Índice
crítica · cultura · arte
4 SCHREIB DICH NICHT <Paul Celan> 7 8 9 10 12 13 18 19 24 25 33 34 35 38 40 43 48 50 51 57
NO TE ESCRIBAS <Traducción de Andreas Kurz, Andrea Tomasena y Emma Y.> VIA SENSE. 1. THE BRIGHT PERIOD <Simone Rooster Face> POEMA INERTE O PICTÓRICO <Eduardo Padilla> CONFUSIÓN <7 > REPACHINGARSE <Anaité Ancira García> AZUL <Ana Karen G. Barajas> ENTRE EL DILUVIO Y LA DESTRUCCIÓN DE SODOMA <Luis Alfonso Angulo Segura> SIN TÍTULO <Leticia Ochoa Castillo> LABERINTO DE LABERINTOS: EL LENGUAJE <Aurora G. Bribiesca Acevedo> EL UNIVERSO ES INMENSO E INFINITO, LA TORRE DE BABEL ES SÓLO UNA CONSTRUCCIÓN <juliovzm> EL EFECTO REALIDAD <Francisco Enríquez Muñoz> EL OBSEQUIO DE YAHVEH <César Meza> NO NECESITO HABLAR <Adrián Alegría> DROGARIA SOCIEDADE ANÔNIMA <Luis Aranha> DROGUERÍA. SOCIEDAD ANÓNIMA <Traducción de Sergio Ernesto Ríos> LAS HUELLAS DE LAS AVES O LA CONFUSIÓN DE LAS LENGUAS O EL MISTERIO DE LOS HIMNOS O LOS REPLIEGUES DE LA ESCRITURA <Amaranta Caballero Prado> Entrevista a Miho Hagino Entrevista a Roberto Morales DENTRO DEL NOISE <Félix Ulrica> BABEL/ Alejandro González Iñárritu <Cali> FRESAS SALVAJES/ Ingmar Bergman <Rosa L. Gante> ( ) <Georgina Fuentes, Juan José Castro Sánchez, Antonino Torres, Daniel Pino, Yanin Givaudan, Leticia Ochoa Castillo>
-.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . . . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...-. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. ..--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... ....- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --1 .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . .-.. . ...- .- -. - .-.. . ... -- --- .-. --- -. .- - . .--. . .-. --- .- -. - . ... .-.. . ...- .- -. - .- -.. . ... --
Mensaje Editorial Comenzó con golpecitos en las ventanas. Oídos sin cuidado, no eran más que golpes; escuchados cuidadosamente, iban convirtiéndose en algo más. Cada uno de nosotros formuló su propia hipótesis: –¡empieza a llover!–, –podría ser un pájaro–, –es polvo arrastrado por el viento–, –¡alguien está tocando!–, –¿un fantasma?–, –esos vidrios están mal empotrados–, –algo o alguien intenta comunicarse en un lenguaje cifrado–. Fueran lo que fueran, llegamos a la conclusión de que a partir de una sola cosa se pueden derivar muchísimas interpretaciones. Entonces nos vino a la cabeza la idea de babel. En ese momento teníamos a la mano algunos poemas de Paul Celan; elegimos uno y decidimos enviarlo a tres personas para pedirles que lo tradujeran del alemán al castellano: una mexicana que vive en Berlín; una alemana y un austriaco que viven en Guanajuato, todos con diferentes formaciones y contextos. La idea de poner en juego las subjetividades al momento de interpretar y/o traducir, nos animó a realizar otro ejercicio: invitar a seis artistas visuales para que realizaran, vía electrónica, un cadáver exquisito. A cada participante se le envió un fragmento de la imagen realizada por el colaborador anterior con la petición de continuarla para, así lograr, que de los seis trabajos se constituyera uno sólo. Pensamos que unas simples instrucciones bastarían para comunicar con claridad los requisitos necesarios para que el ejercicio funcionara y pudiera imprimirse con las características propias de la publicación (otro nivel del lenguaje: acomodar un formato cualquiera al formato de impresión de la revista). Llegar al resultado final costó –a los miembros de DéDALo y a los participantes en este ejercicio– idas y venidas de correos electrónicos que trataban de subsanar los “errores” del instructivo y los “errores” cometidos por los lectores del mismo; desde un principio habíamos contemplado la posibilidad de que esto ocurriera, así que decidimos asumir los riesgos que las “correctas” o “incorrectas” lecturas pudieran traer consigo. La apuesta fue buena: ganamos en la confirmación de que el lenguaje, por más claro o técnico que pretenda ser, está siempre presto a la vaguedad y a las contingencias del contexto desde el cual cada uno de nosotros decodifica e interpreta cualquier mensaje. Pero, además de esto, ¿por qué hablar de Babel? Precisamente porque es en el lenguaje donde nos movemos y podemos comunicarnos, donde adquiere forma, límites, significado y horizontes, todo lo que sucede en nosotros mismos y a nuestro alrededor. Tenemos necesidad de estructurar
2
al mundo, definirlo y ordenarlo para poder asirlo; esta necesidad deviene en lenguaje y, ya sea hablado, escrito, pictórico, etc., en torno a él existe una convención que nos ayuda a situarnos y comprendernos como individuos, como grupo y como especie. Sin embargo, el lenguaje no es único ni unívoco, a él se han ido añadiendo distintas nomenclaturas y predicados que hacen referencia a un sólo ente o fenómeno, y este ensanchamiento, en muchos de los casos, más que entendimiento implica incomprensión. Dice Aurora Bribiesca sobre el lenguaje, luego de disertar sobre los procesos sociales e individuales que intervienen en él, que éste es “dialéctico (…) babilónico, pues las sociedades como los individuos son distintas, diversas, diferentes y de esa manera marcan al lenguaje: múltiple, heterogéneo, diverso, y a nuestro modo de comprenderlo y comprendernos: diverso, variado, distinto; pero sobre todo marca nuestro hacer en el mundo: múltiple, heterogéneo, diverso, distinto (…)”. Luis Angulo, por su parte, encuentra en esta heterogeneidad la oportunidad de inventar con el otro una realidad distinta (…), a partir del reconocimiento y aceptación de la diferencia. Afirma que es necesario hablar, porque así los cuerpos, los individuos se reinventan, (…) porque es la forma de perpetuar su ficción, su mito. El humano (yo) se inventa a la par del otro (tú) y así, ambos, se hacen existir. De esta manera, cualquier discurso normalizador pierde validez y es posible que los yos, los individuos, emerjan. Siguiendo el tópico de la confusión, Francisco Enríquez reflexiona sobre el cine porno, haciendo girar en torno a éste los conceptos de lo real, lo verosímil y lo verdadero, afirmando que el cine xxx pretende representar la realidad, lo explícito apareciéndose como sinónimo de lo verdadero, y que en él coincide la paradoja de mostrar actos sexuales reales desconectados de lo real. El autor, entonces, cuestiona y desplaza a la realidad –entendida de manera general y no sólo referida a la pornografía–, para situarla entre una serie de capas que la encubren o ficcionalizan. DéDALo, a través de este sucinto recorrido por una parte del contenido de su cuarta edición, hace partícipe a los lectores de algunos de los motivos por las cuales creímos importante intentar –y lograr– un número donde se hablara del lenguaje y sus posibilidades.
Noemí Moreno Jiménez 3
Schreib dich nicht Paul Celan
Schreib dich nicht zwischen die Welten, Komm auf gegen der Bedeutungen Vielfalt, Vertrau der Tr채nenspur und lerne leben.
4
No te escribas Paul Celan Traducción de Andreas Kurz
No te escribas entre los mundos, Levántate contra la diversidad de los significados, Confía en la huella de lágrimas y aprende a vivir.
NOTA Resulta de dificultad extrema la traducción del título en combinación con la primera estrofa. Se trata de un simple problema gramatical que, a pesar de su simplicidad, repercute de manera esencial en mi lectura del poema. “Zwischen” (verso 2) es una preposición que alterna su uso entre dativo y acusativo. Si se usa con dativo, expreso algo estático. P. e.: estar entre los mundos sería “zwischen den Welten sein”. Sin embargo, Celan la uso con acusativo: “zwischen die Welten”. De esta manera expresa un movimiento, un actuar. Sería más adecuado traducir con “no te pongas (con tu verso) entre los mundos”. El verbo escribir, en español, difícilmente implica un traslado (del ser, del yo, etc.). En alemán tampoco. Sin embargo, con el uso del acusativo es posible “forzar” el verbo, lograr que exprese un devenir, un trasladarse. Ahora bien: me resulta imposible usar “no te pongas”, dado que se produciría un choque con el título. Debería igualmente cambiar el título, pero esta es una libertad de traductor de la que rehúso. ¿Callejón sin salida?
5
No te escribas Paul Celan Traducción de Andrea Tomasena No te escribas entre los mundos, Domina la multiplicidad de sentidos, Confía en la huella de las lágrimas, y aprende a vivir.
No te escribas Paul Celan Traducción de Emma Y. No te escribas entre los mundos, Aparece en contra de la variedad de los significados, Confía en la huella de las lágrimas y aprende vivir.
6
7 Via Sense. 1. The Bright Period / Simone Rooster Face
Poema Inerte o Pictórico Eduardo Padilla
Marinado en el acogedor despropósito— salta de la cama tostadora y es servido en el plato de un nuevo día laboral. Ser deglutido sin embargo abarca una larga vida de tentativas, prórrogas, esfuerzos. La digestión de un hombre es exponencialmente más lenta que la de un cerdo. Acaso Saturno devoró a sus hijos no tanto por locura sino por exceso de familiaridad, distracción o inmemorial inercia.
8
Confusión 7
En esta casa que habitamos, dentro de una ciudad que compartimos, en un lugar ya olvidado, nos perdemos de los sonidos perpetuos. Se transforman en rocas que sólo sirven para levantar más el muro. Cada movimiento –aquí dentro– nos transporta al mismo lugar de donde veníamos. Lentas luces de neón. Una tras otra. Sobre el muro y sobre sí mismas. No llegan a ti; no llegan a nadie. Pero afecta la repetición. No es aprendizaje. Ya no queda nada para aprender. En este punto no. Habría que salir de esta habitación, de esta casa, de esta ciudad, de este lugar. Todo está olvidado. Vuelvo a empezar: –No veas la luz. –
9
Repachingarse
1
Anaité Ancira
Una ex-------------ten-------------sión2 del mundo más ex------------ten----------sa3 que el mundo para llegar a la luna y ponerle unos aretes, despintarle los ojos, y darle una cachetada con guante blanco. Una ex-----------ten----------sión4 del mundo más ex------------ten------------sa5 y más aguada que las nalgas de Yoko Ono, para hacerle una canción que sin sonar a los Beatles se llame Strawberry Fields Forever. (circular) que Una ex------------ten-----------sión geométrica6 del mundo, más (larga) para poder darle la vuelta por afuera sin caerse (plop). Una ex-----------ten-------------sión muscular7 del mundo para ponerle los calcetines que pierden su par en cada lavada y que el invierno no lo agarre desprevenido y con las patas frías. Una ex-------ten--------sión semántica 8 del mundo para hablar de ella, como hablamos de querer un poni, o una casa en la playa. Una ex--------ten--------sión cantada9 del mundo para saber qué hay de un lado a otro sin tener que moverse tanto. Una ex ---------ten------------sión de mesa10 en forma de mundo para que quepa todo ahí a la vista de todos11.
