TOP 5
CIUDADES IMPERIALES Vista:
Rabat - Kasbah des Oudayas
Gusto:
Meknès - Té con menta
Tacto:
Rabat - Ebanistas
Olfato:
Fez - Curtidurías
Oído:
Marrakech - Hospitalidad Marroquí
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Fez Enclavada entre las montañas del Alto Atlas, Fez se muestra como el centro neurálgico de la artesanía de Marruecos. Su medina aún conserva los atractivos de la antigua ciudad medieval y encierra un auténtico museo viviente de colores y olores intensos.
Meknès Conocida como el Versalles de Marruecos, Meknès conserva la grandiosidad de una antigua capital, cuyos tejados de color aguamarina denotan un pasado glorioso. Para completar el entorno, el Atlas se presenta con toda su naturaleza como telón de fondo.
Rabat
Centro financiero y ciudad capital del paĂs, Rabat se ha convertido en una de las metrĂłpolis mĂĄs cosmopolitas de Marruecos. Las construcciones blancas de su medina contrastan con el azul del mar que, a lo lejos, perfila las esencias de una ciudad costera.
Marrakech
Designada como la ciudad roja, Marrakech encierra en sus murallas una de las medinas mรกs hermosas del mundo รกrabe. Ubicada en las puertas del desierto, tradicionalmente ha sido y sigue siendo el centro de comercio mรกs importante de Marruecos.
Antes de viajar Geografía
Marruecos se ubica en el extremo Noroeste del continente africano. Apenas 20 km separan Marruecos de Europa, por medio del Estrecho de Gibraltar. La superficie del país es de 446.550 km2, y 710.850 km2 si se incluye el territorio del Sahara. Está delimitado por el mar Mediterráneo en el norte y por el océano Atlántico en el oeste. Las fronteras terrestres están delimitadas por Argelia en el este y Mauritania en el sur.
Cómo vestirse
Elegir la ropa que llevar y ponerse en Marruecos depende de la zona y de la época del año en la que viajes. Algo que no debe olvidarse es la protección contra el sol: sombreros, gafas o pañuelos. El calzado cómodo es fundamental en un país donde no todas las calles están asfaltadas.
Clima
Si vas a Marruecos no puedes permitir que te sorprenda el tiempo. Es un país muy diverso en su clima por el hecho de la diversidad de su paisaje. Tiene costa, montañas y desierto y el clima cambia de un lado al otro. En las ciudades costeras, por ejemplo, los inviernos son muy suaves y los veranos, calientes. La temperatura varía desde 12ºC en invierno hasta 25ºC en verano. Hacia el interior, los inviernos son más fríos (la temperatura puede bajar hasta -20 ºC), y los veranos, más calurosos (la temperatura puede sobrepasar 40°C). En los picos de las montañas, durante la mayor parte del año, las temperaturas son inferiores a -17 ºC y la nieve se queda mucho tiempo. La mayoría de las precipitaciones caen entre el norte del país y el Atlas Medio. Te aconsejamos llevar ropa ligera de algodón en verano y cubrirte la cabeza para protegerte del sol. En invierno, en la parte montañosa, hay que ponerse ropa de más abrigo y en la costa sería bueno si llevaras un impermeable. Y claro, si eres una mujer, no olvides vestirte con precaución para no ofender a los musulmanes con las faldas o vestidos cortos.
Oficinas de Turismo Rabat Esquina de Rue Oued El Makhazine con Rue Zalaga-BP Tel: +212 537 673 918 Fez Immeuble Bennani, Place de la Résistance, Boulevard Moulay Yousef Tel: +212 535 623 460 Meknès Place Administrative, 127, Ville Nouvelle Tel: +212 535 526 022 Marrakech Boulevard Mohamed V, 176, Ciudad Nuevs (Guéliz) Tel: +212 524 430 886 10
Hay que tener muy en cuenta a cuál de las Ciudades Imperiales viajarás, si te adentrarás en el desierto o si irás a la costa. En las ciudades del interior, como Fez y Meknès, es recomendable llevar ropa fresca, aunque la manga larga es importante para evitar la exposición prolongada al sol. En invierno no es necesaria ropa de abrigo fuerte, pero una chaqueta es básica al caer la tarde y en las primeras horas del día. En Marrakech el calor es más asfixiante en verano debido a los vientos del Sahara, por lo que hay que tener aún más cuidado con la protección solar. Si decides ir al desierto, debes llevar también ropa de abrigo. Lo mismo es aplicable a la costa, como en Rabat, con temperaturas más suaves durante el día y más frescas por las noches. Es fundamental el respeto hacia los lugareños a la hora de vestir, sobre todo si eres mujer y si visitas lugares sagrados.
Salud en Marruecos
Marruecos no presenta peligro para la salud: existen las mismas enfermedades que en Europa. Los consejos de salud son de sentido común. No hay vacunas obligatorias para viajar a este país, aunque se recomienda aplicar la vacuna contra la tuberculosis. Es conveniente, igual como en cualquier otro viaje, la inoculación contra el tétanos. En las ciudades imperiales existen clínicas privadas o estatales donde se contará, generalmente, con buenas condiciones. Las farmacias están, generalmente, bien atendidas. Abren en un amplio horario y cumplen guardias nocturnas rotativas. El agua en Marruecos es potable, aunque es
aconsejable beber agua embotellada. En cualquier tienda de venta al público puede conseguirse una botella de 1 ½ litros por alrededor de 8 DH. Es siempre recomendable lavar bien las frutas y verduras; evitar baños y salpicaduras en agua estancada; protegerse del sol de Marruecos, especialmente en zonas áridas o desérticas de temperatura elevada. El factor que más aqueja a los viajantes es la deshidratación. Es conveniente ingerir al menos dos litros de agua por día. En los viajes por zonas montañosas o desérticas, es recomendable usar calzado alto, como precaución para evitar picaduras de serpientes o escorpiones, aunque no es algo que ocurra habitualmente. Recuerda que en Marruecos algunas farmacias en vez de tener la cruz tienen como símbolo una luna y que el teléfono de servicios de emergencia es el 177. Así que, lo dicho, tranquilidad, y a disfrutar de este maravilloso país.
Festivales Marrakech Marzo, del 17 al 24 Rallye Maroc Classic Tema: deporte Mayo Caftán de Marruecos Tema: arte y cultura Junio, del 20 al 24 Festival de las artes populares Tema: arte y cultura
Meknès Mayo y Junio FICAM, Festival International de Cine de animación Tema: cine Rabat Mayo Festival Mawazine – Ritmos del Mundo Tema: arte y cultura Casablanca
Noviembre y Diciembre (del 30/11 al 08/12) Festival Internacional de Cine de Marrakech Tema: cine
Mayo El Festival del Bulevar de los jóvenes músicos Tema: arte y cultura
Fez
Essaouira
Junio (del 8 al 16) Julio (del 20 al 23) Festival de Fez de músicas sa- Festival Gnaoua y Músicas del gradas del mundo Mundo Tema: arte y cultura Tema: arte y cultura
Idioma
El árabe es la lengua que predomina en Marruecos, aunque la mayoría de personas dominan también el francés y, en los lugares más turísticos, se habla español. Existen algunas diferencias entre el idioma que se habla en la calle, el árabe dialectal y el berebere, y el de las administraciones y los medios de
Instituciones españolas en Marruecos Embajada de España en Rabat: Rue Ain Khalouya, Rte. des Zaers, Km 5, 3 Suissi Tel: +212 (0) 537 633 900 e-mail: emb.rabat@maec.es Consulado de España en Rabat: Av. Ennassar, 1 Tel: +212 (0) 537 687 470 e-mail: cog.rabat@maec.es comunicación, donde se utiliza el árabe clásico.
