Centésima Segunda Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano Por: Prensa CEM
Año 8 / No. 218
Del 7-11 de noviembre los obispos de todo el país se reuniron en Asamblea Plenaria en Lago de Guadalupe, Cuautitlán Itzcalli, Edo. de México. El objetivo: Avanzar en la elaboración sinodal del Proyecto Global Pastoral hacia el año 2031. Este proyecto es muy ambicioso y abarca a toda la Iglesia en el país y tiene como meta el el 2031, fecha en que celebramos los 500 años de las Apariciones de Nuestra Señora de Guadalupe.
¿Qué es la Conferencia del Episcopado Mexicano? Cada obispo tiene autoridad para regir a su grey en el territorio de su diócesis pero esta autonomía no lo excluye del resto de las demás diócesis de su región, país, continente o del mundo. Cada diócesis de México pertenece al cuerpo místico de Cristo, la Iglesia y los obispos de éstas forman un colegio a nivel nacional llamado Conferencia del Episcopado Mexicano. Esta conciencia de unidad ha llevado a los Obispos, en el cumplimiento de su misión a lo largo de la historia, a utilizar instrumentos, organismos o medios de comunicación que ponen de manifiesto la comunión y la preocupación por todas las Iglesias.
Domingo 13 de noviembre de 2016
¿Qué es la Asamblea Plena- en favor del bien común de la Iglesia En México las Asambleas Plenaria de los Obispos? Un poco de historia Desde los primeros siglos, esta comunión ha tenido una expresión particularmente celebración de los concilios que se realizaron frecuentemente en toda la Iglesia ya desde el siglo II. Después del siglo XVI la tradición de celebrar concilios fue decayendo. La Iglesia en 1917 vio la necesidad de dar disposiciones para la celebración de concilios particulares o regionales con la intención de renovar el vigor de una institución tan venerable. A partir del siglo pasado, por motivos históricos, culturales y sociológicos, y con finalidades pastorales específicas, en diversos países han nacido las Conferencias de los Obispos con el objeto de afrontar las cuestiones eclesiales de interés común y dar las oportunas soluciones. Dichas Conferencias, a diferencia de los concilios, tenían un carácter estable y permanente. Fue a partir del Concilio Vaticano II que las Conferencias Episcopales se han desarrollado notablemente y han asumido el papel de órgano preferido por los Obispos para el intercambio de puntos de vista, la consulta recíproca y la colaboración
rias empezaron después del Concilio Vaticano II (1965) ya que éste normó la celebración de las Asambleas con la nomenclatura actual. Pero hay registros que desde 1930 los obispos en México ya se reunían en lo que llamaron el Comité Episcopal. Desde entonces, y dos veces por año, los obispos de México se reúnen en Asamblea Plenaria para tratar asuntos relacionados al trabajo pastoral en el país y cuestiones de orden social que atañen al país. También pueden reunirse por situaciones extraordinarias como ha sucedido en México donde se han tratado casos que ameriten urgentemente el trabajo de los pastores de la Iglesia.
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Edicto Las Diócesis de Texcoco y Valle de Chalco solicitan la valiosa ayuda de todas las parroquias de esta Provincia Eclesiástica, para localizar al Sr. Alfredo Rodríguez Romero, de 75 a 78 años de edad. Tenemos un comunicado urgente que entregarle. Cualquier noticia sobre esta persona comunicarla a los teléfonos 01 (55) 59 73 13 79 o 01 (55) 59 73 13 81 de la Curia Episcopal de Valle de Chalco.
