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El complejo círculo familiar de Carlos III

La unión es indispensable para mantener la monarquía, a pesar de las diferencias entre todos los miembros y los escándalos, que parecen no tener fin en la casa real británica

Por KemBerlyn reyes / Fotos: aFP la monarquía siempre lucha por mantener su estatus y la familia unida, pese a los escándalos o diferencias que los acompañan. Esta unión es un valor que la reina Isabel II siempre resaltó. de hecho, Carlos ha sido muy familiar, al seguir con las tradiciones de su madre, aunque no le ha temblado el pulso para “castigar” a los miembros de la realeza que no respeten, o que no considere dignos de sus títulos.

CompLICaDa rELaCIón patErnaL no es secreto que la relación entre Carlos y su padre, el príncipe Felipe, fue bastante compleja. Por ser el primer hijo, y además heredero, enfrentó la rudeza y exigencias en su crianza, por parte del duque de Edimburgo, quien quería hacerlo un hombre de mayor peso y carácter. Mucho material fue escrito en la prensa británica, sobre las diferencias entre ambos, las cuales los condujeron a no estar casi nunca en la misma página. la base de esta relación tan distante se debió, en gran medida, a que Carlos era introvertido en su juventud y se inclinaba más por el arte que por el deporte. Esto molestaba mucho a su progenitor, quien lo presionaba para que no fuese un niño “débil”. varios libros que relatan a fondo las relaciones de esta familia, señalan la certeza de la relación padre e hijo, pero que esta mejoró los últimos años antes de fallecer el duque de Edimburgo y, de hecho, disfrutaban de su tiempo juntos.

“Felipe siempre estuvo más cercano a Ana, por su parecido en ideales y forma de pensar; en cambio, Carlos es como la reina”, dijo Eileen Parker, esposa de Mike Parker, amigo cercano del duque de Edimburgo

el Protector de sus hermanos

Carlos es el mayor de los cuatro hijos que tuvieron la reina Isabel II y Felipe, le siguen: Ana, Andrés y Eduardo. Con tanto peso que conlleva la corona, Carlos siempre ha estado en la mira de todos, por ser el primero en la línea de sucesión, lo que supuestamente ha ocasionado descontento entre sus familiares.

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Con Andrés, el “consentido de la reina”, la historia es otra, sobre todo los últimos años, en los que fue azotado por fuertes escándalos, que lo llevaron a ser desterrado de sus labores reales. Especialmente, este corte de la familia real con Andrés, surge por su vínculo con el pederasta y magnate jeffrey Epstein, y las acusaciones de abuso sexual por parte de una mujer identificada como virginia Giuffre, cuando era menor de edad.

E D uar D o DE E DI mburG o

Eduardo, el menor de los hermanos, siempre ha sido el más solitario, aunque puede influir la diferencia de edad entre él y Carlos, la cual es de casi 11 años. Pero con el tiempo, Carlos y Eduardo han tenido más cercanía, en especial para reconocer el trabajo que ha hecho el duque de Wessex; de hecho, autorizó que se le otorgara el título de duque de Edimburgo, que perteneció a su padre, el príncipe Felipe. Cercanos a la monarquía, han descrito un hecho desolador para este hijo de Isabel II, quien supuestamente, olvidó su cumpleaños.

La prInCEsa ana

En su intención de mantener el estatus de su familia, Carlos ha sido muy cercano a sus hermanos, especialmente con Ana, quien ha sido su consejera y cómplice desde su niñez. de hecho, durante la coronación jugó un papel muy importante de liderar un ejército de seis mil soldados para proteger al rey. Esto, definitivamente, fue histórico, por ser la primera mujer en ejercer este cargo.

s u qu E r ID o pa D r I no y m E ntor

El rey Carlos III se ha caracterizado por ser bastante selectivo en cuanto a su círculo cercano y relaciones, y una de las más especiales fue, definitivamente, la relación que llevó con su padrino y mentor, louis Mountbatten, quien también era su tío abuelo, primo de la reina Isabel II, y último virrey de la India británica.

Mountbatten tenía 79 años cuando fue asesinado en un atentado, en el que también murió su nieto de 14 años y otras dos personas. “no podía imaginarme cómo iba a superar la angustia que me causó una pérdida tan grande. Por esta experiencia horrible, entiendo de una manera profunda el sufrimiento de otros en estas islas, fueran cuales fueran sus convicciones religiosas o políticas. soy consciente de la larga historia de sufrimiento de Irlanda, no solo en las últimas décadas, sino a lo largo de la historia”, expresó el rey Carlos III durante una visita en sligo.

Los cuatro hijos de la reina Isabel II: Carlos III, Ana, Andrés y Eduardo, durante una vigilia en el funeral de su madre, en la catedral de San Giles, en Edimburgo

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