2 minute read
El trabajador social y la Cultura
Por ello, el trabajador social tendrá que familiarizarse primero con la cultura. Con el imaginario social que comparte el grupo en el que pretende intervenir y potenciar. De manera que pueda conocer las determinantes culturales que allí funcionan. Sobre la base de estas determinantes, crear las alternativas más factibles para enfrentar los problemas de esos grupos, o los objetivos que previamente le hayan indicado en su labor concreta. De lo contrario, pueden no comprenderse, o sencillamente rechazarse, las que se consideren mejores intenciones de facilitar un cambio. Por muy oportuno y beneficioso que parezca para el propio grupo. El trabajador social deberá trabajar con el grupo y no para el grupo.
Advertisement
El contacto inicial con los grupos deberá también tener como objetivo lograr la aceptación de estos. También reconocer aquellos elementos específicos que pudieran utilizarse para lograr la implicación. El compromiso del grupo con los cambios que se pretenden promover, como elemento de garantía de que realmente sean cambios con posibilidades de consolidarse al ser pensados y realizadas desde la cultura del grupo-objeto de intervención.
Para los Trabajadores Sociales el campo de la Interculturalidad está relacionado con el respeto a la diversidad cultural lo que permite visualizar las necesidades realmente sentidas por las comunidades indígenas, donde podría situarse nuestro rol, lo que conlleva consigo la participación social de las etnias y comunidades indígenas, potenciando la generación de prácticas sociales a favor de los indígenas. Dicha mediación es caracterizada por nuestra apuesta al rol de Educador social del Trabajador Social.
Dentro de los planteamientos de la CONADI, encontramos el “desarrollo con identidad” refiriéndose a la identificación como pueblo, como comunidad con lo común y heterogéneo que contiene su cultura y que en esa medida la modernidad recoge y rescata dichos elementos y por lo tanto la educación se plantea como el protagonismo de las comunidades en su cultura, reconociendo el discurso pedagógico de la Educación Intercultural Bilingüe con el fin de terminar con las discriminaciones dentro de la sociedad.
(sociocultural, s.f.)
• Implicaciones de la profesionalización del Trabajo Social en el contexto de las transformaciones sociales, políticas, económicas y culturales.
La sociedad de hoy ha llegado al punto en que está saturada desde sus diversos ámbitos, lo que ha provocado la destrucción del tejido social, de los valores éticos, de la convivencia social armónica y de nuestra principal riqueza: el ecosistema. Las reglas de progreso y/o desarrollo impuestas por los poderosos a los países latinoamericanos denotan una violación perenne a los derechos internacionales, a la identidad cultural y a la soberanía territorial. Todo esto estimulado por los principios mecanicistas que han promovido también la transformación de nuestras concepciones acerca de lo que somos, sentimos y Queremos Si se examinan las falacias que por siglos han vendido los modelos de desarrollo centrados en el crecimiento económico y en la ampliación de mercados en redes globales; reconocemos que la producción capitalista contribuyó a generar conductas humanas que construyen relaciones sociales sobre la base de la reproducción de la riqueza, utilizando los recursos de la naturaleza y de la biotecnología para el tránsito a una sociedad posmoderna.
Características del cambio social
Un cambio social se caracteriza por modificar estructuras tradicionales en términos de educación, ocupaciones en la sociedad y estructuras en la desigualdad social.
En este sentido, puede reforzar o debilitar la relación entre los orígenes sociales de cada individuo y sus logros educacionales y ocupacionales, aumentando o disminuyendo la igualdad social y la movilidad intergeneracional.
Los cambios sociales se pueden manifestar en diferentes formas y duración según la dimensión de los factores y causas que provocan estas alteraciones.