Arrellanarse en el asiento y extenderse para mayor comodidad. Despliegue de algo: extensión de un paraguas. 3 Espacioso, grande, interminable. 4 Superficie ocupada por un cuerpo. 5 Que tiene u ocupa mucha extensión. 6 En geometría, la extensión es la propiedad de los cuerpos de ocupar una parte mayor o menor de espacio. 7 Extensor hallucis longus, músculo del pie extensor propio del dedo gordo. También es flexor, abductor y rolador interno del pie. 8 Ampliación del significado de las palabras a otro concepto relativo al originario: esta palabra por extensión significa… 9 En música, la extensión de un instrumento es el intervalo entre el sonido más grave y el más agudo que pueda emitir. 10 Suplemento que se añade a la mesa y que puede guardarse debajo de ella. 11 Las cartas sobre la mesa. 1 2
10
Porque ya se ha intentado hacer una ex -------ten--------sión del mundo de ladrillo y betún12 para alcanzar el cielo y salvarse de quien sabe qué diluvio, pero lo que pasa es que todo en su ex -----------ten---------sión13 son puras ------------------ex -----------------ten----------------siones14 ---------------------------- de la misma-------------------------------------------ext-------------ten------------sión15
12 La torre de Babel: Los hombres en su emigración hacia el oriente, se establecieron en una llanura de Senaar, “edifiquemos una ciudad y una torre cuya cúspide llegue hasta el cielo”, al no disponer de piedra para la construcción, fabricaron ladrillos. Y como tampoco contaban con cal, usaron betún como argamasa. 13 Para Descartes la extensión es la característica de existir en más de una dimensión. 14 En la filosofía Aristotélico-Tomista, extensión es el atributo principal de la sustancia material, por razón de la cual la materia es divisible en partes. Para Locke extensión es solamente el espacio que miente entre las extremidades de las partes coherentes sólidas de un cuerpo. Para Spinoza la sustancia (que tiene extensión) se puede limitar solamente por la sustancia de la misma clase, o sea no se puede limitar, es infinita. 15 Cada una de las líneas telefónicas que se sacan de una central y que dependen de una misma centralita.
11
Azul / Ana Karen G. Barajas
ENTRE EL DILUVIO Y LA DESTRUCCIÓN DE SODOMA Luis Alfonso Angulo Segura
Babel fue la torre de los confundidos en las tierras de la confusión (Babilonia) –interpretación abierta para quienes difieran del criterio de la exégesis–. La torre ya no está en su sitio, pero puede accederse a su biblioteca a través de un libro. Sirva de advertencia que ésta es fiel némesis de la otra, donde nadie, por supuesto, puede entenderse. Y no es que alguien lo busque; los viajeros están esforzados más bien en un éxodo individual a manera de redención wagneriana por medio de su amor a los libros. Como supuestos hegelianos, no pretenden edificación alguna. La historia de la torre de Babel se cuenta en un libro contenido en una biblioteca dentro de otro libro en algún sitio cualquiera –por aquello de Borges–. Si se acepta su ficción, es la metáfora antigua de este tiempo –o será que el tiempo es una espiral que incluye ciclos–; de ser cierta, perduran sus escombros por la tierra, sobre los que se erigieron las nuevas ciudades, todas ellas teniendo por origen la confusión misma. Hubieron otras lenguas que edificaron nuevos mundos que luego se unieron para hacer otro aún mayor que se extendía hasta las estrellas, pero estas edificaciones no eran materiales sino intelectuales (lo que Marx llamaría superestructura) y no podían ser destruidas como el ladrillo, a menos que alguien somatizara la confusión a modo de mirada perdida. Estas eran lenguas-semilla y tuvieron ramas, lenguas derivadas; algunas en forma de puente invisible, como jardines colgantes. De cualquier forma, hecho o ficción, la confusión floreció.
13
Aunque el relato de Babel y su torre sea reducido a la confusión de las lenguas, conlleva también la utopía de un pueblo antiguo donde todos podían comunicarse entre sí, “era entonces toda la tierra de una lengua y unas mismas palabras […] y cualquier cosa que se propusieran podrían lograr”, castigado por la voz divina, que pudiera entenderse como la naturaleza misma; y por consiguiente a declarar a todo lo que le prosiga, como distopía de un mundo donde es imposible el entendimiento del otro. Como contraste entre el pueblo del relato y las ciudades modernas, habían en la antigüedad menos palabras, menos que decir, un léxico común que permitía una recepción más pura del mensaje y evitaba confusiones o malinterpretaciones, pues las palabras tenían un sólo significado, estaban cargadas de contenido. De forma simultánea, el lenguaje fue aumentando y con ello que decir, así mismo la necesidad de decir o nombrar más situaciones o cosas aún indecibles (lo inefable está codificado en un habla fantasmal, existe mediante diversas palabras paralelas que fungen como explicación hasta que alguien le encuentra un nombre; otras veces hay nombres aguardando por un cuerpo o fenómeno sobre el cual adherirse y existir), exigió el engrose de palabras hasta llegar a la decadencia tan presta para la verborragia pero en ocasiones tan disfuncional, donde las cosas tienen varios nombres y las palabras pueden significar tantas cosas o nada, volviendo necesario explicar el significado de cada palabra que parezca sinuosa. La lengua se descubrió hueca. Surgió la ambigüedad, la oquedad de conceptos y vacuidad en la palabra, y con ello la necesidad de metacomunicar, haciendo de la interacción algo desgastante y tortuoso para quienes sólo conocían algunos nombres y manoteaban cuando la lengua balbuceaba y el lenguaje conocía sus límites. Eso ocurrió dentro de la misma lengua, pero hacia afuera las lenguas se multiplicaron. Quienes hablaban, aprendieron a traducir y parecía que era más sencillo que interpretar. Traducir requiere interpretar y la interpretación también implica una traducción, sólo que en el primer caso se traduce e interpreta de una lengua común a otra lengua común (llámense idiomas), y en el segundo se traduce desde la lengua particular del otro a la lengua particular del “yo”. En la traducción, el énfasis recae en que es algo dicho en lengua extranjera; en la interpretación, reside en que se decodifica al otro. Cuando se interpreta al otro en la misma lengua, se traduce, paradójicamente, a otra lengua más compleja y profunda, pues sus referentes y significados no son visibles y pueden no estar anclados al significado del lenguaje que se supone compartido. La subjetividad altera, irremediablemente, el mensaje. Al plantear la subjetividad como fallo en el intento de comunicarse, al ser causal de otras interpretaciones que abren lenguas dentro de la misma lengua –sin mencionar las lenguas especializadas, las ciencias imprecisas, la lógica, el pensamiento mágico, el pensamiento crítico, la poesía, la ética–, aparece evocado un concepto presente en los estudios de nuestros días y que ha generado discursos y movimientos: la diferencia. Es la misma diferencia, hecho tajante, lo que suscita la necesidad de comunicar, de hablar, de decir algo a todo aquel que no soy yo. Si nos entendiéramos, progresivamente dejaríamos de hablar, ya no habría qué decir.
14
El yo brota a partir de la diferencia, practica la comunión de la diferencia que es la comunión misma. Así lo sentencia la premisa freudiana, “el yo se construye a partir de su diferenciación con el otro”. La otredad está edificada a partir de lo opuesto y así mismo nos construye no siendo nosotros. Sólo a través del reconocimiento del no-yo, de lo que no se es, el yo se erige. Un yo entendido no como el referente egoísta dibujado por las creencias orientales, sino como manifestación primaria de que se existe. Existo. Yo existo. La existencia se presenta en sus múltiples individualidades, en cada yo, en cada individuo. No puede hablarse de identidad sin esta mecánica. La identidad parte, sí, de definir gustos y rasgos propios del individuo pero que sólo existen al ser reflejo y tener un referente en el otro. Identidad es identificarse con el otro. El reconocimiento de la diferencia como origen del yo implica una postura contraria a los discursos de igualdad o que incluyan prácticas de discriminación. Todos somos diferentes, no podemos –o no queremos– ser iguales. La igualdad anula la diferencia, a menos que se desee dar un giro interpretativo o explicativo y plantear que todo yo es simultáneamente otro para otro yo, lo cual es un juego de palabras y no una condición de igualdad. La importancia de señalar el reconocimiento de la diferencia como opuesto a las premisas de igualdad, es negar cualquier pretensión de establecer un discurso naturalizador o normalizador que someta a los individuos a un lenguaje oficial, así como a una visión del mundo y a una determinada idea del yo (religión, ciencia). Esto aplica a las ideas de ética presentes en ficciones como el sexo y el género, donde el lenguaje atraviesa el cuerpo volviéndolo sexuado, estableciendo normas de cómo debe vivirse y ejercerse la masculinidad o la feminidad, excluyendo a la periferia de la anormalidad cualquier forma de existencia contraria. Lo anterior, se interrelaciona también con los discursos que manejan la diferencia como pauta para establecer jerarquías donde “algunos otros” son subyugados o menospreciados (racismo, sexismo). Todos somos diferentes, entonces no hay forma de categorizar y clasificar a los seres humanos para hablar de superioridad o inferioridad. El problema de la diferencia reside en cómo se le ha interpretado y teorizado; se ha puesto atención en el accidente (rasgos de la corporalidad) y no en las formas de ser de los individuos (el cuerpo siendo). Si el acto performativo (concepto presente en el feminismo posmoderno y desarrollado por Judith Butler) puede
15
alterar realidades, es preferible usarlo para establecer nuevos espacios para el ejercicio de la diferencia, en vez de ensañarse en ahondar sobre la diferencia como desvinculación y enemistad. En esta praxis, la palabra se revela en su forma primaria, como conjuro que hace aparecer lo que dice, donde el que habla ve lo que dice ver. En el acto performativo la palabra es palabra-acto, la palabra sucede. Los discursos normalizadores antes mencionados, se insertan en prácticas de biopolítica y biopoder así como en rituales sociales donde, retomando a Wittgenstein, lo bueno y lo correcto sólo pueden ser en relación a una expectativa o un estándar predeterminado, de tal modo que no pueden formularse juicios éticos o absolutos, sólo triviales o relativos. No es posible escribir ética u otro discurso absoluto que refuerce los estereotipos y exigen al “yo” ser de una forma específica. Sostiene Slavoj Zizek, en El sublime objeto de la ideología, que “el sujeto nunca está en posición de elegir: siempre es tratado como si ya hubiera decidido”. El sujeto tiene libertad de elegir pero a condición de que elija lo correcto, si opta por lo incorrecto pierde su libertad de decidir. Los espacios que han de ser ganados para el ejercicio de la diferencia son los espacios públicos –entendiéndose privado como la casa, y público como la calle o cualquier otro espacio colectivo con sus propias normas, en su mayoría restrictivas–, donde los yo se reúnen y son. Los cuerpos han de hablar para crear, verbalizar lo pensado, que a modo de acto performativo construyan espacios para la diferencia, erigidos precisamente en el espacio público afín a la normalización. Esto, creyendo en la posibilidad de las otras formas, queriendo que sean ciertas. La consigna es inventar con el otro una realidad distinta con su propia lógica inclusiva, donde la diferencia no sea entendida como marca, donde igualdad no signifique mimetización obligada, donde no exista el término discapacidad que incapacita y mutila la realidad de los cuerpos ajenos al propio, discordantes del parámetro de lo común. La idea es vivir en un mundo que aún no es, formándolo a partir de lo que decimos y pensamos, virando el enfoque, usando las ideas como medio para materializar su significado, palabras que hacen cuerpo (para Lacan el lenguaje es cuerpo que da cuerpo). Esta dinámica inicia con cada individuo y se propaga por la colectividad (en palabras de Foucault vendría siendo el cuidado de uno mismo y de los demás) transformando las relaciones entre los yo, entre los cuerpos. Pueden procurarse también espacios vacíos donde los cuerpos no sean tratados como ciudadanos, y por ende, donde las regulaciones del Estado no procedan, no controlen, no detengan la diferencia. Dice el teólogo brasileño Rubem Alves: “Comprendí, que todas la luchas que se hacen tiene la única finalidad de hacer que el cuerpo sea feliz […] Si nosotros hacemos la revolución, la única finalidad de la revolución es permitir que los cuerpos no tengan dolor, que los cuerpos no tengan miedo, que puedan dormir en paz, que puedan trabajar en paz, que puedan crear el amor, que puedan tener sus hijos”. Hablar es dar existencia a lo que se dice o se nombra. Si se toma en cuenta la cosmovisión a la que pertenece el relato de Babel, podrá recordarse que fue a través del logos, de la palabra, que se crearon el mundo y las cosas. Del mismo modo el humano se inventa e inventa a los otros, pues el sujeto es siempre constructo social sobre un cuerpo que aún no tiene consciencia. La consciencia es un algo que se inserta o deviene en un cuerpo y lo reclama
16
como suyo, ejerciendo propiedad sobre aquello de lo que afirma ser vocero. La consciencia puede ser entendida como fallo, porque el lenguaje falla y con él se construye el individuo y el mundo del sujeto, o como resultado evolutivo de la complejidad desarrollada por un organismo que llega a tener noción de sí. Todo esto, esta realidad, está articulada por medio del lenguaje presente en la cultura determinada donde el cuerpo se construye individuo. Por eso mismo es necesario hablar, porque así los cuerpos, los individuos se reinventan, refuerzan su idea de que existen. Existe la necesidad de hablar porque es la forma de perpetuar su ficción, su mito. El humano (yo) se inventa a la par del otro (tú) y así, ambos, se hacen existir. Esto a tenor de Babel, a tenor de la diferencia. Pareciera que esto ya nada tiene que ver con la torre inconclusa y derruida, pero como en Babel nadie se entiende, digamos que sí. Babel es el pretexto. Entiéndase como se entienda.
