Vademékum by Diego Ante

CONTENIDO Página 4 Kode Abdo Artista Dígital Página 6 Tino Christmann Fotógrafo Página 10 Marguerita Premuroso Ilustradora Página 12 SOBRE LA PORTADA La imagen de la portada es una ilustración de Sara Blake hecha originalmente para la fundación DACS United, Designers Against Child Slavery.

CRÉDITOS DISEÑO Y ARTÍCULOS POR: Diego Ante IMÁGENES (en orden de aparición): Sara Blake Kode Abdo Tino Christmann Marguerita Premuroso Jason Seiler

Jason Seiler Ilustrador Página 16 Sara Blake Ilustradora

EDITORIAL

Momento de Consulta Piense por un momento, toma en sus manos una revista que no conoce, pero que por alguna razón sintió por ella cierta atracción, es como cuando uno ve a alguien diferente, y no puede sacar su imagen de la cabeza, esa imagen nos mantiene al tanto y conscientes de que ese personaje era real, esa imagen se convierte en su esencia y es esa imagen la que nos llevará a desear conocer un poco más de esa atracción, lamentablemente esa persona se va y probablemente no la podremos volver a ver. Ahora piense un poco más, ¿Qué pasaría si usted pudiera tener un manual de consulta sobre todas esas imágenes?, un manual de donde no se pudieran escapar, eso es VADEMÉKUM, así que ahora relájese y disfrute. Como miembros de la sociedad moderna en donde la inmediatez es el pan de cada día, y en donde nuestra rutina supera nuestro deseo de aprender, hemos dejado de lado aquello que alimenta nuestra alma. El arte es un término que ha perdido valor, pues ya no estamos dispuestos a beneficiarnos de él, nuestro ser se ha visto esclavizado por las necesidades de otros y es imposible pensar en un momento que sea nuestro, un momento para nuestro propio gusto, para un placer autónomo. ¿En qué momento la sociedad abandona ese gusto por el arte?, si desde pequeños nos encantaba rayar paredes, leer cuentos, crear cosas. No creíamos que fuéramos a crecer nunca, es por eso que debemos alcanzar la plenitud, y para eso debemos ser capaces de unir la inocencia característica del niño, de aquel que poco ha visto pero que todo lo disfruta y la experiencia que hemos acumulado al pasar de los años, porque “Cada vez que las facultades humanas alcanzan su plenitud, necesariamente se expresan mediante el arte.” John Ruskin*. Con esta publicación lo que verdaderamente se quiere, es que usted recuerde esa inocencia, que se pierda unos minutos en las páginas que están a continuación y se dé un momento para usted mismo, en el que usted realmente disfrute y se identifique con aquél personaje que le estamos presentando y con sus imágenes. Éste es el momento para que libere su espíritu y si bien, yo sé que es difícil abandonar lo que se ha convertido en tradición para recuperar la esencia misma, debemos probar que es posible. Haga uso de éste VADEMÉKUM, que en definitiva es eso, un manual de consulta sobre las nociones fundamentales del arte. John Ruskin: Escritor, Crítico de Arte y Sociólogo Británico (1819 – 1900)

Kode Abdo aka bosslogic

Ser capaz de contar historias a través de imágenes no es tarea fácil, lograr conmover al espectador dejando en él una huella requiere de más que saber usar una herramienta, pues no es la herramienta lo que hace al artista, es su capacidad de transmitir mensajes. Kode Abdo es un artista digital de tan solo 24 años. Nació en Siria pero ha vivido desde los dos años en Australia, actualmente vive en la ciudad de Melbourne. Cuando estamos frente a una de las obras de Kode, sentimos inmediatamente energía, pues es gracias a su manejo del color, en donde luces intensas, y fuertes contrastes se unen para involucrar al espectador. Sus obras impactan de inmediato, y su atención por el detalle logra que nos sintamos parte de la escena, es como estar dentro de una película en donde podríamos recorrer “virtualmente“ cada espacio de la imagen, casi que podemos tocar cada elemento. De éste modo Kode logra que entremos en su cabeza y seamos parte de su mundo. Como él mismo dijo

tras haberle preguntado que lo llevó a dedicarse a ésto, “poder contar una historia visualmente o hacer que alguien sienta como si estuviera viendo una película desde una imagen inmóvil es un regalo que me gustaría mantener y usar en toda su extensión“. Además podemos apreciar como sus imágenes están influenciadas por un artista como Fatoe, un artista con una versatilidad incomparable, capaz de entender las necesidades de su público para así ajustar sus imágenes a un mensaje concreto. Fatoe es capaz de, como en una pieza musical, tener momentos de euforia totales en donde todo el sentimiento se ve impreso en sus trazos fuertes, pero al igual da la oportunidad de momentos de descanso en donde mantiene un estilo claro y limpio, causando así tranquilidad.

