (al igual que Pablo) de «manera de hablar de Jesús valientemente como conviene» (Ef. 6,20). El mensaje llega a los lugares más recónditos, no solo de nuestro país sino que también trasciende fronteras a lo largo de la tierra. Mediante accesorios técnicos: micrófonos, cableados, antenas e internet, se «toman esos espacios» donde la misma Presencia del Espíritu Santo actúa acudiendo en ayuda de quienes «calzados los pies con el Celo por el Evangelio» propagan un mensaje de Salvación (Ef. 6,19). De esta manera se realiza ininterrumpidamente semana tras semana, el mandato del Señor de «ir por todo el mundo proclamando las Buenas Nuevas» (Mc. 16,15), recibiendo los oyentes de los 5 continentes, cada martes a última hora del día o en los primeros minutos del nuevo (dependiendo el continente) el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. ¡Qué hermosos son sobre los montes, los pies del mensajero que anuncia la paz, que trae buenas nuevas, que anuncia la Salvación ! (Isa. 52,7) y qué hermoso resultan ser los pies de quienes utilizando estos medios técnicos cumplen con esa misión, haciéndolo con todo denuedo cuando se trata de la Voluntad de Dios. Y también, qué Bendición para quienes sintonizados a la Radio, escuchan la «Voz de Dios como sus hijos, inclinando los oídos a sus razones, no apartándolas de sus ojos, guardándolas dentro de sus corazones, porque resultan ser vida para los que las encuentran y curación para toda carne» (Prov.4,20-22), porque el Señor resulta ser «refugio y escudo para el que espera en su Palabra» (Salmo. 119,114) Que Dios continúe contándote entre los que «escuchan su Voz de verdad» semana tras semana a través de la Radio. ¡Dios te Bendiga! Tomás Vigliatore
*Pregúntate: ¿quiero ir por más o quiero que todo siga igual...? Cuando encontramos algo que queremos cambiar o mejorar, estamos frente a un desafío. Es bueno poder visualizarlo como un propósito para alcanzar, algo concreto. Y luego pensar en estrategias, dedicar tiempo a reflexionar, consultar a Dios en Oración y pedir que nos dé inteligencia y discernimiento al respecto. Es fundamental estar en comunión con Dios y pedirle que ponga en nuestros corazones sus deseos, que nos enseñe cuál es su Voluntad perfecta y que ilumine cada una de nuestras decisiones. «Así que, mis queridos hermanos, como habéis obedecido siempre ( ) llevad a cabo vuestra salvación con temor y temblor, pues Dios es quien produce en vosotros tanto el querer como el hacer para que se cumpla su buena voluntad.» (Filipenses 2:12-13) *Encomienda todos tus proyectos a Dios. La palabra «proyecto» habla de algo pensado, organizado. Pero para que todo salga bien, eso sólo no alcanza. Al iniciar algo es bueno encomendárselo, pero también cada mañana en oración podemos entregarle el día al Señor, para que en cada cosa que hagamos le glorifiquemos con buenos frutos y seamos el suave olor de Cristo en esta tierra.«Encomienda tus obras a Yahvé y tus planes se realizarán.» (Proverbios 16:3) *Sé testigo. «En todo cuanto hagáis, evitad quejas y disputas, para que nadie pueda reprocharos nada. Vuestra vida debe ser pura y sencilla, porque sois hijos de Dios que, en medio de una generación maligna y depravada, resplandecéis como estrellas en el mundo, asidos con fuerza a la palabra viva » (Filipenses 2: 14-16). *Vive con mayor fervor la Santa Misa, Asambleas de Oración, etc. Disponiendo un tiempo de preparación, poniendo atención, participando en la Iglesia con mayor devoción y conciencia del Misterio que estamos celebrando -por ejemplo- en la Eucaristía. «No desertemos de nuestras asambleas, como suelen hacerlo algunos; al contrario, animémonos mutuamente, tanto más cuanto que vemos acercarse el Día.» (Hebreos 10:25). Agustina Spegazzini
Un año de frutos
abundantes
Concluimos el 2013, en el ámbito de la Pastoral Infantil de nuestra Comunidad, con una obra de teatro, representada por nuestros niños que interpretaron lo sucedido en Belén cuando nació Jesús. Fue muy gratificante ver cómo cada uno de ellos interpretó su papel en el relato bíblico de la Navidad. Les agradecemos profundamente su participación, su alegría y dedicación y damos gracias a Dios por ellos, por sus familias y por este hermoso año de juegos y de frutos abundantes, en este camino de avanzar juntos en el conocimiento de la Palabra de Dios. Pedimos al Señor que siempre les guíe y los siga «haciendo crecer en estatura, Gracia, sabiduría y Paz» y les haga en el futuro, hombres y mujeres que, impregnados del Amor de Dios, den un verdadero testimonio cristiano. Agradezco a las servidoras y colaboradoras que conforman el Equipo de la Pastoral Infantil, por su disposición, alegría y compromiso para llevar a cabo la tarea, que Dios las bendiga y, en Cristo, vamos por más!!! Quisiera por último dar Gloria al Señor por cada hermano/a misionero de nuestra Comunidad que llevó a cabo durante todo el año, la tarea de distribución de los alimentos e insumos que nuestra Comunidad proporciona regularmente en el Área de la Ayuda al Necesitado. Particularmente, reconocer la enorme tarea realizada a fin de año repartiendo cientos y cientos de pan dulces, juguetes nuevos y ropa confeccionada por la Pastoral de Damas (Dorkas), además de los alimentos no perecederos; los presentes llevados a los abuelos de los hogares de ancianos y al personal. Gracias Señor por las familias de nuestra Comunidad que hacen posible que se pueda realizar esta tarea en el Ministerio de la Caridad, con regularidad, compromiso y por sobre todo, con enorme amor por el hermano que necesita de nuestra ayuda. Recordando siempre Jesús tus Palabras: «...cuanto hicisteis a uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis.» (Mt 25:40). Y lo mejor, está por venir!!! Celia M. de Hovhanessian