Días Festivos
Las fiestas musulmanas siguen el calendario lunar. Los días festivos son los siguientes: · Fatih muharram (1º de Muharram), primer día del año musulmán. · Ashura, el 10 de Muharram. · Aid al-Mawlid, fiesta del nacimiento de Mahoma, el 12 de Rabi’ al-Awwal (tercer mes). · La noche del destino (Lailat al-Qadr), el 26 de Ramadán. · La fiesta del fin del Ramadán (Aid al-Fitr), la madrugada del último día del mes e inicio del Shawal (décimo mes). · Aid al-Adha, la fiesta del sacrificio o del cordero, el 10 de Du-l-Hiyya (último mes). Además de las fiestas religiosas, en Marruecos hay fechas fijas en nuestro calendario marcadas generalmente por acontecimientos sociopolíticos: · 1 de enero: día del año nuevo cristiano. · 11 de enero: Manifiesto de la Independencia, que conmemora la presentación de este documento en 1944. · 1 de mayo: Día del trabajo · 30 de julio: Fiesta del Trono en recuerdo de la coronación de Mohammed VI. Una de las fiestas civiles principales en todo el país. · 14 de agosto: Fiesta de la Lealtad (Oued Eddahab). Conmemoración de la toma del río de Oro. · 20 de agosto: Fiesta de la revolución del Rey y del Pueblo. · 21 de agosto: Fiesta de la Juventud, que sirve también para recordar la fecha del nacimiento de Mo-
Breve vocabulario útil
Sí: Naam / Oukha No: Lá Gracias: Shukran De acuerdo: Muwáfiq / Ouakha Por favor: Min fadlik / Aafek
Buenos días: Sebah el kheir Buenas noches: Msa el kheir Adiós: Be-Slama Hasta luego: Ilál-liqá/Beslama
Perdón: Ismahlí No entiendo: Lá afhham Estoy bien: Labès Cuidado: Chouf 11
Vista Kasbah des Oudayas
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a Kasbah des Oudayas es uno de esos lugares mágicos en Marruecos, donde el tiempo no existe y te olvidas del mundo. Es un recinto fortificado que era la zona defensiva de la ciudad, situado en el punto más elevado para tener unas buenas vistas del territorio. Las paredes de la Kasbah son azules, de ese que enamora, y blancas, en unas calles laberínticas que te atrapan entre las murallas, llegando hasta el mar que se expande por el horizonte. Desde la plataforma que hay al final de la calle principal se ve la playa, la ciudad de Salé y el punto en que se encuentran el río Bou Regreg y el mar. La Kasbah es la parte más antigua de Rabat donde, a parte de pasear sin rumbo, debes ver la puerta principal (Bab Oudaya), las galerías de arte, la mezquita el-Atiqa (la más antigua de la ciudad) y el Museo de los Oudayas, que expone joyas, instrumentos, cerámica y vestimentas tradicionales marroquíes. En la Kasbah, el Café Maure, es un buen lugar para tomar un té marroquí disfrutando de unas buenas vistas al mar y a la ciudad de Salé. Lo encontrarás en: Av. Al Marsa, al lado de la Place des Oudayas, en la medina, Rabat. Precio: entrada gratuita 75
Vista Zoco Tahti Puede que la medina de Rabat no sea tan grande o exótica como la de cualquiera de las otras Ciudades Imperiales, sin embargo, te ofrece la tranquilidad de pasear sin ser atosigado y de poder hablar con los lugareños. El Zoco Tahti se organiza alrededor de la Rue du Consuls y se extiende por las calles de la medina, supuestamente ordenadas pero aparentemente laberínticas. Puedes curiosear entre la amplia oferta de bolsos, babuchas, alfombras y otras artesanías típicas que se ofrecen, intentando no tropezar con el suelo inacabado. Siguiendo hacia el río, llegas al mercadillo más curioso de Rabat, donde los puestos se montan sobre mantas en el suelo, y se venden productos inverosímiles, objetos rotos y carentes de valor. Lo encontrarás en: souk Tahti, en la medina Horario: comercial
Las grandes Avenidas La arquitectura colonial, las avenidas con palmeras y el ambiente de negocios son los protagonistas en Rabat. Es la capital de Marruecos, más calmada que Casablanca y bastante limpia. La ciudad se articula en torno a la Avenida Mohammed V, donde están la mayoría de edificios públicos e institucionales marroquíes, junto a las cafeterías y hoteles más concurridos. En la misma avenida está también la estación principal de trenes (Rabat Ville), bastante moderna y transitada. Siguiendo la Avenida Mohammed V llegamos a la Medina, y encontramos la muralla del siglo XVII que separa la ciudad moderna de Rabat de la parte antigua. La Avenida Hassan II sigue la muralla hasta el mar, donde el Bulevard Tariq al-Marsa te lleva, siguiendo el río Bou Regreg, hasta la necrópolis de Chellah. En la moderna zona de Agdal, las avenidas también protagonizan el paisaje.
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Lo encontrarás en: Av. Mohamed V. Esta es la avenida más importante, con zona de paseo y cafeterías que instalan fuera grandes terrazas
El Mausoleo de Mohamed V
Vista
Muy cerca de la torre Hassan se encuentra este otro monumento fundamental de Rabat. Entre ambos se extiende una impresionante explanada con cientos de columnas, todo lo que queda de la mezquita que nunca se terminó. El mausoleo fue diseñado bajo las pautas del estilo clásico marroquí, con una decoración exquisita en la que destaca el azulejo y siguiendo la tradición de los demás panteones del país. Pese a ello, es obra del arquitecto vietnamita Eric Vo Toan. Su construcción se llevó a cabo entre 1961 y 1969 y en su interior descansa el cuerpo de Mohamed V junto a sus dos hijos. Lo encontrarás en: cerca del Boulevard Abi Regreg Horario: todo el día todos los días de la semana Precio: entrada libre
La Torre Hassan La Torre Hassan es uno de los puntos con mayor interés turístico de Rabat y el símbolo más conocido de la ciudad. Es el minarete de una mezquita que no ha llegado a nuestros días, pero que fue uno de los proyectos más ambiciosos del sultán AlMansur: comenzó a construirse a finales del siglo XII para ser la mayor mezquita del mundo. Quedó inacabada tras la muerte del monarca, pero nos ha llegado este impresionante minarete de 44 metros, lejos, eso sí, de los 80 del plan original. La torre Hassan está rodeada de jardines, cerca del Mausoleo de Mohamed V; visita la zona al amanecer o al atardecer, momento en el que la luz es perfecta para disfrutar de la belleza del lugar. Lo encontrarás en: junto al mausoleo de Mohamed V Precio: entrada libre 77
Gusto Té con menta
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ay un olor característico en las calles de Meknès: el perfume del té con menta, también conocido como el whisky bereber. El aroma viene de los puestos callejeros, de las casas, de las tiendas y de los hoteles. En todos los lugares, a todas las horas. Es lógico que ésta sea la bebida nacional de Marruecos. Su valor refrescante está asociado a su inigualable sabor. Existe un componente social en compartir un vaso de té que comienza por su preparación: sólo lo prepara el cabeza de familia, o, si está ausente, su mujer o la persona mayor. Esta es la oportunidad perfecta para que el anfitrión dé una clase sobre el tema: cómo se precalientan los vasos; cómo se eligen las hojas; cómo debe caer el filo de agua caliente, etc. Además del tradicional té verde con menta, se suele acompañar con azúcar moreno, vasos peculiares y coloridos, además de bizcochos. Sin duda, es una experiencia para vivir lentamente, a su ritmo, y que no debes perderte.
