Mensajero 211

Año 8

No. 211

TLALNEPANTLA

Mensajero Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla

CUAUTITLÁN

IZCALLI

ECATEPEC

7 de agosto de 2016

TEOTIHUACÁN

TEXCOCO

www.mensajero.mx

NEZAHUALCÓYOTL

Donativo: $5.00 VALLE DE CHALCO

JMJ 2016

Págs. 3, 8, 11, 13 y 16

Voz del Pastor

Vacaciones, divino tesoro Pág. 2

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Voz del Pastor

Mensajero 7 de agosto de 2016

DIRECTORIO Excmo. Sr. D. Carlos Aguiar Retes Arzobispo de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Guillermo Or z Mondragón Obispo de Cuau tlán Excmo. Sr. D. Francisco González Ramos Obispo de Izcalli Excmo. Sr. D. Oscar Roberto Domínguez Cou olenc, M.G Obispo de Ecatepec Excmo. Sr. D. Onésimo Cepeda Silva Obispo Emérito de Ecatepec Excmo. Sr. D. Guillermo Francisco Escobar Galicia Obispo de Teo huacán Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez Obispo de Texcoco Excmo. Sr. D. Héctor Luis Morales Sánchez Obispo de Nezahualcóyotl Excmo. Sr. D. Víctor René Rodríguez Gómez Obispo de Valle de Chalco Excmo. Sr. D. Efraín Mendoza Cruz Obispo Auxiliar de Tlalnepantla

Vacaciones, divino tesoro ¡No! La frase es “juventud, divino tesoro”. ¡Claro! Es cierto, sin embargo, si nos damos cuenta de qué se tratan las vacaciones, en su sentido más original y, por tanto humano, la frase queda bien.

Entendemos por juventud no sólo una edad, una etapa de la vida, sino una actitud ante la vida. Los rasgos de la juventud son el deseo de vivir, la apertura, los ideales, los sueños por ser. Junto, no lo podemos negar, con la conflictividad que surge de la lucha por el yo ante la autoridad, saber equilibrar esa relación de manera constructiva. El descubrimiento de emociones y sentimientos, sobre de la capacidad afectiva, que hace enfrentar temores, ilusiones, decisiones. ¿Qué tienen que ver las vacaciones con esto? Las vacaciones hacen referencia no sólo al descanso sino a la libertad.

Hoy soy libre de la escuela, de las obligaciones de un horario de trabajo, puedo organizar mi tiempo a mi gusto, al gusto del grupo o de la familia con la que salgo de vacaciones.

En las vacaciones todos somos un poco más jóvenes, si las sabemos aprovechar, pues la aventura está en la mente, el retomar cosas que habíamos dejado y que son necesarias para nuestra persona en lo físico, en lo psicológico, lo espiritual.

Una familia en vacaciones tiene la oportunidad para retomar las relaciones constructivas en ella, de afecto, de espontaneidad, de diálogo. Disfrutar juntos desde una caminata, un amanecer, un atardecer, una comida típica etc. Tiene la oportunidad de rejuvenecer.

Si miramos al Padre Dios en su descanso, si contemplamos esa escena que nos describe el Génesis 2, 1-4, aprenderemos qué significan nuestras vacaciones. No son un desahogo irresponsable, que destruya la persona y la familia, que afecte negativamente la naturaleza y la sociedad.

El descanso de nuestro Padre Dios nos enseña a disfrutar desde la creación hasta lo que cada uno de nosotros somos, lo que es mi prójimo, especialmente en la familia. Mirar desde dentro, a las personas y a las cosas, es una oportunidad para volver al sentido de la creación que el Padre miró como “muy bien está todo hecho”. ¡Vámonos de vacaciones! Aunque sea dentro de casa. ¿Cómo? Retomando los espacios de relación humana, de convivencia, de trato respetuoso aunque sólo salgamos a caminar en nuestro pueblo, en la ciudad, al campo para reencontrarnos con todo lo que es vida. Todo lo hizo Dios muy bien. ¡Descubrámoslo! ¡Felices vacaciones para todos!

Excmo. Sr. D. Jorge Cuapio Bau sta Obispo Auxiliar de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Francisco Ramírez N. Obispo Auxiliar Emérito de Tlalnepantla DIRECTOR GENERAL Mons. Víctor René Rodríguez Gómez Presidente de la Comisión Provincial para la Pastoral de la Comunicación DIRECTORA EN TURNO Abril Villanueva SUBDIRECTOR Mons. Luis Mar nez Flores DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO Samuel Nájera COLABORADORES Equipo de la Pastoral de la Comunicación de la Provincia Eclesiás ca de Tlalnepantla.

Registro en trámite.

Mensajero Es una publicación catorcenal de la Provincia Eclesiás ca de Tlalnepantla. Se distribuye en la Arquidiócesis de Tlalnepantla y en las Diócesis de Cuau tlán, Izcalli, Ecatepec, Texcoco, Teo huacán, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.

periodicomensajero@gmail.com

† Guillermo Ortiz Mondragón Obispo de Cuautitlán

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Mensajero

7 de agosto de 2016

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Editorial

¿La Virgen forjó una patria?

Por: Mons. Guillermo Ortiz Mondragón Obispo de Cuautitlán En 1942 aparece el film mexicano “La virgen que forjó una Patria”, en la que de manera sencilla se presenta cómo Miguel Hidalgo y Costilla, el padre de la Patria, explica el sentido de la presencia de Guadalupe en la historia y la iniciación del nuevo país que surge del encuentro entre dos culturas, los nativos de México y los europeos que, desde distintos países y regiones vienen como conquistadores o evangelizadores.

Es el P. José Luis Guerrero quien, mientras elabora su tesis doctoral en Derecho, con el tema sugerido por su asesor, las instituciones jurídicas en México y España al momento de la conquista, va al fondo de lo que él mismo comienza a nombrar el “acontecimiento guadalupano”. Tuve la oportunidad de dialogar con el P. José Luis mientras iba elaborando su maravilloso libro “Flor y canto del nacimiento de México”.

El título de aquella película a la que hice referencia al inicio, cobra un verdadero sentido, no sólo de patriotismo o devoción, sino de un verdadero acontecimiento que forja una nueva cultura. El mestizaje no es sólo un hecho racial, sino que va, desde la experiencia de fe hasta la cultura expresada en valores, estilos de vida y muchos elementos más.

No podemos, pues, hablar del “acontecimiento guadalupano” sólo como un

dato de la religiosidad popular, sino como un acontecimiento evangelizador, un lugar teológico, un espacio de reflexión cultural.

Es un acontecimiento que ha de iluminar el hoy de nuestra historia como mexicanos, sobre todo al descubrir la responsabilidad, no sólo el regalo recibido, de presentar al mundo un camino de solución a la gran problemática actual de conflictos sociales.

Primero estamos llamados a vivir este acontecimiento: El encuentro del camino de religiosidad de los antiguos mexicanos con Jesucristo vivo en el anuncio del evangelio y la misión generosa de los primeros frailes que llegaron. Ahí es donde la Madre del cielo viene a confirmar con su presencia en Cuautitlán para intervenir en la salud de Juan Bernardino, la misericordia de Cristo anunciada por los misioneros y atestiguada en la ternura de la siempre virgen María de Guadalupe, Madre del verdaderísimo Dios por quien se vive.

De ahí surge para los europeos y los nativos una visión nueva de su propio encuentro, en donde ven que dos razas distintas, dos culturas distantes, se hacen una sola.

Podemos sacar muchas conclusiones.

La que nos urge es la de la unidad de nuestra Nación. No es por decreto, ni por leyes, sobre todo, cuando con el

pretexto de apoyar minorías supuestamente desprovistas, está la idea de imponer principios que no son de nuestra cultura, que no tienen nada que ver con la realidad fisiológica, psicológica ni espiritual de la persona humana.

La educación en el sentido de la persona humana, su dignidad, la defensa de la identidad y de la vida, el derecho a la diversidad para la complementariedad, son aspectos a fortalecer, restaurar, confirmar.

No depende de leyes, depende de la conciencia de cada uno de nosotros que seamos verdadero mexicanos, constructores de una Nueva Nación, de la

cultura de la solidaridad, la justicia, la paz.

Seamos católicos o no, volvamos la mirada al “acontecimiento guadalupano” y analicemos su contenido a través de sus protagonistas: La virgen de Guadalupe, el indio santo Juan Diego Cuauhtlatoatzin, los conquistadores y los misioneros venidos de Europa.

Continuemos forjando una Patria que proyecte al mundo no un sometimiento temeroso a la presión mundial de una globalización que despersonaliza, sino a la comunión universal que construye la vida y la paz.

Su oración ante el muro de la muerte, donde se acercó apoyando su mano, después de encender una lámpara de aceite en conmemoración de las víctimas, que dejó como recuerdo de su peregrinación.

Peregrinación que prosiguió hasta el cercano campo de Birkenau, donde el Papa Francisco se detuvo ante el Monu-

mento a las víctimas de las naciones fue pasando ante las lápidas que en 23 lenguas dicen: “Por siempre deja que este lugar sea un llanto de desamparo, una advertencia a la humanidad, donde los nazis asesinaron alrededor de 1 millón y medio de hombres, mujeres y niños, en su mayoría judíos de distintos países de Europa”.

El Papa Francisco en Auschwitz y Birkenau

Grito silencioso hecho oración que invoca la paz Por: Radio Vaticano Elevando a Dios el corazón lleno de dolor, hecho oración silenciosa, el Papa Francisco peregrinó a los campos de concentración y exterminio de Auschwitz y Birkenau. La mañana del tercer día de su Viaje Apostólico que le llevó a Polonia, para la JMJ de Cracovia 2016, se caracterizó por la intensidad del silencio rezado en los lugares donde el odio y la guerra marcaron e hirieron el alma de la humanidad.

