LA PLANIFICACION DE LAS CIENCIAS SOCIALES PARA EL DESARROLLO SOCIECONOMICO

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La Planificación de las Ciencias Sociales para el Desarrollo Sociocconómico.

Carmen Reyes Vergara División de Política Científica Departamento de Estudios CONICYT

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4'.

Este trabajo ha sido preparado como complemento a los "Criterios para la Formulación de una Política Cien tífica" de Marcelo Robert, a fin de ser presentado como base de discu siones en el seminario a celebrarse con personeros de la National Acade my of Science de U.S.A. entre el 11 y el 15 de Enero de 1971.

Santiago Diciembre de 1970.


PLA'TIFICACION DE LAS CIENCIAS SOCIALES PíuA LA SUERACION DE LOS PROBLEMAS QUE PrESENTA EL DESIRROLLO SOCIO-ECON0MICO

1. El Proceso de desarrollo y la importancia de las ciencias sociales Cada vez ccn mayor fuerza existe la sensación, tanto entre los científicos como entre los políticos, de que la ciencia social debiera ser aplicada a la mayor parte de los problemas políticos de nuestro tiempo.

Esta sensación se afirma en la naturaleza estructural dinárnica de la sociedad en que toda decisión de acción afecta al hombre y a la comunidad y es determinada por ellos.

En efecto, viene ganando terreno una nueva concepción del desarrollo que desplaza a los enfoques parciales que se detienen sólo en el problema de la infraestructura y la productividad. En diversos sectores ha existido la idea de que los aspectos sociales son, a lo sumo, problemas yuxtapuestos a los del desarrollo económico. Su atención estaría exigida por motivos generales extraños a la economía, constituyendo una mera función de límites al puro desarrollo económico, plantetndole exigencias ajenas a su propia competencia. El desarrollo se definiría sólo en términos del ritmo de crecimiento del ingreso per cpito; su esencia estaría constituída por el proceso productivo y los incrementos de la productividad.

Parecería olvidarse que el "desarrollo económico no depende sólo de variables económicas, sino también de variables sociales y humanas en general, y que, a su vez, las transf»rmaciones sociales y culturales estén condicionadas por variables económicas.

En otros sectores se ha dado una perspectiva parecida, aunque en ella subyace la idea de la interdependencia económico-social.


Esta se basa en la creencia de que el proceso de expansión de la economía tiene una capacidad para generar bienestar o progreso social; éste por si solo bastaría para crear una cierta igualdad de oportunidades y una distribución rE.lativamente equitativa de los frutos del progreso tecnológico y del aumen to de la productividad. Sin embargo se ha ebservado que junto al aumento de la capacidad productiva del sistema, se ha pro ducido la marginación de una proporción significativa y creciente de la población.

La conducción del desarrollo bajo estas dos concepciones pare ce perder de vista un problema clave que es la finalidad del mismo: lograr la realización integral de todos los individuos y grupos elevando sus condiciones de bienestar material y espiritual. Olvidando también que "desarrollo económico" y "desarrollo social" forman partes interdependientes de un único proceso: el desarrollo, en el cual los problemas se van encadenando uno a otro formando un verdadero sistema de causación circular, en que la marginalidad social es a la vet producto y causa del subdesarrollo económico. Las deficiencias que presentan estos enfoques hn conducido a

una nueva perspectiva; se trata de un enfoque estructuralista en que el desarrollo se concibe como una incorporación progresiva de los diferentes sectores de la población al sistema de producción y distribución de bienes materiales y espirituales y hace énfasis en la transformación de aquéllas estructuras económicas, sociales y políticas que obstaculizan tales objetivos.

M&s exactamente ) se define el desarrollo como

"un proceso con-

tinuo, perman±nte, progresivo e institucionalizado de cambio global e integrado, de las estructuras y procesos hsicos de una sociedad y de las funciones y relaciones de poder de los distintos grupos que la conforman, orientado hacia el mejoramiento del nivel de vida de la pob1ci6n y hacia la creación de un nuevo orden social". (1)

En este contexto, bajo todo el proceso de cambios estructurales -de transformaciones interrelacionadas en la economía, le estratificación social, la cultura, les instituciones políticas y la estructura geográfica- subyace un elemento hósico que es la ticipación del hombre y la comunidad, jugando el triple rol de sujtobjetosy beneficiarios del mismo.


