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El 2022 puede ser el año que lo cambie todo
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El pesimismo ha tomado el centro de la escena: con un Bitcoin por debajo de los U$S20.000 y un bear market que no parece cerca de terminar, los titulares que antes eran esperanzadores han devenido en catastróficos. Mientras que el 2021 estuvo marcado por sucesivos máximos históricos, el 2022 seguramente sea un año que muchos oportunistas dejarán para el olvido. Así es el humor de los mercados. Con todo, el índice Fear & Greed se ubica en miedo extremo.
El futuro es por definición incierto. No sabemos con certeza como variará el precio de las principales criptomonedas en el 2023, siquiera si estas repuntarán o si seguirán a la baja, con argumentos en una y otra dirección. No obstante, si hay algo que vale recordar -ahora más que nunca- es que el precio es solo un resultado, una consecuencia de los intercambios que se llevan adelante en el mercado. Si bien este es importante para medir las valuaciones de las personas sobre un bien o servicio, no es lo único en lo que deberíamos fijarnos. Hay mucho más que eso.
Lo que realmente importa
Lo que muchos faltan en reconocer, es que, por lo general, después de que se termina el bull run y comienza todo un proceso de recesión en el mercado cripto, lo que suele pasar es que se empieza a dar un proceso de innovación mayor.
Los verdaderos momentos de mejora, por lo menos en lo que respecta a desarrollo tecnológico y de ideas, suelen suceder en el bear market, que es cuando se le da mucha más atención a las cosas que realmente tienen significado. Este un momento en el cual la gente que perdió dinero se toma el trabajo de estudiar qué es lo que sucedió, y empiezan a prosperar los proyectos que de verdad contienen una propuesta de valor que haga la diferencia. A su vez, todas las demás criptos, las que no generan ningún cambio, desaparecen del mercado, como sucede en este tipo de ciclos, los cuales son también unos de los momentos de mayor creatividad y nuevas ideas: eso es lo que deberíamos estar viendo en este momento. Mientras nuevos proyectos sigan surgiendo y el mercado deseche aquellos que no valen la pena, entonces el futuro va tomando forma. Sin saberlo, el 2022 puede ser el año que lo cambie todo.
Caso similar podríamos mencionar con respecto al internet. A finales de los 90, una vorágine alcista
tuvo lugar en torno a las empresas “.com”, todo el mundo quería ser parte de la nueva economía. En tanto, montones de empresas surgieron en la web, y el mercado tecnológico no dejaba de subir. El desenlace fue que muchas de estas empresas terminaron quebrando y montones de personas salieron perdiendo. El humor de los mercados. Sin embargo, también hubo proyectos que resistieron la caída. Estas empresas siguieron adelante porque de verdad ofrecían contenido y una forma de mejorar la vida todos. Muchas de las que lo hicieron cambiaron al mundo para siempre.
Los fundamentos siguen ahí
Descentralización, dinero sano, libertad; los fundamentos de las criptomonedas prevalecen, más allá de su precio. Entretanto, habrá personas que no compartan estos valores, pero quienes creemos en ellos vemos un futuro provisorio. Al igual que con el internet habrá pasos en falso, no todo tiene que ser bueno. A veces dos pasos para adelante requieren uno para atrás, pero vale tomar impulso para seguir.
Desafío Exportar | Octubre 2022