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Gusto El cuscús El cuscús es el plato nacional marroquí por excelencia. Se compone de granos de sémola de trigo, cocinados al vapor en la llamada cuscusera, acompañados de diversos ingredientes. El recipiente del cuscús se arregla en tres partes: la de abajo es una olla ajustada y alta, la intermedia es más baja y ancha con perforaciones en el fondo y la superior es la tapa que también tiene algunas pequeñas perforaciones. Este famoso plato, además de riquísimo, es el más ancestral de la cocina marroquí, y se acostumbra a comer el viernes al mediodía.
Restaurante Collier de la Colombe Este simpático restaurante, situado a cinco minutos caminando a la izquierda del Bab Mansou, ofrece una cocina refinada y muy honesta. Se puede comer un clásico menú marroquí, con una entrada, un primer plato y postre, siendo recomendable la bastella, una de las especialidades de la casa. Recomendamos también el cordero a la parrilla y las tagines de pescado. Hay una hermosa vista del valle y el servicio es amable y atento. Es un poco más caro que los demás, con precios de 100 a 250 DH, pero la cocina es rica y bien elaborada. Lo encontrarás en: Rue Driba, 67, Meknès Precio: de 100 a 250 DH 52
Restaurante Omnia
Gusto
Restaurante familiar ubicado en el patio de una casa en una pequeña calle fuera de la medina. Aquí comerás en un auténtico hogar marroquí en vez de en un restaurante formal. Recomendamos los platos tradicionales marroquíes, como los tagines y la bastella. Sus precios varían entre 60 hasta 120 DH, pero ofrece una cocina casera un poco más refinada, pero tampoco excesivamente elaborada. La propietaria es simpática y habla un buen inglés, pero el trato puede no resultar excesivamente atento. Vale la pena aunque sólo sea para experimentar una auténtica comida casera de Meknès a un precio accesible. Lo encontrarás en: Derb ain el fouki, 8, en el quartier Rouamzine, Mekenès Precio: de 60 a 120 DH.
Restaurante Pavillon des Idrissides La terraza de este restaurante, situado en la plaza El-Hezin, es una buena opción para tomar un té al final de la tarde o al principio de la noche, observando el ir y venir de la gente que pasa por la principal plaza de la ciudad. La comida, que oscila entre 70 a 100 DH, resulta cara y no del todo satisfactoria, pero su ubicación y sus vistas sobre la plaza El-Hezin son, quizá, las mejores de todo Meknès. Recomendamos tomar un té con menta, a su ritmo, y observar el espectáculo de la plaza al anochecer. Es, sin lugar a dudas, una experiencia inmejorable. Lo encontrarás en: Dar Smen, El-Hedime, 147, Meknès Precio: de 70 a 100 DH 53
Tacto Ebanistas en la medina de Salé
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n el souk El Najarine - souk El Kabir de Salé, hay un taller de madera donde trabaja Lididi Abdessamad, ebanista de profesión. Huele a madera, hay virutas en el suelo, polvo en el aire y se escuchan máquinas trabajando. Los ebanistas de MenuiserieSalé Moderne tallan a mano la madera, para crear decoraciones en muebles y puertas artesanas que venden a particulares o exportan a Europa. La técnica se trabaja en madera de cedro original de Marruecos, se dibuja en un papel la cenefa, se tallan los motivos florales y tradicionales marroquíes en la madera y, finalmente, se decora con detalles en hueso y metal. Es sólo un ejemplo de la variedad de artesanías y talleres que puedes encontrar en la medina de Salé. Lo encontrarás en: souk El Kabir, en la medina, Salé.
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Tacto El-Ghezel, el zoco de la lana en Salé La lana virgen se sumerge en agua muy caliente en una bañera de piedra con un horno de leña en la parte inferior. Se le añade pigmento natural, según el color que se desee, y se remueve con un palo largo de madera. Se tintan las distintas balas de lana de color amarillo, verde, azul, rojo, rosa o naranja, en función de las comandas, y se cuelgan en la pared hasta que se secan. El proceso de la lana se vive en el Zoco el-Ghezel de Salé, que está a la sombra de los árboles y es donde se regatea el precio de la lana, tintada o virgen, y se subasta ropa que traen las mujeres al mercado. Lo encontrarás en: Place Souk el-Ghezel, en la medina, Salé.
Los tatuajes de Henna La henna, utilizada para decorar manos y pies, es uno de los elementos más representativos de la belleza y la cultura popular marroquí. Símbolo generador del bien y talismán contra el “mal de ojo” o cualquier otro maleficio, se utiliza desde hace siglos en todas las ocasiones festivas y ceremonias religiosas. Aunque es en las bodas donde la aplicación de la henna adquiere un sentido casi místico. Los diseños abarcan desde los más simples, hasta auténticas obras de arte, en los que abundan motivos florales o lineales. En las Ciudades Imperiales es posible ver muchos puestos callejeros donde tatuadores, mayoritariamente mujeres, trazan auténticas obras de arte sobre la piel.
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Tacto La cerámica de las tagines La cerámica es uno de los productos típicos de Marruecos, y la tagine, es sin duda alguna su pieza estrella. Hechas para el uso práctico o simplemente para la ornamentación, se modelan en un torno y, una vez cocidas, se enfrían durante varias horas, se recubren con un esmalte blanco y, sobre la cubierta, el artesano dibuja rosetones y motivos decorativos con un pincel y a mano alzada. También podemos encontrarlas sin pintar, aunque es típico que cada una de las regiones del país utilicen sus propios tonos, principalmente cuatro: marrón, verde, azul y amarillo. Este último es el más representativo de la ciudad de Salé, uno de los sitios más famosos por su producción. Los alfareros siempre se alegrarán de demostrar su destreza con las manos y te invitarán a un té con menta mientras ves como trabajan. Lo encontrarás en: la medina de Salé y en el complejo artesanal Village des Artisans, Salé.
