ENTREVISTA AL SR. ARNOLDO LOYA ACOSTA 18RESISTENCIA DE PLAGAS Y ENFERMEDADES A LOS PESTICIDAS

Entrevista al Sr. Arnoldo Loya Acosta

“Tener una buena producción de manzana no es tarea fácil, para lograrlo es indispensable contar con un clima favorable, buen suelo y poder disponer del agua necesaria, pero sobre todo que el fruticultor disfrute su trabajo, ya que una huerta requiere tiempo, inversión y muchos cuidados” esto lo comentó el Sr. Arnoldo

Loya Acosta, quien nos recibió en compañía de su familia para compartir en esta edición parte de lo que ha sido su experiencia como productor de manzana.

Cada día la vida nos ofrece cientos de oportunidades y el Sr. Loya ha sabido aprovecharlas. Emigró con su familia a Estados Unidos y después de doce años regresó para establecerse en el Terrero, localidad de Namiquipa y probar suerte en el sector manzanero: “En 1999 un amigo me propuso comprar una huerta de aproximadamente 800 árboles en producción y mientras yo seguía trabajando en Nuevo México él se hizo cargo de la huerta. La experiencia fue tan buena que en 2003 decidimos regresar y establecimos nuestra primera plantación, la cual actualmente cuenta con 3 000 árboles. Así que desde entonces no hemos parado, hemos aprovechado cada una de las oportunidades que se nos han presentado y hemos establecido más plantaciones, así como dos frigoríficos y un empaque de manzanas”.

Sin duda alguna el reto como fruticultor no ha sido sencillo, las heladas, enfermedades, plagas, los coyotes y el clima han representado desafíos muy importantes para el Sr. Loya y su familia: “He tenido la oportunidad de trabajar en varios sectores, pero definitivamente ninguno me ha llenado tanto como la fruticultura, en cada ciclo aprendemos cosas nuevas y nos hemos ido adaptando a las exigencias del mercado, actualmente contamos con diferentes variedades como Golden Delicious, Golden Glory, Red Cheef, Red Delicious, Top Red, Red Ace y Gala, variedades tempranas, medias y tardías que nos han permitido alternar los ciclos de producción, así como permanecer más tiempo en el mercado”.

Para el Sr. Loya el apoyo de su familia ha sido fundamental en esta actividad: “Esto es un negocio cien por ciento familiar, mi esposa Susana Nevárez es quien se hace cargo de la empacadora, mientras que mis hijos me apoyan en todo lo que pueden, Arnoldo estudió mecánica en El Paso, Texas y él se encarga de ayudarnos con toda la maquinaria, además ya se hace cargo de una huerta; Alberto se acaba de recibir como ingeniero hortícola y está a cargo de algunas plantaciones, mientras que Mauricio el más joven continúa estudiando la preparatoria y en sus tiempos libres nos ayuda con lo que se le facilita. Afortunadamente los he visto motivados y seguido platico con ellos para aconsejarles que no dejen de aprovechar las oportunidades que podemos ofrecerles, claro que nos gustaría que los tres heredaran el amor y cuidado por estas tierras y que más adelante se encargaran de ellas como hasta ahora lo hemos hecho nosotros, pero solo ellos decidirán con el tiempo si continúan o no con esta actividad”.

La responsabilidad y la puntualidad son dos cualidades que el Sr. Arnoldo ha implementado en su trabajo: “Nunca imaginé que un día me convertiría en fruticultor, pero gracias al apoyo de mi familia, así como a nuestra constancia y dedicación hemos incrementado considerablemente nuestras plantaciones. Actualmente contamos con aproximadamente 35 000 árboles y hemos llegado a levantar hasta cinco mil cajones pallet en un año, lo cual es bastante importante para nosotros. Ahora ya no batallamos para comercializar nuestra producción, ya que la calidad de nuestras manzanas nos han permitido conseguir muy buenos clientes que cada año de manera puntual nos visitan para llevar manzanas a Guadalajara, Puebla, Monterrey y la Ciudad de México, entre otros lugares del país”.