Esto mismo lo podemos ver en los trabajos de Kode, es capaz de mantener la atención del espectador a través de esa variabilidad, donde hay espacios de calma y otros en el que somos atacados por la imagen, dejando claro así una historia, en donde el espectador tiene la oportunidad de interpretar basado en sus propias experiencias. Tal vez la importancia de sus imágenes está en la capacidad de mostrarlas de una manera cinematográfica, es como si se hubiera tomado una escena de una película, pero no cualquier escena sino es la escena más influyente, recordando de cierto modo el instante decisivo de Henri CartierBresson, las escenas que presenta Kode Abdo están tomadas en el momento preciso, en donde la imagen se convierte en el mejor personaje para contar una historia.

Es ahí donde Kode se ha hecho exitoso pues ha sido capaz de crear imágenes que dejan en el espectador una huella, porque ahora tiene una nueva historia para contar. Y aunque éste ya es un gran logro, Kode se mantendrá mejorando pues como el mismo lo ha sugerido, “Sé el mejor que puedas ser porque no hay tal cosa como ser el mejor artista, el arte es un lenguaje que todos podemos hablar pero que se interpreta de distintas formas. Hay veces en que muchos lo entienden y lo aman y otras en que son pocos los que lo entienden, pero son éstos pocos el mundo para uno como artista. En el momento en que uno entiende que la persona con la que uno quiere competir por sus habilidades en el arte está esperando en el espejo, ese es el momento en el que uno empieza a hacerse a sí mismo, y si se continúa haciendo a sí mismo, tus habilidades empezarán a mejorar“.

TINO

CHRISTMANN De pequeños siempre mantuvimos una necesidad por conocer, era natural para nosotros mantenernos experimentando con la vida para lograr nuestros objetivos. Queríamos tocar, mirar y probarlo todo, porque a través de nuestra propia experiencia generábamos la definición de nuestro entorno. De pequeños, no nos importaba que tan locos pudieran ser nuestros sueños, pues eran nuestros y eso era lo que importaba, de éste modo jugábamos a ser bomberos, policías, pilotos, astronautas y siempre estábamos en una aventura distinta. Pero a medida que crecemos, muchos olvidamos ese instinto, y buscamos soluciones más sencillas, o por lo menos que puedan darnos mayor seguridad y es así como nuestros sueños empiezan a desvanecerse. Sin embargo aún hay quienes mantienen esa mentalidad joven y entre ellos está Tino Christmann, un fotógrafo Alemán quién reside en Hamburgo y

FOTÓGRAFO

quién a sus 20 años considera de ésta, la ciudad perfecta para una persona creativa como él. Tino ha enfocado su trabajo especialmente hacia la fotografía de moda y hace uso del estilo vintage y de los colores para transmitir sus emociones.

“Pienso que desde mi primer contacto con la cámara, el proceso de tomar algo y transformarlo en algo más fue como una droga para mi“

Tino es un fotógrafo empírico que siempre se dirigió hacia aquello que lo llevaría a cumplir sus objetivos, como el mismo lo ha dicho: “Desde pequeño siempre estuve fascinado por el arte y siempre supe que quería un trabajo creativo. Pero nunca pensé que me convertiría en fotógrafo. Ahora no puedo pensar en hacer otra cosa. De pronto se debe a que pienso que otros trabajos pueden ser faltos de color. Pienso que desde mi primer contacto con la cámara el proceso de tomar algo y transformarlo en otra cosa fue como una droga para mí. “ Este fotógrafo recomienda que si realmente queremos destacarnos, no hagamos nuestro trabajo por ser famosos, sino porque disfrutamos de lo que hacemos, si no hay pasión en él, los resultados nunca serán suficientes para satisfacer a un público. Además es importante encontrar una identidad, no hemos de enfocarnos en el trabajo de alguien más, busquemos inspiración pero no copiemos el trabajo de otros.

