Incontenible la carestía de productos de primera necesidad

INCONTENIBLE LA CARESTÍA

de productos de primera necesidad

Por las nubes los precios del jitomate, chile, carne de res, cerdo y pollo; leche, huevo y frutas, entre otros

Los problemas de crecimiento económico, la expecatativa de una inflación alta y las consecuencias que trajo consigo la pandemia de Covid 19 en nuestro país, como es el desempleo e informalidad, han desatado una indeseable carestía de productos y servicios que merman gravemente la economía de miles de familias mexicanas, que cada vez experimentan un revés a sus ingresos, los cuales sirven para adquirir una menor cantidad de viveres o provisiones de primera necesidad. Hace unos dias el Banco de México elevó su pronóstico de inflación en 3.2 por ciento para el año 2022 y una reducción de Producto Inerno Bruto (PIB) al 5.4 por ciento que inicialmente era del 6.2%, lo que significa una baja en la esperanza de crecimiento económico de México y sus repercusiones son palpables para todo consumidor al acudir a la tienda de la esquina, plaza púbica o centros comerciales para comprobar la escalada de precios de alimentos, productos y servicios de primera necesidad.

INCONTENIBLE LA CARESTÍA

Y mientras que el Banxico estima que la inflación general anual en promedio para el cuarto semestre del presente año se elevará a un 6.8 por ciento, de acuerdo a datos del Insituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) durante la primera quincena de Noviembre se situó en 7.05 por ciento la tasa anual, lo que representa un récord en los últimos 20 años, y que se plama en una gran escalada de precios, sumado a que a la Secretaría de Desarrollo Económico de la Ciudad de México (SEDECO) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) coinciden que en Octubre pasado, los precios de la canasta básica aumentaron 8.3 por ciento, con respecto al mismo mes del 2020. Sobre lo anterior, el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) señala que las causas principales se originan debido al aumento en los precios internacionales de insumos, factores de clima adverso con lo cual también se propició una menor oferta de producto en los canales comerciales y una mayor demanda después de la etapa crítica de la pandemia del Covid 19 que contrajo las actividades comerciales en varios rubros . Así las cosas, en Septiembre pasado, el índice nacional llegó a 6.7 por ciento respecto al mismo mes del año pasado y según el GCMA el precio del kilogramo de carne de res pasó de 141.1 pesos en octubre del año pasado a 161.1 pesos en el mismo mes de este año, es decir, un avance de 14.1 por ciento. El kilogramo de espinazo de cerdo en promedio nacional en el décimo mes del año pasado se encontraba en 77 pesos y subió a 87 pesos; y la maciza se sitúa hasta 140 pesos por kilo, lo que equivale a incrementos hasta del 40 por ciento. Como resultado de los comparativos de Profeco y GCMA, los precios del huevo blanco y rojo registraron un aumento de 42.3 y 41.3 por ciento, respectivamente, mientras que el costo de la leche observó un aumento en un 5.1 por ciento que los productores justificaron por la alza que sufrieron en materias misma que la trasladaron finamente al consumidor, en tanto el costo de la carne de pollo pasó de 67.1 pesos a 74.8 pesos, un alza de 11.5 por ciento anual. Sin duda alguna, el mejor inspector de precios es el propio consumidor, pues las amas de casa al realizar las compras de la despensa del hogar han verificado la carestía en los precios de productos de primera necesidad; por ejemplo al acudir a los mercados o centros comerciales encuentran que el kilogramo de Jitomate alcanza hasta los 45 pesos, pues hace menos de 30 días se podía adquirir en 20 pesos. Del mismo modo, con las frutas como la manzana Golden que se situaba en aproximadamente 35 pesos el kilogramo, se disparó a más de 50 pesos, lo que representa un incremento del 44.1 por ciento, entre los meses de Octubre e inicio de Diciembre del presente año. Y a pesar de que faltan pocos días para Navidad y Año Nuevo, del mismo modo, en los súper mercados, el alarmante incremento de los precios en productos de la canasta básica y primera necesidad se ponen de manifiesto y como muestra se encuentra que el atún pasó de 23.90 pesos a 34.18; los aceites comestibles subieron en un 10 por ciento en promedio a lo largo de un año, el aguacate Hass se incrementó un 37 por ciento y ronda en los 60 pesos por kilógramo. De igual manera, si se comparan los pagos que deben realizar las amas de casa entre octubre de 2020 y el mismo mes del presente año, observamos que el chile serrano se encareció más del 60 por ciento, el café soluble pasó de 29.66 pesos a 43 pesos; el kilógramo de carne de res, de 130 a 140 pesos; el kilógramo de pollo entero, de 39 a 65 pesos; carne de cerdo de 87 a 123 pesos; papel sanitario (4 rollos) de 18.80 a 25:70 pesos y pasta de sopa de 200 gramos, de 4.93 a 8 pesos el paquete, entre otros productos que han seguido a la alza de forma alarmante, por lo que se vislumbra un fin de año y cuesta de enero muy complicada para los bolsillos de la clase trabajadora y sus familias.