Como sujeto, ellos constituyen el motor, lo energía creadora de las tranSformaciones. "Son los que transforman los recursos naturales y económicos y el trabajo del hombre en bienes y servicios. Son los que crean, modifican y perfeccionan las instituciones. Los que conciben y ponen en marcha los programas, las políticas y estrategias del desarrollo , modifican las tecnologías e incrementan la productividad y consumen los bienes y servicios pro ducidos. 3on ellos los oue se desplazan a través de la pirámide social en tránsito hacia nuevas y mejores posiciones, ellos modifican e incrementan los niveles de vida y mejoran su condición social. Se desplazan de las oreas rurales a las arcas urbanas en busca de mayores oportunidades y se capacitan para incorporarse al pro ceso productivo y a la vida nacional. Son también ellos quienes modifican las estructuras políticas, crean nuevos líderes, formulan nuevas ideologías, organizan nuevos partidos y grupos de presión y orientan las instituciones públicas. Finalmente también son el hom bre y la comunidad quienes modifican la cultura y crean en torno a ellos un universo social, cultural e institucional acorde con sus concepciones, sus valores, sus actitudes, sus motivaciones y sus destrezas.

"Como objeto del desarrollo, el hombre y la comunidad son influen-

ciados y bransformados en su mente, en su sensibilidad y en sus capacidades a lo largo del amplio y complejo proceso de caibios involucrados en el desarrollo. Cada innovación tecnológico, cada nuevo producto, cada proceso orgonizativo, cada nueva institución, cada nueva preocupación hace impacto y contribuye a modelar en él nuevas imigenes, motivaciones y actitudes. fn este sentido su activo prticipación en el proceso es causa y efecto del desarrollo y en esta significativa circunstancia encuentra el proceso el medio y la energía dinamizadora que requiere el desarrollo.

"Sirnultáneaaente, el hmbre y la comunidad son el fin, la razón de ser de la aceleración del desarrollo. Todos los recursos involucrados,todos los esfuerzos desencadenados en tal proceso están dirigi-

dos a beneficiar a ellos, a facilitar la conctuista de nuevas y mejores condiciones de existencia. ¿n este sentido, el hombre y la comunidad constituyen los beneficiarios y destinatarios finales del proceso de desarrollo. Son ellos quienes se benefician del incremento del increso, de la ampliación de los servicios de educación, salud y seguridad social y del mejoramiento de las condiciones habitacionales. Son ellos los usufructuarios de las nuevas conquistas en las relaciones sociales, las instituciones y el comportamiento político."


"En túrminos generales, podría decirse 7,ue las transforianciones en la economía, en los niveles de vida y en todos los dems aspectos de la vida nacional no constituyen un objetivo en sí mismas, sino que son medios o instrumentos destinados a permitir 1 desarrollo del hombre y la realización de su destino humano. Lor otra parte, para que se produzcan tales transformaciones en la economía, la política, la estructura social y la cultura es necesario quc previa o simultáneaente se produzan transformaciones en la 'ente y la sensibilidad del hombre y la comunidad. Esta consideración lleva a ampliar el fenómeno del desarrollo y a plantearlo como un proce so de transformaciones estructurales realizadas por la propia comunidad y en torno a los cambios que ella experinta en sus imánenes, sus actitudes y sus motivaciones" (2)

En síntesis, existen relaciones muy significativas entre el desarrollo-proceso de cambios- y el fenómeno social -de las interrelaciones hun :as-a través de la participación social 1.

el desarrollo trae consigo una creciente earticipación en lo económico, lo socioculturay lo político.

2.

a su vez, la ampliación de la participación facilita y acolora el proceso de desarrollo, porcue asegura la compatibilidad entre los valores populares cambiantes y l evolución del orden social

3.

el desarrollo y la participación forman aspectos correlacionados de un fenómeno g'obal, que es la integración -mejoramiento del nivel de vida de la población y cambio de las estructuras sociales en un nuevo orden social coordinado (3).

"El desarrolo nacional es la consecuencia del desarrollo de procesos intiranmente conectados, a saber, el político, el económico, el social y el cu1tural El desarrollo nacionol, entonces, est dado por la expansión de cada una de estas esferas y por el grado de "participación" de los habitantes de ura terriotrio dado en estos procesos" (4).

Es entonces en esta significativa circunstancia, la participación, donde cobran importancia las ciencias sociales, el conocimiento del comportamiento humano en todas sus dimensiones. Conclusión que so ve reforzada en en ámbito nacional, porque a dfferencia de los fenómenos propios de las ciencias físicas y biológicas, el fenómeno psicosociocultural -al cual se hará referencia más adelante en mayor detalle- se caracteriza por su irrepetibilidad er el tiempo y el espacio- Aún cuando algunas características pudieran ser generalizables al comportamiento de todos los seres humanos o de muchos


grupos sociales, existen diferencias de actitudes o de matices en esas actitudes de grupo en grupo, de país en país, condicionadas por el contexto histórico, por la estructura geográfica, por la cultura, la economía, la política. Esto es, entonces, lo que ha motivado a los políticos -a quienes tienen que tomar decisiones, a los ejecutivos, abs planificadores del desarrollo socioeconómico- a pedir la cooperación de hs científicos del comportamiento humano: psic6logos, economistas, socióbogos, antropólog.s, dentistas políticos, administradores.