Marguerita

Premuroso

Comunicar siempre ha sido una necesidad para el ser humano, y Marguerita no estuvo exenta de verse envuelta por esa necesidad, desde pequeña siempre quiso expresarse visualmente y desde ahí empezó esa búsqueda por la imagen. Ésta mujer, nacida en Milán ha sido influenciada por grandes artistas como lo son Schiele, Giacometti, Bacon e ilustradores de la talla de McKean, Mattotti, Pinter entre otros. Disfruta a plenitud de su versatilidad y de su capacidad para variar entre sus “personalidades“ que si bien son distintas, a veces alegre y colorida, otras veces oscura; en conjunto forman a una gran artista. De este modo es capaz de transmitirle al espectador sus sentimientos por medio de la imagen, del

color, esa sensibilidad es la que logra hablar por ella, transformándose en grandes obras, en imágenes que nos sumergen en ellas y nos invitan a ser parte de la escena, a compartir un escenario con sus protagonistas, quienes permanecen callados hasta que encuentran alguien dispuesto a escuchar su historia. “Mis temas principales usualmente terminan siendo excéntricos, graciosos y criaturas gordinflonas, que parecen tener principalmente una cosa en común: Generalmente parecen tener un sueño escondido que ciertamente están a punto de volver realidad en algún lugar“, es así como el espectador se mantiene cautivado tratando de descubrir ese secreto de sus personajes, tratando de ayudarlo, tratando de ser parte de la historia. Es ahí cuando se empieza a pensar cómo logra ella contar historias de forma diferente, ¿cómo ser creativo en un mundo en el que pareciera estar todo hecho?; pues es ahí donde Marguerita soluciona el problema y nos dice que si supuestamente todo está hecho, pues hagamos uso de la vida misma para mantenernos creativos, visitemos exposiciones de arte, viajemos, conozcamos personas, animales, lugares, pues cualquier cosa que parezca

“No temas a atreverte, expresando lo que un artista es y siente [...] Yo considero el éxito como una droga, porque una vez que lo has probado, debo reconocer, no puedes vivir sin él“

interesante tiene una historia que contar, y nosotros tenemos las herramientas para hacer de su historia algo invaluable, una historia que valga la pena oír. Ahora que hemos encontrado la historia, es hora de preparar como la vamos a contar, para esto ella hace bocetos de lo que trata de expresar y luego usa lo mejor de cada uno para llegar a algo mayor en lo cual trabajar. Habiendo alcanzado eso, se remite a los detalles, para lograr finalmente una composición que realmente comunique. El proceso de bocetación es muy importante para ella, pues es ahí donde ella tiene la capacidad de sentirse libre, de relajarse, donde puede dejar salir su instinto y donde su personalidad se ve reflejada de forma más honesta. El consejo que nos deja es “No temas a atreverte, expresando lo que un artista es y siente y no te preocupes por otros que juzgan tu trabajo“. Marguerita es una mujer que tiene la necesidad de estar aprendiendo constantemente, y ahí se ve reflejado su éxito al cual considera como una droga “porque una vez que lo has probado, admito que no puedes vivir sin él“.

Jason r e l i Se Cuando vemos una gran obra de arte, o vemos una gran ilustración, muchas veces no pensamos en el preámbulo que llevó a ese éxito, muchas veces consideramos que porque esa obra fue creada por cierto artista, realmente ya se sabía que iba a ser exitosa y es así como olvidamos que esos artistas también dudan a la hora de trabajar, o mejor dicho, hay momentos en los que ellos también deben luchar con la incertidumbre de si aquello que se está haciendo terminará bien.

Es así como encontramos a Jason Seiler, un ilustrador Estadounidense que con tan solo 32 años, ya ha tenido clientes tan importantes como MAD, The New York Times, The Wall Street Journal entre otros, además recientemente