Firmando el Libro de Honor, el Papa Francisco - tercer Pontífice en peregrinar a Auschwitz, después de San Juan Pablo II y de Benedicto XVI escribió en español: “Señor ten piedad de tu pueblo, Señor, perdón por tanta crueldad”.

Quedan escritas estas palabras del Santo Padre, que se suman a la emoción

de su llegada y de su paso bajo la tristemente célebre inscripción “El trabajo hace libres”, en el que fue el mayor centro de exterminio de la historia nazi, donde murió más de un millón de personas, la mayoría de ellas judías. Y quedan grabadas también las imágenes de los momentos en que el Obispo de Roma fue saludando uno a uno a once supervivientes. Así como el haberlo visto en oración en el patio donde eran llamados los condenados a muerte, donde San Maximiliano Kolbe se ofreció para salvar a un padre de familia, coincidiendo además con el día en que se cumplen 75 años de ese gesto. El momento en el bajó a la celda donde este santo mártir fue encerrado para que muriera de hambre y de sed, donde vimos la oración del Papa arrodillado.

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Caminar Diocesano

Mensajero 7 de agosto de 2016

Los santos son un modelo de vida cristiana Por: Ruth Rivera El pasado 22 de julio, celebramos en toda la Iglesia, la fiesta litúrgica de santa María Magdalena, primera gran apóstol de la Resurrección, y ello fue motivo, para que en el pueblo de Cahuacán, en el municipio de Nicolás Romero, estuvieran de manteles largos, pues la santa mencionada, es la patrona de aquellas tierras. Cabe destacar que la parroquia de santa María Magdalena, en esta localidad es una de las más antiguas de todo el municipio, es por eso que la fiesta se llena de colorido con asistentes de muchos de los pueblos vecinos, y no sólo del municipio al que pertenece la parroquia.

La fiesta de Cahuacán, es una de las pocas que, en Nicolás Romero, conserva el sentido de fiesta de pueblo, con sus tradicionales rezos, procesiones, misas, cohetes, charreadas, y demás elementos propios de la fiesta. En la parroquia, la

fiesta grande se celebró el domingo siguiente al 22 de julio, día en que el Señor Obispo Francisco González Ramos acompañó a los fieles de la comunidad, presidiendo la santa misa.

En la homilía destacó algunos rasgos característicos de santa María Magdalena que son propios del cristiano, y que por ende no pueden faltar en su vida. El primero de los cuales es la conversión, que no se da en un único momento de la vida, sino en el constante seguimiento de Jesús, de la escucha de su mensaje y en el ser testigos de sus acciones en el mundo. La segunda es la oración que nos permite contemplar a Cristo, muerto y resucitado, porque María fue la discípula fiel que no tuvo miedo de estar cerca del Señor, y ello, la convirtió en una adoratriz, pero no en una adoratriz apartada del mundo sino bien invierta en él, anunciando a sus hermanos. La

tercera es ser apóstol, anunciador de la Buena Notica que es Cristo, que está vivo y que viene a salvar a los hombres.

Después de la Celebración Eucarística, hubo algunos cuadros de folklor de distintas regiones de nuestro país, la banda, los toros y un sin fin de atracciones que hicieron de ese día, algo com-

pletamente distinto al tranquilo pueblo de Cahuacán. Desde este espacio, felicitamos al P. Rogelio Peña, administrador de la parroquia, y al P. Inocencio González, vicario parroquial, y junto con ellos, a toda la comunidad cristiana que habita aquellas hermosas tierras de nuestra diócesis.

pide Dios es ser felices al donarse por los demás, a trazarse metas que causen en una constante alegría y un profundo amor. Pero ello es imposible si no se edifica sobre Cristo, él es la roca que hace firme todo proyecto. Si no se hace sobre él, todo termina por ser arena y ante una tempestad se derrumba.

Los jóvenes, acompañados de seminaristas y sacerdotes, han descubierto su vocación o han actualizado su respuesta, o bien, han recordado lo que implica

el camino de ser candidato, después llegar al seminario y por último llevar un tesoro en vasijas de barro.

El preseminario dio inicio el lunes 25 de julio de 2016 y concluyó en la tarde del siguiente viernes.

Oremos con insistencia para que, a ejemplo de Mateo, su respuesta sea generosa y busquen la felicidad que Cristo les ha propuesto.

Y tú… ¿Te atreves a ser feliz?

Cristo: Roca sobre la que se cimienta Por: CODIPACS Cuautitlán

¡Él se levantó y lo siguió! Al pasar frente a él, y ser mirado por unos ojos llenos en su totalidad de compasión y misericordia, Mateo simplemente no pudo resistirse a quien le otorgaba una nueva vida, y caminó hacia la felicidad, aquella que no acaba y de la cual Jesús le hiciera partícipe en su totalidad.

La vocación específica nace, se descubre y se fructifica en la oración –de rodillas frente al Sagrario– así lo han vivido setenta y seis jóvenes de nuestra Diócesis de Cuautitlán, que a lo largo de cinco días han puesto su vida en manos de Dios, para escucharlo solamente a Él y descubrir que es lo que les pide, pero aún más; enamorarse de la felicidad que sólo se encuentra en la persona de Cristo y en el cumplimiento de su voluntad.

La aventura dio inicio cuando jóvenes, acompañados de papás, hermanos, amigos y seres queridos; se dieron cita en la Catedral de Cuautitlán y llenos de ilusiones, ansiosos por comenzar, pero ante todo, esperanzados por encontrar luces y respuestas que marcaran el rumbo de su vida, partieron hacia Tlalpan. Sin conocerse, sin saber lo que vivirían exactamente, pero sí en total conciencia de saber que iban al encuentro de Cristo que los llamaba a levantarse y seguirlo. Las redes estaban echadas, y era hora de discernir y hacer una opción fundamental, muy probablemente la que cambiaría la vida de más de uno.

En el transcurso de los siguientes días, el mensaje fue: La vocación y lo que

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Jubileo de los comunicadores “Con testimonios de acción y amor, comunicamos la Misericordia del Señor” Por: Lic. Osmara Cruz Rivera CODIPACS Valle de Chalco Hace tres años se inició la labor de consolidar la Red de Comunicadores Parroquiales, es por esto que cada año se realiza un encuentro diocesano, que busca la formación de los mismos con especialistas en diversos temas, dando formación sobre el uso de los medios de comunicación en la Iglesia.

Este año en especial, en el contexto del año Jubilar de la Misericordia, en la Comisión Diocesana para la Pastoral de la Comunicación Social (CODIPACS) nos preocupamos de la formación espiritual, así los comunicadores vivieron el Jubileo de la Misericordia con actitudes de apertura, respeto y humildad, reflexionando su ser y que hacer, en su servicio evangelizador a través de los Medios de Comunicación, llevando el mensaje de Cristo con una buena formación.

Este Jubileo inició en la Capilla de San Mateo Apóstol, donde el Pbro. Martín

Hernández Rueda, responsable diocesano de la CODIPACS recibió a los comunicadores, agradeciendo su participación, acto seguido el Pbro. Jesús Melquiades, responsable de la Dimensión de Radio, impartió del tema de las “Actitudes” invitándolos a vivir la espiritualidad de comunión tal como lo marca el Plan Diocesano de Pastoral.

Posteriormente se contó con la agradable participación del Pbro. Rafael Espino Guzmán de la Sociedad de San Pablo, quien compartió el tema “Perfil del Comunicador Católico”, invitándolos a ser misioneros eficaces en el anuncio del Evangelio y dar buen uso a los medios de comunicación, resaltando que “el testimonio y las buenas actitudes son la clave para comunicar de manera eficiente”.

En el contexto de esta reflexión la Lic. Patricia Peña Veloz los llevó al momento de la oración y reflexión con una

Lectio Divina, haciendo hincapié sobre el ser y qué hacer de los comunicadores.

En este ambiente de meditación se inició la peregrinación hacia el Santuario del Señor de la Misericordia, para pasar juntos por la Puerta Santa y obtener la Indulgencia Plenaria.

El Obispo de la Diócesis de Valle de Chalco, Mons. Víctor René Rodríguez Gómez recibió esta peregrinación encabezada por el responsable diocesano.

Nuestro Obispo motivó a los comunicadores a seguir trabajando en cada una de sus comunidades, mencionando que “aún queda mucho trabajo por realizar pero con la gracia de Dios se podrá lograr”.

Teniendo conocimiento de la respon-

sabilidad del Comunicador Católico, los comunicadores se comprometieron voluntariamente a realizar las tareas encomendadas para comunicar la Buena Nueva en su entorno, aprovechando los medios tecnológicos y partiendo del testimonio, creando un ambiente cordial en su comunidad. Que Jesucristo, perfecto comunicador, los ayude a llevar a cabo este compromiso que firmaron y pusieron en las manos de su Obispo, de quien recibieron un signo de mensajeros enviados por Cristo mismo.

Agradecemos a todas las personas que apoyaron con sus donaciones y su generosidad, especialmente a la Parroquia de San Juan Bautista, Tenango del Aire.

Auxiliar de Tlalnepantla, quien envió un mensaje a los ahí reunidos, mensaje lleno de esperanza, que invita a seguir trabajando por nuestros niños, a no descuidar su formación integral y a seguir promoviendo este tipo de encuentros entre nuestros niños del catecismo. Así mismo estuvo presente para la ceremonia inaugural la Alcaldesa de Tlalnepantla Lic. Denise Ugalde Alegría quien llevó a cabo el discurso inaugural, en tanto que algunos niños

representantes de cada parroquia hacían el recorrido de la antorcha olímpica y al encenderse el fuego en el pebetero cientos de globos multicolores llevados por cada niño se elevaron al cielo para dar inicio a la justa olímpica veraniega, versión Arquidiócesis de Tlalnepantla.