2. La Reloc.6n del Científico Social con el olítico

En Chile y en América Latina en general comenzó a darse importancia a las ciencias sociales sólo hace unos treinta años atrás, cuando los historiadores, los ansayistas o los ideólogos no fueron capaces de explicar o predecir el comportamiento de las nuevas sociedades urbano-industriales (5).

Se renuerían nuevas ideas, definir categorías que permitiesen conceptualizar los coabios, contar con informaciones hasta entonces inexistentes; se necesitaba craar capacidades y aptitudes en el campo de las ciencias sociales y de la imaginación política.

La gama de problemas planteados por la necesidad del desarrollo suscitaban una reflexión más intensa que exigía mejores teorías, metodologías y técnicas, para la racionalización a posteriori de lo ya ocurrido, para lo comprensión de lo que ocurría, para la previsón del futuro, y para el diseño de estrategias y formas posibles de acción.

En los países

latinoamericanos estos requerimientos fueron en-

frentados con gran entusiasmo, sin embargo es posible observar que, en el curso de los anos, la institucionalización de la investigación económico-social ha debido chocar con duros problemas que se reflejan básicamente en una situación de frustración de las expectativos mutuas entre los investigadores y los políticos, situación que redunda en una falta de prestigio y de poder en los científicos.

in efecto, st s han carecido de rnconocimiento y valoración, por parte de las clases y grpos fundamentales o por los gobiernos. Por el contrario, su imágea y su actividad aparecen en muchos casos revitidas por una aureolo inquietante y hasta subversiva.

Quienes deben tomar decisiones acusan a los investigadores de tecnocratismo autosuficicnte,de (1esdn or los intereses inmediatos de la población; de subestimación por los problemas de estrategia y táctica políticas; de falta de atractivo emocional e ideológico. A éstos les parece, an síntesis, que la contrihución de la ciencia social a la solución de problemas no ha sido significativa. La investigación parece inútil o irrelevante a los problemas planteados, resultando, en general, sólo como

-


una forma compliceda de decir lo obvio y ya conocido, sin hacer un aporte a la solución de ellos.

Los investigdores, por su parte, suelen imDutar a los políticos menosprecio hacia las técnicas científicas, decisiones erriticzis, fijci6n de metas sin consid€ración hacia los problemas y recursos reales, mal uso o desaprovechamiento de sus investigaciones.

i:•ara algunos (6),los investigdores tienen una restringida gama de posibilidades para enfrentar y resolver los problemas planteados, debido a una falta casi total de poder y recursos ciue los incapacita para influir significativamente en las tendencias fundamentales de la sociedad. Esta restricción estaría determinada en gran medide por la existencia de grupos de interús poderosos que disponen de los resortes fundamentales y de las variables estratégicas, y que no serían fn•orables a los c:wtbios, al menos en el sentido propuesto por los técnicos.

Para otros (7),la fuente de frustraciones mutuas entre el científico social y el "hombre de acción radica en fallas de comunicación entre ambos especialistas. n síntesis, las frustraciones se darían a raíz de las equivocadas expectativas nue tienen uno de otro.

Los políticos piensan, por uno parte, en la falacia de que cualquier robema juede ser solucionado por la simple recolección de datos; piensan que con mayor información podrían hacer mejores decisiones. este supuesto los conduce a sentirse desencantados con los resultados de la investigación en dos sentidos: - si el científico realiza una minuciosa recolección de hechos, el político recibe lo que había pedido, pero se da cuenta de que esto no lo ayuda a resolver su problema. - por el contrario, si el investigador, en lugar de recolectar datos, reestructure los cue tiene de tal forma nue éstos pued&i ser interpretados, el ejecutivo pensará oue la labor desarrollada no corrasonde a las metas perseguidas, aún cuando posteriormente se de cuenta de que su utilidad es mayor.

Por otra parte, los ejecutivos creen oua la utilidad de la investigación en ciencias sociales puede ser probada nor su habilidad para predir el complejo comportamiento social con algún detalle. sto se explica 1 porque la predicción es un comoncnte necesario de la política, ya que las decisiones de acción han de basarse en juicios


acerca de que las consecuencias de la acción elegida sern mas favorables que las que presentan las demós alternativas. Sin embargo, parece ser que las ciencias sociales no han llegado a un nivel en que sus modelos formales puedan predecir un evento social compleja, sus modelos son parciales, siempre excluyen la consideración de algún factor, el peso de los factores no puede ser medido, ni computada su influencia combinada. Como consecuencia, las decisiones políticas terminan basmndose mis en la intuición y la experiencia pue en las técnicas de los científicos sociales.