17
Leticia18 Ochoa Castillo
LABERINTO DE LABERINTOS: EL LENGUAJE Aurora G. Bribiesca Acevedo
La comunicación humana está relacionada con la puesta en común. Lo que se comunica se comparte con el otro y en este compartir subyace el entendimiento y la comprensión mutua entre los hablantes de la misma lengua, de tal manera que la comunicación representa la antítesis de Babel, pues si bien desde las lenguas el destino del hombre es la confusión, en la comunicación creamos el ideal de la comprensión mutua, la confluencia de perspectivas, de visiones de mundo. Así, en las lenguas fluctuamos entre dos extremos: la diversidad de lo individual y la identidad de lo social. ¿Y qué hay en el inter? El uso, la práctica, la pragmática… Si únicamente nos comunicáramos mediante las lenguas seguramente tendríamos una realidad menos diversa, sin embargo nuestra capacidad para comunicarnos va más allá de hablar (o escribir, cuando la lengua es también escrita), es decir que además del habla, al comunicar tenemos una multiplicidad de formas que trae consigo una abrumante pluralidad de maneras de significar: la multimodalidad del lenguaje. Como la lengua no nos es suficiente, entonces complementamos nuestras expresiones con otros lenguajes y toda una serie de representaciones simbólicas que, aunada actualmente al avance tecnológico, pareciera interminable e inevitable. Además, explotadas a su máxima expresión esas representaciones son consideradas arte.
19
La multimodalidad del lenguaje humano la podemos ver en cualquiera de nuestras expresiones, pues además de signos sonoros o gráficos utilizamos movimientos, gestos, figuras, imágenes, actitudes, moda, comida, disposiciones espaciales, distribuciones temporales y un larguísimo etcétera, y lo más interesante es que somos excelentes lectores de toda esa diversidad semiótica: leemos cada signo con la intención de entenderlo y comprenderlo de acuerdo a cada situación comunicativa en que se presenta y, asombrosamente, cada signo queda en nuestra memoria para seguir siendo utilizado en posteriores comunicaciones con el mismo significado y/o con el potencial para otorgarle cualquier sentido que a su vez influya en la evolución del significado. Porque los lenguajes también participan del tiempo a causa de ser utilizados, es en el uso donde se encuentra la capacidad para desarrollar, cambiar, evolucionar o dejar de significar de todo lenguaje. El lenguaje es donde los individuos nos reconocemos como parte de un grupo al identificarnos con las maneras de ser y hacer del mismo. Entre la identidad del grupo y la identidad de cada uno de los individuos que lo conforman existe una relación de correspondencia, pues simultáneamente al pertenecer al grupo adquirimos el papel que jugamos en él, establecemos las relaciones de poder y solidaridad entre los miembros. Desde la pragmática valoramos que el pertenecer a un grupo nos otorgue identidad a quienes lo conformamos, esa pertenencia obedece claramente las reglas del sistema semiótico, ya no solamente lingüístico, usado en contextos específicos. Los individuos sabemos comportarnos de acuerdo a los usos sociales que hacemos del lenguaje y elaboramos significados mediante determinadas configuraciones textuales con un fin comunicativo específico. Todo acto comunicativo es una contextualización de lo que expresamos. Lo que decimos significa en signos y en acciones socialmente aprendidas. Como hemos asimilado en el lenguaje la forma de ser y participar en la sociedad, somos en el lenguaje. Esa forma de ser y participar señala los prototipos de significado, nos modela la mentalidad y norma nuestra acciones, nuestra comunicación está constreñida por sus reglas creadas e impuestas socialmente. El lenguaje es significativo porque se produce en y por la sociedad, consiste en una multiplicidad de sistemas de representación acerca del acontecer en el mundo desde el punto de vista de los individuos que se comunican. En la comunicación usamos todos los recursos semióticos que reconocemos en el momento y que integran una serie de significantes elaborados en eventos comunicativos pasados y presentes; además han servido, sirven y potencialmente nos servirán para usarlos adecuadamente a nuestros intereses y necesidades comunicativas. Este potencial uso de recursos coincide con la idea de que los significados no son controlados ni establecidos totalmente por los individuos, por lo cual los recursos siempre son incompletos y se adecuan a propósitos específicos puesto que las formas de comunicación son susceptibles a los cambios sociales y culturales.
20
Desde el lenguaje lo social moldea lo individual y viceversa Si bien el lenguaje, diverso y múltiple, es aprendido socialmente, lo cierto es que los actos comunicativos se dan entre individuos, en una relación intersubjetiva; los hablantes asignamos sentido al discurso cuando lo comprendemos e interpretamos, al hacer relevante la coherencia del texto que constituye el primer elemento de nuestra percepción en los intercambios comunicativos: lo dicho tiene un sentido específico; en segunda instancia establecemos ese sentido particular en el contexto que permite crearlo: conocimiento y reconocimiento de los signos que lo conforman, situación particular de enunciación, participantes en el evento comunicativo, intencionalidad, etc. La cognición humana juega un papel determinante en la producción y comprensión del contexto, del texto y de los eventos o acciones discursivas. Los procesos y representaciones mentales caracterizan a los individuos e implican especialmente una cognición sociocultural. Toda comunicación se genera en la intención de un individuo por expresar lo que quiere decir; inicia en la creación y la producción de lo que expresa no sólo el contenido de lo comunicado (texto), sino además el conocimiento de su entorno socio-cultural, en el que la experiencia corpórea –física y social– da lugar al pensamiento (contexto). La comprensión del discurso es lograda en tanto nuestras estructuras conceptuales son análogas y conmensurables con las de nuestros interlocutores, por ello el lenguaje es un vehículo de comunicación y no una distinción de idiolectos (hablas individuales). La forma de conceptualizar la realidad que nombramos determina la estructura de la expresión y la manera en que la significamos. Los procesos mentales humanos son procesos dinámicos de construcción de sentido; dependen del contexto al relacionar elementos del texto, del saber y las creencias de los usuarios del lenguaje; no son sistemáticos necesariamente, pues como dependen del contexto pueden dar lugar a errores, a que la información quede incompleta, a que haya todo tipo de ruido, desde físico hasta de entendimiento y
21
comprensión de lo dicho. Los procesos mentales pueden funcionar simultáneamente a diferentes niveles y se espera que operen rápida y eficazmente en la realización de nuestros propósitos comunicativos. Todo acto comunicativo posee una carga significativa donde se dispone primordialmente de la comprensión del discurso mediante representaciones cognitivas de nuestra experiencia (modelos mentales) y la activación de la memoria. Nuestros modelos mentales son manifestados en expresiones donde damos a conocer nuestra comprensión del contexto discursivo. El conocimiento del contexto implica saber a quién nos dirigimos –que determina incluso el estilo del habla–, en dónde y cuándo nos expresamos –reconocemos la situación–, cómo debemos expresar, cuándo pausar y dejar que el otro hable, qué forma discursiva se adecúa más a la situación, si podemos apoyarnos en otros lenguajes, cómo desenvolvernos en lo paralingüístico –movimientos, gestos, posturas, vestimenta, distancia…–, etc. La relación intersubjetiva dada en todo acto comunicativo impone a los individuos procesamientos mentales que determinan su actuación cognitiva, lingüística y pragmáticamente hablando. Así, instaurados en la comunicación, fluctuamos entre las diversas formas del lenguaje aprendidas socialmente y las formas particulares marcadas subjetivamente por los individuos participantes en actos comunicativos específicos. Babel, Babylon, Babilonia Si Babel refiere a la diversidad de lenguas que da lugar a la confusión, entonces habría que pensar en el total desconcierto que despliega la multimodalidad del lenguaje en el mundo actual. Todo discurso se mueve en el continuo entre objetividad y subjetividad: la primera entendida como la adaptación a la convencionalidad del lenguaje (denotación, significación: semántica; texto), la segunda como el manejo particular del lenguaje en la perspectiva de quienes realizan los actos comunicativos de acuerdo a esa convencionalidad (individualidad, connotación, sentido: pragmática; contexto). Ese continuum muestra la intersubjetividad subyacente en toda actividad semiótica que se realiza en la dialéctica entre la convencionalidad social y la creatividad individual. Es en ese sentido dialéctico que el lenguaje es babilónico, pues las sociedades como los individuos son distintas, diversas, diferentes y de esa manera marcan al lenguaje: múltiple, heterogéneo, diverso, y a nuestro modo de comprenderlo y comprendernos: diverso, variado, distinto; pero sobre todo marca nuestro hacer en el mundo: múltiple, heterogéneo, diverso, distinto, y a veces enigmático. Así es que Babel queda asociado a la confusión creada por la diversidad del lenguaje, a la condena de los hombres al no entendimiento, a la no comprensión; simboliza la no confluencia de perspectivas, puntos de vista, modos de entender, etc., de los hombres en el
22
mundo, en una palabra: la diversidad de pensamiento y por lo tanto de costumbres, acciones, culturas, etc., de la individualidad. Ya he formulado que el ser individual está dialécticamente asociado al ser social, por lo tanto, por más individualidad que pretendamos en nuestra expresión (cuya representación extrema es la expresión artística del lenguaje) ésta siempre quedará íntimamente ligada a las formas de representación social, que a su vez pretenden identificar a un grupo particular de individuos que está ligado a otra forma de representación social, que a su vez repite los laberintos entre lo individual y lo social en el infinito que impone esa dialéctica. Ahora, si añadimos a la diversidad de formas del lenguaje la multiplicidad de medios que la tecnología nos permite tener a la mano actualmente, y sobre cuyo pretendido acceso de la mayoría de la población cimentamos la existencia de una sociedad mundial, quizá podamos vislumbrar la actual soberbia de los seres humanos (poderosos) para crear la nueva torre de Babel, cimentada sobre la idea de una sociedad global cuyos intereses semejantes permiten crear formas globales de información, de comunicación, de comprensión, de entendimiento, de acción del y en el mundo sin tomar en cuenta toda la diversidad de lenguas, acciones, terrenos, climas, costumbres, conocimiento, entendimiento y comprensión del mundo, en una palabra: la individualidad, que curiosamente es al extremo de la misma (el aislamiento) al que los avances tecnológicos nos llevan, pues vivimos y convivimos mejor a través de los medios electrónicos que permiten la virtual comunicación en línea antes que a través de la comunicación directa con nuestros congéneres de al lado. Nuestra Babel se cimenta sobre la diversidad de los múltiples lenguajes que debemos saber leer simultáneamente, estamos invadidos de información a través de todos los medios de expresión: habla, escritura, carteles publicitarios, música a todo volumen, gráficos, imágenes estáticas y en movimiento, colores, olores, comandos computacionales, comida, moda, costumbres, cultura, arte, etc.; invadidos en nuestros (cinco) sentidos con una inmediatez enorme que nos impone actuar mas ya no nos permite pensar, reflexionar. De ahí que la educación ahora sea para hacer sin más; saber hacer o saber por qué saber ya no tiene sentido, lo único significativo es hacer por hacer y entre más rápido, mejor. Nunca antes el tiempo se ha cotizado tan alto. Así, nuestra Babel actual se aviene de una complejidad enorme y por lo tanto deviene en un caos mayormente complejo: nuestra Babel antes que una torre es un laberinto. Laberinto de percepción de formas, de significados, de sentidos, de intenciones, de símbolos (¿de actos simbólicos?). Laberinto de laberintos. Laberinto babilónico donde debemos buscar los caminos para el entendimiento, primero, de todo el potencial semántico de nuestras acciones expresado en la multimodalidad del lenguaje y, después, para la comprensión que nos permita la comunicación, quizá con uno mismo en el principio y posteriormente, y si hay tiempo, con el otro.