Agradecemos el apoyo de Integración Juvenil A. C., Unidad de Asuntos Religiosos, IMCFD, Deportivo Santa Cecilia y equipo de CARS y catequistas del decanato.

Primer mini olimpiada infantil Por: Lic. Marco Antonio Rivera Camacho El pasado 23 de julio se llevó a cabo la primer mini olimpiada infantil del decanato II, zona I Corpus Christi.

Hemos escuchado a Jesús en el evangelio decir: “Dejen que los niños se acerquen a mí”, hoy podríamos decir: “Dejad que los niños nos acerquen a Jesús a través de su alegría, por medio de su sonrisas, con su sencillez e inocencia”, recordando que el evangelio es alegría, gozo y esperanza.

Este proyecto ha surgido en la experiencia del caminar diocesano de la comunidad sacerdotal Insolidum de la Parroquia de la Inmaculada Concepción de María, donde los sacerdotes Leoncio Guzmán, Oscar Camacho, Ricardo Bracho y el Diácono Israel Nolasco comparten la vida y el ministerio al servicio de esta unidad pastoral. Aquí ha surgido esta iniciativa motivada por el padre Leoncio, quien reconoce en el deporte la oportunidad del desarrollo

para nuestros niños en los cuales está depositada la esperanza de la Iglesia del mañana, así la Iglesia responde a la llamada del Papa, “una Iglesia en salida”, que va más allá de las paredes del templo para hacerse presente en los diversos ámbitos de la vida del hombre.

En esto redescubrimos que nuestra Iglesia vive, porque vive Jesús en ella, en las familias, en los niños, en la alegría de compartir de la vida a través del encuentro con el otro que es hermano, amigo y compañero.

A estos primeros juegos olímpicos de verano han asistido cerca de 300 niños pertenecientes a los grupos de catecismo escolarizado de las distintas parroquias del decanato, con edades que van de los 6 hasta los 13 años, los cuales participaron en cuatro disciplinas: Futbol, basquetbol, voleibol y atletismo.

Engalanaron el evento la presencia de Mons. Jorge Cuapio Bautista, Obispo

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Caminar Diocesano

Ejercicios espirituales del Clero 2016 Por: Equipo Diocesano de Formación Permanente del Clero

“Discípulos, testigos y misioneros de la misericordia de Dios Padre”, fue el tema elegido por Mons. Emilio Carlos Berlie, arzobispo emérito de Yucatán, para conducir los Ejercicios Espirituales para los presbíteros de la Diócesis de Texcoco, llevados a cabo en Casa LagoSede CEM, en Cuautitlán Izcalli, Estado de México.

Con esta iniciativa como presbiterio quisimos unirnos a la Iglesia que es llamada a vivir y experimentar el Año de la Misericordia, y no pasar por alto que somos los primeros que experimentando la misericordia, somos instrumentos de misericordia.

La reflexión, no cabe duda, nos ayudó a descubrirnos y reconocernos como hermanos y nos reforzó muchos vínculos en la relación con nuestro Obispo Juan Manuel Mancilla Sánchez, el primer maestro de misericordia, y a nosotros mismos como ministros de la misericordia.

La relectura de la Bula de convocación del Jubileo Extraordinario de la Misericordia “Misericordia Bultos”, fue el hilo conductor que Mons. Emilio tomo para compartir la vida y su experiencia, y nos hacía descubrir que 'Jesucristo es el rostro de la misericordia del Padre. El misterio de la fe cristiana parece encon-

trar su síntesis en esta palabra. Ella se ha vuelto viva, visible y ha alcanzado su culmen en Jesús de Nazaret. El Padre, «rico en misericordia»'” (Ef 2,4), después de haber revelado su nombre a Moisés como “Dios compasivo y mise-

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ricordioso, lento a la ira, y pródigo en amor y fidelidad (Ex 34,6), no ha cesado de dar a conocer en varios modos y en tantos momentos de la historia su naturaleza divina” (Misericordia Bultos 1).

Nos recordó que no podemos olvidar que viviendo la Reconciliaron nos hacemos capaces de ser verdaderos hombres de Eucaristía y que sin el apoyo de

constituye en instrumentos de la Misericordia del Padre.

Compartimos la oración, la vida, la comida, pero sobre todo nuestro esfuerzo de ser un presbiterio que busca servir en el anuncio del Reino de Dios.

Hemos acogido en esta semana al nuevo Coordinador del Equipo de Formación Permanente del Clero, al Pbro.

María Madre de la Misericordia, no podremos vivir en plenitud nuestro ser de testigos de la misericordia, Una vez que hemos experimentado como sujetos, la Misericordia del Padre en carne propia, y con nuestras limitaciones nos

Delfino Quintero Vázquez, que junto con los coordinadores de cada generación y los demás miembros de este equipo, coordinaron la preparación y servicios de los ejercicios espirituales.

Puebla, Mons. Víctor Sánchez Espinosa, invitó a todos los asistentes a proclamar la alegría de vivir, de predicar el Evangelio, con Misericordia y reconciliación, defendiendo los valores, la vida y la familia.

No hay nada mejor que ver a un joven renovado, alegre como los miles que vi salir al terminar el ENJES, pero injertado ese mensaje a ser dóciles al Espíritu Santo para vivir en Santidad.

Para el próximo ENJES, yo te invito, joven, a que vayas al encuentro del Espíritu consolador, dador de vida, de alegría. Créeme que Dios cambiará tu vida, solo falta tu respuesta generosa, siendo tú mismo y veras que Dios te dará un regalo muy especial para ti. Yo volveré a ir, espero verte allí. Hasta entonces, ¡Dios les colme de bendiciones a todos los jóvenes!

ENJES 2016: Un Espíritu renovador Por: Gabino Lico Ramos Seminarista Diócesis de Ecatepec El pasado 22, 23 y 24 de julio, tuve la bendición de asistir al Encuentro Nacional de Jóvenes en el Espíritu Santo (ENJES). En esta ocasión manifiesto mi asombro al Espíritu Santo por congregar a miles de jóvenes en Puebla y llenar a muchos de dones, carismas y bendiciones.

Comparto que es la primera vez que participo de este encuentro, y como tal, me siento renovado y muy contento por ver la alegría de muchos jóvenes que se dejan llevar por el Espíritu Santo, todos ellos en diferentes etapas de su vida.

Como yo, muchos participaron por primera vez y la gran mayoría encontraron respuestas a sus dudas, otros recibieron consuelo, otros disfrutaron la presencia del Espíritu de Dios, otros hicieron hasta lo imposible para poder ser partícipes en esos tres días.

Mi experiencia durante los tres días,

fue y sigue siendo algo único, pues la invitación a una oración profunda, me hizo encontrarme íntimamente con el Espíritu Santo, pero de una manera muy diferente, ayudando a la vocación que Dios me ha concedido. Me mueve a ir más allá de un plan, inspirándome a complementar en éste caminar, la renovación carismática.

Un expositor exhortaba a los jóvenes a no solo vivir ENJES como un encuentro social, sino dejarse apoderar por el Espíritu Santo, para llevar una vida en santidad. Ese mensaje dirigido a los jóvenes, fue emotivo para mí, pues, así como yo, muchos vivieron por primera vez ese encuentro, pudiendo estar en otro lugar y en alguna actividad ajena, pero, Dios quiso que más de 20,000 jóvenes escucharan ese mensaje, en el Centro Expositor y de Convenciones en los Fuertes de Loreto y Guadalupe. El Arzobispo de

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Celebremos la Fe

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Mujeres con compromiso social Por Alejandra Zafra.

Diócesis de Nezahualcóyotl

La “Escuela de Incidencia Política para Mujeres Líderes” hace presencia por primera vez en Ciudad Nezahualcóyotl.

Consta de tres módulos de formación que contemplan el valor de la persona y su dignidad, las diferencias y complementariedad entre mujeres y hombres, las realidades de la mujer, políticas públicas, instrumentos jurídicos, liderazgo y comprensión de la metodología de clínicas de incidencia.

Logran diseñar y elaborar un proyecto de campaña de incidencia a implementarse durante 2017, y en el que se suman, tanto ciudadanía como autori-

dades, academia, empresa, líderes sociales, entre otros en torno a una política pública que contribuya a mejorar la vida de las mujeres en el municipio, es la misión de la Asociación Nacional Cívica Femenina A.C. El curso está dirigido a mujeres con compromiso social que tengan correo electrónico y acceso a computadora para los contenidos en línea. El proceso es semipresencial, es decir, se toma en línea y en sesiones para trabajo en grupo. (37 horas en línea y 27 en diez sesiones presenciales).

Cuenta con el aval de la Universidad

Vasco de Quiroga (Michoacán).

El 10 de agosto vence el plazo para registrarse y es totalmente gratuito.

Las mujeres interesadas en participar pueden enviar carta de exposición de motivos con sus datos generales a escueladeincidencianeza@gmail.com o comunicarse al 553955-0202 con

María Alejandra Zafra, y recibirán la información necesaria para preregistrarse. Una vez completos los requisitos será enviada una clave de acceso a su correo electrónico, y los medios de contacto con la sede en Nezahualcóyotl. También pueden visitar la página: www.ancifem.org

Vivir en plenitud la misa dominical Por: CODIPACS Ecatepec El domingo es el Día del Señor “Dies Domini”, donde se festeja su Resurrección. Es el día en que cada católico ofrece su tiempo a Dios, un tiempo para participar activamente en la Misa, como lo indica el primer mandamiento de la Santa Iglesia.