Productos de belleza Callejeando por los zocos es imposible no detenerse ante la variedad de productos de belleza, para muchos de nosotros inverosímiles, que ofrece la cultura marroquí: aguas florales, como la de rosas; jabón negro, elaborado a partir de aceitunas negras y que es un potente exfoliante natural; polvo Kohl, utilizado para delinear los ojos; aceites, como el extraído del higo chumbo o el famoso aceite de argán; piedra pómez, utilizada como exfoliante; pasta dental al miswak, blanqueadora; diferentes tipos de henna, para cuerpo y cabello; o perfumes sólidos vendidos en bloques de colores. Y es que las mujeres marroquíes utilizan un sinfín de productos para embellecerse, totalmente naturales y artesanales, que no tienen nada que envidiar a los productos cosméticos químicos que compramos en Occidente. Es un gusto perderse y experimentar olores y texturas nuevas en la piel, ¡sólo atrévete! 85
Olfato El olor de las curtidurías
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ste es el olor más característico de Fez y también la imagen más exportada de su medina. Pozas multicolor de tintes, un fuerte olor a podrido y un proceso que casi no ha cambiado durante siglos. Los tintoreros se introducen dentro de las pozas y pisotean las pieles durante horas para que los colores se distribuyan de forma uniforme. Finalmente, las pieles teñidas son secadas al sol sobre el suelo de piedras o extendidas sobre los techos de las viviendas. Los viajeros empiezan a subir escaleras que parece que no se acaben nunca, hasta llegar a una terraza desde donde se ve el duro esfuerzo que tienen que hacer los curtidores y los tintoreros. Un vendedor marroquí explica todo el proceso: se raspan las pieles con cal para encurtirlas y darles más elasticidad. Después se bañan con ácido sulfúrico, se secan, se engrasan para ablandarlas y se alisan. Finalmente se tintan de índigo (azul), gualda (amarillo) o cochinilla (rojo), para dejarlas secar y convertirlas en babuchas, bolsos o cinturones. Un trabajo muy duro bajo un sol que no da tregua, pero que ofrece una de las imágenes más características de la ciudad.
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Olfato Los olores de la medina La medina de Fez es un caleidoscopio de olores. La menta, las almendras, el clavo, el comino, el azafrán, las naranjas, la nuez mascada, la madera de cedro, el curry... Es el olor del cuerpo acalorado y la carne colgada en las puertas de las carnicerías. Y también los olores de los puestos callejeros anunciando alguno de sus manjares, de los de los hornos donde acuden las mujeres con velo y los de los vendedores ambulantes que sirven la tradicional b´sara, una sopa de ajo y judías espaciada. Olores que saldrán de sus plazas, nos llegarán por sus puertas y se elevarán por encima de las callejuelas apretadas de la ciudad vieja. Son estos olores, que no se veden en los paquetes turísticos, los que otorgan a Fez su característica personalidad.
El Atlas Medio A 80 quilómetros de Fez te edentrarás en el universo olfativo de las montañas del Atlas Medio. Esta sucesión montañosa se extiende a lo largo de 350 km, del suroeste al nordeste de Marruecos, ubicada entre el Rif y el Alto Atlas, y ocupando una superficie total de 2,3 millones de hectáreas, es decir, el 18 % de la zona montañosa del país. Su paisaje es deslumbrante, con bosques de cedros milenarios y monos de barbería, que son de la misma raza de los que se encuentran en el peñón de Gibraltar. En el corazón de estas montañas, nace el río más largo de Marruecos, el Oum Er-Rbia. Destacamos las ciudades de Ifrane y Azrou, así como las fuentes termales de Sidi Harzem y Moulay Yacoub. 32
Olfato La naturaleza de Ifrane Ifrane es un tranquilo pueblo de montaña ubicado a 65 kilómetros al sur de Fez. Fue construido por los franceses en 1930 como destino vacacional y su nombre, Ifrane, significa “grutas” en berebere. Su aroma es el de un olor suave a naturaleza en los parques, los lagos y los jardines. Durante el invierno, constituye uno de los destinos de esquí más importantes de Marruecos, por lo que se la conoce como “la Suiza de Marruecos”. La fauna del parque nacional incluye 37 especies de mamíferos, 140 especies de aves y 30 especies de réptiles y anfibios. Los bosques y su clima son similares a los que se encuentran en las regiones de frío intenso de algunas regiones de Europa.
El olor de cedros centenarios de Azrou Azrou es una pequeña aldea situada a 80 kilómetros al sur de Fez. Por su ubicación en medio de la naturaleza, es un excelente punto de partida para realizar excursiones que te llevarán a descubrir este otro lado del país, el Marruecos de las montañas de la cordillera del Atlas. Saliendo de la ciudad de Fez, se aprecian los cambios en el paisaje: el urbanismo desordenado de una gran ciudad deja paso a los campos de cultivo que pronto se convertirán en grandes montañas – en la zona del Parque Natural existen puertos de montaña que superan los dos mil metros. La belleza de su bosque de cedros centenarios, donde habitan los monos de Berbería, ha hecho famosa la zona.
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Oído La hospitalidad en Marrakech
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i algo hace de Marruecos un destino realmente atractivo es la hospitalidad de su gente. A lo largo del recorrido que une las cuatro Ciudades Imperiales encontrarás tenderos que te invitarán a un té con menta mientras negociáis el precio de un producto, y gente que te abrirá la puerta de su casa con una sincera sonrisa, ya sea para invitarte a comer o para enseñarte sus costumbres. En Marrakech, te encontrarás con fiestas improvisadas en las azoteas de todos los hostales, donde la música y el olor a té con menta harán que te sea imposible rechazar la invitación. En los riads, alguien se ofrecerá para darte clases magistrales de danza del vientre o de cocina tradicional marroquí, donde las risas y las charlas estarán aseguradas. En Marrakech, la hospitalidad tiene nombre de mujer y se llama Kenza. A ella la encontrarás en el Riad Sacr, incluido en la lista de los hostales de esta guía. La frase Bienvenidos, esta es vuestra casa, es una de las máximas de la hospitalidad en Marruecos y, aunque a veces pueda parecer un mito, si tienes los ojos abiertos y rehúyes la desconfianza, te darás cuenta de que la hospitalidad marroquí también existe en Marrakech. Lo encontrarás en: Riad Sacr (para la dirección y los precios, ver el apartado Dónde dormir en Marrakech de esta guía) 119
Oído
La convivencia de las religiones Comunidades judías y cristianas conviven con el Islam en Marruecos. Desde tiempos inmemoriales, Marruecos ha sido un territorio de paso que unía África con el viejo continente, por lo que diferentes etnias y culturas han tomado Marruecos como escenario principal. De las numerosas migraciones que conoció el país a lo largo de los siglos, emanó un espíritu de tolerancia y apertura de mente que ha durado hasta la actualidad. En Marrakech encontrarás mezquitas por todos lados, pero también existe una iglesia cristiana en la Ciudad Nueva (Guéliz) donde podrás ir a misa, así como una antigua sinagoga judía en el barrio del Mellah que, si bien actualmente está en desuso, es un testimonio vivo de la tolerancia del Islam respecto las otras religiones. Sinagoga de Lazana La encontrarás en: Derb Ragrada, 6, Mellah (dentro de la medina) Horario: de lunes a sábado de 9h a18h Église des Saints-Martyrs (Iglesia cristiana) La encontrarás en: Rue el Iman Ali, Guéliz (Ciudad Nueva)
Venta en las calles La medina de Marrakech está repleta de complejos artesanales, como el de la Avenida Mohamed V, así como de zocos laberínticos donde se pueden adquirir todo tipo de productos artesanales procedentes de Marrakech y de otras ciudades, como la madera de Essaouira y la cerámica de Safi. Los vendedores resultan muy empalagosos e insistentes y los precios que piden no guardan relación alguna con la realidad. No debes olvidar que te encuentras en la ciudad más turística de Marruecos, por lo que los precios resultan mucho más caros respecto otras ciudades como pueden ser Fez o Rabat. El regateo, pues, se convierte en algo obligatorio, y esto es algo que debes tener en cuenta si no quieres ser estafado o no quieres ofender a nadie. Regatear es una costumbre marroquí muy arraigada, no tengas vergüenza. Lo encontrarás en: todos los zocos de la medina de Marrakech Precio: el que consigas sacar 120
Oído Gatos y perros Pocas veces en Marrakech verás a un marroquí paseando a su perro. Tampoco verás demasiados perros por la calle y puedes tener la certeza de que, los que veas, probablemente serán de un extranjero. En cambio, te darás cuenta que las calles de la ciudad están llenas de gatos poco asustadizos que se te acercan sin miedo pidiendo comida. Esto es debido a que el Islam considera a los perros como animales non gratos, puesto que antiguamente eran animales sucios que transmitían enfermedades. En cambio, se dice que si una mujer cuida a un gato durante toda la vida, las puertas del paraíso quedarán automáticamente abiertas para ella, por lo que es habitual que las mujeres salgan con comida y tarros con leche para alimentar a los gatos callejeros.