23
24universo es inmenso e infinito, la Torre de Babel es s贸lo una construcci贸n / Juliovzm El
EL EFECTO REALIDAD Francisco Enríquez Muñoz
Al momento post coitum
¿Qué diferencia hay entre el coito representado por un pintor y el orquestado a seis manos por un cineasta y dos actores? Medio de ánimo altamente representativo, el cine siempre ha sido visto, por críticos y censores al unísono, a través de un lente con más dioptrías morales que sus contrapartes en pintura, escultura y danza. Una orgía delineada por ínfimos trazos es representación de divinidad hinduista; un espectáculo como el Cirque du Soleil es arte light para la masa adinerada e incauta; Rodin y sus mil muslos de mujer son pieza de museo; pero el filme que contenga el close up de una vulva moviéndose sin recato sobre un alebrestado pene, succionándolo hacia dentro y expulsándolo luego parcialmente, no. Porque ahí el coito no se disimula, se exhibe, como desde hace décadas lo hacen el llanto, la muerte y la alegría, en toda su desnuda carnalidad. ¿Cuál es entonces la diferencia? La Realidad. La Imaginación ha muerto, y la Realidad (sea lo que sea) se ha coronado nueva reina del mundo, ocupando el trono que no hace mucho le pertenecía a aquella. La Historia se había escrito hasta ahora con el lenguaje de los mitos, entreverada de fantasía, de invención y de magia. Esto es, la Historia venía a ser puro relato, mera literatura o, en el mejor de los casos, leyenda. Pero el final del siglo XX exhaló las últimas provisiones de imaginación que nos quedaban tras dos Guerras Mundiales, una Guerra Fría y
25
un nuevo mapa del orbe. Ya no tenemos ni una gota de ficción con la cual aliñar nuestro doloroso camino como especie. A partir de aquí, la Historia se contará con apabullante sencillez y cercanía, con la veracidad de un video casero. Digamos adiós a los viejos archivos y legajos. La Realidad es plana vista a través de una pequeña pantalla. Todo tiende a teñirse de Realidad cada vez más deprisa. Pareciera una eternidad desde que series como Los guardianes de la bahía y Beverly Hills 90210 aparecieran en horario estelar. Ahora, en estos tiempos ya no tan inocentes, no es raro encontrarte en la pantalla chica desnudos totales y encuentros coitales en los que se muestra todo. Los reality porn (difundidos ampliamente en Internet desde hace años), donde profesionales del metesaca conviven con gente “común” en un ambiente controlado, tienen como objetivo comprobar si los aspirantes poseen la madera para ser parte del imperio de los gemidos. El ensayo y la biografía están cada vez más en boga. Las películas de ficción parecen documentales reales. ¿Hay algo más descaradamente real que el detrito, que una simple caquita envasada?, ya lo hizo en 1961 el artista Piero Manzoni poniendo a la venta noventa cajitas con dicho contenido y la denominación Merda d’artista. En 1991, el fotógrafo Jam Montoya elaboró la Serie negra, un conjunto de imágenes en blanco y negro que nos recuerdan, de forma real y sin contemplaciones, que las mujeres hermosas también hacen caca (véase Defecación suspendida y Defecación convencional). Hemos llegado al actual estado del arte en el cual ya no se busca Belleza sino Realidad, pero en teoría, según los preceptos de los iluminados con vocación censora, el arte consiste en la producción de algo (escultura, cuadro,
26
libro, melodía, fotografía, película) cuyo objetivo final sea la Belleza. En la porno setentera se mostraban personas con vello y con cuerpos no-ideales en actos sexuales que no estaban fuera de la Realidad (felaciones, cunnilingus, sesentaynueves, penetraciones vaginales o/y anales en las tres posiciones básicas: mujer arriba, misionero y de a perrito). Ahora, una producción de exuberantes muñecas y musculosos gigantes haciendo tríos a bordo de un lujoso yate, no es competencia para un video de celular donde una muchacha flaca y un muchacho gordo fornican alegremente en la azotea de una lumpemproletaria casa, porque el segundo caso es real y mirar cuerpos desnudos no-ideales es también un ideal, como quien adquiere las grabaciones de conocidos moteles de su ciudad para observar los actos sexuales de su prójimo y de sí mismo. Esto ha dado pie a que jóvenes comunes y corrientes, cuya edad promedio se ubica entre los dieciocho y los veinte años y cuya experiencia sexual es baja o nula, realicen y graben videos triple equis. Estos videos se llaman Olya, en honor a la primera Lolita rusa que interpretó y “subió” a Internet material de este tipo. La tierna inexperiencia de esos polluelos dista mucho de las rudezas y acrobacias que se desprenden de las producciones de metesaca hardcore a las que los fans estamos acostumbrados, pero al fin y al cabo esa inexperiencia parece real, a veces demasiado real, y eso es, precisamente, un ideal, una fantasía. Y combinar hechos reales con hechos ficticios crea el engaño más poderoso, el Efecto Realidad. A principios de los 80, Annie Sprinkle fue tutelada por una actriz porno más experta, quien la llevó a su casa y la colocó frente a
un espejo para que aprendiera un dato clave: cómo hacer mamadas de forma fotogénica y clara. Lo que Annie aprendió en esas sesiones fue mejorar la ilusión de lo que entonces se entendía por un acto sexual real. Hoy, sus calistenias triple equis lucen artificiales porque lo que ha cambiado no es la naturaleza del acto, sino la forma en que esperamos se retrate en la pantalla. Hoy se cotizan en alza las experiencias auténticas, únicas, verdaderas, que no sean una puesta en escena. Se busca la Realidad (o algo que se le parezca). La Navidad es algo que ha abandonado la Realidad y ha pasado a pertenecer al territorio de la ficción, es decir, al del fingimiento. La Navidad es una prueba fehaciente del increíble poder persuasivo de las obras de ficción que hoy en día impregnan y contaminan el mundo hasta un extremo difícil de calibrar. En el siglo XIX, quien quería alternar su vida real con unas dosis de vida ficticia, no tenía más remedio que acudir a los libros y a los folletines; y quien, por el contrario, abominara de lo imaginario, podía pasar sin dificultades su existencia entera sin cruzar nunca el umbral que separaba con bastante nitidez lo vivido de lo inventado, lo experimentado en la propia carne de lo solamente fantaseado, ensoñado o contado. En nuestra época, en cambio, esto último es casi imposible y lo primero (la alternancia) se hace arduo: vivimos en un mundo tan saturado de ficciones que nadie puede sustraerse de ellas o a la huella que dejan, cada vez más marcada, en el espíritu y el carácter de los contemporáneos. La ficción, antiguamente, se alimentaba en buena medida de la Realidad a la que tenía como referencia, excepto en aquellas obras que eran clara y deliberadamente fantásticas. Hoy sucede al revés: no es sólo que la Realidad imite al arte, como dijo Oscar Wilde en primer lugar y luego han repetido tantos, sino que el arte condiciona y domina nuestra Realidad, como prueba a menudo el cine. Por ello, rara es hoy la situación en que alguien puede encontrarse a lo largo de su vida, raros son los sentimientos o las dudas o las obsesiones o los odios o las pasiones o los orgasmos que pueda experimentar (rara es la vivencia), que no hayan sido tocados o usurpados por alguna ficción, a la cual ese alguien se verá remitido inmediatamente o, por decirlo de manera más cruda, por segunda vez. A veces la Realidad aplastante se empeña en presentarse disfrazada de ficción, y de calibre grueso. Ya nos costó mucho asumir que aquellos aviones que chocaron contra las Torres Gemelas eran reales y no fabricadas imágenes de una película, y que el subsiguiente desplome costaba en verdad la vida a personas que no eran extras ni creaciones de computadora. Ni una verdadera torre medieval ni un verdadero castillo renacentista se apegan tan bien a la idea de castillo como la asombrosa morada, instalada en Disneyworld, de la Bella Durmiente del Bosque. En otras palabras, la Realidad
27
es decepcionante al grado que nos vemos obligados a revalorarla por medio de una puesta en escena que la vuelve más atractiva. ¿Quién no se ha encerrado en casa para ver películas, para refugiarse en la verdadera ficción y huir de esa otra ficción bastarda a la que aún llamamos Realidad? Aunque la Realidad sea mucho más libre y menos exigente que la ficción, aunque en ella quepa todo y no esté sujeta al concepto de “verosimilitud” (lo que sucede no es susceptible de ser o no creído: sucede y basta), aunque se den en la vida circunstancias e historias que no admitiríamos en la ficción por un exceso de coincidencias o porque resultarían demasiado forzadas y traídas de las greñas para darles crédito, lo real también depende un poco de su apariencia, o en alguna medida se rige por cierta convención estética, en el amplio y elevado sentido de este adjetivo. ¿Cómo es posible que Osama Bin Laden haya aparecido en un largo y soporífero video que parecía sacado de una aventura de James Bond? Que irrumpa en la pantalla de la tele un tipo con barba larga, turbante y estudiado aspecto de iluminado cruel y místico, anunciando la destrucción de Occidente y de los “infieles”, causa el Efecto Realidad. Más aun cuando se suponía que el sujeto andaba por ahí escondido en unas cuevas, acosado por los ejércitos y los servicios secretos del globo entero, y sin embargo lucía unas ropas blanquísimas y planchadísimas que hasta en tiempos de paz y en un palacio habría sido difícil tener así de radiantes y estiradas. La realidad más dura se sobrelleva mejor cuando al menos se empeña en parecer ficticia. Los condones previamente usados y luego arrojados a espacios destinados a un coito (o sea, arrojados a cualquier parte), se convierten en las huellas de algo invisible pero explícitamente señalado por los signos que lo atraviesan. Del money shot al latex shot, del cuerpo sexualmente explícito a la sustitución de la corporalidad por sus rastros. He aquí la Realidad, donde los vestigios de una furtiva actividad sexual (manchas, condones, pañuelos desechables) conforman imágenes más cercanas a la mirada forense que a la pornográfica, evidencias de un momento pasado pero, al mismo tiempo, ominosamente presente. “Lo obsceno es el fin de toda escena”, afirmó Baudrillard. La escena está fundada en la distancia; la obscenidad implica una dilatación de la visibilidad que anula cualquier distancia. Por otra parte, la escena funciona a través de la ilusión, juega seductoramente con las apariencias. En cambio, lo obsceno está encaprichado con lo real, con lo verosímil, con las evidencias. La obscenidad es, según Baudrillard, “proximidad absoluta de la cosa vista”. En la imagen pornográfica encontramos un correlato de este régimen de visibilidad ampliada, con su zoom in, su medical shot, su meat shot, su extreme close up. La pornografía es obscena por su inmediatez, por su literalidad, esa manía por representar
28
la Realidad, reflejar de manera trasparente la Verdad bajo la égida de lo explícito como sinónimo de lo verdadero. La Realidad ocurre y no nos tiene que persuadir, sencillamente se nos impone. Una de las tareas más difíciles de la ficción es lograr la verosimilitud. Lo verosímil es lo que tiene apariencia de verdad, no la verdad misma. Es más, a menudo la verdad resulta inverosímil si la extirpamos de su territorio y la insertamos tal cual en una obra de ficción. Lo fascinante en la porno contemporánea no es el placer sexual, sino lo verosímil, el exceso de Realidad, la Hiperrealidad del asunto. El Efecto Realidad del cine triple equis reside en su Hiperrealidad y en su capacidad simultánea de falsificar la Realidad, porque el cine triple equis representa en la pantalla un imposible pero que realmente sucedió en el lugar donde fue grabado. Las imágenes triple equis tratan de ser más reales que lo real, mostrando no sólo cómo funcionan los genitales sino también, y sobre todo, cómo es el Efecto Realidad. El Efecto Realidad tiene el objetivo de mostrar una ficción tal y como se cree que podría ser, o suceder, en la Realidad. Ya sea con webcams o con cámaras digitales, el cine y la fotografía de nuestros días buscan lograr el Efecto Realidad, es decir, la escena que parezca vista a través de los ojos de una persona común y corriente; la escena movida, descuadrada, sin buena iluminación, fea, tan parecida a la Realidad Real, la de todos los días, la de tu calle, la de tu casa, la de tu coche, la de tu trabajo, como sea posible. El Efecto Realidad consiste en añadir lo verosímil a lo real, a fin de elaborar la ilusión perfecta. Todos tenemos la noción de que hay una sola Realidad que determina y limita a todo lo que se encuentra en ella; pero tan inmersos estamos en lo que llamamos vida real como en lo que denominamos ficción. De esta manera, vivimos en ese espacio en el que distribuimos las representaciones de la Realidad en la ficción y viceversa. Lo real, paradójicamente, conlleva un elemento ficticio, irreal. La irrealidad de lo real puede ser cotejada con la realidad de lo irreal. Del Efecto Realidad procede la idea de lo verosímil y con ello la seducción, la inmersión en irrealidades, el engaño, la mentira, lo que no es real, es decir, el cine, la literatura, la pornografía, el sueño. Peter Lindbergh, un fotógrafo estadounidense, creó a inicios del 2009 una serie de retratos donde sus modelos, varias mujeres famosas entre las que destacaba Monica Bellucci, posaron sin maquillaje y sin retoques. La Realidad es un efecto: uno que hechiza, ya que parece ofrecer una verdad que nos desobliga de responsabilidades, un punto de referencia total desde el cual se puede catalogar lo que sea con certeza absoluta. El Efecto Realidad, un efecto parecido al creado por Orson Wells en su Guerra de los mundos, es justo lo que en 1999 con el estreno de El proyecto de la bruja de Blair (Eduar-
29
do Sánchez), dio origen a un escalofriante género cinematográfico: el falso documental de terror. Este falso documental se presenta ante el público como si fuera un documental totalmente real pero, a pesar de su filtro amateur y de que hace suya la frase “lo que no ves es mucho más aterrador que lo que ves” que alguna vez dijo Alfred Hitchcock, es una obra de ficción, una ficción tramposa que ha encontrado en lo sobrenatural un terreno abonado para sembrar la duda sobre lo que es y lo que no es real. Esa duda, llevada a niveles superlativos en películas como Actividad paranormal (Oren Peli, 2007), produce un estado de desasosiego en el espectador, un estado provocado por un sádico juego de espejos falsos donde lo único que se refleja es un hecho escalofriante que grita “¡Soy real, soy real!”. La Imaginación ha sido definitivamente derrotada por la Realidad. Hoy en el cine de terror hay una influencia no sólo de extraterrestres, zombis, Leatherface, Michael Audrey Myers, Jason Voorhees y Frederick Charles Krueger, de lo sobrenatural como esencia de lo cotidiano y la amenaza como forma de vida, sino también del cine porno.