Lo importan- México y las cifras te en el en el Informe de matrimonio Libertad Religiosa en el Mundo 2016 Pag. 10
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Directorio Excmo. Sr. D. Carlos Cardenal Aguiar Retes Arzobispo de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Guillermo Ortíz Mondragón Obispo de Cuautitlán Excmo. Sr. D. Francisco González Ramos Obispo de Izcalli Excmo. Sr. D. Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, M.G Obispo de Ecatepec Excmo. Sr. D. Onésimo Cepeda Silva Obispo Emérito de Ecatepec Excmo. Sr. D. Guillermo Francisco Escobar Galicia Obispo de Teotihuacán Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez Obispo de Texcoco Excmo. Sr. D. Héctor Luis Morales Sánchez Obispo de Nezahualcóyotl
Una alegría que no se acaba Gran regalo ha sido la celebración del Jubileo Extraordinario de la Misericordia, en el cual el Santo Padre Francisco ha dado a cada Iglesia Particular un momento de gracia y renovación espiritual, que nos recuerda que la Iglesia sigue teniendo la gran responsabilidad de ser un signo vivo del amor del Padre. El Año de la Misericordia ya está por concluir el próximo 20 de noviembre, Solemnidad de Jesucristo Rey del Universo, pero no termina la gran tarea que tenemos como Iglesia: cooperar en la obra salvífica de Cristo, para que el Pueblo de Dios contemple el Rostro de Dios que es Misericordia. Las peregrinaciones hacia la Puerta Santa nos han recordado que, como Pueblo de Dios, necesitamos de la Misericordia Divina, ya lo dijo el Santo Padre al inicio de su pontificado: “Dios no se cansa de perdonar, somos nosotros los que nos cansamos de pedir perdón”. El acercarnos a la Misericordia de Dios no es sólo en este Año Jubilar sino siempre. Cuantas expresiones del jubileo: de las familias, de los adolescentes y jóvenes, de los catequistas, de los sacerdotes, de la vida consagrada, de los seminaristas, de los presos, de los enfermos… cada una de estas expresiones fueron oportunidad de experimentar el bálsamo del perdón y la alegría de ser parte de la Iglesia, Cuerpo Místico de Cristo. En cada una de las comunidades diocesanas y parroquiales, queda el llamado de la Iglesia a
ser Sacramento Universal de Salvación, como lo ha expresado el Papa Francisco: “Cuánto deseo que los lugares en los que se manifiesta la Iglesia, en particular nuestras parroquias y nuestras comunidades, lleguen a ser islas de misericordia en medio del mar de la indiferencia”. Nuestra Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla se ha esforzado en vivir la espiritualidad de comunión en el proceso de renovación pastoral con la metodología prospectiva, trabajando en ser una iglesia en salida, que responda a los desafíos de nuestro tiempo. Recordemos constantemente que ser discípulos misioneros que promuevan la solidaridad y la justicia, solo se hace posible a través de la Misericordia. Trabajemos por el perdón y la reconciliación en nuestra sociedad convulsionada con tanta violencia y corrupción, y aportemos la “revolución de la ternura” como lo ha expresado el Santo Padre, al mundo dividido por el odio y el rencor. Que María Madre de la Misericordia interceda por nosotros para experimentar que “la Misericordia de Dios es eterna” (Sal 135). En Cristo misionero les reitero mi amistad, oración y cariño. Con mi bendición. + Óscar Roberto Domínguez Couttolenc M.G. Obispo de Ecatepec
Excmo. Sr. D. Víctor René Rodríguez Gómez Obispo de Valle de Chalco Excmo. Sr. D. Efraín Mendoza Cruz Obispo Auxiliar de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Jorge Cuapio Bautista Obispo Auxiliar de Tlalnepantla
Encuentro Provincial de la pastoral de Laicos en Nezahualcóyotl Por: P. Luis Alberto Mondragón Mugica OSJ El pasado 30 de octubre del presente año se realizó en la catedral de Ciudad Neza con la presencia del señor Obispo de esta demarcación Mons. Héctor Luis Morales, se llevó a cabo el primer encuentro de Grupos y Movimientos Laicales de la provincia de Tlalnepantla integrada por las diócesis de Izcalli, Cuautitlán, Tlalnepantla, Valle de Chalco, Teotihuacán, Texcoco, Ecatepec y Neza. La cita fue en el auditorio de la catedral. Citados a las 10:00 am iniciamos con dinámicas de integración, temas de reflexión, pero sobre todo el interactuar entre nosotros y conocer por medio del método FODA (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas) los avances que como provincia y como diócesis se han tenido principalmente con la metodología prospectiva. Nos dimos cuenta del camino que hemos de recorrer, pues hay diócesis que ya tienen desde hace años un Consejo de Laicos que apoyan las iniciativas pastorales de
los obispos y sacerdotes, admiramos la tenacidad de haber profundizado mucho más en el método prospectivo en las diócesis hermanas, de tal modo que los avances se notan en los modelos tanto de situación, como ideal, diagnóstico y operacional. Nosotros expusimos que estamos en la elaboración del modelo de situación y que aunado al Sínodo diocesano podamos tener pronto los resultados para poder seguir adelante y emparejarnos en el método prospectivo en la provincia. Otro de los llamados que tuvimos en este encuentro laical es poder incidir positivamente más en la sociedad, como laicos en la política, en la economía, en la promoción humana y que hasta la fecha se ven ciertos avances, pero como laicos podemos dar más. Nos preparamos para el encuentro nacional de laicos (DELAI) que se llevará a cabo en Culiacán, Sinaloa, el 10, 11 y 12 de marzo del 2017 y que el próximo
Excmo. Sr. D. Francisco Ramírez N. Obispo Auxiliar Emérito de Tlalnepantla DIRECTOR GENERAL Mons. Víctor René Rodríguez Gómez Presidente de la Comisión Provincial para la Pastoral de la Comunicación DIRECTORA EN TURNO Abril Villanueva SUBDIRECTOR DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO Jessica Vázquez COLABORADORES Equipo de la Pastoral de la Comunicación de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla Registro en trámite.
