SIGUE INFLACIÓN AL ALZA

Aumentó en julio a 12.1% anual la carestía de los alimentos

Sigue inflación al alza

En julio pasado, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó una variación de 0.74% respecto al mes anterior. Con este resultado, la inflación general anual se colocó en 8.15 por ciento. En el mismo mes de 2021, la inflación mensual fue de 0.59% y la anual, de 5.81 por ciento. El índice de precios subyacente registró un avance de 0.62% mensual y de 7.65% anual. El índice de precios no subyacente aumentó 1.09% a tasa mensual y 9.65% a tasa anual. Al interior del índice subyacente, a tasa mensual, los precios de las mercancías incrementaron 0.72% y los de servicios, 0.50 por ciento; alimentos, bebidas y tabaco 1.02; mercancías no alimentarias 0.38; vivienda 0.27, educación (colegiaturas) 0.17, otros servicios 0.79%. Dentro del índice no subyacente, a tasa mensual, los precios de los productos agropecuarios subieron 1.64% y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, 0.63 por ciento. Además frutas y verduras 2.38%, entre ellas papas y otros tubérculos 1.96%, naranja 15.51, cebolla 13.79, tomate verde 20.4. Otros productos con mayores aumentos fueron: el huevo 8.31%, refrescos envasados 1.33%, carne de cerdo 3.40, loncherías, fondas, torerías y taquerías 8.5%, restaurantes y similares 0.94%. Mientras que los productos que bajaron de precio fueron: pollo -2.07%, aguacate -8.90%, jitomate -5.02%, uvas 16.81%, chile po blano 10.67%, calabacita -5.20%, chile serrano -4.49%, y chayote- 4.86%. Los estados con mayor y menor variación fueron: Michoacán 1.19%, Sinaloa 1.13%, Sonora 1.09%, Guanajuato 1.07% y Coahuila 1.04%. Y Morelos 0.45%, Veracruz 0.49%, Hidalgo0.55%, Puebla 0.57% y Campeche 0.60%. El consumo individual por finalidades con relación a junio de 2022 pasó de 0.74 a 8.5% en el mes de julio. La inflación general en México escaló en julio a su mayor nivel en cerca de 22 años, impulsada por el alza en los precios de alimentos, pero los analistas esperan que alcance su ‘pico’ entre agosto y septiembre, hasta niveles cercanos a 8.5 por ciento. De acuerdo con el INEGI, los mayores incrementos anuales fueron en los precios de los alimentos procesados, con 12.1 por ciento, y en los productos agropecuarios, que tuvieron un aumento de 16.1 por ciento. Para los analistas, el resultado de la inflación fortalece la expectativa de un incremento de tres cuartos de punto en la tasa de interés de referencia de Banxico que da a conocer.

“En busca de mejores precios, para hacer rendir el presupuesto familiar”

“CUESTA DE ENERO’ ADELANTADA

O QUE NUNCA SE FUE” Algunos de los alimentos que ya no están presentes en la mesa de las familias, debido al alza de precios en los últimos meses, son la carne de res y pollo, jamón, fruta, aguacate y algunas verduras. Son algunos de los productos que las y los compradores se han visto obligados a no comprar para que de alguna forma les rinda el dinero ante la elevada inflación. Algunas amas de casa explican que su economía no les permite adquirir comida para toda la semana, pues “van al día”. En algunos hogares, con cinco integrantes de la familia, han dejado de comprar fruta y la carne es sólo dos veces por semana. Jefes de familias reconocen que la situación al estar tan complicada han optado por priorizar la compra de comida y dejar para el final el pago de servicios. Otros han tenido que prescindir de pan, fruta y refrescos, que ahora son un lujo. También ahorrar en gas, solo se usa lo necesario. “Ahora ya ni tortillas y frijoles”, para alimentar a la familia, señalan. Otras personas toman como habito recorrer mercados y tiendas en busca de los mejores precios para surtir su despensa, hasta hallar la mejor oferta, aunque muchas veces la diferencia es mínima. “El aumento en los precios cada vez hace más insuficiente su presupuesto”, comentan. El encarecimiento de la canasta básica consiguió lo que no pudo el etiquetado de advertencia:

LOS CONSUMIDORES HAN DEJADO DE COMPRAR PRODUCTOS COMO BOTANAS Y LOS DULCES. “Los productos que dejaron de comprarse son enlatados, huevo, botanas, dulces y lácteos. Las golosinas, que eran un gancho muy bueno en las ventas del pequeño comercio, que son los chocolates y los dulces; y el tema de las botanas ligadas con el fin de semana. La caída en general de estos productos, que son de alta demanda, les genera una baja de no menos de 25 por ciento en ventas”: Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) De cada 10, 8 de los consumidores están solicitando fiado a sus tenderos, cuando en 2020, al inicio de la pandemia de COVID-19, eran entre 20 y 30 por ciento. “El pequeño comerciante tiene un ‘séptimo sentido’ que le da la oportunidad de estar cerca de sus clientes y conoce a quién sí y a quién no fiar. La gente vive de crisis en crisis, y los consumidores leales de pedir ayuda lo hacen y lo pagan porque cuidan su crédito, y tampoco son grandes cuentas”: Anpec. DATOS DEL INSTITUTO

NACIONAL DE ESTADÍSTICA

Y GEOGRAFÍA (INEGI) Arrojan que a julio del 2022 la inflación anual del aceite comestible asciende a 32.49 por ciento; la leche, crema y el huevo se promedia en 18.30 por ciento; pan de caja, 18.70 por ciento; refrescos, 8.56 por ciento; los chocolates y productos de confitería, 8.26 por ciento.