Una reflexión sobre la importancia del domingo, puede partir de la Biblia, donde se contempla la creación como obra de Dios y la obra de Cristo como nueva creación, por ello; el descanso no es una simple interrupción del trabajo sino la celebración de las maravillas obradas por Dios. El domingo es la Pascua semanal, donde los cristianos progresivamente se separaron del sábado judío: es el día de la nueva creación, el día que anuncia la eternidad, el día de Cristo-luz, el día del don del Espíritu, el día de la Fe. La asamblea litúrgica del domingo es un alimento de fe, ya que se comparte la Palabra de Dios y el Pan de la Eucaristía. Quien celebra el domingo, obtiene una mejor calidad de vida al experimentar una alegría liberadora, un descanso humanizador que conlleva el enriquecimiento espiritual. Cristo es el centro del tiempo, la celebración del día de Cristo, es el día que revela el sentido del tiempo. El domingo es el día que estructura todo el año litúrgico, y su celebración es el paradigma de todas las demás celebraciones de las fiestas litúrgicas.

Es de importancia capital que cada fiel esté convencido de que no puede vivir su fe a plenitud en la vida de la comuni-

dad cristiana, sin tomar parte regularmente en la asamblea eucarística dominical. La Santa Misa obliga a todos quienes tienen uso de razón y hayan cumplido los siete años. No se puede suplir el domingo por otro día, a menos que sea imposible la asistencia por motivos de fuerza mayor. El no ir a misa el domingo, “porque no lo siento, porque

estoy cansado, porque estoy ocupado, porque me cuesta trabajo...” es pecado mortal.

No asistir por imposibilidad manifiesta, por enfermedad propia, por tener que cuidar a un enfermo, por atender una causa grave, por no haber ministro sagrado que celebre... no es pecado mortal. Para esos casos -sólo para esos-

es factible escuchar la Misa por televisión o por radio donde exista este servicio. "Cumple el precepto de participar en la Misa quien asiste a ella, dondequiera que se celebre en un rito católico, tanto el día de la fiesta como el día anterior en la tarde" (Código de Derecho Canónico c. 1248 § 1).

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Iglesia México/Iglesia Universal Jóvenes Mexicanos en la JMJ 2016

Mensajero 7 de agosto de 2016

Historias de conversión y solidaridad Por: María Ximena Rondón ACI Prensa La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) en Cracovia ha sido una semana muy intensa donde los jóvenes se han podido encontrar con Jesucristo a través de los eventos con el Papa Francisco, los festivales de música, las catequesis y la compañía de miles de peregrinos de todo el mundo. Aquí te presentamos algunos testimonios de conversión y caridad de estos muchachos.

1.- De Ciudad Juárez a Cracovia Walter Marroquín es de Ciudad Juárez, en la frontera de México con Estados Unidos, un lugar considerado de los más violentos del país. Tiene 23 años y cuenta a ACI Prensa su experiencia.

“Tuve un amigo que falleció por culpa de la violencia, y también personas cercanas que han sufrido, fueron secuestradas o extorsionadas. Pero estando de la mano de Dios, de la oración se mantiene viva la esperanza, pues el mal se va a acabar porque Jesús ya venció. Dios siempre hace algo a pesar de la violencia.”, manifestó.

Al inicio no estaba cerca de la Iglesia Católica y se convirtió luego de que unos amigos le pidieron colaborar con la catequesis de confirmación. Se animó a ir a la JMJ porque escuchó varios testimonios sobre el evento.

2.- Se convirtió en la JMJ Río 2013 Gustavo Quijano es un colombiano que trabaja como voluntario en la JMJ de Cracovia a raíz de una experiencia de

conversión en la JMJ de Río de Janeiro 2013.

"Llegué a Río y vi a la juventud de Cristo, todos unidos con un mismo propósito: Servir en la Jornada. Fue sentir la fe con todos los jóvenes y renovar la fe que estaba tibia en mí. Lo que más me impactó fue la Vigilia, es estar con los jóvenes y a la vez sólo con Cristo. Sentí el llamado y me animé a seguirlo”.

Gustavo comparte que lo que le ocurrió “fue una conversión fuerte porque antes no creía mucho en la Iglesia, pero ahora sí, ya sigo el camino largo del ser católico. Empecé a ir a Misa todos los días. Mi familia y mis amigos se dieron cuenta del cambio. Algunos me preguntaban por qué estaba tan feliz”.

Ahora tiene 26 años y vive en Alemania. Cuando termine la JMJ, planea viajar a Lourdes para servir como voluntario allá también.

3.- Seminarista y peregrino Santiago Adame Alemán es un seminarista mexicano de la sociedad de vida apostólica los Cruzados de Cristo Rey. Llegó a Cracovia con otros tres seminaristas porque ganó un concurso de escritura filosófica organizado en su institución. El premio era el permiso para viajar a Cracovia, pero ellos tenían que recaudar el dinero necesario en 16 días.

Escribieron una carta a San José pidiéndole todo lo que necesitaban, cómo: boletos de avión, de tren, etc.

“Gente muy generosa que apuesta por la formación de los seminaristas quería que viniéramos. La verdad es que es un don inmerecido. Nos damos cuenta cuantos dones nos va dando Dios. Hicimos el Camino de Santiago, conocimos Roma, la tumba de San Pedro, San Pablo y de muchos santos”, comentó a ACI Prensa.

Santiago añadió: -la JMJ- “me hace sentir feliz, me ha ayudado a consolidar mi vocación y a descubrir cuánto Dios ha hecho por mí”.

4.- Estaba lejos de Dios y una señal la trajo a Polonia Ana Ruiz es una joven mexicana de 22 años y tenía dudas de fe antes de venir a la JMJ de Cracovia. Ella quiso ir a Brasil, pero no tenía dinero así que decidió ahorrar para la siguiente jornada. Cuando se acercaba la fecha se alejó de la Iglesia y no quiso ir. “Hablé con un obispo, y él me dijo que si Dios me había dado los medios para ahorrar tenía que ir. Son señales divinas”, contó a ACI Prensa.

Ana llegó a Cracovia y comentó que “me había alejado de Dios, pero al llegar a aquí y al ver a tantos jóvenes, sobre todo en el Santuario de la Misericordia y al estar frente a la imagen del

Señor de la Misericordia me volví a sentir llena de ese amor, de la mirada de Dios y mi fe ha vuelto”.

5.- Vale la pena trabajar para ir a la JMJ Paulina Milajko tiene 18 años, es originaria de Cracovia y trabaja en un supermercado ocho horas y media al día. Ella sabía que la JMJ sería en su ciudad, pero no se animó a participar hasta que una profesora le comentó sobre la ceremonia de acogida al Papa Francisco.

Tomó la decisión y fue sola a Blonia: “fue una experiencia muy bonita. Es la primera vez que lo vi y no puedo esperar para volver a verlo. También conocí muchos amigos.”

Paulina comentó que pidió permiso y tuvo que trabajar dos horas extra. “Pero no me arrepiento, valió la pena”.

6.- Solidaridad desde Texas Robert tiene 21 años y ha venido como peregrino desde Estados Unidos, y esta es su primera JMJ. Para poder cubrir los gastos del viaje él tuvo que trabajar.

“También mis amigos, gente de la parroquia y mi familia me dieron el dinero. Les conté sobre este evento y estaban muy felices por mí, así que me apoyaron”.

Mensajero

7 de agosto de 2016

Iglesia y Actualidad

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Han venido a Cracovia para encontrarse con Jesús

Durante la Santa Misa de Clausura de la JMJ 2016, el Santo Padre Francisco, dirigió estos mensajes a la juventud el mundo, reunida en Cracovia, Polonia: ü “Para Jesús nadie es inferior y distante, nadie es insignificante, sino que todos somos predilectos e importantes: ¡Tú eres importante! Y Dios cuenta contigo por lo que eres, no por lo que tienes: ante él, nada vale la ropa que llevas o el teléfono móvil que utilizas; no le importa si vas a la moda, le importas tú. A sus ojos, vales, y lo que vales no tiene precio. ü “Cuando en la vida sucede que apuntamos bajo en vez de a lo alto, nos puede ser de ayuda esta gran verdad:

Dios es fiel en su amor, y hasta obstinado. Nos ayudará pensar que nos ama más de lo que nosotros nos amamos, que cree en nosotros más que nosotros mismos, que está siempre de nuestra parte, como el más acérrimo de los «hinchas». Siempre nos espera con esperanza, incluso cuando nos encerramos en nuestras tristezas, rumiando continuamente los males sufridos y el pasado.” ü “Pero complacerse en la tristeza no es digno de nuestra estatura espiritual.

Es más, es un virus que infecta y paraliza todo, que cierra cualquier puerta, que impide que la vida se reavive, que recomience. Dios, sin embargo, es obstinadamente esperanzado: siempre cree que

podemos levantarnos y no se resigna a vernos apagados y sin alegría. Porque somos siempre sus hijos amados.” ü “Recordemos esto al comienzo de cada día. Nos hará bien decir todas las mañanas en la oración: 'Señor, te doy gracias porque me amas; haz que me enamore de mi vida'.” ü “Esto es también para nosotros el secreto de la alegría: no apagar la buena curiosidad, sino participar, porque la vida no hay que encerrarla en un cajón.