El investigador, entretanto, se equivoco res 1 ecto del político pensando, por una parte, oue si la función de éste es actuer, lo ue necesita son conclusiones en lugar de análisis y,creyendo al mismo tieapo, -debido en parte a que el ejecutivo no usa la terminología de las ciencias sociales- que las decisiones son guiados por un proceso intuitivo mís allí del argumento racional- Esto lo lleva a elaborar conclusiones obvias o recomendaciones poco sostenibles para el político.

Se equivoca también estimando ciue éste sabe claramente lo que quiere y puede obtener del científico, aceptando por tanto sus requerirnientos. Esta posición, como se planteaba más arriba, puede dar por resulbado una inutilidad del trabajo realizado.

Por último, frente a un problema determinado, el investigador, por el contrario, puede tornarse crítico del planteamiento de éste por el político y, a fin de lograr resultados realmente interesantes o que sean relevantes a los objetivos buscados, porcializa

replan-

tea la investigación, logrando, sin embargo, coma se decía anteriormente, la frustración del político y de sí mismo, puesto cue su trabajo no es aprovechadn.

parecería ser entonces, que -reconociendo tanto los ejecutivos como los investigadores que la ciencia social puede ser útil para la solución de loroblemas del desarrollo socioeconórnico- la cooperación entre

2~ no ha sido fícil debido principalmente a una falta

de comunicación enLre ambos. Se supone que el político conoce lo çue necesita saber y que es capaz de hacer claros requerimientos al investigador en ese sentido. Se Supone, al mismo tiempo, que el investigador es capaz de responder esos renuerimientos. Pero las relaciones entre el conocimiento y la acción son mis complejas y recíprocas y no pueden ser abordadas si cada esecialista no conoce el proceso mental del otro; debe haber entre ambos una definición más comunicable del problem a resolver.


n relación a esto, cabe acjreçar qu las pr.acicic

políticas des-

cansnjuicios de valor y que las decisiones que se han de tomar no son independientes de los conceptos que se usen para interpretar la realidad. Un mismo fenómeno social enfocado con distinto contennido valorativo puede dar por resultado distintas interpretaciones. n este sentido 1 el científico social y el político tienen que ponerse de acuerdo respecto a sus contenidos valorativos para enfrentar la realidad. El análisis político considera ls motas, n1 medio ambiente y los instrumentos; el análisis del científico social, en cambio, se limita al segundo aspecto, sin embargo, cada uno de estos elementos está relacionado con los otros dos. Luego, no se puede separar el análisis de lo positivo y de lo norraetivo sin privar a la ciencia social de su .itilidad operacional (8). Es importante, por tanto 1 que el científico no se remita a aceptar los requctens del político, sino q tba exista una

relación dia

léctica entre ambos, que permita al investigador toear realnta el problema central y que permita thi4n la rformulci6n por arabos del problema politíco. Surcrados los escollos de la comunicac6n,

se observa, sin

embargo,

que el problema de la utilidad de las investiciones socialea para el político subsi:te Las dificultades p:recer ser más profundas, enraizándoee en las posibilidades de las ciencias sociales mismas para implementar

los complejos

problemas del desarrollo. Zstas difi-

cultedes estarín dadas tanto por la naturaleza de la materia sujeta a las ciencias sociales como por el estado actual de las mi mas.


3. El Fenómeno Psicosociocultural, materia de las Ciencias Sociales

Las características básicas del fen&aeno que es objeto de las ciencias sociales y que lo diferencian de los objetos del resto de las ciencias son: su enorme complejidad y su constante cambio.

En efecto. el conociminto de la realidad en todos sus aspectos -de la materia física, biológica

u

orgánica y social- revela

un primer hecho: existe una pluralidad de elementos que no son independientes entre sí, sino que forman una unidad a travs de la in:uracción. Los elementos se interrelacionan y se organizan a travós de la transmisión de". Todos los seres interactúan, existe entre ellos mutua acci6n ea interaeci6n; por eso forman un universo, una unidad en la diversidad: todos son influÍdos y se influyen mutua1mnt.

Se observa, sin embargo, que a medida que se pasa del orden físico al org.nico y al psicosociocultural aumenta la complejidad en la interacción, es decir, en ést3 tomaR porte un mayor número de elementas y óstos estn mós estrechamente orqniados entre sí.