Cuentos y leyendas en la plaza Jemaa el Fna Antiguamente era habitual que una o varias esclavas escenificaran cuentos y contaran leyendas en el harén del palacio del sultán. También era común que una anciana, poseedora de la sabiduría antigua, contara a un auditorio del palacio las aventuras de los héroes míticos o las fábulas que siempre escondían alguna moraleja. Actualmente, esta tradición se puede revivir en la plaza Jemaa el Fna al caer la noche. Junto a los tenderetes en los que se vende comida, se crean unos círculos espontáneos de gente que se junta alrededor de un contador de historias. Aunque no hables ni árabe ni bereber, vale la pena juntarse al círculo (llamado halqa) para participar de los teatrillos que allí se improvisan. Al terminar el espectáculo, no te olvides de dar una propina. Lo encontrarás en: Place Jemaa el Fna Horario: cada día al caer el sol 121
Dormir en Meknès
Touring hotel Si quieres un hotel low-cost con habitaciones limpias y con baño en la habitación, este hotel es perfecto para ti. No hay internet y las camas son de muelles, por lo que si sufres de la espalda es mejor evitarlo, pero es un hotel bonito y limpio. Además, se encuentra en una buena zona de la ciudad nueva.
Lo encontrarás en: Av. Alllal Ben Abdellah, 34, en la ciudad nueva, Meknès Contacta con ellos en el teléfono: +212 05 35 52 23 51
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Hotel Majestic Este hotel es el más antiguo de Meknès, construido en 1937. Aquí, tendrás la impresión de hacer un viaje al pasado gracias a su decoración de los años 30 y 40, todo intacto. El hotel es muy simpático y grande, tiene Wi-Fi y una terraza con una vista panorámica de la ciudad. El dueño es muy simpático, hospitalario y agradable. Te ofrecerá todo tipo de información que necesites sobre la ciudad. Lo encontrarás en: Av. Mohamed V-Meknes, 19, en la ciudad nueva, Mekenès Contacta con ellos en el teléfono: + 212 05 35 52 20 35 Página web: www.hotelmajesticmeknes.ma e-mail: accuel-client@hotelmajesticmeknes.ma
Dormir en Meknès Hotel Regina Si lo que estás buscando es un hotel básico y barato, sólo para ir a dormir, este hotel es para ti. Las habitaciones son muy simples y no dispone de Wi-Fi. Pero lo que le da valor es su gran patio luminoso y espacioso, y su situación privilegiada al lado del Museo de Meknès y justo en la entrada a la medina. Lo encontrarás en: Rue Dar Smen, 19 Contacta con ellos en el teléfono: +212 05 35 53 02 80
Riad Zahra Este riad es una joya dentro de Meknès. Situado en pleno centro de la medina, cerca de todos los monumentos de interés, encontrarás un sitio donde descansar del ruido y el caos de la medina. La paz y la tranquilidad están aseguradas y tendrás impresión de que te encuentras en dentro de un cuento de las mil y una noches. El riad está construido en una antigua casa andalusí, con habitaciones preciosas y limpias. Además, tiene un patio bonito en el centro al estilo árabe. Dispone de todo lo que se necesita para una estancia más que agradable. Lo encontrarás en: Touta 5 Sidi Abdellah el Kassri, en la medina, Mekenès
Maroc hotel Las habitaciones son básicas pero están muy limpias, con baño propio. Los baños compartidos se limpian varias veces al día y disponen de agua caliente, cosa que no es habitual en la ciudad. Las habitaciones no tienen ventiladores pero son tranquilas, no se escucha el ruido de la calle. La ubicación es buena, por lo que se puede ir dando un paseo hasta la me-
dina y está al lado de la gran parada de taxis para Moulay Idriss. Lo encontrarás en: Av. Rouamzine,7, Derb Ben Brahim, Mekenès Contacta con ellos en el teléfono: +212 05 35 53 00 75
Otros Hoteles en Meknès Hotel Palace
Dirección: Rue du Ghana, 11, en la ciudad nueva Tel: +212 535 400 468
Hotel Toubkal
Dirección: Av. De Mohammed V, en la ciudad nueva Tel: +212 535 522 218
Hotel de Paris
Dirección: Rue de Roumazin, 58, en la medina
Hotel Rif
Dirección: Rue d´Accra Tel: +212 535 522 591 e-mail: hotel_rif@menara.ma
Habitaciones de huéspedes Sweet Sultana
Dirección: Derb Sekkaya Tiberbarine, 4 , en la medina Tel: +212 535 535 720 e-mail: info@dar-sultana.com
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Comer en Marrakech
Restaurantes Chez Bahia (Plaza Jemaa el Fna): Rue Riad Zitoun el Kdim Horario: 8-22h De 15 a 25 DH
Super Marocaine (Ben Yousef): 43-46, Place el Barodienne Horario: 7-21h De 30 a 50 DH
Chez Chegrouni (Medina): Plaza Jemaa en Fna Tel: +212 661 434 133 De 50 a 100 DH
Bar L’Escale (Guéliz – Ciudad Nueva): Rue Mauritanie Tel: +212 524 433 447 De 50 a 60DH
Chez Omar (Mellah): 14, Place Qzadria Horario: 11-17h De 25 a 40 DH
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Llegar a Marrakech En avión
Transportes públicos
Aeropuerto Internacional de Marrakech Menara
ONCF
El aeropuerto internacional de Marrakech está localizado a 6 km al suroeste del centro de la ciudad. Hay vuelos regulares a Casablanca, Madrid y Girona. Royal Air Maroc: Av. Mohamed V, 197 (Marrakech) Tel: +212 (0) 524 447 910 Tel. reservas: +212 (0) 524 425 501 Conexión con el centro de la ciudad: Autobús número 11. Precio: 20 DH (ida) o 30 DH (ida y vuelta antes de 15 días) Taxi pequeño. Precio: 35-50 DH Taxi grande. Precio: 65- 110 DH.