Es una publicación catorcenal de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla. Se distribuye en la Arquidiócesis de Tlalnepantla y en las Diócesis de Cuautitlán, Izcalli, Ecatepec, Texcoco, Teotihuacán, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.
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encuentro provincial será después de marzo del 2017 y hay una gran posibilidad de que sea en nuestra Diócesis, en Nuestro Santuario Diocesano de la Siempre Virgen María de Guadalupe y casa de los 2 videntes. Ojalá que seamos unos excelentes anfitriones. Roguemos a Dios Nuestro Señor por los lai-
cos para que siendo el futuro de la Iglesia mantengan la esperanza de llevar el Evangelio a donde los sacerdotes no podemos llegar y siembren nuevas y santas vocaciones en sus familias para que se den los sacramentos a la próxima generación.
Ordenación sacerdotal de mujeres Por: CODIPACS Izcalli
Los días pasados hemos sido testigos de un nuevo viaje apostólico del Papá Francisco, ahora a Lund, en Suecia, en donde además de emotivos y claros discursos, tuvo un encuentro ecuménico con la arzobispa luterana de Upsala, Antje Jackelén, encuentro que ocasionó numerosos comentarios por todo el mundo. Durante el viaje de regreso a Roma, una de las preguntas obligadas al Papa fue exactamente sobre el papel de la mujer en la Iglesia Católica y especialmente sobre la ordenación sacerdotal de las mujeres, a lo que el Papa respondió que “la última palabra clara fue la que dio Juan Pablo II, y sigue siendo la misma”. Y es que en el año de 1994, el entonces sucesor de san Pedro, en la Constitución Apostólica Ordinatio
Sacerdotalis (sobre la ordenación sacerdotal reservada sólo a los hombres), dijo que “la presencia y el papel de la mujer en la vida y en la misión de la Iglesia, si bien no están ligados al sacerdocio ministerial, son, no obstante, totalmente necesarios e insustituibles” (OS núm. 3). Y además, en dicho documento, declaró: “Por tanto, con el fin de alejar toda duda sobre una
cuestión de gran importancia, que atañe a la misma constitución divina de la Iglesia, en virtud de mi ministerio de confirmar en la fe a los hermanos (Cf. Lc 22, 32), declaro que la Iglesia no tiene en modo alguno la facultad de conferir la ordenación sacerdotal a las mujeres, y que éste dictamen debe ser considerado como definitivo por todos los fieles de la Iglesia”. En este sentido, la no admisión de las mujeres a la ordenación sacerdotal no puede significar una menor dignidad ni una discriminación hacia ellas, como lo hacen ver o sentir grupos feministas de nuestro tiempo, sino la observancia fiel de una disposición que hay que atribuir a la misma sabiduría de Cristo, el Señor, pues dice el mismo documento ya citado que, según
“los Evangelios y los Hechos de los Apóstoles atestiguan que la llamada al sacerdocio fue hecha según el designio de Dios cuando dice que Cristo ‘eligió a los que él quiso’ (Cf. Mc 3, 13-14 y Jn 6, 70), y lo hizo, además, en unión con el Padre ‘por medio del Espíritu Santo’ (Hch 1, 2), después de pasar la noche en oración (Lc 6, 12)”. Y de esta misma manera actuaron los apóstoles elegidos por Cristo, cuando ellos a su vez eligieron a sus sucesores. De manera que, la norma de la Iglesia no cambia, aún cuando los tiempos en los que vivimos surjan corrientes que privilegien y defiendan los derechos igualitarios para las mujeres, pues como ya lo hemos dicho antes, la prevención de la Iglesia no es la discriminación sino la fiel observancia a los mandatos divinos.
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Cristo es el Rey del universo y de cada uno de nosotros
Chicos, Jesús es el rey del universo, o sea de todas las cosas que Dios creó. Su Reino es el Reino de la verdad y la vida, del amor y de la paz. Jesús puede reinar en nuestros corazones: Cuando empezamos a conocerlo. Cuando nos acercamos a él en la oración y en la Eucaristía.