aunque se le añadan unos breves e irrelevantes insertos de ficción narrativa. Una lubricación o una eyaculación no son actos de interpretación dramática sino actos reflejos. En la escena porno se cruzan tres miradas: la del espectador, la del actor y la de la cámara. El goce del espectador se encuentra en ver y poseer mediante la mirada al actor gozando de manera real ante la mirada de la cámara. El actor realiza actos sexuales reales para el espectador y en el lugar del espectador. El actor es un personaje ante la mirada de la cámara ya que, seguramente, fuera de escena se comporta de otro modo. Sin embargo, más allá de la postura moral y de la supuesta explotación criminal que siempre ha rodeado al imperio de los gemidos desde su nacimiento, el cine porno no miente. Lo que vemos es lo que realmente sucede. En este sentido, la porno es un género cinematográfico por derecho propio, aun cuando lo sea por el simple expediente de cumplir una de las necesidades más bajas y básicas de la cinefilia: ofrecernos sin fingimientos aquello que la vida nos está negando. Entonces se crea una nueva paradoja: el Efecto Realidad del cine porno ofrece lo imposible, actos sexuales reales desconectados de lo real.
El cine porno, nos guste o no, se asocia y se define con representaciones explícitas de actos sexuales reales, lo cual nos indica que es fundamentalmente un género documental,
El orgasmo se vive únicamente en primera persona, y aun en primera persona no es localizable ni en el espacio ni en el tiempo. Sin embargo, las películas triple equis osan
30
asirle. Meg Ryan protagonizó una escena en la película Cuando Harry encontró a Sally (Ros Reiner, 1989) donde fingía estupendamente un orgasmo; el orgasmo femenino real es visualmente pobre y, por si fuera poco, es intocable para una cámara cinematográfica, ésta busca una confesión absoluta del cuerpo de la mujer, de sus señales involuntarias, como las eyaculaciones vaginales (squirting) e inclusive corrientes eléctricas, para saber que, en efecto, ha ocurrido algo; algo real. De igual forma, se recurre una y otra vez a la eyaculación masculina. Con los espasmos y la externalización de lo interno (el semen), la promesa es hacer explícito lo implícito. Cuando un duro pene lanza semen en la pantalla, usualmente sobre una mujer que se extasía al recibir el viscoso líquido blancuzco en su maquillada faz, comprendemos que hemos visto pornografía y que ésta ha concluido. Podemos estar satisfechos: algo real ha sucedido y ahí estuvimos nosotros como testigos oculares. En suma: una mala película porno sería aquella donde se fingen los actos sexuales, porque lo importante es ver una felación real, una penetración real, un orgasmo real. El cine de terror, sobre todo el gore, ha empezado a aplicar en su estética visual, como desde hace mucho lo realiza el cine porno, el POV (Personal Point of View), donde, gracias al empleo de largos planos de secuencia y de formatos de registro más parecidos al casero, se quiere hacer creer al espectador que lo grabado no es un montaje sino la realidad misma. En este sentido, la Realidad es una forma de fetichismo. Así, tenemos que la repetición ritual de escenas idénticas en la porno no es tan distinta, en esencia, de los juegos macabros de Jigsaw. Las cintas de terror, como las porno, hacen de determinadas rutinas la base y la textura misma de la historia. Por otra parte, directores “convencionales” como Catherine Breillant, Virgine Despentes, Coralie Trinh Thi, Lars Von Trier, introducen escenas de coito explícito en sus películas, apropiándose de la estética de la porno hardcore con la colaboración a veces de los propios actores y actrices. Los teléfonos celulares con cámaras posibilitan un ajuste inmediato entre las experiencias tal y como se viven (antes de comprenderlas) y su registro. Si tú, lector mío, quienquiera que seas, ya has utilizado el celular para filmarte con tu pareja jugando al metesaca, ¡felicidades!, ya has producido porno amateur. Un sinfín de videos de este estilo se encuentra en RedTube, PornTube, YouPorn y Tube8. La motivación en este caso no suele ser económica, obedece más bien al exhibicionismo y al voyerismo, la humana necesidad de no ocultar lo oculto, de dar aire y luz a la intimidad propia, de elevar un momento ordinario a rango de entretenimiento masivo. En 1985, Serge Daney, un influyente crítico francés de cine y televisión, planteaba dos formas de ver el videoclip: como un simulacro (fragmentos de un todo perdido) o como un síntoma (fragmentos de un todo por descubrir). La misma vacilación ahora nos planteamos ante la porno amateur: o se destina a un ensimismamiento manierista y mimético, o nos ofrece (una vez “subida” a Internet) imágenes reales que sólo mediante herramientas domésticas podrían haberse grabado y que hacen emerger nuevas apariciones de la fantasía. Es paradójico que el espacio privado, por su propia definición opuesto al público, se convierta,
31
gracias a la realidad, en el lugar de la fantasía. Cuando una cámara registra la vida privada de los seres humanos, la realidad siempre se presenta ante el espectador como una gran fantasía. La realidad fílmica siempre se independiza de la realidad física. Lo filmado nunca es la sombra de la realidad, sino que la realidad siempre es la sombra de lo filmado. Internet es el lugar donde puede decirse todo y mostrarse casi todo sin ninguna consecuencia (mientras escribo esto, al filo de una lúgubre medianoche, un majestuoso cuervo, con aires de gran señor o de gran dama, se posa en el busto de Palas, sobre el dintel de mi puerta, y yo recuerdo la posible aprobación de la Ley SOPA, y el cuervo dice: “Nunca más”). Internet es el instrumento perfecto para la construcción de un personaje propio. La histeria del protagonismo se ve reducida a un click. Significa presumir la alegría de nuestra familia, los abrazos de nuestros amigos, la muchedumbre que asistió a nuestro evento y nuestros sudorosos coitos para demostrarle al mundo que “mi vida es mejor”. ¿Para qué? Para calmar un poco la ansiedad de sobresalir ante los demás. Algo que no termina de tener sentido cuando ni siquiera somos capaces de saber si aquellos ante los que queremos sobresalir son como se presentan. Así, en RedTube, PornTube, etc., brincamos sin rumbo de un “desconocido famoso” a otro, pues a final de cuentas, ¿quién existe realmente como se hace ver en los medios electrónicos? Tenía razón el escritor polaco Stanislaw Jerzy Lec: “El hombre nace, vive y muere en el espacio de una frase”.
32
33 El obsequio de Yahveh / CĂŠsar Meza
34 No necesito hablar / Adrián Alegría
Droguería Drogaria Sociedad Socidade Anónima Anônima Traducción por Sergio Ernesto Ríos
Luís Aranha
Productos Químicos y Farmacéuticos Especialidades en artículos para toilette Perfumerías Finas Aparatos y objetos de cirugía Importación directa Mayoreo y menudeo Precios módicos Informaciones gratuitas Las cuentas son liquidables invariablemente Al final de cada mes Se vende Libro de Oro del Veterinario Manual del Farmacéutico Formulario de Chernoviz Tratado de Versificación
Produtos Químicos e Farmacêuticos Especialidades em artigos para toilette Perfumarias Finas Aparelhos e objetos de cirurgia Importação direta Atacado e varejo Preços módicos Informações gratuitas As contas são liquidáveis invariavelmente No fim de cada mês Vende-se Livro de Ouro do Veterinário Manual do Farmacêutico Formulário de Chernoviz Tratado de Versificação
Yo era poeta Pero el prestigio burgués de ese letrero Explotó en mi alma como una granada. Resolví un día, Incómodo mensual de las musas, Ir a trabajar en una droguería Y ejecuté mi proyecto. Proceso financiero de los millonarios norteamericanos Que veía en el cinematógrafo: Multiplicación incesante de la riqueza De año en año Con acumulación de los intereses al capital… Procreación y desarrollo de las drogas en el estante
Eu era poeta... Mas o prestígio burguês dessa tabuleta Explodiu na minha alma como uma granada. Resolvi um dia, Incômodo mensal das musas, Ir trabalhar numa drogaria E executei o meu projeto. Processo financeiro dos milionários norte-americanos Que via no cinematógrafo: Multiplicação incessante da riqueza De ano em ano Com acumulação dos juros ao capital... Procriação e desenvolvimento das drogas na prateleira
35
Por los métodos científicos modernísimos… Prestigio de los comerciantes fuertes Desvalorización creciente de la poesía Mi musa romántica Murió luego de su primer parto, Que fue al bote con mal de siete días.
Pelos métodos científicos moderníssimos... Prestígio dos comerciantes fortes Desvalorização crescente da poesia... Minha musa romântica Morreu após o seu primeiro parto, Que foi para a cesta com mal de sete dias.