En la materia viva la interacción entre las N'rtes y con el medio es más compleja que en la materia inerte, y entre los seres humanos mayor que en el resto de los seres vivos. Si se sigue la historia natural del universo, se puede comprobar en el sucederse del tiempo 1 -.. aparición de seres e interacciones cada vez más complejos hasta llegar al hombre. ;Te pasa progresivamente de la transmis6n de enercjía física a la interacción psíquica, de transmisión de información o comunicación. En la interacción psíquica el ser vivo no sólo ineraetúa con el medio, sino que se perceta de ól. El ser vivo en contacto con el medio , de acuerdo a sus necesidades realzo ciertos sectores del ambiente, los hace presente y los estructura en un complejo de significación, los percibe, Al cciptor algo signi-. ficativo, valorado, se siente afectado y por medio de su conducta activa busca en su mundo, la satisfacción de sus tendencias, ln disolución de sus tensiones. Cuando la interacción psíquica -percepción del otro y reacción hacia el otrr_ es reciproce, existe un proceso de comunicación.


En las interacciones humanas, la comunicación es el proceso por el cual los seres humanos condicionan recíprocamente su conducta en lo relación interpersonal, consciente o inconscienteiente.

Lo que diferencia la comunicación entre los seres humanos del reato de los seres vivos es que en estos últimos el sistema de comunicación está fijado por el instinto, la serial o signo se aqota en sí misma, es unívoca, se adhiere estrechamente al significado. En los primeros en cambio, es mdietizada a través de símbolos, que son interpretados y a los cualas se les da un significado. En este sentido existe una amplio gama de probabilidades de respuesta tanto respecto al contenido como a la intensidad de la misma.

El fenómeno psicosociocultures el fenómeno de la comunicación significativa y por tanto no 'juede ser entendido si no es dinimicamente. No se puede separar ni tratar como cstticos los aspectos del fenómeno. No so puede hablar de personalidad, sociedad y cultura, sino como ficción, )ues se trata de tres arocesos, personalización, socialización y culturización,y rns exnctamenteson tres aspectos o tres procesos que se implican y determinan mutuamente en un solo proceso de relación estructurante. 2n efecto, el ser humano selecciona del medio aquéllo.- aspectos que lo son significativos debido a sus tendencias y orientaciones valorotivs, culturalesJol actuar estnblece relaciones saciales y modifica las ya existentes, creando tarnbión y modificando los objetos materiales y los valores; al *vertir la acción hacia ói, •ste s transformado a su vez en su personalidad. i se produce un cambio en cualquier: de los elementos del sistema, éste afecta a todos los derns elementos y sus intcrz.icciones

¿n síntesis, en tanto los sisteaas físicos preservan su estructura y tienden a mantenerse en equilibrio, y mientras el sistema orqónico, con un nivel de organización mínimo fr tiende a mantener su estructura específica dentro de límites bastante definidos a trnvs de procesos homoestiticos, el sistea psicosociocultural tiene proqiedod.es morfogénicas: crea, elaboro o modifica constantemente su estructura corno prerreuisito para conservorse viable en cuanto sistema activo.

Se caracteriza or la natur:leza aarticularmene fluido de su estructura . sta esta en oermannte estructuración, desustructurnción y reestructuración


Las sociedades y los grupos modifican constantemente sus estructu.ras adaptándolas a las condiciones internas o externos. Estas aparecen como una construcción abstracta; no diferenciable del proceso interactivo en desarrollo, son más bien una representación temporal del proceso en un momento dado. Cabe agregar que a medida que los sisteias se hacen más abiertos al medio, aumenta su nivel de oroanización, su complejidad, y es más rápido el proceso morfogénico. Si se concibe a la sociedad, objeto de las ciencias sociales, como T'interacción compleja, multifacética y fluída de muy variables grados e intensidades de asociación y disociación entre los seres humanos (10), tenemos las dos características propias del fenómeno psicosociocultural: complejidad y cambio.


4. Sjteacjón Actual de las Cieacias Sociales Frente a esta realidad cambiante, el científico social será útil al político en la medida en que pueda introducir explícitamente el proceso de transformaciones en su análisis y sus observaciones impiricas, puesto que el ejecutivo tiene que tomar decisiones de estrategia para inducir el cambio. "Se podría definir la formulación de estrategias como un estudio que en aproximaciones sucesivas, y partiendo de un diagnóstico interpretativo que vincule las diversas estructuras imperantes en un sistema económico y social, establece una imagen-objetivo del nivel de desarrollo al que se quiere llegar, va analizando las distintas O ciones de desarrollo evaluando sus ventajas y desventajas, y siguiendo una trayectoria que sea compatible con una. cierta constelación de fuerzas sociales". (11) Al político le interesa fundamentalmente el cambio, poder conbrolar y prever las interacciones entre los distintos aspectos que inciden en el desarrollo social, puesto que la sociedad se está transformando constantemente. En este sentido, las características del estado actual de las ciencias sociales dificultan su utilidad para el ejecutivo, ya que las metodologías desarrolladas son II rnitadas, sirviendo casi exclusivamente al análisis dci estado de las interacciones 0 is posible realizar anli sis dinámico sólo con un gran costo en cuanto al rigor científico y u le precisión de los resultados. Por otra parte, el político debe decidir sobre situacio nes Lotales compes, su decisión será afectada por una multiplicidad de factores psicosocioculturales y estos serán a su vez afectados por ella. Al respecto, las ciencia.s sociales que, se han caracterizado por una tendencia al análisis y la compartimenta ción no estin capacitadas para dar una visión totalizadora de la realidad.