Ante Jesús no podemos quedarnos sentados esperando con los brazos cruzados; a él, que nos da la vida, no podemos responderle con un pensamiento o un simple 'mensajito'.” ü “Queridos jóvenes, no se avergüencen de llevarle todo, especialmente las debilidades, las dificultades y los pecados, en la confesión: Él sabrá sorprenderlos con su perdón y su paz. No tengan miedo de decirle «sí» con toda la fuerza del corazón, de responder con generosidad, de seguirlo. No se dejen anestesiar el alma, sino aspiren a la meta del amor hermoso, que exige también renuncia, y un «no» fuerte al doping del éxito a cualquier precio y a la droga de pensar sólo en sí mismo y en la propia comodidad.” ü “No tengan miedo, piensen en cam-

bio en las palabras de estos días: «Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia» (Mt 5,7). Puede que los juzguen como unos soñadores, porque creen en una nueva humanidad, que no acepta el odio entre los pueblos, ni ve las fronteras de los países como una barrera y custodia las propias tradiciones sin egoísmo y resentimiento. No se desanimen: con su sonrisa y sus brazos abiertos predican la esperanza y son una bendición para la única familia humana, tan bien representada aquí por ustedes.” ü “Él espera que, entre tantos contactos y chats de cada día, el primer puesto lo ocupe el hilo de oro de la oración.

Cuánto desea que su Palabra hable a cada una de tus jornadas, que su Evangelio sea tuyo, y se convierta en tu «navegador» en el camino de la vida.” ü “Fiarse del recuerdo de Dios: su memoria no es un «disco duro» que registra y almacena todos nuestros datos, sino un corazón tierno de compasión, que se regocija eliminando definitivamente cualquier vestigio del mal.

Procuremos también nosotros ahora imitar la memoria fiel de Dios y custodiar el bien que hemos recibido en estos días.”

jamás juzgar. Jamás. Esto es la hipocresía, si nosotros juzgamos.”

no juzgar, para no ser juzgado; la medida, el modo, la medida con la que juzgamos será la misma que usarán con nosotros; y, tercero, mirémonos al espejo antes de juzgar. 'Pero ésta hace esto… éste hace aquello…. Pero, espera un momento…, me miro al espejo y después pienso. De lo contrario seré un hipócrita, porque me pongo en el lugar de Dios y, además, mi juicio es un pobre juicio; le falta algo sumamente importante que tiene el juicio de Dios, le falta la misericordia. Que el Señor nos haga entender bien estas cosas'”.

Que los cristianos se miren al espejo antes de juzgar Por: María Fernanda Bernasconi Radio Vaticano En Casa Santa Marta el Santo Padre Francisco señaló que antes de juzgar a los demás hay que mirarse al espejo para ver cómo somos. El Pontífice subrayó la diferencia existente entre el juicio de Dios y el nuestro que no está en la omnipotencia, sino en la misericordia.

“El juicio pertenece sólo a Dios, por tanto, si no queremos ser juzgados, tampoco nosotros debemos juzgar a los demás”, lo subrayó el Pontífice al observar que todos nosotros queremos que en el Día del Juicio, “el Señor nos mire con benevolencia, que Jesús se olvide de tantas cosas feas que hemos hecho en la vida”.

Jesús nos llama hipócritas cuando juzgamos a los demás Por esta razón, dijo textualmente el Papa, si “tú juzgas continuamente a los demás, con la misma medida serás juzgado”. Y añadió que el Señor nos pide que nos miremos al espejo: “Mírate al espejo, pero no para maquillarte, para que no se vean las arrugas. No, no, no, ¡ese no es el consejo! Mírate al espejo

para ver cómo eres. '¿Por qué miras la paja que hay en el ojo de tu hermano y no te das cuenta de la viga que tienes en el tuyo?' ¿O como dirías a tu hermano: 'Deja que te quite la paja de tu ojo', mientras en tu ojo hay una viga?' ¿Y cómo nos califica el Señor, cuando hacemos esto? Una sola palabra: 'Hipócrita, quita primero la viga de tu ojo y entonces verás bien para quitar la paja del ojo de tu hermano'.

Rezar por los demás, en lugar de juzgarlos Se ve que el Señor –dijo también el Santo Padre– “aquí se enoja un poco”, nos llama hipócritas cuando nos ponemos “en el lugar de Dios”. Y recordó que la serpiente convenció a Adán y a Eva cuando les dijo: “Si ustedes comen esto, serán como Él”. Y ellos –añadió Francisco– “querían ponerse en el lugar de Dios”: “Por esto es tan feo juzgar. El juicio ¡sólo a Dios, sólo a Él! A nosotros el amor, la comprensión, rezar por los demás cuando vemos cosas que no son buenas, pero también hablarles a ellos: 'Escucha, yo veo esto, quizás…'. Pero

A nuestro juicio le falta la misericordia, sólo Dios puede juzgar Cuando juzgamos – reafirmó el Papa– “nos ponemos en el lugar de Dios”, pero “nuestro juicio es un pobre juicio”, jamás “puede ser un juicio verdadero”. “¿Por qué el nuestro no puede ser como el de Dios? –Se preguntó el Papa Francisco– “¿Por qué Dios es Omnipotente y nosotros no? Porque a nuestro juicio le falta la misericordia. Y cuando Dios juzga, juzga con misericordia. Pensemos hoy en esto que el Señor nos dice:

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Familia

Mensajero 7 de agosto de 2016

Educar obra de la familia

Por: Pbro. Mtro. Gerardo Medrano González CODIPACS Cuautitlán Los seres humanos somos criaturas inquisitivas por naturaleza. Tal vez no sería aventurado afirmar que, después de la palabra “mamá”, la expresión más trascendente en nuestra infancia es “¿por qué?”, pues nos gusta conocer el nombre, la razón de ser y la causalidad de todo lo que nos rodea. Y ese a veces molesto o fastidioso período en la vida de un niño en el que pregunta sin cesar el porqué de todo, es una pertinente evidencia de que nacemos sin saber nada de nada, por lo que tenemos un apetito innato de conocimientos para poder relacionarnos con todo lo que nos rodea: cosas, personas, situaciones, etc.

A veces es difícil hacer entender a los padres de familia que el proceso de enseñanza-aprendizaje tiene muy poco que ver con la naturaleza pública o privada de la institución donde están matriculados sus hijos, o con el costo de lo que están dispuestos a pagar por darles una “buena educación”. Pero sucede que la educación como tal es un proceso que se lleva a cabo fundamentalmente en el seno del hogar, y que se afina y complementa en el proceso de aprendizaje social de las instituciones educativas.

Los seres humanos somos las criaturas más desvalidas al nacer, pues dependemos absolutamente en todo de nuestra

madre para sobrevivir hasta que aprendemos a hablar, y esto nos hace preguntarnos ¿cómo es que nos “hacemos” personas? Y la respuesta es solo una: por el proceso educativo. La educación extrae de la familia lo mejor de ella para darle a la persona habilidades con las que no nace, sino que las desarrolla gradualmente en un largo y complejo período de nuestra vida (en sentido estricto es un proceso que ocupa toda la vida). De ahí que el apetito de aprender es una aptitud que deberíamos esforzar-

nos por desarrollar en los niños desde temprana edad y mantenerla viva y vigente a lo largo del desarrollo humano para ir adquiriendo las habilidades que necesitamos para ser cada día más y mejores personas. Pero esta semilla solamente crece en el hogar, al calor del afecto de los progenitores que solamente puede darse en presencia física. Se educa en casa, no en la escuela, y se educa para ser, no para tener. Ojalá que algún día lo podamos entender.

que les llegue.

TERCERO. QUE APRENDAN A TOMAR TURNOS Este punto es básico ya que sin no saben esperar arrebatarán todo y esto genera prepotencia y corrupción en sus acciones futuras.

Los juegos de mesa son excelentes para lograr este fin. Siempre debemos estar pendientes de lo que hacen, y lo logramos al estar presentes.

Aprender a esperar su turno cuesta trabajo, por lo que podemos ayudarlos con palabras de aliento y explicándoles que así son las reglas del juego.

Para nosotros como papás está prohibido enojarnos porque no nos entienden nuestros hijos o porque aún hacen berrinche, ya que lejos de ayudar les hacemos daño.

CUARTO. LAS PALABRAS MÁGICAS Por favor y gracias. Debemos enseñarles que con ellas podemos muchas cosas, siempre y cuando no sea algo que les haga daño o que vaya contra su integridad.

Una persona prudente sabe usarlas para su beneficio. Ayudemos a nuestros hijos a aprenderlas.

Con nuestros hijos más grandes también está bien si de repente debemos recordarles su uso. ¡Nunca es muy tarde para ello!

Y QUINTO. SEAMOS TAMBIÉN PRUDENTES La mejor forma de educar es con el ejemplo. No podemos pedirles a nuestros hijos que sean prudentes si nosotros actuamos imprudentemente.

Debemos estar conscientes de que una actitud educa más que mil palabras, y que nuestros hijos nos observan en todo momento, por eso debemos ser coherentes con lo que decimos y lo que hacemos.

Para tener hijos prudentes debemos ser padres prudentes y si cometemos errores debemos reconocerlos enfrente de nuestros hijos y ofrecer disculpas, deben saber que todos nos equivocamos y es prudente ofrecer disculpas y corregir el camino.

La imprudencia es lo que lleva a muchas personas a herir a otras, a tomar decisiones apresuradas, a pasar por encima del tiempo que cada cosa necesita para su óptima fluidez.

El valor de la prudencia Por: Silvia del Valle @TipsMama5Hijos El valor de la prudencia, es el que nos permite saber cuándo es momento de algo, cuándo es momento de actuar, de hablar, de caminar o de parar.

Una persona prudente es la que cuida sus palabras y acciones, es la que tiene en cuenta que todo tiene su instante para producirse.

Y es muy importante que nuestros hijos adquieran este valor; por eso, aquí les dejo 5 tips para lograrlo.

PRIMERO. PLATICA CON TUS HIJOS Es importante estar siempre en comunicación con ellos porque es la forma de saber lo que piensan y lo que sienten y así podremos ayudarlos.