SUBEN FONDAS SUS PRECIOS,

OTRAS MÁS INTEGRAN PLATILLOS MÁS BARATOS Y YA COMIENZAN A RESENTIR BAJA

EN SUS COMENSALES. Así coinciden diversos dependientes de estos establecimientos, pues comentan que el gas es uno de los productos que más aumento registra, además de ser clave para su negocio. Sus platillos han incrementado 15 pesos, ante el alza de precios de la canasta básica e insumos alimenticios como el aceite, huevo, arroz y frijol, que son de los alimentos que constantemente elevan su precio. Además señala que al incremento se suman 25 pesos extras en cada caja de refresco. Alimentos como el limón y aguacate también se encarecen, y pese a los aumentos los clientes esperan un buen precio y una porción regular. “Le subí diez pesos a los platillos, no se le puede subir más porque por un peso dejan de venir". Refirió que ahora sus comensales antes de ordenar preguntan precios. Estiman que desde hace poco más de tres meses sus ventas han ido a la baja. Expuso que los precios de los alimentos no puede aumentarlos, debe mantener el precio sin reducir la calidad. Desde el año pasado mantiene este precio, no puede ser más caro por la competencia a su alrededor.

INFLACIÓN DE COMIDA EN MÉXICO,

LA MÁS ALTA DE AL, REPORTA EL BM En el año y medio que ha supuesto un periodo de recuperación tras los primeros cierres por la pandemia, los productos agrícolas se han encarecido 19 por ciento en promedio. En particular los granos básicos como maíz y trigo, que se han incrementado 15 y 24 por ciento, respectivamente, de acuerdo con datos del Banco Mundial (BM). El organismo advierte que en el caso de América Latina se requieren medidas urgentes, no sólo para garantizar el suministro hacia familias de la región, pues hay países donde más de 30 por ciento de la población ha reducido su consumo de alimentos por menor poder adquisitivo, sino invertir en el sector agropecuario para mantener su exportación a otros países. Los efectos de la crisis mundial del precio de los alimentos son significativos y van más allá de su impacto regional. Dado que Latinoamérica es la mayor exportadora neta de alimentos del mundo, cualquier impacto a sus sistemas agroalimentarios tendrá repercusiones en todo el planeta, reportó dicho organismo. Además exhibe que desde el año pasado los precios de los alimentos iban al alza, y ahora se dispararon con la crisis en Ucrania. Entre los países de América, México destaca con la mayor inflación real de alimentos, junto a Paraguay, Colombia y Surinam, reporta el organismo. Las alertas sobre una crisis alimentaria se han elevado en los últimos meses por parte del Banco Mundial. El organismo refiere que su combinación con una crisis de deuda paralizará a algunos países, por lo que la asistencia internacional se convierte en la única salida. El alza sin precedente de los precios de los alimentos ha provocado una crisis mundial que empujará a millones más a la pobreza extrema, aumentando el hambre y la malnutrición, y amenazando con eliminar los avances en materia de desarrollo, refiere. Destaca que 94.1 por ciento de los países de ingreso bajo, 88.9 por ciento de los de ingreso mediano bajo y 87 por ciento de las economías con ingreso medio alto han registrado niveles de inflación superiores a 5 por ciento, incluso en algunos ésta supera los dos dígitos. EL ALZA EN LOS PRECIOS DE LOS ALIMENTOS NO DA TREGUA AL BOLSILLO

DE LOS CONSUMIDORES En la primera quincena de julio los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas crecieron 0.81% respecto de la quincena anterior. A tasa anual alcanzó un alza de 14.35%, después de que en la primera quincena de junio, hace dos meses, fue de 13.26% con cifras publicadas recientemente por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Los precios de los alimentos han sido los principales impulsores de la inflación general en la primera quincena de la segunda mitad del año. Los precios de los productos pecuarios (pollo, carne de res, cerdo, entre otros) siguen incrementándose y crecieron 0.72% a tasa quincenal y 16.33% a tasa anual. En la quincena, fueron las alzas de precios en productos agropecuarios los que incidieron más en el índice general, con 0.14 puntos.

INFLACIÓN GENERAL AL ALZA Con las presiones de los precios en alimentos, la inflación general alcanzó 0.43% a tasa quincenal, por arriba del 0.39% que esperaban los economistas encuestados por Citibanamex, por lo que la inflación general fue de 8.16% a tasa anual, un nivel no visto desde enero de 2001, confirmando que el impulso inflacionario no se ha detenido. Si bien la inflación subyacente o básica -aquella que no contabiliza los precios más volátiles como los agropecuarios y energéticos- fue de 0.34% respecto de la quincena anterior y en línea con lo previsto por el consenso del mercado, a tasa anual alcanzó 7.56%, un nivel no visto desde 1998 para una misma quincena. Esta presión inercial inflacionaria, que es la que toma en cuenta el banco central para decidir sobre su política monetaria, que lleva al Banco de México (Banxico) incrementar nuevamente su tasa objetivo en 75 puntos base en agosto.