Instrucciones: Colorea el siguiente dibujo con el mismo amor que Cristo abraza al mundo.
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Elecciones en Estados Unidos y nuestro caminar de Iglesia
Elecciones en Estados Unidos y nuestro caminar de Iglesia. El 8 de noviembre se han llevado a cabo las elecciones en los Estados Unidos, con la participación de Hilary Clinton (Partido Demócrata) y Donald Trump (Partido Republicano) como sus principales candidatos. Este proceso electoral ha despertado un gran interés, por el proceso de la globalización, aunado a que Estados Unidos es una potencia mundial. Nuestro País ha seguido con particular atención este proceso electoral, ya que México ha sido punto importante del debate de ambos contendientes, incluida la visita que realizó el candidato republicano a nuestro país el 31 de agosto, trayendo unas severas críticas a la administración federal y consecuencias diversas que hoy se siguen teniendo. Esta elección debe proyectarse en el marco del mundo que se mueve vertiginosamente con relaciones cada vez más complejas: China ha tenido un repunte como potencia, pero ha producido mucha volatilidad en el mercado mundial; Europa tiene el gran flagelo del terrorismo, migración y la salida del Reino Unido de la Unión Europea. En esta zona del mundo, las economías de Estados Unidos, Canadá y México han estado enlazadas con el Tratado de Libre Comercio y hay un flujo migratorio de los más grandes en el mundo, con más de 35 millones de personas de origen mexicano en Estados Unidos. México exporta el 90 por ciento de su manufactura a Estados Unidos, y, a diferencia de otros países de Latinoamérica, México ha desarrollado más sus procesos indus-
triales y productivos, y no sólo la exportación de materias primas. En cuestión de Iglesia Católica, los migrantes mexicanos son un pilar de la comunidad cristiana que peregrina en Estados Unidos de América: el aumento de la Iglesia Católica en nuestro vecino del norte se ha dado gracias a los migrantes, según estimaciones 8 de cada 10 católicos en el 2030 serán de procedencia latina. En enero de 2017 inicia una nueva administración en los Estados Unidos, y la Iglesia, como Pueblo de Dios, debe seguir siendo “sal de la tierra” y “luz del mundo”. Si es cierto que hay gobiernos que favorecen y otros ponen obstáculos a la vida de fe, pero la Iglesia, que es Madre y Maestra, ha convivido durante más de 2000 años con diferentes regímenes y ha salido adelante en su misión de evangelizar y bautizar a toda criatura. Los obispos, sacerdotes, vida consagrada y laicos comprometidos tienen que enlazar los esfuerzos hechos por las Iglesias de Estados Unidos y de México, por la atención pastoral de millones de fieles que viven su fe a un lado y otro de la frontera. El Papa Francisco, los episcopados de ambos países han trabajado arduamente en estos últimos años. La llegada de Mons. Christophe Pierre como Nuncio Apostólico en nuestro vecino de norte, después de haber sido el representante del Santo Padre en nuestro País, es un aliciente para que en este mundo globalizado, la relación binacional de nuestros pueblos, supere obstáculos y colabore con un mundo de paz y progreso que todos deseamos.