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En una ocasión, estando Jesús en casa de Marta y de María, ocurrió que Marta estaba muy atareada con los quehaceres, y se queja con el Señor porque su hermana que permanecía escuchándolo no la ayudaba. Entonces, Él le dijo: «Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la mejor parte, que no le será quitada.» (Lucas 10:41-42). ¿Puede esta expresión de Jesús ser un «permiso» para evadir las responsabilidades? NO, en absoluto!!! Es un llamado a vivir en el equilibrio, sin estrés y en paz. Querido hermano: hay tres principios fundamentales para conseguirlo: 1) Identidad: saber quién eres, reconocerte como hijo de Dios, amado, asistido por Él. No eres lo que otros piensen o digan de ti , sino lo que Dios en Su Palabra dice. Eso te dará seguridad al descubrir que tienes un propósito en esta vida. 2) Consagración: a Quién quieres agradar. Intentar complacer a todo el mundo causa estrés y es sumamente desgastante. Debes tener en claro que tu vida está consagrada a Dios, a Él buscas agradar. Obrando así, siempre estarás haciendo lo correcto, cumplirás Su Voluntad, y aún cuando esto pueda no agradar a alguien, tendrás paz, porque estás haciendo lo correcto, que será siempre de bendición tanto para ti como para quienes te rodean. 3) Prioridades: cuando una persona no establece sus prioridades -necesariamente- su vida será gobernada por las situaciones externas, por otros o por determinadas cuestiones interiores, que serán «presiones» que «empujarán» sin rumbo claro y desordenadamente. Para determinar prioridades es preciso orar y conocer la Palabra de Dios. El Espíritu Santo te asistirá en esta tarea, pero de ti depende acudir en Su ayuda. No una vez cada tanto, sino cada mañana es necesario discernir las prioridades y enfocarse en eso. Ten presente que hay una diferencia entre estar simplemente ocupado y ser productivo. Dios te llamó a dar mucho fruto, ya tienes los dones para hacerlo. La paz es parte de ese patrimonio que necesitas. Tu tiempo es muy valioso como para perderlo en vano o con amargura. Sé feliz, no estás solo, Jesús te sostiene: «Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y Yo en él, ése da mucho fruto » (Juan 15:5). Que la Paz de Cristo guarde tu mente y tu corazón ahora y siempre. Feliz Año 2014 y que Dios te bendiga!!! BREVE EXTRACCIÓN DE LA PRÉDICA DE DIEGO HOVHANESSIAN
En esos momentos...
Hay momentos en los que nos encontramos sin saber qué hacer... Queremos hacer muchas cosas a la vez y poder así solucionar aquello que nos preocupa. En realidad, son momentos «perdidos» que nada bueno nos dejan y de los cuales no sacamos ningún provecho. En las Páginas de la Biblia, encontrarás qué hacer en «esos momentos». En el Evangelio de San Lucas leemos: «Les propuso una parábola para inculcarles que era preciso ORAR SIEMPRE SIN DESFALLECER» (18:1). Las dificultades, las circunstancias que te toquen atravesar, las penas y también los desafíos cotidianos, preséntalos delante del Señor en ORACIÓN, tal como Jesús nos enseña: SIEMPRE y SIN DESFALLECER. Verás los maravillosos resultados de esta valiosa decisión.
Lidia I. de Papazian
Vivir como Jesús
« Id, presentaos en el Templo y comunicad al pueblo todo lo referente a esta Vida.» (Hechos 5:20). Si alguien me preguntara qué significa ser cristiano, lo resumiría en tres palabras: es un «modo de vivir». Siempre nos enseñan en la Comunidad que la fe debe necesariamente «impregnar» nuestra vida cotidiana. De nada serviría decir que somos cristianos si eso solo permanece en la idea, pero no en los hechos. La fe en Jesús es una elección de vivir según Su Palabra, y lo más hermoso de todo esto, es que la Palabra puede aplicarse a todas las realidades personales. El modo en que vivimos se ve en el tiempo que pasamos rodeados de familia, amigos, compañeros y extraños, por eso es absolutamente imprescindible aplicar los principios bíblicos allí. Dice el apóstol Juan que «Quien dice que permanece en Él -Jesús- debe vivir como vivió Él.» (1 Juan 2:6). El cristianismo es Vida, es la Vida de Jesús que se dio por cada uno de nosotros. Y es un modo de vivir que nos plenifica, nos da esperanza, nos permite superar las adversidades y poder tener paz. No es evadir la realidad o negar los problemas, nada más alejado de eso, sino creer y experimentar que en Cristo siempre viene lo nuevo y lo mejor. Lic. Anahi Raggio
Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa, Dios no se muda. La paciencia todo alcanza. Quien a Dios tiene nada le falta. SÓLO DIOS BASTA STA. TERESA DE JESÚS www.elpoderdelespiritu.org
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