Por carretera La autopista enlaza con Casablanca y Rabat al norte y con Agadir al sur. La carretera N-9 comunica con Casablanca al norte. Aunque está en buen estado, tiene mucho tráfico. Hacia el sur, esta vía se dirige a Ouarzazate, bien asfaltada pero con muchas curvas, cuestas muy pronunciadas y un puerto de montaña de 2.260 metros que a veces está cortado por culpa de la nieve. La N-7 llega de El Jadida y de Safi por el noroeste. Esta carretera está asfaltada y se circula con normalidad. La carretera N-8 enlaza con Fez al nordeste y con Essaouira al oeste. Es bastante buena pero hay algunos tamos de curvas.
Hay trenes a Tánger, Oujda, Fez y Casablanca. Dirección: Av. Mohamed VI.
Autocares Supratours
Salidas periódicas hacia Essaouira, Agadir, Laayoune, Dakhla, Zagora, Tinerhir, Merzouga, Errachidia, Beni Mellal, Meknès y Fez. Dirección: Av. Hassan II.
Autocares CTM
Salidas periódicas hacia Casablanca, Fez, Ouarzazate, Agadir, Essaouira, Errachidia, Smara, Dakhla y Laayoune. Dirección:Rue Abou Bekker Seddik (extremo occidental de Marakech). Importante: Algunos autocares CTM, tienen parada en la estación de Bab Doukkala.
Durante el viaje Historia de las Ciudades Imperiales
Las Ciudades Imperiales hacen referencia a lugares que, en momentos muy diversos de la historia de Marruecos, fueron capitales de diferentes dinastías. No fueron, por tanto, las capitales de un gran imperio, pero su trayectoria y el patrimonio que acumulan las convierten en un lugar de gran interés cultural. Por orden cronológico Fez, Marrakech, Meknés y Rabat son hoy las Ciudades Imperiales.
Fez, el inicio de todo
La primera de estas ciudades que fue considerada capital fue Fez, que lo ha sido en repetidas ocasiones y de reinos diferentes. Fue fundada en el 789 por Idris I como centro comercial bereber y su hijo, Idris II, terminó fijando allí la capital de la dinastía idrísida a comienzos del siglo IX. Durante cien años la ciudad se embelleció y recibió una gran cantidad de población andalusí y procedente de Túnez, lo que la convirtió en una de las grandes joyas del mundo árabe. Con la decadencia de los idrísidas, la ciudad perdió durante siglos la consideración de capital, pero nunca dejó de ser una referencia por su importancia cultural, económica y por su belleza.
interna provocada por los Wattásidas, familias que ostentaban ya importantes cargos. De forma sangrienta acabaron con los meriníes y tomaron el poder, aunque su siglo de reinado estuvo envuelto en un importante contexto de crisis.
Marrakech se impone
Los saadíes, que se autoproclamaban herederos de Mahoma, controlaron desde principios del siglo XVI el sur de Marruecos y se instalaron en Marrakech. Aunque en un principio se mostraron respetuosos con los Wattásidas, pronto se rebelaron contra ellos y, tras años de enfrentamientos, se hicieron con el control de todo Marruecos, trasladando de nuevo la capital de Fez a Marrakech. Hasta mediados del siglo XVII la dinastía saadí reinó en Marruecos, dejando en su capital importantes monumentos como el palacio El Badi o las tumbas saadíes.
Marrakech, capital de almorávides y almohades
Los almorávides tomaron el testigo de la dinastía idrísida a mediados del siglo XI con el objetivo de reunificar el norte de África y al-Andalus, así como devolver el rigorismo al Islam. Para ello, fundaron la ciudad de Marrakech en torno al año 1070 y la convirtieron en capital de su reino, Marruecos. Lograron en muy poco tiempo formar un imperio que controló los actuales Marruecos, Mauritania, Malí, parte de Argelia y buena parte de la Península Ibérica durante casi un siglo. Desde la segunda década del siglo XII una nueva facción, los almohades, amenazó el poder almorávide hasta suplantarlo en 1147 tomando Marrakech. Su poder fue firme durante medio siglo.
De vuelta a Fez
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La decadencia almohade desde comienzos del siglo XII fue aprovechada por la dinastía de los meriníes, que en 1250 traslada la capital a una ciudad que no ha dejado de prosperar: Fez. La capital vivió entonces su auténtico apogeo, sobre todo con una edad de oro en el siglo XIV. En esta época se dota a Fez de toda una nueva parte administrativa (Fez el-Yedid), con palacios, mezquitas, cuarteles y numerosas madrazas para la formación de esa administración. A mediados del siglo XV hubo una importante revuelta
Moulay Ismail transforma Meknés en capital de su imperio
Tras décadas de descontrol y desunión al final del reinado saadí, la dinastía alauí, iniciada por Mulay Ali Sharif, logra unificar buena parte de Marruecos y establecer un periodo de paz que empieza en la década de 1660. La capital vuelve a trasladarse a Fez, pero por poco tiempo, ya que Moulay Ismail, en su ascenso al trono (1672-1727), elige Meknés. Fundada en el siglo IX, Meknés siempre había sido una ciudad secundaria, aunque desde el siglo XIV comenzó a dotarse de infraestructura. Se destruyó buena parte de la ciudad antigua para construir una nueva, empezando por muralla y puertas para seguir con mezquitas, alcazabas e impresionantes monumentos como Dar el Majzen. Muchos de ellos se construyeron a partir de materiales extraídos de otros lugares, como el palacio el-Badi de Marrakech.
Fez, capital de Marruecos durante la época de mayor crisis
Desde la muerte de Moulay Ismail Marruecos entró en una importante crisis, con enfrentamientos internos y las continuas embestidas colonialistas. Durante este periodo, la capital estuvo situada en Fez que, a pesar de las dificultades, recuperó su prestigio en el siglo XIX debido a su fuerza política, intelectual, religiosa y económica.
Rabat, de capital del protectorado a capital del nuevo estado marroquí
Por su buena posición geográfica, el entorno de Rabat ha contado con asentamientos desde el siglo III a.C. Fue una ciudad bereber desde el III d.C. y no tuvo una gran importancia en los sucesivos reinos hasta la llegada de los almohades, quienes la convirtieron en una fortaleza fundamental para ellos. Yaqub al-Mansur, a finales del siglo XII, proyectó convertirla en la ciudad más importante del reino y llegó a situar allí la capital durante cuatro años. Se planeó incluso la construcción de una mezquita mayor que la Koutoubia de Marrakech, de la que sólo nos ha llegado la Torre Hasan. La muerte de al-Mansur provocó la decadencia de la ciudad, que fue incendiada por Alfonso X y hasta el siglo XX sólo tuvo momentos de renacimiento gracias a la ciudad vecina de Salé. Sin embargo, en 1912, tras la conversión de Marruecos en protectorado franco-español, la administración francesa la convirtió en capital, alejada de las constantes revueltas en el resto del país.
