Cardenismo, Morena y CDMX

Desde mediados de los años ochenta, la CDMX es de izquierda. Después de las represiones de 1968 y 1971, la ciudad entró en letargo. Los sismos de 1985 la despertaron. En 1987, los estudiantes de la UNAM, organizados en el CEU, recuperaron la plaza pública. En 1988, la mayoría de la capital hizo valer el voto ciudadano y nueve años después, eligieron a Cuauhtémoc Cárdenas como su primer jefe de gobierno electo en la historia moderna.

Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard convirtieron a la CDMX en la capital de los derechos y las libertades. Los sismos de 2017 fueron definitorios para el proceso electoral del 2018. En 2018, la ciudad se volcó a favor de Andrés Manuel López Obrador en la elección presidencial, particularmente los sectores medios de centro y centro dere- cha, que por años se le habían negado. La ciudadanía capitalina fue generosa con el ahora presidente. En 2005 y 2006, lo acompañó en sus movilizaciones en contra del desafuero y del fraude electoral, respectivamente.

Las políticas de austeridad aplicadas sin criterio, la retórica oficial de “estás conmigo o en mi contra”, la pandemia de Covid y la ausencia de apoyos a los sectores medios de la ciudad, provocaron que en 2021, las clases medias no ratificaran su apoyo a AMLO. La ciudad está dividida.

En la capital del país está la oposición social más fuerte al presidente AMLO y a la continuidad de Morena en el poder, como se expresó en las marchas de noviembre del año pasado y febrero de éste. Ojo. El hecho de que AMLO haya perdido las clases medias capitalinas no significa que en automático voten por el PAN o por el PRI, pero sí en contra de AMLO. Las encuestas señalan que Morena sigue como la opción preferida de los capitalinos; sin embargo, tiene frente así una oposición movilizada, consciente de su voto, pero aún carente de liderazgo. En suma, las elecciones de 2024 no serán miel sobre hojuelas para Morena y sus candidatos.

Omar García Harfuch, Clara Brugada, Martí Batres, Rosa Icela Rodríguez son los nombres que día a día suenan con más frecuencia en las encuestas y los corrillos políticos. Con excepción de García Harfuch, las demás corcholatas capitalinas continuarían con la línea de la 4T, pero ninguno de ellos es un candidato con fuerza propia y arrastre social. AMLO parece estar resignado a perder las clases medias capitalinas. La eventual candidatura de Lázaro Cárdenas Batel era la posibilidad de recuperar esos sectores. La Ciudad aún conserva su ADN cardenista. Lástima Margarito. Lázaro decidió renunciar. Ante la disyuntiva de estar con la familia o con el jefe. Prefirió la familia. Eso pienso yo, ¿usted qué opina? La política es de bronce.

•@onelortiz https://youtu.be/95vf-qApAvY

El desmantelamiento del Servicio Profesional Electoral

La reforma electoral conocida como “Plan B”, entre otras cuestiones eliminó las 300 Juntas Distritales permanentes, para establecer oficinas auxiliares temporales a cargo de una sola persona y bajo un argumento de austeridad eliminó gran parte del cuerpo civil de carrera del INE.

En el ámbito local existe una afectación proporcional, si no es que mayor a la federal, ya que se limita a una estructura compuesta por dos áreas:

• Organización, Capacitación Electoral y Educación Cívica.

• Administración, Prerrogativas y Asuntos Jurídicos.

También, se elimina la estructura municipal o distrital permanente y no se contempla ningún funcionario como administrador territorial de los distritos electorales.

En el IECM contamos con 33 Órganos Desconcentrados entre los que se encuentran Direcciones Distritales permanentes que se integran por cinco

COLUMNA INVITADA personas, todas integrantes del Servicio Profesional Electoral Nacional.

Este personal, no solamente cuenta con obligaciones en materia electoral, ya que el Instituto Electoral cumple con dos funciones permanentes, la primera, como instancia electoral para organizar y vigilar los procesos electorales en coordinación con el INE, y la segunda, que considero la más importante, es la relacionada con la organización de los instrumentos y mecanismos de participación ciudadana. Además, es trascendente puntualizar también que, el IECM da seguimiento y acompañamiento en actividades, consultas y elecciones de autoridades tradicionales de pueblos y barrios originarios, así como de comunidades indígenas residentes en la Ciudad de México.

Aunado a lo anterior, al establecerse solamente dos áreas en los OPLES se ignora que a nivel local no solamente se organizan elecciones, sino que también se desarrollan los mecanismos e instrumentos de participación ciudadana que son un gran aporte a nivel local para la reconstrucción del tejido social y, que grupos como las niñas, niños y adolescentes se involucren y se comprometan con estas actividades en la democracia de nuestra capital.

Para todo ello, el IECM cuenta con una Dirección Ejecutiva de Participa- ción Ciudadana y Capacitación, que sería eliminada con la reforma y que está conformada esencialmente por personal del SPEN.

En conclusión, con esta reforma sin precedentes se transforma el esquema electoral que dota de certeza todos los procesos tanto electorales como los de democracia participativa. Tan solo en la Ciudad de México se reducirá un 82.3% el cuerpo de servicio civil de carrera especializado en materia electoral, considerando que se conserven de forma íntegra las demás direcciones que se conforman con personal del SPEN, de no ser así, este cálculo podría aumentar.

Estamos ante una reforma violatoria de la autonomía constitucional, de las autoridades electorales, ya que se trata de actos de poderes públicos que implican una merma a la naturaleza jurídica de los organismos electorales y en el ejercicio en la especialidad de sus funciones.

•Consejero Electoral del IECM