MIRABILIA
DÍAZ ROIZ
MIRABILIA
DÍAZ ROIZ
Atleta celeste, 2016 Acrílico. 33x41 cm
Del 9 de junio al 8 de julio de 2017
Javier Díaz Roiz, Mirabilia, Galería Cornión La representación subjetiva de la realidad transforma nuestro carácter y entorno, revitalizando la concepción personal del mundo, hasta sintetizarse en una serie de ideas que suelen verse alteradas en función de la propia psicología de cada individuo. Díaz Roiz ha explorado en estos últimos tres años de trabajo, que ahora se presentan bajo el título Mirabilia en la sala de arte Cornión, una serie de representaciones plásticas donde la figuración, influida bajo la técnica y el resultado de la generación pop y el Street-art neoyorquino, cobra cada vez más fuerza y vitalidad, motivado por el deseo de transferir a través de la materia y el color las inquietudes que rondan al artista. Díaz Roiz sitúa a la figura ante múltiples espacios procurando jugar con el contraste, la apariencia, el ocultamiento, la integración con el medio o incluso su dimensión corpórea, sugiriéndonos con ello una serie de referencias místicas y existencialistas. El concepto de Mirabilia como entidad mágica que auxilia a toda aquella persona que desea vivir bajo una distorsión fantástica de la realidad, el sacrificio del deporte de élite como reto vital para superar nuestras propias barreras naturales, la relación que establece cada individuo con la vida y la muerte, o la ciencia como motor de progreso y nuevo dogma de fe para sobrevivir al mundo globalizado, son algunos de los planteamientos que sugiere a través de sus figuras. No de forma explícita, por supuesto, pero sí a través de un modelo rupestre que tiende a explicar la relación del ser con la naturaleza. La constante repetición de su talismán, un cuerpo danzarín, flexible y flotante, sostenido por el propio espacio que le acoge, se convierte en una obsesión que no busca otro camino más que la autoafirmación: “Soy, estoy y aquí me mantengo”, parece repetirnos como un mantra Díaz Roiz con cada una de sus obras. Juan Canteli Maza –2–
Corredor de fondo, 2017 Impresión digital y acrílico. 24x36 cm –3–
Espíritu olímpico, 2016 Acrílico. 40x40 cm –4–
La virgen en la cueva, 2016 Acrílico. 40x40 cm –5–
Mirabilia I, 2016 Acrílico. 60x81 cm –6–
Atleta cubista, 2015 Óleo. 54x65 cm –7–
Por mí y por mis compañeros, 2016 Acrílico. 100x81 cm –8–
Dos cabezas, 2016 Acrílico. 81x100 cm –9–
El vencedor de la muerte, 2016 Acrílico. 81x116 cm – 10 –
El dueño de la pelota, 2016 Acrílico. 81x116 cm – 11 –
Ironmam, 2016 Óleo y acrílico. 150x150 cm – 12 –
Vampiro, 2017 Impresión digital y acrílico. 24x36 cm – 13 –
MIRABILIA Deportistas corren por las calles. Y pienso. Que salga el sudor de los cuerpos, mucho mejor que la sangre. Y siento que “Es la hora de los deportistas de élite”. Sí. Algo tarde, pero... Deportistas de élite corren por las calles. La premisa es clara. Si andaba buscando el cielo en la tierra, necesito la ciencia en mi ayuda. Me pondré a correr, física, mentalmente. Todo está por hacer, no hay tiempo que perder, con la lentitud adecuada, con la velocidad requerida. Emularé las grandes hazañas. Una vez fuera por caminos solitarios me gustaría saber cuál es mi disciplina, e incluso ponerle un nombre. Monstruos y bellezas. Socorristas y guardianes. Enigmas e imposibles. Abandonar la maldad. La bondad es mágica. Podríamos jugar todos un tiempo, lo pasaremos bien. Pero cuál es esa disciplina. Lo desconozco o podría ser un secreto. Lo averiguaré. Quizá las hadas se hayan hecho militantes y activistas políticas. Todos somos ciudadanos de viaje hacia la muerte. Las víctimas de un sistema, de unas creencias. Siempre-Nunca. El arte triste, el político corrupto. Denuncia y provocación, prisas y explotación. Resumiendo. Corren tras la pelota mis compañeros los poetas. Van. Vienen y por el camino se entretienen. Pero qué corto es el camino. Mirabilia que alargue nuestro camino, nuestras fronteras. La conclusión es clara. No cabe duda. Soy un deportista de élite. Afín a los héroes y me encuentro solo ante ti. Dando mi máximo. Haciéndome el sufrido. Proponiéndote juegos…sintiendo la fuerza…casi la euforia. Pero date cuenta y yo también, lo mejor es la paz. Es lo que más conviene. El cuerpo sano, la mente consciente. La satisfacción que solamente se puede obtener por la satisfacción, la tierra en silencio, su dulce poesía, la fragilidad humana. La tranquilidad, el contento y el contentamiento. Nada como una oración de agradecimiento. La auténtica maravilla. El momento mágico que nada pretende. Amén. Aprovechando este momento el deportista de élite ha mejorado su marca de inmovilidad absoluta. No hacer. El éxtasis estático. La labor del pintor. Parar el torbellino de ideas y centrarse en las dulces horas. Todo lo que es y está pasa por él y por la obra. Perder el miedo a que te atropelle la maldad y ser impecable en tu sentimiento y acción. Detenido en el tiempo. Ingenuo en el hallazgo. La confianza plena. Sin pérdida ni ganancia. Eterno, dormido y despierto. Ensoñando en su pincel lo que somos, seres maravillosos. Es el deportista de élite de las dulces horas. MIRABILIA
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Atleta neutral autorizado II, 2017 Impresión digital y acrílico. 81x100 cm – 15 –
CORNIÓN. Galería de Arte C/ La Merced, 45 33201 Gijón - Asturias Tel./Fax + 34 985 34 25 07 E-mail: galeria@cornion.com www.cornion.com
©2017. Galería Cornión ©2017. Díaz Roiz Textos: Juan Canteli Maza y Díaz Roiz Fotografías: Archivo Cornión Maquetación e impresión: Asturlet, S.L.