Con poco más de veinte años de experiencia, el Sr. Loya ha ampliado su participación en el sector mediante la construcción de frigoríficos y una empacadora: “En el año 2009 construimos nuestra primera sala convencional debido al incremento de nuestra producción y afortunadamente hoy contamos con cinco salas que nos permiten manejar la carga y temperatura de acuerdo a nuestras necesidades, evitando picos de temperatura y abrir salas innecesariamente, así como tener la refrigeración disponible para cuando la fruta se encuentra en el momento óptimo de maduración, por otra parte esto nos ha beneficiado con la comercialización de nuestro producto y nos ha dado la oportunidad de obtener ingresos extra al tener la capacidad de refrigerar la manzana de otros productores de la región”.

La familia Loya Nevárez cuenta además con una empacadora equipada con máquinas para lavar las manzanas y empacarlas según las necesidades de los clientes, lo cual les ha permitido emplear a mujeres y hombres de su localidad no nada más en las huertas: “La parte que más disfrutamos de nuestro trabajo es la temporada de la cosecha y la comercialización, ya que es entonces cuando vemos materializado el esfuerzo de todo el año, pero es además la temporada en la que podemos generar un mayor número de empleos para las personas de nuestra región y de alguna manera beneficiar la economía de nuestros pueblos”, mencionó el Sr. Arnoldo.

El año pasado fue bastante perjudicial para todos los sectores a nivel mundial y aunque la producción de manzana en la región de Namiquipa no se vio particularmente afectada, su comercialización sí: “Como productores pudimos observar un mercado bastante inestable, ya que muchos establecimientos en los que se comercializa nuestra manzana tuvieron que cerrar. Para este año nuestra expectativa es obtener una cosecha de mejor calidad, y nos encontramos optimistas respecto a los precios de la cosecha 2021, pues esta temporada la estamos cerrando con buenos precios”.

Respecto a su relación con Unifrut, el Sr. Arnoldo mencionó: “Existe una muy buena relación con la Unión y sus representantes. A nosotros nos han apoyado bastante con asesorías técnicas gratuitas; con los sistemas de crédito para adquirir insumos; el monitoreo de plagas; con sus estaciones meteorológicas, las cuales son bastante importantes en temporada de heladas ya que como productores debemos contar con fuentes confiables, pues de ello depende en gran medida nuestra producción; así mismo nos proveen de herramientas como el Padrón Georreferenciado de la Manzana, el cual es una excelente herramienta para la defensa de la producción y de gran importancia a nivel nacional pues da certidumbre a la información del sector, así como de la rastreabilidad de la fruta en términos de inocuidad alimentaria”.

Finalmente el Sr. Loya comentó que existen necesidades muy importantes en el sector que deben ser atendidas: “Como en todo sector primario el financiamiento oportuno y las tasas competitivas son siempre una necesidad latente, nos hacen falta apoyos para modernizar nuestras variedades, los patrones, mecanización, refrigeración y empaques”.

Resistencia de plagas y enfermedades a los pesticidas

M.C. Yolanda Gabriela Rodríguez Manríquez Laboratorios de Fitopatología y de Reproducción de Insectos Benéficos de Unifrut

La resistencia es una característica genética que da a los organismos la capacidad de sobrevivir a una dosis de plaguicida que comúnmente resultaría suficiente para controlar el problema de alguna plaga o enfermedad.

Los genes de resistencia se pueden presentar en la naturaleza debido a mutaciones, las cuales se pueden presentar en cualquier ser vivo, ya sea hongos, bacterias, plantas, animales y el ser humano, pero también puede ser heredada en cualquiera de estos organismos.

Las poblaciones resistentes son cada vez más abundantes, esto debido a que los organismos resistentes logran sobrevivir y posteriormente reproducirse y esta característica de resistencia permanece en los organismos sobrevivientes, mientras que los individuos sin resistencia son eliminados por los plaguicidas. Al continuar aplicando los plaguicidas que han causado resistencia, se incrementan las cantidades de poblaciones resistentes, hasta que se llega al punto de que los plaguicidas dejan de ser eficientes.