trabajó como diseñador de personajes en la película de Disney, Alicia en el País de las Maravillas dirigida por Tim Burton. Él explica que cualquier persona puede dibujar, pero esto requiere de trabajo duro y constante, si se tiene disciplina y gusto por lo que se hace se puede triunfar y más allá de algo que podría considerarse “talento natural”, está el trabajo. Y es por eso que ahora además de todo lo que hace, se desempeña como profesor, da clases en línea a través de schoolism.com y como él dice “Todo el mundo puede hacerlo […] Mientras tengas la voluntad de realmente hacer el trabajo y de escuchar lo que digo, yo te enseñaré como dibujar, los estudiantes que lo hacen terminan haciendo un gran trabajo, por eso sigo enseñando.” Es precisamente ahí donde está la diferencia entre el que triunfa y el que no, mientras algunos desperdician su tiempo en cosas variadas, o simplemente no tienen la disciplina para alcanzar sus sueños, esos pocos que si lucharon, trabajaron y tuvieron voluntad para alcanzar eso que anhelaban, son los que finalmente logran triunfar. Jason estudió Ilustración en Chicago en la Academia Americana de Arte, y su estilo recuerda a la pintura renacentista por su manejo de la forma; él es un clásico moderno pues se expresa mayormente a través de la caricatura, pero logrando un realismo impactante. Sus imágenes se caracterizan por su vitalidad, desde sus bocetos que pareciera que

pudieran hablar hasta sus obras con mayor detalle, tienen siempre una cosa en común y es el realismo. El color en sus obras es otro elemento para destacar, en donde independientemente del medio, siempre usa un método similar a como maneja la acuarela, a través de la variación de opacidades, y de superposición de colores es capaz de comunicar. Por último Jason nos deja algo en que pensar y es que si hemos logrado ya ciertas habilidades pero como artistas no estamos avanzando, tal vez no estamos haciendo lo que queremos, necesitamos un cambio de actitud, si lo que buscamos es ser reconocidos pero trabajamos en algo pequeño, pongamos todo nuestro empeño en ese pequeño proyecto como si estuviéramos trabajando para la empresa más grande, siempre demos lo mejor de nosotros, que ese esfuerzo se verá recompensado a través de los logros que alcanzaremos.

Su estilo recuerda a la pintura renacentista por su manejo de la forma; ĂŠl es un clĂĄsico moderno pues se expresa mayormente a travĂŠs de la caricatura, pero logrando un realismo impactante.

Esos pocos que si lucharon, trabajaron y tuvieron voluntad para alcanzar eso que anhelaban, son los que finalmente logran triunfar.

SARA

BLAKE 16

Vivimos en una era digital en donde no podemos negar la facilidad y eficiencia que nos pueden traer las herramientas virtuales, pero así mismo dejamos de lado las virtudes de la esencia del arte, tanta perfección nubla la intervención humana. Sara Blake es una artista Estadounidense, que ha sido capaz de unir lo mejor de ambas partes para conseguir resultados de una estética incomparable, en sus propias palabras “Yo amo la naturaleza tangible de dibujar algo a mano en principio, pero amo la libertad y la alegría de lo digital. Para mí fue el matrimonio más natural“. El arte para Sara es algo más de emoción que de razón, logra transmitir sensaciones a través de su propio pensamiento y de su propio estado de ánimo, por eso sus obras pueden tener personalidades tan variadas, y comunicar de formas tan distintas. “Amo mi propio estilo no por cómo se ve, pero por cómo se siente. Es como una pasión. Es como cocinar o como los deportes para algunas personas. Esa soy yo, y realmente es la única forma en la que sé hacer las cosas“ Si viviéramos en constante sorpresa, seríamos más propicios a ser creativos. Si

nos detuviéramos con mayor frecuencia a disfrutar de nuestro entorno, tendríamos más herramientas de trabajo, más opciones para comunicarnos, no solo en cuanto al arte sino en nuestra propia vida. Estamos tan cercados por modelos de perfección que no valoramos esas mal llamadas imperfecciones, que a la hora de la verdad, son las que logran la síntesis de un trabajo, es lo que lo hace humano. Mantenernos activos y variados conlleva a tener mayores experiencias, y esto significa que tendremos más cosas que decir. Sara no es solo una ilustradora, sino además es Directora de Arte, Diseñadora, y escritora, lo que le da más herramientas a la hora de comunicar. Todas estas áreas de conocimiento se ven reflejadas en su flujo de trabajo, “Escribo más seguido que lo que hago bocetos. Intento capturar cómo me siento, quién creo que soy y cómo me relaciono con el mundo. Encuentro que articular eso primero me lleva a definir lo que será mi próxima pieza“. Sara es una de esas artistas que hay que mantener en la mira, pues seguramente seguirá sorprendiendo a través de su arte, que cada vez logra mayor reconocimiento.