A veces nuestros hijos son imprudentes porque al no saber lo que sienten, se comportan de forma irracional. Si nosotros los ayudamos a identificar sus sentimientos, entonces nos dirán con claridad lo que pasa y podrán actuar con prudencia en cada situación.

Debemos estar conscientes que este es un proceso y de que el dialogo debe ser constante.

No importa que debamos trabajar todo el día, con 10 minutos de charla con nuestros hijos al día son suficientes para

conocerlos y guiarlos.

SEGUNDO. NO LES DES TODO LO QUE TE PIDEN Como padres queremos que nuestros hijos tengan todo lo que necesitan y que no pasen por las estrecheces que nosotros experimentamos, por eso queremos darles todo lo que nos piden sin pensar si en verdad les hace falta o si les hace un bien tenerlo.

Debemos enseñarlos a que las cosas se tienen que ganar ya sea trabajando o cumpliendo con sus obligaciones.

Pero ¿los niños pueden trabajar? ¡Claro! pueden hacer algunos deberes en casa, y nosotros podemos pagarles una cantidad adecuada por ellos; por ejemplo, si lavan el carro podemos darles lo que nos gastaríamos si llevamos el coche a algún lugar. O si arreglan el jardín podríamos darles lo que nos cobra el jardinero por cortar el pasto, etc.

También podemos hacer que ganen puntos en lugar de dinero y así, en cuanto lleguen a determinado número de puntos, tendrán lo que quieren.

Lo importante es acostumbrar a nuestros hijos a esforzarse por lo que quieren, en lugar de pedir todo y esperar a

@Joven

Mensajero

7 de agosto de 2016

El rostro joven de la misericordia En estos días, muchas miradas del mundo se encuentran en Cracovia, en donde miles de jóvenes de todo el mundo se encuentran reunidos en torno al Papa, en la 31 Jornada Mundial de la Juventud, con el fin de celebrar que Jesús está vivo en medio de nosotros, y que en esta ocasión se hace visible en medio de la juventud.

En su mensaje de acogida a los jóvenes, el papa Francisco expresaba su dolor “ante jóvenes que parecen haberse 'jubilado' antes de tiempo”. Esto ante la realidad que viven muchos jóvenes que llevan una vida sin sentido, tristes y sin convicciones.

La sociedad en la que hoy estamos inmersos nos inclina a llevar una vida líquida, rápida, que no nos permite hacer una pausa; no nos permite mirar nuestro entorno y menos mirar hacia el interior para preguntarnos ¿Qué es lo que quiero? ¿Hacia dónde quiero ir? Y vamos avanzando sin fijarnos una meta, un fin al cual llegar. Los jóvenes de hoy vivimos en la sociedad del egoísmo donde cada quien se preocupa por sí mismo sin darnos cuenta de lo que está viviendo el que está a mi lado, el más cercano, el necesitado.

Otro gran fenómeno que afecta a la juventud es el mal uso del Internet, las redes sociales; estos medios que nos facilitan estar en mayor comunicación con los que están lejos, nos alejan de los que están más cerca de nosotros, nos impiden entablar relaciones con las

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Por: Seminarista Bruno Chía Lozano

una gran verdad: la juventud de hoy está necesitada de Cristo.

“Nos hemos reunido para ayudarnos” dijo el papa Francisco a los jóvenes.

Hay una gran esperanza en la Iglesia, porque también hay muchos jóvenes que han decidido aceptar a Cristo en sus vidas. Y todos ellos son el rostro joven de la misericordia y es a lo que nos invi-

vidas y que se encuentran necesitados de él. Somos los jóvenes, que viviendo esta misma realidad podemos tender la mano a otros jóvenes que necesitan de nuestra ayuda y ser transmisores del amor y la misericordia de Dios.

Pedimos la intercesión de San Juan Pablo II, patrono de las Jornadas Mundiales de la Juventud, que nos dice: ¡No

personas que están en nuestro entorno y nos limitan a ir más allá de un verdadero encuentro con las personas que nos rodean. Estos problemas que afectan a la juventud, sin mencionar otros muchos, nos hacen darnos cuenta de

ta el Papa Francisco “a vivir la aventura de la misericordia”. Estamos llamados a salir de nuestras comodidades, de la parroquia, de nuestras horas de reunión, para ir en busca de todos aquellos jóvenes que no han recibido a Cristo en sus

tengáis miedo a abrir de par en par las puertas a Cristo! Somos el presente de la Iglesia, somos el rostro actual de Cristo en su Iglesia, por lo tanto, ¡seamos portadores de la misericordia!

Papa en este marco del año de la misericordia donde los jóvenes descubrieron cómo el Señor confía en ellos transformándolos en “centinelas de la mañana”, luchando por la defensa de la familia, la vida y los valores, como actores y protectores de la misericordia de Dios en el mundo.

Todos los participantes fuimos testigos del poder de Dios en ese evento; experimentamos la presencia transformadora el Espíritu Santo como Dynamis, que renueva la vida y suscitó en todos los participantes un deseo de ser portadores

de esperanza a las comunidades.

Este es el gran milagro de Dios, la resurrección de miles de jóvenes deseosos de trasformar el mundo impregnándolo de la presencia de Dios. La llamada es a renovarnos en Cristo e iniciar procesos de formación y crecimiento para los jóvenes. Aprovechemos la riqueza de nuestra Iglesia y la diversidad de carismas en cada joven, grupo, movimiento que nos ayudan a vivir procesos de crecimiento, llevándonos a ser esos “centinelas de la mañana”.

Centinelas de la mañana Por: Pbro. Gustavo Mendieta Martínez Vivimos en un país donde la mayor parte de sus habitantes son jóvenes, ellos constituyen una fuerza importante en la población nacional que, desafortunadamente se ha desacreditado mucho.

Los errores de unos cuantos han fracturado la visión que se tiene de esta potencialidad transformadora de nuestra sociedad. Hemos dejado de creer en el joven, y ¿por qué se ha dado esta situación? Es sencillo. Reconocer que hemos dejado de acercarnos al joven para reconocer sus riqueza, sus recursos, su energía y sus deseos honestos de trasformar la sociedad en un lugar donde reina el amor, la paz, el progreso y la justicia; pero principalmente reconocer que existen miles de jóvenes con una espiritualidad fuerte y fundamenta-

da en Jesucristo, el Buen Pastor, que todavía hoy sigue llamando y confiando en los más jóvenes para realizar los grandes cambios en la historia de la humanidad.

En la ciudad de Puebla se llevó a cabo el Encuentro Nacional de Jóvenes en el Espíritu Santo (ENJES) del 22 al 24 de agosto donde Tlalnepantla, junto con toda la provincia, hizo presencia con 300 jóvenes para compartir la fe y la vivencia del Espíritu, tanto en lo personal como a nivel de Iglesia. Más de 25,000 jóvenes de todo el país se reunieron en el Centro Expositor de dicha ciudad para ser testigos del amor de Dios en la vida de cada uno.

El tema principal del encuentro fue la misericordia, haciendo eco a la voz del

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Dios te llama

Mensajero 7 de agosto de 2016

Ser de Dios Por: Sor Estrella M. Pérez

Etimológicamente la palabra “vocación”, viene de la palabra latina “vocare” que significa “llamado”. Es por eso que la vocación la entendemos como un llamado personal de Dios, es una elección libre y amorosa del Señor, es un don gratuito de su amor, Él ha tomado la iniciativa de elegirnos para ser de Él y estar con Él.

Quiero hablarte de una gran mujer, que escuchó la llamada de Dios y con un corazón generoso dijo “sí” a Jesús. Ella es la Beata Eugenia Ravasco, fundadora de la Congregación de las Hijas de los Sagrados Corazones de Jesús y de María. ¿Cómo inició todo? Una tarde pasando cerca de una iglesia en Génova, Italia; estaba expuesto el Santísimo Sacramento, ella entró y al ponerse de rodillas para recibir la bendición, el sacerdote lanzó una pregunta: “¿No hay alguien entre ustedes, que quiera dedicarse a hacer el bien por amor al corazón de Jesús?”, ella se siente interpelada y dice: “Jesús, sí, soy yo; mándame una

señal”. La respuesta no se hace esperar, después de una semana llegan a tocar la puerta para invitarla a ser catequista, esta invitación es la confirmación del deseo que lleva en su corazón, ser de Dios. Ayudada por su director espiritual descubre que ha sido elegida a la edad de 23 años para empezar una nueva obra: hacer el bien por amor al Corazón de Jesús, encontrando su fortaleza en cada momento delante de Jesús Sacramentado.

Jesús sigue llamando a jóvenes para estar con Él y ser de Él, dispuestas a responder con un corazón generoso, confiando en la gracia de Dios.

Ya son 13 años que formo parte de esta Congregación, y como hija de la Madre Eugenia, vivo con el corazón agradecido por la enorme bendición de ser elegida a pesar de mis miedos, debilidades y pecados. Jesús me ha mirado con ternura y amor. Me ha dicho ¡Ven y sígueme!

Soy consciente que no son mis fuerzas sino su misericordia la que me sostiene para vivir con alegría y fidelidad el don

de mi consagración.

Siempre llevo en mi corazón las palabras que Dios dijo al profeta Isaías: “No temas, yo te rescatado, te he llamado por tu nombre y eres mío”, en cada momento es él quien precede nuestros pasos, y sin olvidar a María, que con su ternura maternal también me ha acom-

pañado en este caminar, por eso como ella, mi corazón se alegra en el Señor.