Algunos aspectos que influyen en el desarrollo de las resistencias son:

*Uso continuo y frecuente de un mismo plaguicida o de plaguicidas estrechamente relacionados sobre una población de plagas. *El uso de dosis de aplicación que están por debajo o por encima de las recomendadas en la etiqueta. *Pobre cobertura del área bajo tratamiento. *Tratamiento frecuente de organismos con grandes poblaciones y cortos tiempos de generación. *Fallo al incorporar otras prácticas no plaguicidas de control cuando sea posible. *Tratamiento simultáneo de los estadios larvales y adultos con compuestos sencillos o relacionados. Además, la realización de malas prácticas agrícolas, tales como la poca o nula rotación de cultivos y la falta de limpieza de los equipos agrícolas, con lo que se incrementa la diseminación de las semillas de malezas, hongos, bacterias, nematodos y plagas resistentes.

Manejo de la resistencia

Consiste en prevenir o al menos retardar la acumulación de individuos resistentes en las poblaciones de plagas, de manera que preserve la efectividad de los plaguicidas disponibles. El manejo de la resistencia puede también llamarse manejo de la susceptibilidad como medio de mantener un alto porcentaje de genes susceptibles dentro de la población de la plaga y así mantener los genes de resistencia en un mínimo. El reto es reducir la presión de selección de resistencia a la vez que se proporciona el nivel necesario de protección al cultivo.

Manejar la resistencia requiere: primero, del uso racional de las estrategias de control de plagas basado en los principios de Manejo Integrado de Plagas (MIP), el cual reduce el uso del plaguicida y en consecuencia la resistencia; y segundo, la implementación de un Plan de Manejo de Resistencia (PMR) exhaustivo y bien planeado, adaptado a la plaga, cultivo y la región, lo que es parte integral

del Manejo Integrado de Plagas (MIP). Un principio clave del MIP es usar los plaguicidas solamente cuando sean absolutamente necesarios y usar técnicas alternativas de manejo de plagas siempre que sea posible. El MIP, por lo tanto, constituye un enfoque fundamental para el manejo de la resistencia al minimizar la presión de selección que provoca la resistencia.

Tácticas de manejo de resistencia para todo plaguicida

*Mezclas de plaguicidas con diferentes modos de acción o mecanismos de resistencia. *Rotaciones o alternancia de plaguicidas. *Restringir el número de tratamientos por estación, aplicar solamente cuando sea estrictamente necesario. *Usar dosis efectivas, o sea las recomendadas. *Proteger los organismos benéficos.

¿Cuáles son los beneficios del manejo de la resistencia?

• Ahorrar dinero. • Mantiene los productos más efectivos por períodos más largos. • Reduce la necesidad de cambiar a productos más costosos o métodos de control menos preferidos. • Mantiene expectativas de cosecha y asegura una producción sostenible. • Ahorra tiempo. • Se pasa menos tiempo en el cultivo porque se reduce la necesidad de repetir aplicaciones. • Hay menor esfuerzo y preocupación para lograr un control de plagas efectivo. • Mejora la seguridad del producto • Reduce la necesidad de repetir aplicaciones de insecticidas, minimizando los riesgos de residuo en la cosecha. • Protege su salud y su tierra.

Referencias:

http://www.fao.org/3/a-bt561s.pdf https://www.croplifela.org/es/actualidad/articulos/manejo-de-la-resistencia http://www.nacionmulticultural.unam.mx/empresasindigenas/docs/1866.pdf https://xn--daocerebral-2db.es/publicacion/ la-crisis-global-de-la-resistencia-bacteriana-a-los-antibioticos-dejaran-pronto-de-curar/ https://www.mens-app.es/resistencia-a-los-antibioticos/ http://acasesores.co/es/2020/03/04/economia-naranja-beneficios-tributarios-y-los-requisitos-que-debe-cumplir/