Cocinar para no olvidarles: Recetario para la memoria

En la cultura popular mexicana el ritual de la preparación de comida, desde pensar en los platillos favoritos de quienes se deleitan con nuestros “guisos”, hasta la elaboración con amor como principal sazonador, forman parte de una de las mayores demostraciones de afecto, cuidado y cariño para nuestros seres amados.

¿Pero qué pasa, cuando ya no podemos cocinarles ese chicharrón en salsa verde, ese mole rojo o picadillo a un miembro de nuestra familia, porque están desaparecidos o desaparecidas? Ese, es el otro gran vacío, el de las sillas sin ocupar en la mesa que deja la grave crisis de

Alejandra Gallardo

personas desaparecidas o no localizadas. En México, más de 100 mil personas están desaparecidas. Más de cien mil familias, aún tienen la esperanza de poder cocinar los platillos favoritos de quienes hoy no están en la mesa.

Es precisamente por esa dolorosa razón que nació “Recetario para la memoria”, un proyecto gastronómico, fotográfico y social sobre la desaparición forzada, gestionado por colectivos de búsqueda que se resisten al olvido de sus personas desaparecidas, como una forma de nutrir la resistencia durante las largas jornadas de búsqueda, sin ayuda del estado. sario para continuar con sus búsquedas, hasta encontrarles.

Con sus recetas, en una mesa dispuesta a compartir, además de enseñarles a sus lectores a cocinar, buscan crear redes para transformar una ausencia individual, a una ausencia colectiva, que genere exigencia. Exigencia de verdad, justicia, reparación del daño y no repetición en medio de las precarias investigaciones y la impunidad para dar con el paradero de las 29 personas que desaparecen todos los días en México.

COLUMNA INVITADA •

El libro “Recetario para la memoria” está disponible en dos versiones, una sobre las desapariciones en el estado de Guanajuato y otra sobre el estado de Sinaloa. Las ganancias de la venta de los libros será destinada a los colectivos de búsqueda de ambos estados. Colectivos autogestionados, que invierten sus propios recursos en investigación, capacitación y todo lo nece-