Comunión: Un Dios que es Padre de todos Por: Leandro Medina, Comunicador Católico El Papa Francisco nos ha insistido en “Salir de nosotros mismos”, en llevar ese testimonio de la misericordia de Dios como “buenos samaritanos”, y nunca olvidar que somos portadores de la paz de Cristo en la misión confiada a su Iglesia: Instrumentos de reconciliación. El mismo Papa nos ha dado grandes muestras de esa reconciliación y paz al tener encuentros con otras denominaciones cristianas, incluso con otras denominaciones de fe. Sabemos de su amistad con rabíes judíos, pastores evangélicos, e Imanes musulmanes. Hemos visto los históricos acercamientos con las Iglesias Ortodoxas, Pentecostal, Anglicana, y en días recientes la Luterana. Sin embargo, algunos se han “rasgado las vestiduras” ante estos hechos argumentando que ‘el Papa está cometiendo grandes errores acercándose a esos cismáticos y herejes’. ¿Qué les contestaría Jesús a estas personas? Indudablemente recordamos escenas de los evangelios: La comida con los pecadores, la Samaritana, las sanaciones en sábado, las 100 ovejas, y muchas otras enseñanzas en donde nos debería quedar claro que es más importante el fondo que las formas; que la misericordia de Dios trasciende a los conflictos y faltas del hombre (más aún cuando hay reconciliación, respeto y paz de por medio). Que no nos corresponde ser jueces ni motivo de división al reclamar un cisma haciendo “cismas particulares” dentro de la misma Iglesia. Que Dios quiere una sola Comunidad
(Común+Unidad), que a su vez debe unirse con Él a la cabeza para formar ese cuerpo místico que nos refiere San Pablo (vea I Cor. 12, 27). En ese sentido, debemos ser congruentes con nuestra fe y transformar el verbo en acción, debemos abonar con nuestra actitud y testimonio a la unidad que pide Jesús en la oración: “Que todos sean uno” (Jn. 17-21). Ser esa comunidad de comunidades que deja atrás esa insensibilidad del mundo para superar sus diferencias, y más bien encuentra sus coincidencias poniéndose “en los zapatos del otro”. Las divisiones, los conflictos de la humanidad, no sólo afectan a las partes involucradas, también hay daños colaterales hacia los más frágiles, pero sobre todo rompen nuestro compromiso de amor a Dios y al prójimo; por tanto tengamos siempre presente lo que dice San Pablo en su Carta a los Efesios : “Les ruego que se comporten con gran humildad, amabilidad y paciencia, aceptándose mutuamente con amor. Preocúpense de conservar mediante el vínculo de la paz la unidad que es fruto del Espíritu. Un sólo Señor, un Dios que es Padre de todos, que está sobre todos, actúa en todos y habita en todos” (Ef. 4, 1-6). A fin de cuentas, Dios es quien nos une en su misericordia y nos pide unidad y caridad, no sólo de palabra o dentro del templo, más bien, como una experiencia permanente que ilumine a los demás y les contagie para generar una verdadera comunión.
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Diálogo con la cultura
Somos deportistas de corazón
La Iglesia es llamada a abrir espacios de encuentro con las culturas, para escucharlas, valorarlas, transformarlas y promoverlas a la luz del Evangelio.
Por: CODIPACS Izcalli
Los documentos de la Iglesia relativos a la formación sacerdotal definen al Seminario como el corazón de la Diócesis, en razón de que él bombea e irriga sangre para que el cuerpo tenga vida. Y es que, siendo el Seminario quien provee de pastores a la Iglesia, debe tener un lugar especial en la vida de todos los cristianos. No podemos descuidar en oración y en todos los demás medios, lo que está generando vida y lo que hace que tengamos vida. De manera que, el cuidado de las vocaciones depende, no sólo del obispo y los sacerdotes encargados de la formación, también depende de todo el santo pueblo de Dios. De muchas y variadas maneras estamos llamados a ser cercanos con el corazón de la Diócesis, que es el Seminario. Y en esta ocasión, como el año pasado, nos invita a la gran kermés que se organiza en beneficio de la formación de los futuros sacerdotes. La kermés se llevará acabo el domingo 4 de diciembre e iniciará en punto de las 8 de la mañana. El evento se llevará a cabo en las mismas instalaciones del Seminario, ubicado en Prolongación Río Acatlán, Colinas del Lago, en Cuautitlán Izcalli. La kermés iniciará, como el año pasado, con una carrera atlética de 5km, carrera que comprende calentamiento, competencia, premiación y animación. La carrera será en categorías libre, master, juvenil y veteranos, además, de la carrera infantil y si lo prefieres la caminata familiar de 2km.
Por: Samuel Nájera
Además, durante la kermés habrá celebraciones eucarísticas en diferentes horarios a lo largo del día, de manera que no falte el sustento del alma al participar de este evento. En la kermés, que está pensada para toda la familia, también habrá comida todo el día, para que quienes asistan puedan desayunar, comer y cenar con nosotros. Además de los eventos que tenemos preparados como presentaciones de bailes folklóricos, algunos animadores, música viva, concursos, la feria y más entretenimientos, sin que falte la ya esperada pastorela que los
mismos seminaristas escriben, actúan y preparan para todos nosotros. La kermés está pensada para todo el público y tiene como finalidad hacer que pases un domingo diferente y divertido con tu familia, de manera que, si quieres hacer ejercicio, te inscribas en la carrera, y lo puedes hacer a través de nuestras redes sociales o directamente en las instalaciones del seminario. O bien, si quieres comer éste será el lugar ideal, si quieres montar a caballo o si quieres bailar, ese domingo, el Seminario es la mejor opción. ¡Ven, te esperamos!