En el centro de la ciudad, Triángulo de oro y sol, La Droguería era una gruta de sombra… Como en Italia La gruta del can Llena de ácido carbónico En la droguería el éter se apoderaba de la atmósfera… No obstante, Mi pituitaria se habituó Como la vista se habitúa a la sombra… Armarios en toda la extensión de la casa… Yo los arreglaba en mi inexperiencia de / empleado nuevo… Iniciación. ¡Oh! Estantes de mi mocedad ¡“Castillo de sueños” de mi bazar de drogas! ¡Ventanas ojivales corriendo sobre durmientes! ¡Palaciegas llenas de rótulos y fórmulas!... Cómo era feliz entre vosotras, Palaciegas que urdíais En vuestros husos silenciosos ¡El bordado sérico de las telarañas!...
No centro da cidade, Triângulo de ouro e sol, A Drogaria era uma gruta de sombra... Como na Itália A gruta do cão Cheia de ácido carbônico Na Drogaria o éter tomava conta da atmosfera... Não obstante, Minha pituitária se habituou a ele Como a vista se habitua à sombra... Armários em toda extensão da casa... Eu os arrumava na minha inexperiência de / empregado novo... Iniciação. Oh! Prateleiras da minha mocidade “Castelo de sonhos” do meu bazar de drogas! Janelas ogivais correndo sobre trilhos! Castelãs cheias de rótulos e fórmulas!... Como era feliz entre vós, Castelãs que fiáveis Nos vossos fusos silenciosos O bordado setíneo das teias de aranha!...
36
Mi “sueño de oro” ¡Contemplación de Urracas enamoradas! Mi cruzada de metal ¡Oh! ¡Mis cruzados ideales!...
Meu “sonho de ouro” Contemplação de Urracas namoradas! Minha cruzada de metal Oh! Meus cruzados ideais!...
Sabía El nombre a todas las hermosas Que amaba mucho más que vendía más Embrujadas todas en papel de seda, Mantos de colores nacionales… Morfina Cocaína Benzina Aspirina Quina Cina Atropina Hexamina Gelatina Heroína Fenacetina Antipirina Papaína Exalgina Digitalina Aconitina Estricnina ¡Y tantas otras que no recuerdo más!
Sabia O nome a todas as formosas, Que amava muito mais que vendia mais Embrulhadas todas em papel de seda, Mantos de cores nacionais... Morfina Cocaína Benzina Aspirina Quina Sina Atropina Examina Gelatina Heroína Fenacetina Antipirina Papaína Exalgina Digitalina Aconitina Estricnina E tantas outras que não me lembro mais!
37
Las huellas de las aves o la confusi贸n de las lenguas o el misterio de los himnos o los repliegues de la escritura / Amaranta Caballero Prado
38
39
MIHO HAGINO Entrevista por DéDALo Fotografía: Ana Karen González Barajas
Miho Hagino vive en México desde hace quince años. Es artista visual, y aunque trabaja en asuntos de diversa índole, siempre están relacionados con el arte. Estudió Derecho en su ciudad natal, pero luego de varios viajes recordó que siempre le había gustado el arte y pensó que, a diferencia de los deportistas profesionales, podía comenzar a hacerlo en cualquier momento. 40
DéDALo. ¿Cuáles son los temas más recurrentes en tu trabajo? MIHO. Mi tema es siempre el individuo alienado dentro de la masa, cómo las personas son tratadas como una dentro de los demás. Yo intento expresar lo contrario, que cada individuo significa algo, que una persona puede ser y sentirse individuo y hacer que eso sea importante para él; no la fama ni la riqueza, nada de eso, sino buscar que los individuos se sientan bien, felices y seguros. Este tema me preocupa por la situación que yo he vivido en Japón, de extrema soledad, pero eso lo vi también en Canadá y en Estados Unidos. Muchas personas piensan que como son países ricos, todo mundo está bien, tienen dinero, viajan y son felices; pero yo lo veo diferente, ahí antes de preocuparse por otras cosas se preocupan por el dinero para poder hacer algo, para sobrevivir, y están alejados de la familia y los amigos porque tienen que trabajar.
Tokio, en la zona rosa, en Guanajuato, son iguales en su forma de ser. También pasa que algunas personas que antes orgullosamente portaban su traje regional ahora lo dejan, o al revés, muchos japoneses que llegan a México fascinan con sus vestidos y la gente los usa sólo por consumo, para estar fashion, y luego que pasa de moda lo cambian por otro, pero no ven que ese vestido tiene atrás toda una historia, un códice, y no está mal, pero no me agrada que las personas tomen de esta manera otra cultura, como producto de consumo. La cultura es muy importante y creo que no puede desaparecer, pero muchas circunstancias piden que así sea. Por ejemplo, muchos migrantes mexicanos que están en los Estados Unidos, les prohíben a sus hijos hablar español en su casa porque quieren que crezcan como estadounidenses, o muchos japoneses que viven en México no hablan japonés porque sus padres nunca les quisieron enseñar para que se pudieran adaptar a la sociedad de aquí; estas situaciones crean muchos conflictos y hacen sentir a las personas inseguras, entonces pienso que psicológicamente es bueno que las personas tengan una identidad, ideas más claras de quiénes y cómo son.
D. ¿De qué otra manera, aparte de esta alienación del hombre, encuentras el problema de falta de identidad? M. Pienso que ahora, aunque no queramos, recibimos mucha información de Internet y otros medios; nos dicen, por ejemplo, que tenemos que estudiar otro idioma para conocer otras “Mi tema es siempre cosas, otras situaciones y coel individuo alienado municarnos con personas de dentro de la masa, otro país, y de repente no sé cómo las personas si hay oportunidad para que son tratadas como las personas se pregunten qué están haciendo con toda una dentro de los esa información. Yo veo drademás. Yo intento máticamente que desde que expresar lo contrario, todo mundo tiene computaque cada individuo doras y acceso a la informasignifica algo...” ción, muchas personas en
Yo soy japonesa oficialmente pero culturalmente no comparto muchas cosas con la gente que vive o viene de Tokio, yo no me siento de allá, yo nunca he visto un templo viejo, por ejemplo, y tampoco me enseñaron tradiciones japonesas, pienso que ya no existen, además, llevo viviendo fuera veinte años, entonces debo decir que yo
41
Interpretación de Miho Hagino sobre “Signos y señales”, Partitura Visual de Felipe Ehrenberg
hablo japonés pero no me siento japonesa porque no comparto muchas cosas con esta cultura. Acepto la identidad que tengo, y es la que quiero y puedo mostrar, pero creo que si no entendiera eso tendría muchos problemas y falta de entendimiento con los demás. D. ¿Qué buscas o esperas de tu trabajo como artista? M. La meta es muy abstracta, no sé a dónde vayamos, pero en general espero que las personas nos sintamos felices, no de manera superficial sino desde lo profundo. Esta es una meta que quiero intentar, cambiar de sistema. Creo que antes no había ningún
42
sistema pero de repente se pusieron a ordenar todo, y un día llegamos y todo lo que vemos ya está hecho por alguien más y tenemos que cuidarlo forzosamente, en lugar de un cuidado por voluntad, y yo siento que mucha gente tiene miedo de enfrentar esto. Por ejemplo, el derecho nos dice que no podemos hacer algo porque una institución o gobierno lo prohíbe, pero debemos estar seguros, investigar si es cierto o no, preguntarnos si hacemos las cosas porque así nos dicen o porque así lo quiere uno.
ROBERTO MORALES Entrevista por DéDALo
Empecé a estudiar guitarra a los doce años. Luego me metí a la Academia Juan Sebastián Bach para estudiar guitarra clásica pero más bien me ponían a copiar biografías, era muy aburrido. Afortunadamente aparecieron los folcloristas, estudié con ellos y como a los dieciocho años me incorporé al Centro para el Estudio del Folklore; me aficioné mucho al arpa jarocha y a diferentes tipos de jaranas, quenas, etc. Después estudié de manera empírica flauta transversa, y luego a los 18 años entré a clases particulares con el maestro Francisco Núñez a estudiar piano y composición, después él se hizo director de la Escuela Superior de Música y me invitó a que estudiara ahí. Hice las carreras de piano, flauta y composición. Acabando la Superior de Música, en 1978, la autocrítica era fuerte así que decidí encerrarme durante dos años y no hacer otra cosa más que tocar mis instrumentos, componer y hacer música electrónica. La música electrónica entró de manera paralela a mis estudios en la Escuela Superior. A los 20 años, trabajé con el Taller Coreográfico y la Compañía de Teatro de la UNAM, con López Tarso y Salvador Garcini, en la obra El rey Lear; las críticas fueron muy buenas y continúe trabajando con ellos. Luego entré al Tercer Foro de Música Nueva, con Manuel Enríquez, en la barra de música elec-
43
trónica. También formé parte del grupo Alacrán del Cántaro, un grupo multidisciplinario donde estábamos la bailarina Rosa Romero, Arturo Cipriano y mi hermano Rodrigo. Curiosamente teníamos el Teatro Casa de la Paz prácticamente tomado, o sea, por lo menos una vez al mes nos presentábamos ahí y uno podía vivir de la música experimental; aparte yo tenía encargos y no necesitaba trabajar como académico, podía estar como freelance. Después las vacas se empezaron a poner flacas y había que vivir de algo, entonces entré a la Superior de Música, fundé el primer laboratorio de música por computadora, junto con el maestro Francisco Núñez, y se creó un ambiente entre programadores de la
44
UNAM, músicos y compositores, y de ahí nació mi programa Escamol, que todavía conservo y actualizo, y lo sigo utilizando para cosas en vivo. Después surgió la oportunidad de venir a Guanajuato a formar parte de dos instituciones que querían hacer un laboratorio: el CIMAT y la Universidad de Guanajuato. Llegué en 1992 y a partir de ahí empecé a traer profesores de todos lados del mundo, así nació el Callejón del Ruido, en el 93 ó 94, y durante ocho años lo dirigí. Después de esto surge en la Universidad de Guanajuato el programa PROMEP, el cual consiste en la promoción y mejoramiento del profesorado, y se me da
la oportunidad de hacer un doctorado en la Universidad de Berkeley. Volví a Guanajuato hace siete años. Ahorita estamos tratando de resucitar al callejón del ruido, además estoy apoyando al posgrado en Artes.
material humano ofrecía la variedad de los instrumentos en un sistema de afinación temperado. El tener acceso a la información de manera tan inmediata y accesible definitivamente modifica cómo nos comportamos; tenemos DéDALo. ¿Cómo piensas que se reconfigura la que estar al día, o sea, la composición no música a partir de la relación que tiene con se acaba con el último maestro que tuviste, nuevas tecnologías y el uso de Internet? la composición apenas empieza, hay mucho ROBERTO. Definitivamente hoy estamos vi- que hacer en estos momentos y mucho que viendo un paradigma distinto como compo- aprender de mucha gente, no nada más de sitores. Hay un aspecto que siempre me ha compositores consagrados sino también de fascinado: hacer composición algorítmica, compositores jóvenes. Yo creo que ahora es utilizar modelos de otras disciplinas, como la un tiempo increíble porque se acaban las matemática, la física, astronomía, etc., don- escuelas de “San Berio”, “San Messiaen”, de puedo crear diferentes cartografías y des- ahora esos grandes compositores son como cubrir nuevas formas musicales. Ahora, por un compositor más, esto nos da la posibiliejemplo, tengo modelos que generan una dad de abrir brechas, no tanto como nuevas obra formal para piano en menos de diez tradiciones sino como lo que somos, músisegundos, muy bien escrita y con todos los cos contemporáneos que tenemos que vivir rigores de la composición contemporánea, y intensamente nuestro tiempo. Creo que la puede haber, por decirlo así, un compositor mejor manera de compartir la música es haanálogo que durante tres años se la pase ciendo lo que nos toca ahora, con los medios haciendo notas y tratando de y la cultura que nos toca videscubrir modelos nuevos, vir; hay que entender que la “Yo creo que ahora pero ahora con estos nuevos cultura ya no es tan regional es un tiempo increí- como antes; facebook, twitmedios se puede lograr en ble porque se aca10 segundos, entonces ser ter y todas las redes sociacompositor puede llegar a ser les, nos ponen en un marco ban las escuelas de irrelevante porque todo esto distinto, mucho más ins“San Berio”, “San cambia el enfoque y la forma tantáneo, incluso se puede Messiaen”, (...) esto de ver la música contempotrabajar con colegas de una nos da la posibilidad manera en la que jamás lo ránea. Todos los compositode abrir brechas, no hubiéramos pensado, poderes jugaron con tecnología de punta, digamos Bach con tanto como nuevas mos colaborar e intercambiar los órganos, o cuando salió tradiciones sino como música, fotos, pensamientos, el pianoforte era como la lo que somos, músi- bibliografía y demás, que necomputadora de ahora, era cesariamente no nada más cos contemporáneos nos acelera sino que nos lleel instrumento que sonaba más fuerte; o la orquesta que tenemos que vivir na de felicidad y de conocisinfónica fue otra tecnología, intensamente miento. pues además de convocar al nuestro tiempo.”