Por el contrario, las ciencias sociales se han caract rizado por su esecia1ización sobre distintos aspectos del comportamiento humano, en tanto la riqueza del an lisis que supone la formulación de una estrategia de desarrollo nacional es enorme y excede muy lejos las capacidades y posibilidades de las ciencias sociales compartimentadas0 "La importancia del análisis totalizante resulta fundamental para una teoría del desarrollo nacional y para la formulación de estrategias de desarrollo. Sin embargo, la mayor parte de la enseñanza y de la investigación en ciencias sociales en imérica Latina sigue insistiendo en un trabamiento de las ciencias sociales como compartimientos estancos." ( ..... ) "La insistencia en la falsa especialización de las cien cias sociales ha llevado progresivamente a un callejón sin salida a estas disciplinas en su capacidad para interpretar los fenómenos del subdesarrollo. Junto a la esterilidad que se viene observando en los hombres de ciencia que se dedican al análisis social parcelado, se une la alienación de que hacen gala muchos cientistas sociales Muchos especialistas han perfeccionado sus estudios en Universidades de países desarrollados, 'donde han rec bido un entrenamiento intensivo en metodologías de medición de fenómenos sociales aislados. Tal es el caso, por ejemplo, de economistas entrenados en el análisis microeconómico, pero que carecen de una formación histó rica, sociológica y política que les permita ubicar el uso de herramientas de análisis en un contexto ms amplio. Cosa parecida ocurre con los sociólogos entrena dos en técnicas de encuestas sobre microproblemas y que no dominan metodologías de análisis macrosocial. Esto tipo de especialización conduce a la incapacidad de interpretación general y a la falta de perspectivas para hacer análisis que incluyan parámetros y variables económicas, sociales, políticas y culturales, reduciéndose


su labor científica, por lo general, a la mora cuantificación de la irrelevante (12) La situaci6n se torna ms grave aún, si se considera que la especialización no sólo se ha producido entre disciplinas sino dentro de cada una de ellas. La inves tigación en gran escala se ha transformado de una "investigación de taller e unainvestigación de f ábrica", en la cual la mayor parte de los que trabajan en ella no conocen ni sicuiera cuál es el gran proble ma que va a ser estudiado, ni las hipótesis, debido simplemrnte a que no les dan a conocer el secreto o bien en consideración a que el conocimiento de esas h pótesis estropearía la investigación. Esto ha llevado a crear mini especialistas dentro de cada disciplina: el experto en códigos de investigación, el experto en formular preguntas para las encuestas, el experto en hacer entrevistas. (13) ¿sta situación ha hecho que mucios en nuestro país, y afor€unadamente ya casi todos', sean muy críticos fren te a las ciencias sociales, 'orque aprecian que su enseñanza esti en buena medida desajustada de las realida des históricas del medio, los mátodos no son siempre los más apropiados y la temática que se escoge no es la más oportuna, o la más decisiva (14) No existo todavía una ciencia general del comportamiento humano, en tanto un gran número de factores que co rresponden a distintas disciplines decn ser estudiados simultáneamente en un enfrentamiento interdisciplinario. Hay que agregar que la investigación de los problemas del desarrollo exige a la vez la consideración de lo micra y lo macrosocial. La investigación de las grandes comunidades requiere de la investigación de las más pequeñas. Las relaciones de comunicación con sus orientaciones valo rativas en los pequeños grupos producen los sistemas naçionales e internacionales0


1

En

sentido, la cooperación multidisciplinaria presenta algunos problemas, puesto que las diferentes ciefl cias sociales han desarrollado distintas capacidades pa ra tratar diferentes niveles de agregadas sociales. La este