Se construyeron nuevos barrios para los europeos, separados de los musulmanes, y la ciudad vivió una absoluta transformación. Mulay Yúsuf, sultán tras el tratado de Fez, también fue trasladado a Rabat. Su hijo, futuro Mohammed V, lideró los movimientos independentistas tras la II Guerra Mundial, lo que le obligó a exiliarse brevemente por la presión francesa. Su vuelta en 1955 provocó la independencia de Marruecos al año siguiente y mantuvo la capital en Rabat, como sigue siendo a día de hoy.
Política
La política contemporánea
La independencia de Marruecos (1956) supuso un cambio de mentalidad política en el seno del estado marroquí, aunque económicamente siguió dependiendo de Francia y, más tarde, de Estados Unidos. La instauración de la monarquía, con Mohamed V en el trono, supuso la casi total soberanía en manos de personalidades marroquíes, pero la situación de desigualdad social prevaleció: la monarquía marroquí se asemejaba más a los antiguos regímenes absolutistas que a las monarquías parlamentarias europeas modernas. No es de extrañar, pues, que gran parte de los años del reinado de Mohamed V hayan pasado a la historia como “los años de plomo”, puesto que supuso un periodo de gran represión política, en la que centenares de personas desaparecieron y otras tantas fueron encarceladas. Con la subida al trono de Hassan II empezó un perío-
Como la población infantil ha crecido mucho en los últimos años, las escuelas se han quedado pequeñas. Al faltar aulas, se ha adoptado una solución que consiste en la diversificación horaria. Algunos niños van a la escuela de 8 h a 10 h y de 16 h a 18h, mientras que otros van de 10 h a 12 h y de 16 h a 18 h, de lunes a sábado. Es por este motivo que el viajero puede tener la sensación de que los niños se pasan el día en la calle o por los caminos de montaña. La matrícula de los centros educativos es gratuita, pero los padres tienen que comprar los libros, por lo que muchas familias pobres o numerosas no pueden llevar a cabo dicho gasto anual. Existe para ello una organización benéfica que ayuda económicamente a las familias menos favorecidas. La escolarización durante los primeros años es en árabe culto un idioma que a los niños les resulta nuevo, ya que están acostumbrados a hablar en árabe dialectal o en bereber. A partir del tercer año, se empieza a estudiar el francés como lengua complementaria, mientras que las demás materias se siguen dando en árabe culto, que es el idioma oficial del país. Al terminar el sexto curso, el alumno puede decidir si quiere seguir estudiando o si prefiere trabajar, ya que el mínimo exigido por la ley laboral son los 12 años. rantes. Desde cerveza a licores, pasando por los vinos y el champagne. Está permitido comprar todo tipo de bebidas alcohólicas mediante la presentación del documento de identificación y la anotación de los datos personales del comprador.
La enseñanza
En Marruecos es habitual ver a niños jugando y corriendo por las calles a cualquier hora del día. Esto podría llevar a pensar que la escolarización no es obligatoria, o que no es un punto importante en la agenda del estado. Pero la realidad es otra. La escolarización de los niños es obligatoria de los 6 a los 12 años y el Ministerio de Educación hace lo posible para que la ley se cumpla. Existen escuelas en cada pueblo y cada aldea, pero es difícil que las leyes lleguen a todos los rincones de un país mayoritariamente agrícola. Allí es donde es más difícil hacer entender a los padres de la importancia de la educación de sus hijos. Muchos niños no van al colegio porque deben quedarse cuidando del ganado, puesto que sus padres piensan que aprender árabe culto o matemáticas no les va a servir para nada. En este sentido, las niñas son las que más discriminadas se ven por lo que respecta al acceso a la educación, ya que la mayoría de ellas deben quedarse en casa para encargarse de las tareas del hogar. 132
Si lo que el niño quiere es seguir estudiando, deberá acudir a un instituto, en el que seguirá cursando otros tres años y, después, al liceo, donde cursará tres años más de bachillerato. Los institutos sólo se encuentran en las grandes poblaciones o las ciudades, por lo que a los niños de campo se les hace más difícil poder seguir estudiando. Y lo mismo pasa con la universidad, también concentrada en los núcleos urbanos.
Consejos generales Clima · Incluso en invierno, no subestimes el sol: debes llevar siempre crema solar y sombrero. · Cúbrete siempre todas las partes de tu cuerpo para evitar quemaduras solares. Ropa fina de manga larga, es una buena opción. · Si te quieres adentrar en el desierto y zonas aisladas, conviene ir bien equipado y contratar los servicios de un buen guía de confianza, conocedor de la región. · Vestirse adecuadamente y sin llamar mucho la atención puede evitar algún contratiempo, sobre todo si eres mujer.
quiera acompañar a los hostales o los sitios que quieras visitar.
Guías y falsos guías · Hay que tener cuidado con los falsos guías. Por esto te recomendamos contratar un guía oficial (con foto y identificación). Sus tarifas son más caras, pero vale la pena: llegarás a los puntos de interés, te explicará los monumentos, las costumbres culturales y evitará el constante asedio en la medina. El precio de la visita guiada es de 35€ para grupos de 1 a 4 personas y 80€ para grupos de 13 a 16 personas. Es posible reservar estas visitas en la web www.fez.net
Ramadán · Durante el Ramadán todo musulmán adulto, sano de cuerpo y mente, debe dedicarse a la meditación y practicar el ayuno desde la salida hasta la puesta del sol. Por lo tanto, es recomendable evitar comer en público y ser prudente si fumas, bebes agua o eres cariñoso con tu pareja.
Pasaporte y visados · Si eres ciudadano de la Unión Europea, no necesitas visado. Si no es el caso, debes dirigirte al consulado de Marruecos más cercano, con un mes mínimo de antelación, para solicitar tu visado. · Tu pasaporte tiene que estar en vigor y con una validez mínima de seis meses desde la entrada a Marruecos. Puedes quedarte hasta 3 meses si eres de la Unión Europea.