Dos sacerdotes más en la Diócesis de Cuautitlán Por: Padre Didier Munsiensi Mawete / Codipacs Cuautitlán
Cristo es Sumo y Eterno Sacerdote. Este afirmativo se entiende en la naturaleza del sacerdocio mismo, y la cual es ofrecer sacrificios y de esa manera ser el mediador entre lo divino y lo humano. Cristo es sumo y eterno sacerdote porque sólo Él realiza aquella mediación que salva a los hombres. Aunque Él mismo no se llamó sacerdote, su misión sacerdotal se resalta en la unión hipostática. Por medio de su encarnación, la humanidad se une con la divinidad.
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De esta forma comprendemos que Cristo realiza la mediación entre lo divino y lo humano. Desde luego el sacerdocio, vivido hoy, es la figura del sacerdocio de Cristo y su forma concreta. En el sentido de que el sacerdote realiza en él la mediación entre Cristo y el pueblo de Dios en el mismo sacerdocio de Cristo sumo y eterno Sacerdote. Con razón tener un sacerdote es una bendición peculiar para la Iglesia y el pueblo de Dios que necesita la redención en Cristo.
La Diócesis de Cuautitlán ha experimentado la fuerza del favor de Dios con el don de dos sacerdotes jóvenes Javier Álvarez Santiago y Héctor Martínez Reyes. Fueron ordenados el lunes 24 de octubre del 2016 en la Iglesia Catedral de Cuautitlán a las 18 horas por la imposición las manos del Señor Obispo don Guillermo Ortiz Mondragón. El Padre Javier Álvarez Santiago, apoyándose en San Juan Crisóstomo toma la idea de su sacerdocio con estas palabras: “La señal de nuestro amor para con Él es el empeño que ponemos en cuidar de su rebaño”. De su parte, el Padre Héctor Martínez Reyes, contando a la misericordia divina pidió a todos que no nos olvidemos de orar por él. Oremos queridos hermanos y hermanas para que el Señor Jesús los haga sacerdotes santos según su corazón.
Cada obispo de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla hace esfuerzos serios y significativos por ir al encuentro de la diversidad de pueblos y comunidades de su propia diócesis, y de tener un contacto directo y personal con la cultura que embellece, enriquece e identifica la vida de las personas y sectores humanos, a veces cristianos, a veces no. De ahí la enorme capacidad de nuestros pastores para dialogar con todas las personas, de manera amplia, cálida e incluyente.
En este sentido y para este fin, las diócesis promueven la dimensión de la Pastoral de la Cultura que tiene entre sus metas impulsar la Nueva Evangelización de las culturas contemporáneas, para que el Evangelio ilumine los diversos ambientes y transforme al hombre de hoy. El documento “Para una pastoral de la cultura” del Consejo Pontifico para la Pastoral de la Cultura (1999) señala que “en el camino indicado por el Señor, la pastoral de la cultura, estrechamente unida al testimonio de fe personal y comunitario de los cristianos, se inscribe en la misión de anunciar la Buena Nueva del Evangelio a todos los hombres de todos los tiempos, como medio privilegiado de evangelizar las culturas y de inculturar la fe.” Los agentes de pastoral integrados a la acción profética de la Iglesia deberán de empeñarse en reconocer y participar en la exigencia que enmarca nuestro camino histórico, en los procesos pastorales a largo plazo, y también en los aspectos profundos y globales que conlleva esta tarea… porque lo que está en juego (dice el do-
cumento) es el futuro de la Iglesia y del mundo: “El anuncio del Evangelio de Cristo nos impulsa a constituir comunidades vivas de fe, profundamente insertadas en las diversas culturas y portadoras de esperanza, para promover una cultura de la verdad y del amor en la cual cada persona pueda responder plenamente a su vocación de hijo de Dios «en la plenitud de Cristo»”. La urgencia de la pastoral de la cultura es grande, la tarea gigantesca, las modalidades múltiples, las posibilidades inmensas… El Evangelio, lejos de poner en peligro o de empobrecer las culturas, les da un suplemento de alegría y de belleza, de libertad y de sentido, de verdad y de bondad. Y claro está, de paz. Agente de Pastoral, cuando ejerzas la catequesis, la predicación, la preparación a las pláticas presacramentales, las charlas a los padres de familia, a los niños, adolescentes y jóvenes, en todo proceso evangelizador, no pases por alto, el ámbito de la cultura, a la que estás llamado a servir y a transformar en el corazón de Cristo Jesús.
