Dos reyes y dos destinos

Suecia y Grecia representan no sólo dos geografías diferentes, aunque tiene en común el mar como vecino. Grecia tiene al Mediterráneo, mientras que en la nórdica Suecia el Mar Báltico es uno de sus límites

Pero hablaremos de sus dos reyes que son noticia y de quienes se comentará por un largo tiempo. Mientras uno es centro de una celebración el otro protagonizó su funeral, cerrando así un capítulo de la historia europea. Nos referimos al rey Carlos XVI Gustavo de Suecia, quien en 2023 celebra su Jubileo de Oro en el trono. El otro es Constantino II de Grecia, quien se despidió de este mundo a los 82 años. A diferencia de su colega sueco, no tenía trono ni corona, pero seguía siendo estimado por las casas reales europeas, con las que estuvo relacionado, no sólo por amistad sino vínculos familiares.

Ni corona ni nacionalidad

Grecia, el país donde nació la democracia, tuvo una monarquía que se inició con la dinastía de los Wittelsbach, antigua familia alemana. Luego, en 1862 llegaron los Glücksburg, depuestos al establecerse la República. Se mantuvieron en el trono hasta 1972. A esta última familia perteneció Constantino II de Grecia, príncipe de Dinamarca. Su reinado terminó después de celebrarse un referéndum donde los griegos decidieron establecer la República. Comenzó una nueva vida para Constantino, a quien el gobierno heleno le retiró la nacionalidad y le confiscó sus bienes.

Su reinado obedece a la vigencia de la Ley Sálica en la monarquía griega. Esta ley prohibía que las mujeres subiesen al trono, por esta razón, aunque la mayor era su hermana Sofía, la corona estaba reservada para su hermano Constantino.

Sus padres fueron Pablo I de Grecia y Federica de Hannover. Pablo era hijo de Constantino I y Sofía de Prusia, por lo tanto, bisnieto de la reina Victoria de Inglaterra. Así que Constantino II está emparentado con la casa real británica. Su madre Federica, también está vinculada consanguíneamente con Victoria.

Constantino II contrajo matrimonio con su prima Ana María de Dinamarca, quien se convirtió en reina consorte de los griegos. Ella es hermana de la reina Margarita de Dinamarca. Pero a su vez, este rey era hermano de Sofía, quien actualmente es reina emérita de España y su sobrino es Felipe VI, actual monarca español. Además, era primo de Felipe de Edimburgo. Todos estos lazos permitieron que su exilio fuese menos pesado.

En 1967, el joven rey de 24 años, y su esposa de 19 se refugiaron en Roma con sus dos hijos mayores, Pablo I, quien ahora pasa a ser la cabeza de esta casa real sin corona; y Alexia. Luego se mudaron a Londres, donde nacieron los tres menores: Nicolás, Theodora y Filippos. Allí gozaron del amparo de Isabel II, quien era madrina de Theodora y Constantino apadrinó al príncipe William.

A su regreso a Grecia se mudaron a Atenas en 2014 y vendieron su residencia londinense por una buena cantidad. Ya la salud del rey, quien nunca abdicó a sus derechos dinásticos, estaba resentida, sin embargo, en 2021 pensaba celebrar sus 80 años, pero la pandemia se lo impidió.

La última vez que se le vio en una celebración fue en la boda de su hijo Filippos con la millonaria suiza, Nina Flohr en 2020.

Su funeral tuvo carácter privado, siendo enterrado en la Finca Real de Tatoi, junto a sus padres. Así, sin grandes ceremonias, pero rodeado de miembros de la realeza y la brisa del Mediterráneo se despidió el último rey de los helenos.

El Jubileo de Oro

Este es el nombre que recibe el aniversario número 50 de un reinado. En 1973, un joven llamado Carlos Gustavo subía al trono al morir su abuelo, ya que su padre no pudo reinar porque falleció en un accidente aéreo siendo muy joven.

Carlos XVI Gustavo es algo indiscreto y en una entrevista sobre esta celebración reveló su escondido machismo ya que expresó cierta frustración por no tener por heredero a su segundo hijo, Carlos Felipe, ya que la sucesora al trono es Victoria, la mayor. Esto parece que levantó malestar en la heredera y puso en acción al equipo de relaciones públicas.

Pero como la fiesta debe continuar, el monarca, acompañado de su esposa Silvia, tiene preparado una gira por toda Suecia. Pero antes se hizo una nueva fotografía oficial, otra tradición en las casas reales. La realizó el fotógrafo Thron Ullberg, quien ubicó al rey delante del trono de plata, regalo a la reina Cristina con motivo de su coronación en la catedral de Estocolmo en 1650. Este trono es un símbolo de la monarquía sueca y uno de los emblemas de la nación.

El rey viste su uniforme de almirante con los rangos más altos de todas las Órdenes de Caballería suecas. En su cuello porta el Gran Comendador de la Orden Danesa de Dannebrog, además de las medallas conmemorativas reales suecas y noruegas.

Dos palabras marcaron la juventud de Carlos Gustavo, la dislexia y la timidez. Pronunciar un discurso significó para el joven rey todo un reto y dicen que llegó a memorizarlos para evitar equivocarse en la lectura.

La timidez no le impidió tener fama de playboy e incluso, después de su matrimonio con la alemana Silvia Sommerlath, se daba sus escapaditas a bares donde trabajaban chicas. Carlos XVI Gustavo celebrará este Jubileo de Oro con cierta discreción ya que corren otros tiempos.