psicología y la antropología, por ejemplo, se han especializado en los individuos y en pequeños grupos respec tivamente, la ciencia política, en instituciones nacionales e intcrnacionals; la economía, en agregados nacionales, aunque más que las otras ciencias, ha relaci2 nado a los individuos en pequeñas unidades con el agregado nacional e internacional, (15) Esta situación torna dificultuosa la posibilidad de integrar a las ciencias sociales con métodos y temática comunes, requisito para el enfoque interdisciplinario. (16) Se observa, es cierto, una tendencia de )arte de cada disciplina a tratar los otros niveles de agregados. En efecto, le ciencia política se ha preocupado cada vez más por el comportamiento político del individuo y de los pequeños grupos; los psicólogos y antropólogos, con ayuda de los soci6logos se preguntan cada vez con mayor frecuencia, cuán representativos son los :en6menos rev lados por sus microestudios en el nivel más amplio con el que trata el cienista político. Sin embargo, la co municación enre los estudioa micro y macrosociales debe progresar mucho antes de que pueda soportar el peso de los requorimienLos del análisis político. (17) En síntesis, actualmente la relaci6n de la ciencia so cial con la utilidad que ella. presta a los complejos pro blemas del desarrollo se —la de la siguiente manera - por una parte, el político enfronta situaciones rea les complejas sobra las que emite juicios. Ningún cien tífico puede presentar al respecto proposiciones defini das que emerjan do un claro modelo teórico y de evidencia empírica. Luego, en ci astado actual de las cien cias sociales, las decisiones del ejecutivo se basan en su intuiciór, inspiración y sentido común.


1

- por otra, las conclusiones cientĂ­ficas, comunicables, capaces de ser demostradas por experimentos repetidos y por evidencia incontrovertible se refieren a fenĂłmenos simples y operacionalmente sin importancia, controlados para excluĂ­r todas menos algunas variables susceptibles de tratamiento por una disciplina simple. (18)


5.

Ç0J

:

Alqunas líneas de Planificaci 6n Ciencias Sociales

Del diagnóstico de la situación actual de las ciencias sociales respecto a las necesidades que plantea el desarrollo socjoeconómico y de las relaciones de los cien tíficos sociales con los políticos es posible extraer algunas amplias recomendaciones orientadoras de su pla nificación. S.I. En primer lugar, es de gran importancia promover una mayor comunicación entre los investigadores y los ejecutivos, de tal forma que, conociendo cada cual las posibilidades y las necesidades del otro en el desempeño de los respectivos roles, la cooperación entre ambos sea rn5s estrecha y de' mejores frutos. Dadas las limitaciones de la ciencia. social, parece ser que la utilidad que puede prestar el investigador al político es la de explicitar los conceptos y supues tos incomprendidos e implícitos en los juicios prácticos que éste emite. En este sentido, la ciencia social puede contribuir efectivamente a la predicción, enriqueciendo, clarificando y generalizando la intuición y la experiencia que no puede reemplazar. (19) Las ciencias sociales se centran en aspectos limitados del comortamiento humano. Los juicios políticos, en cambio, implican considerar los recursos económicos, las motivaciones, lo.s posibilidades de organización y administración, los intereses políticos, etc., lo cual implica una sistematización a travós del análisis eco nómico, psicológico, político y sociológico. Su com-binación en un todo va ms alli del análisis científi co, pero óste puede ayudar al proceso intuitivo. Las ciencias sociales pueden profundizar y extender la c pacidad de los políticos para juzgar, pero no pueden darles las respuestas.


Es importante que el investigador y el político, a tr vés de la comunicación, reconozcan esta realidad. Si este último conoce los usos y limitaciones de la inves tigacin social podrá airovechar1a en sus propias dcci siones; estará equivocado y se vera frustrado si espe ra rigor científico para lograr conclusiones directa y mecánicamente aplicables a los problemas que enfrerita. l investigador, a su vez, se puede beneficiar en el proceso de comunicación, conociendo los problemas normativos del planificador, puesto que esto le dará una pauta -que no le ci método científico- sobre las materias que son importantes para ser investigadas0 Aderná.s, ya que la ciencia social trata de ex plicar el comportamiento humano en su complejidad, el esfuerzo por asesorar al político dor para enfatizar su ignorancia tensión en que la ciencia social tiva, motivá,ndolo a la búsqueda

servirá, al investig al respecto y la ex es imprecisa e intuide nuvas y mejores teo

rías y métodos. Sólo a través de la comunicación el científico social y al político pueden ser realmente útiles uno al otro. 5.2. n segundo luqar, y a fin de superar las limita ciones de las ciencias sociales, es preciso orientarlas hacia el logro de la 'masa críica', es decir a adquirir cierto nivel mínimo que permita producir conocimie tos útiles para abordar con éxito los problemas del desarrollo sociocconómico. Al respecto, importa bá.sicamentc promover una perspecti va totalizadora de los fenómenos sociales e introducir métodos ciuc permitan interpretar y prever ci cambio. El cambio y la multivariabilidad son aspectos que estai intimamente relacionados en los fenómenos sociales; lograr incorporarlos en las ciencias sociales implica fu damentalmente rasar de los mótedos causales a los métodos prohabilísticos y del análisis a la síntesis.