Te invito a que no temas preguntarle al Señor ¿Qué quieres de mí? Piensa que como Padre amoroso, la única respuesta que puede darte será la invitación al amor.

he dado cuenta que la vocación es un misterio, es un don que Dios da, y por lo tanto Él solo sabe qué nos depara el futuro, ya lo dice el canto “no pienses en el mañana, déjalo estar…vive tu vida siempre mirando a la luz…” Y recordemos también aquel pasaje de la Escritura “muchos son los llamados pero pocos

los escogidos” Mt.22,14.

Pidamos pues al dueño de la mies que envíe operarios a su campos, y no solo eso sino que nos dé jóvenes valientes que digan si al Señor, que digan cómo María al Ángel que Dios envió “Hágase en mí según tu Palabra” Lc.1, 38b.

Decisión que marcará tu rumbo Preseminario 2016 Por: Seminarista Benji Brian Campos Anaya Diócesis de Nezahualcóyotl

El pasado 17 de julio en la diócesis de Nezahualcóyotl se llevó a cabo el Preseminario, al cual asistieron 35 jóvenes para tener un encuentro cercano con Jesús, y poder así definir su vocación.

Son muchas las historias de vida que cada uno tiene, son muchas las interrogantes que uno se plantea al estar ahí para tomar una decisión; una decisión que marcará el rumbo de sus vidas.

Muchos se encuentran perplejos ante la elección de una preparatoria, universidad o entrar al seminario. Pidamos a Dios que les envíe su Espíritu Santo y tomen la mejor decisión.

Pidieron la entrada al Seminario Dio-

cesano San José 17 jóvenes para el seminario menor. Y para el curso introductorio 6 jóvenes que harán su segunda experiencia de discernimiento del 5 al 7 de agosto.

El día 8 de agosto llegan los que han decidido irrumpir esta experiencia de formación con vistas a la vida sacerdotal, que es cuando todos nos incorporamos nuevamente a las actividades del seminario.

Hay que ser conscientes de es un proceso largo y de compromiso total, el que asistamos a este Preseminario no significa que seremos sacerdotes. En estos 5 años que he estado en el seminario, me

Mensajero

7 de agosto de 2016

Iglesia y Cultura

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El martirio cristiano y el deseo de una “guerra santa”

Por: Andrea Tornielli Vatican Insider

La barbarie asesina que llevó a un chico exaltado a degollar a un sacerdote en el altar invocando a Alá ha perturbado e impresiona: por primera vez un sacerdote fallece dentro de una Iglesia europea. Lo que sucedió y sigue sucediendo en otros países (desde Turquía hasta Irak, pasando por Siria, la República Centroafricana y Filipinas) se da también en nuestras casas. En un pueblito tranquilo de Francia, contra un hombre anciano, bueno e inerme, que durante toda su vida predicó la paz y el amor.

Aunque no hay que olvidar que los fundamentalistas islámicos no son los únicos que han monopolizado el asesinato de sacerdotes y obispos: basta recordar el homicidio del obispo salvadoreño Óscar Arnulfo Romero, hoy beato, asesinado en el altar por hombres bautizados de los Escuadrones de la Muerte en

1980.

Los terroristas de Daesh, la última de las horribles criaturas que Occidente también contribuyó a crear, llenando de armas a los rebeldes anti-Assad, quieren llevar su «yihad» a los corazones de nuestras ciudades. Quieren llevar el miedo a nuestra cotidianidad. Quieren sacudir nuestras vidas, como ya han hecho en otros países en los que los atentados han sido cotidianos y en los que decenas de miles de víctimas inocentes ya no son noticia. Daesh, el autoproclamado estado islámico, tiene un objetivo claro: unir a su alrededor a los musulmanes sunitas. Para hacerlo debe llevar su «guerra santa» y su «enfrentamiento de civilizaciones» a nuestra casa. Debe hacernos «sentir en guerra» como occidentales, como cristianos, como descendientes de los «cruzados».

Debe hacernos olvidar que la gran mayoría de las víctimas del terrorismo fundamentalista islámico es musulmana.

Frente a todo esto, no podemos simplemente ver hacia otra parte. Pero sería seguirles el juego a los terroristas pensar que hay que responder a su «yihad» con una «guerra santa» de signo opuesto, e invocar actitudes que asuman la lógica de la «guerra santa», como hacen ciertos sectores del mundo católico europeo. No significa solo darle la victoria al Califato, hacer exactamente lo que los asesinos fundamentalistas pretenden y buscan. Significa también, principalmente, olvidar todo lo verdadero que hay en la experiencia de la fe cristiana. La que se vive auténticamente y la que no se convierte ni en ideología identitaria ni en movimiento políticocultural.

Hay, efectivamente, una manera para hablar sobre lo que ha pasado en Francia, un modo para hablar de las persecuciones de los cristianos, que no tiene nada de cristiano, aunque quien lo haga se sienta parte militante del catolicismo occidental. Las únicas palabras auténticamente cristianas son las que en estas horas recuerdan que la realidad del martirio pertenece desde el principio a la

vida de la Iglesia. Una experiencia que siempre ha estado presente. «Si me han perseguido a mí, los perseguirán también a ustedes», dijo Jesús.

Los mártires cristianos, como recordó papa Francisco antes de su viaje a Armenia el mes pasado, son personas normales, hombres, mujeres, niños. Desde siempre el sacrificio de inocentes, la sangre derramada ha sido semilla para nuevos cristianos, como afirmaba Tertuliano, y ha dado frutos de reconciliación, de perdón, de amor. La mirada de fe demuestra cuál es la única y verdadera respuesta a los últimos hechos de sangre, que nos sacuden en nuestras burbujas de indiferencia. Como hace algún tiempo testimonió aquella anciana copta cristiana, que no sabía leer ni escribir y que no se movió de su pobre casa de barro a orillas del Nilo. Se negó a maldecir a los que degollaron a su hijo en la costa de Libia. No los maldijo, sino que rezó por su salvación. Y en esta aparentemente «débil» respuesta no se refleja solo una de las cimas de la civilización humana. Se aprecia sobre todo el signo de la «debilidad omnipotente» del Dios cristiano, que se abajó y aniquiló para compartir los sufrimientos de los seres humanos.

Jesús envía a la Iglesia a propagar su paz y misericordia y servir al mundo Por: Radio Vaticano La mañana del cuarto día de su Viaje Apostólico a Polonia, para la JMJ de Cracovia 2016, el Papa Francisco celebró la Misa votiva de la Misericordia de Dios, con sacerdotes, religiosos, consagrados y seminaristas, en el Santuario dedicado a San Juan Pablo II. En su homilía, subrayó que la Iglesia y el mundo son los espacios abiertos de la misión de los discípulos de Jesús para llevar la Buena Nueva. Jesús quiere que sus discípulos abran las puertas y salgan a propagar el perdón y la paz de Dios con la fuerza del Espíritu Santo.

En el Santuario dedicado al santo Papa polaco que proclamó el segundo domingo de Pascua como el “Domingo de la Misericordia Divina” para todo el mundo, Francisco hizo resonar la exhortación a «abrir las puertas» a Cristo, con la que Karol Wojtyla comenzó su Pontificado, invitando a no tener miedo.

A los sacerdotes, seminaristas, religiosos, religiosas y personas consagradas les recordó, con el Evangelio de Juan, (Jn 20,19-31) cuando Jesús se aparece a

sus discípulos, que estaban a puertas cerradas, pasaje que «nos habla de un lugar: la casa en la que estaban los discípulos, de un discípulo: Tomás, y de un libro: el Evangelio».

«En la casa, ese local cerrado resuena fuerte el mensaje que Jesús dirige a los suyos: «Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo» (v. 21)».Jesús nos envía y llama también a nosotros, recordó y añadió que «la vida de sus discípulos más cercanos, como estamos llamados a ser, está hecha de amor concreto, es decir, de servicio y disponibilidad», poniendo siempre al Señor en el centro de la vida, lejos de «los estrados vacilantes de los poderes del mundo».

«En segundo lugar, aparece en el Evangelio de hoy la figura de Tomás, el único discípulo que se menciona» recordó el Papa, señalando, que «en su duda y su afán de entender —y también un poco terco—, este discípulo se nos asemeja un poco, y hasta nos resulta simpático.

Sin saberlo, nos hace un gran regalo: nos acerca a Dios, porque Dios no se

oculta a quien lo busca. Jesús le mostró sus llagas gloriosas, le hizo tocar con la mano la ternura infinita de Dios, los signos vivos de lo que ha sufrido por amor a los hombres».

Tras señalar luego que el «libro: es el Evangelio y que «queda todavía «un desafío, queda espacio para los signos que podemos hacer nosotros, que hemos recibido el Espíritu del amor y estamos llamados a difundir la misericordia», el Papa invocó a María.

«Que la Madre de Dios nos ayude en ello: que ella, que ha acogido plenamente la Palabra de Dios en su vida (cf.

Lc 8,20-21), nos de la gracia de ser escritores vivos del Evangelio; que nuestra Madre de misericordia nos enseñe a curar concretamente las llagas de

Jesús en nuestros hermanos y hermanas necesitados, de los cercanos y de los lejanos, del enfermo y del emigrante, porque sirviendo a quien sufre se honra a la carne de Cristo.

Que la Virgen María nos ayude a entregarnos hasta el final por el bien de los fieles que se nos han confiado y a sostenernos los unos a los otros, como verdaderos hermanos y hermanas en la comunión de la Iglesia, nuestra santa Madre».

Mensajero 7 de agosto de 2016

SecciĂłn Infantil

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Colorea el camino que conduce a los niĂąos a entrar por la puerta angosta y llegar al Reino de los Cielos

Ser Luz y Sal

Mensajero

7 de agosto de 2016

¿Cuál es la misión de los laicos?

