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12 y 13 de Mayo de 2018
360 grados / Empleo
Por qué no decir la aspiración salarial Pablo Alejandro Alzate
Especial para Portafolio
ALGUNAS empresas consideran que la remuneración puede estar sujeta a la negociación durante el proceso de selección. Si hay algo que puede incomodar a una persona que está buscando trabajo es que en las ofertas laborales no se especifique el salario. De hecho, algunos pueden ver ese detalle como una falta de respeto. No obstante, los empleadores tienen sus razones para abstenerse de publicar cuánto van a pagar, por lo menos en primera instancia. Rafael Minauro, director de Desarrollo Universitario para Colombia y Perú en la Universidad Nebrija, ubicada en Madrid - España, dice
que algunas veces los empleadores tienen dudas a la hora de especificar el salario. “En varios casos los perfiles profesionales que pueden desarrollar determinada actividad son diversos, y las organizaciones prefieren escuchar la pretensión económica antes de ofrecer la suya. En otros casos tratan de aprovechar la compe-
Es potestad de las empresas poner en primera instancia la oferta salarial.
tencia por empleos para intentar conseguir un candidato idóneo con aspiraciones menores a las usuales en el mercado”. Para las compañías el salario puede estar sujeto a negociación. Según Minauro, es aceptable que la empresa reserve el valor de la remuneración hasta la primera etapa de selección. Sin embargo, debe estar preparada para responder el rango salarial ante la pregunta de un postulante. El mercado laboral tiene profesionales que están buscando permanentemente mejora en sus salarios y, muchas veces, se ven tentados a postular a ofertas para las cuales no cumplen los requisitos. “En algunos casos, no publicar el sueldo puede ser una estrategia para
Las empresas buscan que las personas apliquen por afinidad con el cargo y no por el salario.
atraer solamente a los interesados en el puesto y sus características”, contempla Minauro. La empresa siempre debe estar dispuesta en cualquier momento del proceso de selección a brindar información sobre la remuneración, por lo menos, establecer un rango. John Alexander Córdoba, psicólogo y asesor en Gestión Humana, asegura
que pueden ser muchas las variables por las que las compañías no indican en la oferta la remuneración. Por ejemplo, porque esperan que sea positiva la convocatoria y no desean sesgar con el salario. De igual manera, para poder tener abierta la posibilidad de negociación teniendo en cuenta las aptitudes y conocimientos del aspirante. “En muchas ocasiones ju-
gar con la necesidad del candidato”, afirma. “Las empresas reservan el derecho de evidenciar el valor salarial porque todos, por lo general, tenemos niveles aspiracionales altos y, en muchas ocasiones, nos presentamos a estas ofertas sin tener en cuenta los requisitos. Esto produce pérdida de tiempo y dinero en costosos procesos de selección”, responde Córdoba.