45
46
RADIO UNIVERSIDAD DE GUANAJUATO 50 ANIVERSARIO Difusión y Extensión de la Cultura Por Edgar Guzmán Magaña Jorge Olmos Fuentes Universidad de Guanajuato, 2011 228 páginas Precio: $110.00
contribuyeron en su desarrollo, todo ello a través de las páginas de Radio Universidad de Guanajuato 50 Aniversario, Difusión y Extensión de la Cultura.
La historia de Radio Universidad de Guanajuato se remonta a la década de los sesenta, época en que un grupo de trabajo, con el apoyo del entonces rector de la universidad, licenciado Eugenio Trueba Olivares, se dio a la tarea de cimentar el proyecto de creación de XEUG bajo una serie de objetivos comunes, encaminados a la fundación de un espacio que diera cabida a la reunión y discusión de ideas, a la difusión cultural, y al mismo tiempo fungiera como vínculo directo entre la Universidad de Guanajuato y la sociedad.
Con el trabajo historiográfico de Jorge Olmos Fuentes, esta publicación ofrece un importante recorrido a los eventos, fechas, lugares y personas clave en el proceso generacional de Radio Universidad, desde sus inicios hasta el presente, sin dejar de mencionar la creación de la Red Universitaria de Radiodifusoras, la irrupción del internet, las redes sociales y las nuevas tecnologías, lo cual ha impactado de manera importante en las plataformas y contenidos de las transmisiones de Radio Universidad.
Hoy, a 51 años de la fundación y primeras transmisiones de Radio Universidad, es posible conmemorar el proceso histórico de consolidación de la estación radiofónica universitaria, (re)identificar la importancia de sus funciones para con su contexto, así como rememorar a las personas y empleados universitarios que
Así, con el apoyo visual de fotografías, diagramas, noticias de prensa, planos y otros anexos, Radio Universidad de Guanajuato 50 Aniversario, Difusión y Extensión de la Cultura refleja una tarea de investigación puntual alrededor de una de las entidades universitarias de mayor trascendencia, Radio Universidad.
47
DENTRO DEL NOISE Por Félix Ulrica
Quiero agradecer a Eberick Hashvay y a Martín Escalante por compartir conmigo cosas sorprendentes acerca del ruido.
1- No todo el ruido es noise. La música noise es un mensaje, ¿de qué? En principio, de subversión y de protesta, ¿contra qué? Contra los humanos, contra lo humano mejor dicho. Un músico del noise se ha dado cuenta de un secreto fundamental: el tiempo está pasando ahorita, no hace rato ni al rato, ahorita en tu mente, mientras flotamos en el universo y la tierra gira entre la luna y el sol, mientras los árboles crecen y las plantas van dando su flor, lentamente y sin marcas, sin ciclos tan perceptibles como nos los han ilustrado. El músico que siente el presente es capaz de oír y darle sentido al ruido, hace abstracciones que sólo puede compartir intuitivamente a través del sonido y necesita una cofradía de participantes del mismo viaje para no sentirse perdido y en una misión ridícula. Humanos recorriendo el espacio interior en una gigantesca nave sónica. 2- El imperativo categórico en algún momento de la juventud es hacer lo incorrecto, de esta manera te alejas de las reglas y, a través de la búsqueda de la libertad, tocas tu identidad. Si este método funciona y tu identidad se vuelve esta búsqueda de libertad, el feedback de un alimentador y un amplificador es la gloria, es tan incorrecto como romper la vasija donde descansa el polvo de tu abuela, es el evento más intenso de la física y de la creación. 3- Hay quienes pueden escuchar su sangre siendo bombeada dentro de ellos, recorriéndoles todo el cuerpo, llenando venas y arterias, y lo quieren reproducir. 4- Hay músicos de noise con imágenes muy claras de sonidos abstractos. Estas personas están concientes del estado de ánimo que despierta el ambiente en el que estamos. En una conferencia en 1937, John Cage lo planteó así: “Donde quiera que estemos lo que oímos más frecuentemente es ruido. Cuando lo ignoramos no molesta. Cuando lo escuchamos lo encontramos fascinante. El sonido de un camión a 50 millas por hora. La estática entre emisoras. La lluvia. Queremos capturar y controlar estos sonidos”. Podemos reproducir el poder de la tormenta sin repetir
48
el sonido del agua cayendo sobre la calle, no la representamos, la igualamos. Esa es una virtud del noise, es música deíctica, egocéntrica y local. 5- Hay personas seguras de que pueden escuchar planetas explotando a diez galaxias de distancia mientras están en el trance con su música. La imaginación es el territorio de lo propio, la creación es el esfuerzo de volverlo real. 6- Lo oscilante, lo metal, lo estruendoso, pudieran ser metáforas de lo inestable, de lo frío y lo desordenado, pero también de lo que vuelve, de lo que brilla y de lo que es gigantesco, depende de cómo te quieras sentir en el momento en que te pones a pensarlo. 7- Hay quienes hacen música como pueden y quienes hacen música como quieren, pero cada músico hace su deber (salvo aquellos que no deben nada, que son aquellos que no quieren hacer nada). Quiero decir que estamos en un momento en que hacer música es pensar cómo somos estimulados, y que aquellos que se emocionan por el estímulo, sólo piensan en repetirlo. 8- Proclamemos la individualidad del orden, la comprensión de lo propio y la aventura del viaje. Solamente una comunidad capaz de entender la música que produce el loco, está libre de injusticia, porque aquello que logra expresar una mente en desorden tiene el poder simbólico de un tropezón; es algo anormal, una demostración de la incapacidad para cumplir un reto, se necesita humor. Para Peter Sloterdijk, la música es la analogía tonal de la vida emotiva: así como el lobo aúlla y la gallina cacarea, el hombre tira pedos si su moral se lo permite. La sabiduría de los cínicos nunca se ha visto tan engalanada como en estos tiempos de frustración y cólera generalizada donde la única escapatoria parece ser reunirse con los amigos, hacer música para comunicar lo que con palabras cuesta tanto y entrar en el territorio donde todos te comprenden porque todos están tan tontos como tú.
49
BABEL
Dir. Alejandro González Iñárritu. Guión: Guillermo Arriaga / México, 2006 Por Cali Con la película Babel, llega a su fin la “Trilogía de la muerte”, así como también la dupla Iñárritu y Arriaga que tanta acogida tuvo en el Festival de Cannes con el filme Amores Perros. Pero, a decir por Biutiful, el último filme dirigido por Iñárritu, la separación del guionista no ha modificado el tópico de la muerte al que tanto nos ha acostumbrado “El Negro”. Babel no podía ser la excepción, aquí también Arriaga e Iñárritu nos preparan para lo peor que podría sucedernos, desde una deportación hasta la muerte de un hermano. El título no es arbitrario, no responde sólo a la variedad de idiomas, lenguajes y países en que fue grabada; la confusión se da no sólo por estas diferencias, como sea la comunicación fluye, pero no hay comprensión ni empatía sino hasta llegar al límite de la compasión, ahí, frente al desnudo de Chieko, la muerte de Ahmad y la deportación de Amelia. Lo que hila sus historias no es sólo un rifle -esta unión podría parecernos anodina- sino la soledad, frustración y desesperación a la que son confinados los personajes, sea por un choque entre culturas o una inconformidad con la propia cultura, con la propia vida. El choque cultural más evidente está protagonizado por el drama que viven Richard y Susan, quienes viajan a Marruecos para reconciliarse tras la muerte de su hijo menor. Un disparo, que comenzó como un juego entre Yussef y Ahmad -dos niños marroquíes- , dejará gravemente herida a Susan; el gobierno estadounidense considera el suceso como un acto terrorista e infundidos por el miedo, los compatriotas de Richard y Susan deciden abandonarlos. En diversas escenas se muestran los excesos de paranoia y xenofobia de los norteamericanos, su inseguridad y desprecio por lo otro, aún en medio de la necesidad de eso
50
otro. Escenas que van desde la preferencia de una coca-cola en lugar de un vaso con agua, hasta la incomprensión de la importancia que tiene para Amelia asistir a la boda de su hijo en México y su imposibilidad ante el deber de cuidar a los hijos de Richard y Susan; esta situación desencadenará otra catástrofe tanto para los niños como para Amelia, quien finalmente es deportada tras años de radicar y trabajar en los Estados Unidos. Otra temática recurrente pero latente en el filme es la sexualidad de los personajes, pareciera que aquí la dupla no quiere evadir el tema o tratarlo de modo accesorio, sino por el contrario, lo muestran como algo tan cotidiano que aparece aún en medio del caos, así los personajes se presentan más humanos: Amelia en un encuentro amoroso furtivo; Richard y Susan -ella herida - reencontrándose en un petate de un pueblo marroquí; Yussef espiando desnuda a su hermana; y Chieko, buscando en medio de la opulencia, el silencio y la tristeza, unos labios, aunque sean los del dentista, unos brazos, aunque sean los del policía. En toda la trilogía las historias se fragmentan y se encuentran a destiempo. En Babel, además de esto, encontramos una estética y una fotografía única en cada caso -se eligieron diferentes milímetros para su ejecución-, así el espectador se encuentra en diversos ambientes; lo que une las historias es el exilio de la incomprensión a la que son confinados los personajes por conflictos posibles en la vida real. Babel intenta el reencuentro a través de la sumersión en la vida de los otros, sin cortapisas, sin heroínas, sin superhéroes, sino por el contrario, mostrándolos ahí, en lo que los hace más inermes.