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Por: Mons. Óscar Camacho Macías Vicario Episcopal de Laicos Nuestro país posee una larga tradición cristiana católica que ha marcado la vida de nuestros pueblos a lo largo de ya algunos siglos. En medio del pluralismo cultural y religioso creciente, la mayoría de la población sigue siendo católica. Sin embargo, ¿cómo puede explicarse que siendo un país con mayoría católica coexista con una profunda desigualdad social, económica y una participación política aún precaria? En México, la brecha entre los más ricos y los más pobres es cada vez más infranqueable, como lo refleja la movilidad social en México. La educación que debería ser un factor de cambio, reproduce la desigualdad del origen. Y en cuanto la actividad política, el país se encuentra aún en los niveles más bajos de participación. Estos breves datos plantean serias preguntas: ¿Qué está haciendo el laicado para resolver estos problemas? ¿Cómo está asumiendo sus responsabilidades desde la fe en lo social, económico y político?

¿Sus compromisos están respondiendo a las necesidades de vida de los que sufren?

Esta situación pone de manifiesto una realidad del laicado, misma que el papa Francisco expone en Evangelii Gaudium: “Si bien se percibe una mayor participación de muchos laicos en los ministerios laicales, este compromiso no se refleja en la penetración de los valores cristianos en el mundo social, político y económico. Se limita muchas veces a las tareas intraeclesiales sin un compromiso real por la aplicación del evangelio a la transformación de la sociedad. La formación de laicos y la evangelización de los grupos profesionales e intelectuales contribuyen un desafío pastoral importante” (102).

La participación del laicado, como lo señala el Papa Francisco, ha estado más encaminada a la edificación “ad intra” de la comunidad eclesial. Algo naturalmente necesario, pues es una dimensión de la evangelización muy importante, pero no es la

única. El documento de Aparecida aclara la impostergable misión “ad extra” del laicado: “Su misión propia y específica se realiza en el mundo, de tal manera que, con su testimonio y su actividad, contribuyan a la transformación de las realidades y la creación de estructuras justas según los criterios del evangelio” (210).

Ante esta situación, el documento de Aparecida nos hace una proposición desafiante al convocar a ser discípulos misioneros del Señor Jesucristo para que los pueblos en él tengan vida y vida en abundancia.

La misión de los discípulos es contribuir para que, a partir de este mundo, el punto de partida (la cultura de la muerte) se aproxime al máximo, al punto de llegada (una cultura de vida) por la promoción de la vida plena de toda la persona y de todas las personas. En esto está verdaderamente la misión del laico.

¿Qué nos pasa?

Por: Tom Pichardo Diócesis de Nezahualcóyotl

Los laicos estamos por todos lados… en América, Asia, Europa, África y Oceanía. Estamos en los diversos ámbitos de la sociedad: la familia, el trabajo, la cultura, el arte, la educación, la política… y en este sentido, estamos llamados a impregnar todas nuestras actividades con el espíritu del Evangelio.

Los laicos estamos por todos lados.

Somos una fortaleza de la Iglesia que debería ser capaz de transformar la realidad social con la fuerza del Evangelio.

Sin embargo, a pesar de este potencial evangelizador, la presencia de los laicos no llega a proyectarse con la fuerza suficiente como para influir en la situación actual del mundo y de nuestro país.

La violencia, la injusticia, la pobreza y miseria, las leyes contrarias a los valores cristianos demuestran que los gran-

des ausentes en la vida pública de nuestro país, somos los laicos católicos.

No sabemos, no podemos o no queremos Probablemente muchos laicos no tienen clara conciencia de que su compromiso de bautizados y miembros de la Iglesia alcanza todas las actividades y ámbitos de su vida.

En otros casos hay laicos que de plano no pueden, como es el caso de quienes viven en lugares donde los cristianos son perseguidos.

Pero también, somos laicos, que hemos estudiado, leído y oído los constantes llamados que desde la doctrina de la Iglesia se nos hace, para que participemos en la construcción de un mundo más justo, más digno y más humano… y simplemente no lo hacemos e incluso en no pocos casos hacemos cosas que

van totalmente en sentido contrario. ¿Qué hacer?

La respuesta es sencilla: actuar en lo social como verdaderos discípulos de Jesús. Que dejemos el adoctrinamiento y hagamos nuestros los valores del Reino de Dios, como Iglesia.

Trascender los ámbitos en donde pro-

clamamos cómodamente nuestra fe y salir a la calle a enfrentar desde el amor de Cristo las crisis que hoy en día padece nuestra sociedad.

El papa Francisco lo ha dicho así: salir de la cueva y vivir una fe callejera. Estar en la primera línea de la solución de los problemas sociales que nos aquejan.

16 XXXI Jornada Mundial de la Juventud Mensajero

Cracovia 2016 El pasado 27 de julio de 2016, dio inicio en Polonia, la XXXI Jornada Mundial de la Juventud, con la llegada del papa Francisco a las 16:00 horas, al aeropuerto internacional “San Juan Pablo II” de Cracovia-Balice.

Destaca el encuentro celebrado a las 17:30 horas el día jueves 28 de julio de 2016, donde se realizó la ceremonia de acogida de los jóvenes en el Parque Jordan, en Błonia, Cracovia. Ahí el Santo Padre les habló: Queridos jóvenes, en estos días Polonia, esta noble tierra, se viste de fiesta; en estos días Polonia quiere ser el rostro siempre joven de la Misericordia. Desde esta tierras, con ustedes y también unidos a tantos jóvenes que hoy no pueden estar aquí, pero que nos acompañan a través de los diversos medios de comunicación, todos juntos vamos a hacer de esta jornada una auténtica fiesta Jubilar, en este Jubileo de la Misericordia.

En los años que llevo como Obispo he aprendido una cosa ‒he aprendido muchas, pero una quiero decirla ahora‒: no hay nada más hermoso que contemplar las ganas, la entrega, la pasión y la energía con que muchos jóvenes viven la vida. Esto es hermoso, y, ¿de dónde viene esta belleza? Cuando Jesús toca el corazón de un joven, de una joven, este es capaz de actos verdaderamente grandiosos. Es estimulante escucharlos, compartir sus sueños, sus interrogantes y sus ganas de rebelarse contra todos aquellos que dicen que las cosas no pueden cambiar... …También quiero confesarles otra cosa que aprendí en estos años. No quiero ofender a nadie, pero me genera dolor encontrar a jóvenes que parecen haberse «jubilado» antes de tiempo.

Esto me hace sufrir. Jóvenes que parece que se hayan jubilado con 23, 24, 25 años. Esto me produce dolor. Me preocupa ver a jóvenes que «tiraron la toalla» antes de empezar el partido. Que se han «rendido» sin haber comenzado a jugar. Me produce dolor el ver a jóvenes que caminan con rostros tristes, como si su vida no valiera. Son jóvenes esencialmente aburridos... y aburridores.

Que aburren a los demás, y esto me produce dolor. Es difícil, y a su vez cues-

tionador, por otro lado, ver a jóvenes que dejan la vida buscando el «vértigo», o esa sensación de sentirse vivos por caminos oscuros, que al final terminan «pagando»…y pagando caro.

El viernes 29 de julio de 2016 a las 18:00 horas se realizó el Vía Crucis con los jóvenes en el Parque Jordan de Błonia, Cracovia, con relación al “Año de la Misericordia”, el Papa comentó: “Recorriendo la Via Crucis de Jesús, hemos descubierto de nuevo la importancia de configurarnos con él mediante las 14 obras de misericordia... … En esta tarde, queridos jóvenes, el Señor os invita de nuevo a que seáis protagonistas de vuestro servicio; quiere hacer de vosotros una respuesta concreta a las necesidades y sufrimientos de la humanidad; quiere que seáis un signo de su amor misericordioso para nuestra época. Para cumplir esta misión, él os señala la vía del compromiso personal y del sacrificio de sí

mismo: es la vía de la cruz. La vía de la cruz es la vía de la felicidad de seguir a Cristo hasta el final, en las circunstancias a menudo dramáticas de la vida cotidiana; es la vía que no teme el fracaso, el aislamiento o la soledad, porque colma el corazón del hombre de la plenitud de Cristo. La vía de la cruz es la vía de la vida y del estilo de Dios, que Jesús manda recorrer a través también de los senderos de una sociedad a veces dividida, injusta y corrupta.

El sábado 30 de julio de 2016, a las 12:45 horas, tuvo un almuerzo con los jóvenes en el arzobispado.

La XXXI JMJ terminó el domingo 31 de julio, después de haber tenido un encuentro con los voluntarios de la jornada y con el Comité organizador y benefactores en la Tauron Arena de Cracovia, donde agradeció: “Queridos voluntarios: Antes de regresar a Roma, siento el deseo de encontraros y, sobre todo, de dar las gracias a cada uno de

7 de agosto de 2016

Por: CODIPACS Ecatepec

vosotros por el esfuerzo, la generosidad y la dedicación con la que habéis acompañado, ayudado y servido a los miles de jóvenes peregrinos. Gracias también por vuestro testimonio de fe que, unido al de los muchísimos jóvenes de todo el mundo, es un gran signo de esperanza para la Iglesia y para el mundo. Al entregaros por amor de Cristo, habéis experimentado lo hermoso que es comprometerse con una causa noble, y lo gratificante que es hacer, junto con tantos amigos y amigas, un camino fatigoso pero que paga el esfuerzo con la alegría y la dedicación con una riqueza nueva de conocimiento y de apertura a Jesús, al prójimo, a opciones de vida importantes. “no tengáis miedo”.

S.S. Francisco confirmo que la próxima Jornada Mundial de la Juventud 2019, se realizará en América Latina, en nuestro vecino país de Panamá.