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Graciela Castillo

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Angélica López

Angélica López

CAPÍTULO 4 Personal Administrativo

Graciela Castillo

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Yo fui la primera secretaria privada que tuvo el Doctor Bimbi y mi función era hacerle todos los meses las rendiciones de las Obras Sociales de sus pacientes, que en ese tiempo era a máquina, con una calculadora. Por eso siempre el Doctor dice: “Graciela, mi primera secretaria”, aunque yo no me ocupaba de recibir a los pacientes ni nada, solo de hacerle los papeles. Yo antes de ese trabajo ya estaba trabajando de administrativa en el hospital viejo, porque mi mamá, Angelita Castillo, trabajaba de enfermera también ahí y ella los adoraba al Doctor Bimbi y a Elena. Cuando entré me dijo “No vayas a decir nada en contra de ellos”. Mi mamá había empezado como mucama y después pasó a enfermería por la práctica, porque ni siquiera había hecho el curso de enfermera, pero te atendía partos, de todo. El día que nació mi hija Fernanda mi mamá no volvió más, porque ya estaba pasada de edad para jubilarse, así que empezó Elena a hacerle la jubilación. Porque si no iba a trabajar hasta el último día de su vida, porque la verdad que estaba re agradecida con ellos y con el Doctor, no te digo nada.

Yo entré al hospital en 1972 en el turno de tarde y a la mañana estaba en la Municipalidad. Yo salía a las 14:00 hs. de la Municipalidad, y me iba como a las 15:00 o 16:00 hs. al hospital, hasta las 20:00. Me tocaba trabajar con Elena, en la administración y trabajamos muy bien, estaba acá la Farmacia, vos entrabas y veías la farmacia en la Mesa de Entrada y pasabas para atrás y ahí estaba la oficina de Elena y ahí trabajábamos nosotras. Lo que sí Elena nos hacía ir los sábado a la tarde, y estábamos un día con la Señora de Bianchi y Lidia Seguel, todas controlando las rendiciones, porque tenía que estar todo a la perfección… pero era sábado y teníamos una salida programada, porque cuando uno es joven le gusta la joda, le gusta salir los sábados. Entonces yo no tenía ganas de ir, pero como mi mamá trabajaba ahí y era tan leal al Doctor Bimbi y a Elena, no quería que yo le fallara, obligada a ir los sábados también. Cada vez que venía un Ministro, me decían “Vamos a conseguir que te nombren”, pero pasaba el tiempo y no me nombraban. Gracias a Elena, que ella tenía su manera de manejar las cosas, ella consigue que me paguen el año completo que yo había trabajado y eso me sirvió para comprarme un auto, así que yo a los 19 o 20 años ya tenía mi auto, gracias a los ahorros que había hecho sin querer en el hospital, así que más vale que tengo recuerdos hermosos de ese trabajo. Además trabajando ahí, aprendes mucho, porque te exigen y

Año 1977 . Balbina Cabezas, Martina Coya, Adelina Allochis, America Coetsen, Matilde Cabezas, Delia Allochis, Amina Crespo, “Lola” Treffinger, Ángela Castillo, Erminia Pérez, Claudia Millatureo

te volvés responsable. Un año trabajé en el hospital, después el Doctor me preguntó si quería llevarle las cosas, las rendiciones del consultorio y le dije si como no, así que ahí empecé con él a trabajar. Después mi hermana, que había terminado el Secundario en Gallegos, se viene a Perito, entonces ella se quedó a cargo de ese trabajo, le entregué la Secretaría a mi hermana.

Yo con el Doctor Bimbi trabajé muy bien, era exigente y me controlaba los papeles para saber lo que le hacía firmar, pero siempre me tuvo mucha confianza y yo creo que no lo defraudé y bueno con Elena también. Era así, re exigente pero así también en el hospital, pero tenía las cosas muy en orden, porque nosotras ordenábamos las carpetas de lo que iba al Tribunal de Cuentas, con todos los gastos de administración del hospital, así que tenía que estar todo perfecto. La verdad es que el hospital fue un antes y un después del paso de Elena y el Doctor Bimbi, y si hubiera sido por ellos, seguían trabajando hasta hoy. Y ellos te inspiraban ese compromiso por el hospital y éramos como una familia. Éramos pocos pero muy comprometidos, festejábamos el Día del Enfermero, el Día del Médico, se armaba comida después el baile ahí nomás, todo el hospital, muy lindo era. Pienso en toda la labor del Doctor Bimbi al ser primer médico rural digamos, de venirse a un lugar así, donde no había los recursos necesarios para poder desarrollarse. Todo el mundo se atendía con él, porque tenía su capacidad para saber lo que te pasaba. A mí me atendía de chiquita, cuando vinieron acá, mi mamá y después cuando yo tuve a los chicos me atendió en dos partos, pero todos los controles los hice siempre con él y después mis nietos. No siempre estaba en los partos porque me decía “Vas a tener para tal fecha y a lo mejor estaba de viaje o en un curso”. Yo considero que la verdad el Doctor Bimbi dio su vida por Perito. Le pusieron todo, al igual que Elena, porque Elena vivía en el Hospital. Viste vos le decías a Elena: “Elena, descansá un poco”, porque me parecía que estaba 24 x 24 en el hospital.

Y bueno después, yo había pasado una etapa fea que fue cuando mi hermana se enferma, y yo dejé a mi mamá ahí en el hospital. Yo le pedí ese favor al doctor, “Yo llevo a mi Hermana ¿Puedo dejar a mi mamá acá? Y si, él la atendió como una reina. Así que como uno se va a olvidar de esa gente. O por ejemplo un día mi mamá, no sé qué le pasó, que no caminaba, dura estaba. Llamé al Doctor Bimbi y cuando llega el Doctor, podés creer que se curó, se levantó ahí nomás. Se mejoró de verlo, te juro. Se curó de verlo. Yo siempre le agradezco al Doctor, cuando lo encuentro, el haberme tenido en cuenta. A él, a Elena, porque en ese tiempo viste, sos joven y queres trabajar en todos lados y ellos me enseñaron a trabajar. Agradecerle todo lo que ha hecho por mi familia, porque realmente siempre era el Doctor Bimbi si estabas enferma y te atendía, siempre fue muy querido en mi familia.

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