1

En efecto, el anélisis de la realidad social se ha caras terizado por la tendencia a aislar las variables indepen dientes e intervinientes que afectan a una variable dcpen diente, es decir, se han caracterizado por la tendencia a la búsqueda de la causa del fenómeno; lo que implica, por una parte, desconocer que el fenómeno es afectado por múl tiples variables, por lo cual resulta un análisis parcial y, por otra, significa nlviJr el problema de predicción-del futuro. ¿n este sentido, parece conveniente, por el contrario, que se desarrollen los métodos que permitan aprehender la realidad, en forma global y sintética y que permitan predecir con cierta probabilidad. Ya han comenzado a desarrollarse modelos probabilísticos de an1isis de la sociedad. Su secuencia estaría dada b.sicamonte por cuatro etapas: primero, se hace el dia nóstico de los síntomas del problema; en segundo luqar, se aislan las variables; el tercer paso estaría dado por el desarrollo de un modelo ético-científico, y el cuarto, por la combinación alternativa de variables en términos de costo-beneficio. Este tipo de onfoquc impli ca realizar anilisis, pero también síntesis y plantear alternativas robabilísticas de cambio para el futuro. La perspectiva totalizadora y la introducción del proce so en la investigación social requiere, por lo tanto, fundamentalmente a) fomentar el desarrollo de la ciencia social multidis ciplinaria, la formulación y refinamiento de la gran te orí a l disDersa en todas las discialinas, la unificación de los niveles de anlisis y de los métodos, de tal for ma que el investigador no aca economista, ni sociólogo, ni antropólogo, sino una gran menbe en el campo de las ciencias sociales; o bien donde el economista sea, al mismo tiempo, si puede serlo, sociólogo, antropólogo, historiador; donde ci jurista sea nl mismo tiempo, hi toriador y disaonga de conocimientos económicos, sociológicos, cc. (20)


1

Esto significa por una parte, promover la tanto intra como interdisciplinaria en el ciencias sociales, como también con otras les como la cibernética y fomentar además

comunicación campo de las ciencias, ta la intuición

y la imaginación social. b) ¿n el campo estrictamente metodológico, significa dar importancia a técnicas tales como las matemticas de la teorí de la información, de la teoría de los juegos o de la teoría de las redes; en general, a los métodos que impliquen tratar con la complejidad y el c amb jo. 5.3. Por último, y a fin de lograr resultados en el cor to plazo, y considerando que el fenómeno psicosociocultural, -a través de la participación del hombre y la co munidad en el proceso de desarrollo como sujetos, objetos y beneficiarios del mismo - est5 afectando todo pro grama do desarrollo y a la vez está siendo afectdo por cada transformación tecnológica, parece importante co menzar, desde ya, a incorporar a las ciencias sociales teniendo presente sus limitaciones y resolviendo las dificultades de comunicación con el político- a la supera ción de aquellos problemas del desarrollo nacional que han de ser enfrentados en el corto plazo. Así, por ejemplo, la costosa investigación de un nuevo producto alimenticio puede ser llevada al fracao, aún cuando el resultado sea óptimo desde el punto de vista técnico-económico, si no se consideran los valores y a titudes de la población frente a él; la incorporación de maquinaria al proceso productivo agrícola puede producir cesantía, migración urbano-rural y marginalidad; la ampliación de las formas institucionales de portici pación pueden ser ineficientes si no existe al mismo tiempo un programa de motivación; un programa de des rroilo de la industria del cobre puede quedar en el pa pci si no se cuenta para su ejecución con personal téc nico adecuado.


¿s necesario, por lo tanto, en todo problema planteado por el desarrollo socioecon6mico considerar los f actores sociales en su triple dimensión de $ujetOS, Objetos y beneficiarios del mismo.

Para terminar, resta decir aquí, que estas recomendaci2 nos han de ser tomadas sólo como una primera aproxima ción al problema que plantea la planificación de las ciencias sociales para el desarrollo socioeconómico del stn por tanto sujetas a modificaciones y a afi país. na.mientos posteriores que han de ser elaborados a tra vós del trabajo conjunto de cientistas sociales y 1ani ficadores de la ciencia.

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e

(11) (12)

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(13)

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(14)

Osvaldo Sunkel Mesa Redonda sobre la Factibi lidad de un Programa Doctoral en Ciencias so ciales en Chile, Diciembre de 1968. Boletín Informativo ?LANDES NQ 35, Septiembre- Octubre 1969 1 pág. 19

(15)

MaxMillikan

(16)

Os valdo S unke1

op. cit., pág. 175 - 176 op. cít., pág. 20

(17) M ax

op. cit., pág. 176

(18) Max Millikan

op. cit., pág. 177 - 178

(19) Max Milli ka n

op • ci t., pág. 166 - 168

(20)

José Medina Echeverría

op. cit., pág. 22 - 24


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