Riqueza cultural que nos lleva al encuentro con Dios, a través del rezo por nuestros difuntos Por: Seminarista Moisés García / Diócesis de Ecatepec El día de muertos es una celebración mexicana de origen indígena en la que se honra a los difuntos y que se remonta a la época prehispánica. En la actualidad, se celebra el día 2 de noviembre conjuntamente con el día 1°, en que se celebran todos los santos en el calendario católico. En la fe católica se pueden ofrecer oraciones, sacrificios (ayunos) y misas por los difuntos, para que sus almas sean purificadas de sus pecados y puedan entrar cuanto antes a la gloria a gozar de la presencia de Dios. En nuestra tradición mexicana, el día 2 de noviembre se realiza la “alumbrada” en el panteón. En esta festividad, es obligado visitar las tumbas de los difuntos para limpiarlas y arreglarlas, donde miles de velas iluminan los sepulcros decorados con flores, el amor y el respeto son los elementos princi-
pales de esta celebración, haciéndola única y extraordinaria. Esta visita, es una muestra más de la riqueza y diversidad de la tradición, pues en algunos lugares, es costumbre colocar una ofrenda sobre el sepulcro y pasar allí la noche en vela con la familia reunida, en estas fechas se hacen oraciones por los fieles difuntos las cuales muchas veces no nos damos cuenta que nos llevan a ser misericordiosos como el padre ¿Por qué?: Porque hemos hecho dos obras de misericordia, primero: Enterrar a los muertos y segundo, hacer oración por vivos y muertos, recordemos los pasajes bíblicos donde se hace oración por los difuntos para que el señor en su infinita misericordia los salve del fuego eterno “... y rezaron al Señor para que perdonara totalmente ese pecado a sus compañeros muertos. El valiente Judas exhortó a sus hombres a
que evitaran en adelante tales pecados, pues acababan de ver con sus propios ojos lo que sucedía a los que habían pecado.” (2 Macabeos 12,42) En nuestra Diócesis de Ecatepec, la celebración de los fieles difuntos tiene una peculiaridad, ya que, desde hace algunos años, en nuestros pueblos los feligreses se organizan para realizar un tapete desde el atrio de la Iglesia hasta el panteón o campo santo, dicho camino es alumbrado con velas o
veladoras que indican el camino que han de seguir nuestros difuntos de retorno a su morada de descanso, se hace una procesión donde dentro de ella, se va rezando el Santo Rosario por los difuntos. Esta tradición ha movido los corazones de los fieles para participar en estos actos de piedad que acrecienta el reino de Cristo. Al llegar al panteón se celebra una misa en sufragio por los difuntos ahí enterrados.
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La alegría de ser Jesús Por: Hna. María Ángela Hernández García
La alegría de ser de Jesús ha sido para mí la experiencia más hermosa de mi vida. Mi nombre es María Ángela Hernández García y pertenezco a la Congregación de las Hermanas de Santa María. Hice mis votos perpetuos en el año 2000 y puedo decir que el Se-
ñor me ha hecho muy feliz. Desde el primer día que estuve en Santa María, Jesús cambió mi vida… Las alegrías que me ha dado el Señor a lo largo de estos años de entrega, han sido muy, muy especiales, sobre todo porque he podido experimentar el amor de Dios en mi vida.El camino es largo, pero la recompensa, la meta a la que espero llegar, es Jesús, quien ha alegrado mi vida en momentos cruciales, le ha dado luz y sentido a lo que no tenía sentido. Él es mi fortaleza, la Roca que me sostiene cada día, y cada momento, aún cuando mi mente se ofusca, Él siempre está ahí para sostenerme y no me deja caer porque me ama; y el gran regalo que Él me ha hecho es que lo puedo experimentar, porque yo lo amo también. Todos los días no me canso de entregarle
mi vida y ofrecérsela como el día que le dije que le quería seguir, tomando mi cruz con alegría porque es Él quien me ayuda a llevarla, no estoy sola, ni camino sola porque mis hermanos son el rostro visible de Dios que es Padre y Madre. Cuando decidí dejarlo todo por Él, la gente y mi familia decían que estaba loca. ¡Y bendita locura que me ha permitido trabajar a su lado para la salvación de las almas y la extensión de su Reino! Hoy como cada día le digo al Señor: “Heme aquí para lo que dispongas de mí” con una sonrisa en los labios, porque saberme elegida, amada y saber que confía en mis capacidades para su obra. Sólo le amo, adoro su presencia amorosa y le sirvo. Gracias mi Dios y mi TODO.