FRESAS SALVAJES Dir. Ingmar Bergman / Suecia, 1957 Por Rosa L. Gante
Eberhard Isak Borg, es un médico de setenta y ocho años que está a punto de recibir un nombramiento como Doctor Honoris Causa por sus cincuenta años de ejercer la profesión. Para ello deberá ir desde Estocolmo hasta Lund, ciudad donde será laureado. La noche anterior a la entrega del reconocimiento tiene un sueño que lo altera sensiblemente, y al despertar decide que realizará el viaje por carretera conduciendo su automóvil hasta Lund, en lugar de viajar en avión con Agda, su ama de llaves, como estaba planeado. Aprovechando que se trasladará en automóvil, además de ir a saludar a su madre al pueblo donde ésta vive, visitará la casa de verano donde pasó su infancia y primeros años de juventud. Al viaje se une Marianne, su nuera, que está hospedada en casa de Isak y lo acompañará para encontrar en Lund a su esposo, Evald. Al llegar a la casa de verano –la primera escala que realizan– Isak comienza a recordar su pasado. Recuerda a su novia Sara, con la que estuvo comprometido pero que decidió casarse con su hermano Sigfrid. La película, en gran medida, trata sobre el enfrentamiento entre la soledad en la que vive Isak y el recuerdo de ese pasado perdido que le prometía amor y compañía, así como sus intentos por reconstruir dicho recuerdo para intentar comprender por qué Sara eligió a su hermano y, de este modo, eliminar la culpa que siente por haberla perdido. A este remordimiento se añaden su matrimonio tormentoso y sin amor, y la relación con su único hijo, Evald, que es más obligatoria que afectiva. Sincrónicamente al recuerdo de la Sara de su juventud, aparece otra Sara real que física y emocionalmente se parece mucho a la primera, una chica que junto con dos amigos emprende un viaje hacia Roma. Isak sale de su ensoñación cuando la joven lo despierta y le pide aventón, así, al viaje hasta Lund se unirán la chica y sus dos compañeros. La película, como lo enuncia el narrador (Isak), es el relato de los acontecimientos y encuentros de ese día pero se trata, más bien, del viaje interior y en el tiempo que realiza el médico. Ambos viajes lo llevan a analizar su vida y preguntarse quién es realmente, al mismo tiempo que vuelve a
51
conocer, o quizá conoce por primera vez, a las personas más cercanas a él. A partir de lo que sucede en el trayecto, Isak tiene la oportunidad de verse a sí mismo a través de la percepción y opinión de los otros: los chicos a quienes da aventón lo perciben como una persona amable y agradable; un matrimonio, dueño de la estación de gasolina del pueblo donde Isak nació, le agradecen su altruismo y su amor por los demás; Marianne, antes de llegar a la casa de verano, le confiesa que lo percibe igual que a su hijo, como un ser frío, insensible y egoísta; él mismo se define como un solitario y un pedante, y también en sus recuerdos y sueños se ve como tal. ¿Quién es él entonces? ¿Cuál de todas estas percepciones es la verdadera? ¿La de los demás? ¿La de Marianne? ¿La de él? ¿Lo que vemos y recordamos de nosotros mismos es real? ¿Somos quienes creemos que somos? Los recuerdos, los sueños y el encuentro con diferentes personas durante el viaje, fungen como puentes entre presente y pasado, puentes que se van desvaneciendo conforme lo pasado y lo actual se integran, tornándose difícil dilucidar qué es, de lo recordado, lo que realmente sucedió, y qué es, desde el presente, lo que se inventa y construye. Lo interesante de la película, además de carecer de lineali-
52
dad narrativa, es la ruptura del tiempo que no solamente se debe a la irrupción de los sueños o a la “interrupción” del presente para dejar aparecer momentos del pasado, también se debe –y esto es lo principal– a que la historia que se cuenta es la historia de la memoria y, al mismo tiempo, la historia de la memoria se convierte en la historia del presente. Más allá del excelente manejo del tiempo y sus posibilidades como recurso narrativo –del cual Bergman es un maestro consagrado–, la ambigüedad de la historia radica en los contenidos, es decir, en el tratamiento del tiempo como parte de la trama. No sólo se trata, como decíamos, de la inclusión de sueños o del recurso de la remembranza, sino también de la manifestación del tiempo en bruto, sin separación alguna; el tiempo como absoluto: sin presente, pasado o futuro; una fusión entre realidad, sueños y memoria, donde sus aparentes diferencias se encuentran diluidas, mezcladas. En varias escenas podemos ver a Isak recordando momentos en los que él no estuvo presente, recuerdos que por esta peculiaridad se convierten más bien en reconstrucciones imaginarias que el médico realiza a partir de algunos fragmentos que le fueron relatados. También observamos varios sueños en los que se incluyen episodios biográficos que él mismo dice recordar con precisión pero que, por estar inmersos en un sueño, nos hacen dudar si realmente acontecieron. Los recuerdos se confunden con los sueños y los sueños están plagados de recuerdos. Uno se pregunta si el hombre –no sólo Isak– estará completando a su antojo lo que recuerda, y si al evocar y comparar el presente con vivencias del pasado, no está evadiendo y dejando de vivir lo actual para reconstruir su presente a partir de la edificación del pasado. Al parecer, los recuerdos y sueños del doctor Borg son orquestados desde el presente, como si él quisiera obligarse a recordar, a
autoanalizarse y reconstruirse desde ahí. La memoria se muestra entonces como un juguete al servicio de las necesidades. Si constantemente aparece Isak “observando recuerdos” en los que él nunca participó, ¿cómo distinguir en Fresas Salvajes entre sueños y recuerdos? Parece que el tiempo se burla de nosotros. El presente llega pero no hay manera de rastrear su camino, ¿por cuál vereda llegamos hasta este momento, hasta el ahora? El presente nos rodea y pesa sobre nosotros pero no sabemos de dónde ha salido, o cómo y cuándo nos ha llegado; sabemos que ahí está y que nosotros estamos en él pero no podemos adivinar o rastrear su procedencia. ¿Todo ha sido producto de nuestra voluntad? ¿Todo es consecuencia de la infancia y los primeros años? ¿Somos resultados del azar? Fresas Salvajes sugiere la imposibilidad del autoconocimiento y la posibilidad del destino y el azar como rector y director de nuestro devenir. Como nada podemos recordar cabalmente, quizá nada podamos saber, de ahí que no haya aprendizaje ni, mucho menos, decisiones conscientes. No hay pasado accesible, tan poco futuro. El tiempo ya no se fracciona, es uno y en él confluyen lo actual, lo anterior y lo venidero. Se trata de una historia sobre la constante muerte de la memoria, sobre el replanteamiento perpetuo de la misma, sobre lo que es, el papel que juega en la vida, su existencia o comprobación de existencia, y sus contenidos. Cuando en la pantalla aparece un fondo negro indicando el final, uno tiene la sensación de que la película no ha acabado, que después de eso vendrá otra escena. Pero no, la película termina súbita, repentinamente, como súbitos son los recuerdos, como repentina es la muerte física, como de improviso
acude el pasado o acudimos a él para tratar de entender nuestro presente y como, queriéndolo o sin querer, de repente nos encontramos completando los agujeros de la memoria y del presente que bien pudieran ser los agujeros de la realidad. Si al principio de la película Isak dice que su aislamiento voluntario se debió a que se dio cuenta que nuestras relaciones con los demás se basan en discutir y juzgar el carácter y la conducta del prójimo, al final de la misma, parece que por fin ha decidido salir de su aislamiento para demostrar a su hijo, a su nuera y a su ama de llaves, su afecto. Sin embargo, ni personaje ni narrador expresan algo sobre esto. El último gesto en el rostro de Isak es una leve sonrisa que aparece en un primer plano, luego de recordar un momento de su juventud. Esa última sonrisa puede ser la huella del amor y la esperanza, o bien, la dulce y dolorosa confirmación del eterno aislamiento en que vive el ser humano, pues de la imposibilidad de reconocernos en el tiempo –de llamarlo nuestro– deviene la imposibilidad de contacto humano (debemos recordar que Isak es un hombre de ciencia y no de fe). Entonces quizá esa sonrisa es una ironía, una sonrisa conformista, ya sin dolor, ante la muerte y la inutilidad. Somos nosotros, como espectadores y como seres que estamos en la vida, quienes tenemos la última palabra.
53
Colaboradores ENTRADA
ENCRUCIJADA
6. Adrián Alegría
1. Andreas Kurz
1. Miho Hagino
hugoualegria@hotmail.com http://www.facebook.com/hugoadrian.ugaldealegria
andreas_kurz@yahoo.com
2. Roberto Morales
2. Andrea Tomasena 3. Emma Y. meximay@gmx.net
reSEÑAS 1. Félix Ulrica
4. Eduardo Padilla
everardofelipe@hotmail.com
5. 7
2. Cali
sietecabezasmenos.blogspot.com
3. Rosa L. Gante
anaiteancira@gmail.com Twitter: @nocorro_nogrito
SALIDA - INICIO
7. Sergio Ernesto Ríos
1. Simone Rooster Face
sergioerios22@hotmail.com hangar-sergio.blogspot.com
rooster.xfgo@gmail.com icantweedkant.tumblr.com
1. Luis Alfonso Angulo Segura
8. Gina Fuentes hola@ginafuentes.com
9. Juan José Castro Sánchez astroilustracion@gmail.com astroilustracion.blogspot.com
10. Antonino Torres
2. Ana Karen G. Barajas
oskar_antonino@hotmail.com www.eluniiversoverde.blogspot. com
karengobe@hotmail.com www.karensteapot.tumblr.com
11. Daniel Pino
3. Leticia Ochoa Castillo
dani.pino@hotmail.com www.daniel-pino.com
vasto.siervo@gmail.com http://www.facebook.com/Vastolords
leticiaochoacastillo@gmail.com http://leticiaochoa.tumblr.com/
2. Aurora G. Bribiesca Acevedo briantix@yahoo.com.mx
juliovzm@hotmail.com http://www.wix.com/juliovz0/ julio-vzm
3. Francisco Enríquez Muñoz
5. César Meza
pornocochinon@yahoo.com.mx paco.enriquezm@facebook.com
cesarmeza.88@gmail.com cesarmezaobra.blogspot.com
54
amaranta.caballero@gmail.com www.amarantacaballero.blogspot. com
( )
6. Anaité Ancira García
VÍAS
7. Amaranta Caballero Prado
4. juliovzm
12. Yanin Givaudan elizaldeana@hotmail.com http://revolucionchantilli.blogspot. com/
. .-.. -.-. .. . .-.. --- . ... - -.. . ... -- --- .-. --- -. .- -.. --¿ --.- ..- .. -. .-.. --- -.. . ... -.. . ... -- --- .-. --- -. .- .-. .- ? . .-.. -.. . ... -.. . ... -- --- .-. --- -. .- -.. --- .-. --.- ..- . .-.. --- -.. . ... -.. . ... -- --- .-. --- -. . --- -. .- -.. --- .-. ... .
55
Directorio DIRECTOR DE CULTURA Y EDUCACIÓN MUNICIPAL José María Hernández Vallejo EDITORA Noemí Moreno Jiménez ASISTENCIA EDITORIAL Juana Adriana Rocha Luna Citlali Sánchez Martínez Arizbeth Chávez Chacón REDACCIÓN Juana Adriana Rocha Luna Arizbeth Chávez Chacón DISEÑO Georgina Fuentes Casillas COORDINADOR DE FOMENTO A LA LECTURA Y PUBLICACIONES Juan Manuel Ramírez Palomares GESTIÓN Y PROMOCIÓN Ana Celeste Cabrera Arango Este número ha sido posible gracias al apoyo de la Universidad de Guanajuato a través de su Programa Editorial, también a la colaboración de los autores, artistas y entrevistados que aparecen en la revista. Así mismo, agradecemos a la Dirección de Extensión Cultural de la Universidad de Guanajuato, y a la ayuda de quienes con sus comentarios, sugerencias e ideas, enriquecen diariamente este proyecto. Cada texto, ilustración y comentario es responsabilidad de su autor. Dédalo no está necesariamente de acuerdo con la opinión de sus colaboradores. Prohibida la reproducción total o parcial del contenido para fines comerciales y sin la autorización de los autores y la Dirección Municipal de Cultura y Educación de Guanajuato. Se terminó de imprimir en marzo del 2012 en los Talleres de la Imprenta Universitaria, Blvd. Bailleres s/n, C.P. 36100, Silao, Guanajuato. 1000 ejemplares. Honorable Ayuntamiento de Guanajuato · 2009-2012 Lic. Edgar Castro Cerrillo · Presidente Municipal / Carlos Ernesto Scheffler Ramos · Síndico / Gabino Carbajo Guzmán · Síndico / Luis Ignacio Gutiérrez Reyes Retana, Erika Lorena Arroyo Bello, Lic. Joel Modesto Esparza, Luz Alejandra Caballero Egan, Salvador Sánchez Martínez, Karen Burstein Campos, Mónica Macías Páez, José Manuel Morán Velázquez, Francisco Licea Montiel, Israel Cabrera Barrón, Ma. del Carmen Ortega Rangel, Marco Antonio Hernández Gutiérrez · Regidores / Gabino Carbajo Zúñiga · Secretario del Honorable Ayuntamiento / José María Hernández Vallejo · Director de Cultura y Educación Municipal
56
58