Regatear · Cuando compres cualquier cosa debes tener en cuenta que todo se regatea. No existen normas para esta Interactuar con marroquíes costumbre tan arraigada, así que déjate llevar por cada · Si deseas preguntar algo en la calle, es mejor hacerlo situación. En ciudades más modernas como Rabat, a alguien que sea del mismo sexo que tú. Está mal visto verás que el límite de maniobra es mínimo, mientras que un hombre se dirija a una mujer en la calle. que en Fez, en Marrakech o en los pueblos del sur, no · Cuando mires una carta en un restaurante, debes pre- hay límites. star atención a las siglas “HT” (hors taxes) que están sólo algunas veces. Esta es la indicación de que la propi- Transporte na está incluida en el precio. Si no aparecen estas siglas, · Si dispones de pocos días de viaje, coge el autobús es de buena educación dejar una propina en todos los turístico durante 24h, que te permite subir y bajar donrestaurantes. La cuantía de la propina no está especi- de quieras. Te saldrá más a cuenta que coger un taxi. ficada, pero es costumbre dejar algunos dírhams, 10 Precio: 150 DH. · Un trayecto en taxi, dentro de la ciudad, no debe coscomo máximo. tarte más de 20 DH. Es buena idea llevar el billete de 20 Llamadas telefónicas e internet DH preparado para pagar sólo esta cifra. · Para llamar por teléfono a tu país debes tener en · Si te mueves en coche por Marruecos, debes tener en cuenta que las tarifas son más económicas por la noche cuenta que los límites de velocidad son muy estrictos, y durante el fin de semana. La opción más económica no debes rebasarlos nunca. La red de carreteras está son las cabinas que encontrarás en la calle (1,50 DH el bastante bien, pero debes tener cuidado en las rotonminuto), pero existen también los locales conocidos das, puesto que hay veces en las que tiene preferencia como teleboutiques donde puedes llamar por 10 o 20 el coche que viene por la izquierda y otras no, por lo DH el minuto. que las rotondas resultan bastante caóticas. · La mayoría de ciudades tienen sitios públicos para · Si vas con tu vehículo, conduce con mucha prudencia conectarse a internet. Debes preguntar el precio antes y, en invierno, ten cuidado con la nieve y el hielo. Antes de conectarte. También hay cafés y sitios públicos en de entrar en una pista infórmate de su estado actual y los que encontrarás conexión a internet. comprueba que la rueda de repuesto y los neumáticos están utilizables. Prevé una reserva de carburante y de Moneda agua. · Debes cambiar tus dírhams por monedas pequeñas · Si viajas en transporte público, ten en cuenta que el para evitar gastarte más de la cuenta en propinas y equipaje se debe facturar, pagando según el peso del donativos, puesto que siempre habrá alguien que te mismo.
Cuaderno de Bitácora Siete periodistas de viajes Cinco sentidos Cuatro Ciudades Imperiales Un desafío Descúbrelo por ti mismo Aquí está nuestro cuaderno de bitácora
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MEKNÈS Jovana Kostic
Periodista de viajes. Serbia.
Día 1. En la capital de los bereberes
Cada momento que pasamos aquí está lleno de emoción y parece una nueva aventura. “En la cultura bereber la mujer no puede mirar a la cara del hombre antes de casarse”, nos explica un agradable vendedor. Pero, por otro lado, lo que la mujer puede hacer es enviar un mensaje a través de la alfombra que teje para él. “No hay dos alfombras iguales – nos dice-, cada una tiene una combinación diferente de colores y adornos. Y cada una lleva un mensaje distinto, por supuesto”.”¿Entonces estas alfombras son una especie de cartas bereberes de amor?”, le pregunto. Empieza a reír y, un poco confundido, responde con una mezcla de francés, español e italiano: “Probablemente tienes razón mi amiga, podrían ser consideradas como una carta de amor bereber.
Día 2. Volubilis, una flor romana en el corazón de Marruecos
A unos 30 kilómetros de Meknès encontramos Volubilis, antigua ciudad romana, la ciudad romana mejor conservada de Marruecos. La imaginación es un don maravilloso. En un segundo, me transporta a tiempos antiguos. Veo ricas damas romanas paseando por este gran bulevar, mirando las tiendas, hablando y riendo. Puedo ver la belleza y los colores del foro y el gran templo, dedicado a sus dioses principales: Júpiter, Juno y su hija, Atenas. Parece increíble. La gloria de Roma está viva ante mis ojos. Ellos sabían cómo vivir sus vidas plenamente y cómo disfrutar de cada momento. “Carpe diem”, decían. Aprovecha el día, saca lo mejor de él. Es algo que realmente hacemos aquí en Marruecos. Y lo hacemos bien.
Día 3. En el Atlas: epifanías
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El Atlas es una cadena de montañas en el centro de Marruecos. Esperamos que sea nuestro oasis en este día caluroso. Aquí se encuentra un bosque de cedros lleno de monos, así que estamos con muchas ganas de visitarlo. La única solución para ir al Atlas es tomar un taxi colectivo que va a Azrou. Ir en un taxi colectivo en Marruecos significa siete personas atrapadas dentro de un Mercedes viejo cuyas ventanas no se pueden abrir. No voy a mencionar el olor o la temperatura dentro. Fuera hay 44 grados, supongo que dentro habrá al menos 50. Hemos intercambiado las miradas y decimos: “vamos”.
RABAT Bibiana Cristina
Periodista de viajes. España.
Día 1. We love Bastella
Aterrizamos en Casablanca alrededor de la 1.30 am. Nos quedaban aún varias horas para poder tomar el primer tren con destino Rabat. El aeropuerto estaba repleto de gente que como nosotras, tenía que pasar la noche ahí y que se las ingeniaba para poder descansar en los rincones más inverosímiles. A las 6 am tomamos el primer tren con destino Rabat. Parece sacado de una película de terror (incluyendo al revisor). En la cola de los billetes conocemos a Sophie, una mujer marroquí que vive en España hace más de diez años y que viene a pasar las vacaciones con sus hijos. Nos ayuda a orientarnos y nos promete una invitación a su casa. Rabat es una ciudad de negocios en la que contrastan infraestructuras modernas (tranvía, edificios de estado, banderas nacionales por doquier…) con construcciones que reflejan la esencia más mística marroquí. Nuestro primer contacto fue en la Medina. Sus cientos de callejuelas ordenadas de forma caótica (algunas de menos de 50cm de ancho), plagadas de colores, olores y ruidos que saturaban nuestros sentidos. Los negocios inverosímiles (barberías improvisadas en cualquier rincón, puestos de costura imposibles, librerías antiguas...), junto con la amabilidad de sus gentes (grupos de niños, comerciantes o ajenos que nos encontramos en el camino) y su sorprendente gastronomía (definitivamente amamos la bastella de pollo) hicieron que nos enamoráramos del lugar.
Día 2. La Kasbah des Oudayas, piensa en azul
No soy demasiado amiga del turismo estrictamente cultural, no obstante, hoy he querido romper prejuicios y nos hemos marcado tres destinos que según las guías y blogs no nos podíamos perder. Dos de ellos, la Tour Hassan y el Mausoleo de Muhammad V, han resultado ser puntos turísticos al que acuden las familias a sacarse la foto de rigor para poner en el salón. Dicen que “allá donde fueres haz lo que vieres” y nosotras no hemos sido menos. Como último destino, la Kasbah des Oudayas nos ha parecido espectacular. Ciudad amurallada dentro del propio Rabat, es un lugar con muchísimo encanto, propio de cualquier paisaje mediterráneo. Sus construcciones son de color blanco y azul infinito. Difícil no dejar volar la imaginación en sus paisajes, donde los niños corren y donde poder tomar un café con vistas al mar. Nuestra aventura gastronómica del día culmina con la primera tagine. 143
Tu Cuaderno
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Encontrarás también la guía de las Ciudades Imperiales a través de los cinco sentidos, en versión digital adaptada en Let it Guide.com Para descargarla puedes leer este código que te remitirá a la pagina:
CIUDADES IMPERIALES, MARRUECOS. Esta guía Travel Pills es una guía sensorial que te servirá de ayuda en tu viaje pero también de cuaderno de bitácora, de cartera para guardar tu pasaporte y toda la documentación que necesites. Además de poder tomar notas, en ella encontrarás los cuadernos del viaje de los autores y se convertirá en tu compañera durante las horas muertas. Esperamos que en tu regreso a casa, esta guía se transforme en un recuerdo imposible de olvidar.