Nunca he sido mucho de celebrar la Navidad. No es que no me guste la fiesta ni nada de eso, y, por supuesto adoro los regalos. Supongo que es más bien una oposición ideológica a celebrar una fiesta religiosa, así que la idea de hacer un número especial de Samaritano con una temática navideña tenía que surgir por narices. La posibilidad de cargarme de forma violenta y sangrante los mejores deseos de la gran mayoría de la población mundial forma parte de mi cometido como genio maligno, así que no dudé ni un segundo en escribir una serie de historias cortas que, aunque tontorronas y de poco contenido, captaban la maldad que sale de mis dedos cuando estoy motivado (y el resto del tiempo también, la verdad). Cuando tuve unas cuantas escritas, decidí que ya estaba harto de ver historias de Samaritano dibujada por mí, así que me puse en marcha y, tal y como hago siempre que una idea suicida sobrevuela mi cerebelo, hablé con Paco (Hernández). Paco, que suele ser bastante comprensivo con mis delirios de grandeza y, muy de vez en cuando, me deja pasear por el jardín sin correa, me dijo que adelante, que hiciera lo que quisiera pero que por lo que más quisiera le devolviera su televisión y dejara de ponerle petardos en el buzón. Los artistas que han colaborado en la elaboración de este número merecen toda mi admiración, no sólo por ser unos buenos dibujantes y demostrarlo en cada trabajo que realizan, sino también por hacerse una idea de lo que mi mente enferma intenta expresar y reflejarlo en sus páginas (además a una velocidad pasmosa). Así pues, en este número podemos contar con los lápices de Paco Hernández, que por fin se moja y hace un comic para Cool Universe, Abel García, que vuelve a regalarnos los ojos con unos dibujos impresionantes, David Lorca, un colega mío que se estrena en esto de los comics por Internet y al que he tenido la mala hostia de darle la historia más larga, la portada de Pater, que como siempre es un lujo que dedique su tiempo, y, como no podía ser de otra forma, mis garabatos, y tendréis que perdonarme, que hago lo que puedo... Así pues, os invito a disfrutar de este número especial, que el equipo de CU hemos elaborado con todo nuestro cariño, y, de paso, os deseo a todos vosotros, lectores que hacéis posible que esto vaya tirando, unas felices fiestas y bla, bla, bla, que en estos tiempos de crisis todos necesitamos creer en la magia (aunque yo prefiero creer que Samaritano está ahí fuera, acabando con los malos y protegiéndonos de todo menos de él mismo), que empecéis bien el año y soñéis con la muerte de vuestros enemigos que, es lo máximo que vais a conseguir viviendo fuera de Cool Universe...