No te quedes en la emoción. Dios te llama a vivir en la fe Por: Pbro. Gustavo Mendieta Martínez Una pregunta que constantemente se hacen los jóvenes, sobre todo después de haber tenido una experiencia espiritual fuerte como en un retiro, una asamblea de oración, o alguna experiencia en su grupo, es ¿cómo hacer para poder seguir creciendo en la vida espiritual, en el encuentro con Dios? La mayoría de las personas, en algún momento de la vida, experimenta a Dios de manera sensorial y es natural que después de dicha experiencia se quiera permanecer e un estado constante de experiencia de Dios a este nivel pero ¿es realmente esto lo que buscamos o necesitamos?. Generalmente después de dichas experiencias, que pudiéramos llamar experiencias fundamentales, los jóvenes salen con los deseos de cambiar el mundo y hacer cambios determinantes en su propia vida, pero al cabo de unas semanas comienza el desánimo y se vuelve a lo cotidiano. Es por esto que surge la pregunta, ¿cómo hacer para seguir creciendo?, ¿cómo no quedarse en el camino de conversión por el desánimo?.
Una Iglesia en salida: sinodal, misericordiosa y desprendida
Por: CODIPACS, Valle de Chalco
Tlalmanalco, Méx. Los integrantes del Consejo Diocesano de Pastoral, los Decanos y los Coordinadores de Comisiones Diocesanas de Pastoral, convocados por el Sr. Obispo, se reunieron en la parroquia San Luis Obispo para analizar las síntesis de las evaluaciones parroquiales y de Comisiones con base en el objetivo del año, a fin de ir preparando la VI Asamblea Diocesana de Pastoral y la programación del 2017. Los integrantes del Consejo Diocesano de Pastoral son representantes de niveles, comisiones y dimensiones pastorales, Vicarios Episcopales y el Equipo Diocesano de Animación Pastoral, en comunión con el Obispo, cuya tarea es investigar, valorar, proponer y decidir todo lo pertinente a las actividades pastorales en la diócesis. Los Decanos y los Coordinadores de Comisiones Diocesanas de Pastoral constituyen las estructuras de ejecución e implementación del Plan Diocesano de Pastoral, por lo
que son los responsables de darle seguimiento, juntamente con los sacerdotes, religiosas y laicos de la jurisdicción encomendada. En un clima de comunión, apertura y confianza, se comenzó con esta reunión en donde se realizó una Lectio Divina dirigida por el Pbro. Juan Martínez. En seguida, el Sr. Obispo dio el saludo y bienvenida en donde mencionó la importancia de realizar una evolución. “No es para ver qué o quién hizo algo mal si no para ver en que podemos mejorar, para lograr nuestras metas y alcanzar nuestro ideal. Nos sirve para ver avances y lo que nos limita para seguir creciendo. La voluntad de Dios es lo
que debe animar nuestro ministerio. Se debe seguir buscando caminos para que se logre ayudarnos mutuamente, porque evaluando el trayecto recorrido podemos vencer con mayor facilidad las dificultades, el estancamiento, el individualismo y el conformismo”. Se dieron a conocer los cambios o logros alcanzados y las dificultades a vencer en la síntesis de las evaluaciones parroquiales y de comisiones, con base en el objetivo del año: con los resultados que las parroquias y comisiones diocesanas habían entregado previamente al EDAP. Señalando los avances y logros alcanzados se puede continuar con mayor éxito y entusias-
mo hacia el ideal soñado, La finalidad de evaluar es para evitar que se repitan las mismas fallas y asegurar el proceso pastoral de acuerdo al itinerario trazado e ir preparando la VI Asamblea Diocesana de Pastoral y la programación del 2017, sentar las bases, tener a tiempo los elementos, con la objetividad requerida, y prever los pasos a seguir de acuerdo al itinerario de nuestro Plan, con miras a la Asamblea y a la elaboración del objetivo del año siguiente. Se finalizó con una convivencia compartiendo los alimentos, Dios sea quien nos ilumine y guíe para la evaluación diocesana.
Ofrecemos los frutos de nuestro trabajo Por: CODIPCAS, Texcoco
Primero que nada, hay que comprender que la experiencia de Dios no es a través de los sentidos sino desde la fe. En algunas ocasiones, Dios puede permitirnos experimentar su presencia a través de los sentidos pero es simplemente un estímulo para seguir creyendo en Él. Es algo similar a la experiencia de los apóstoles en la escena de la transfiguración. Jesús les permite ver su Gloria para creer y en los momentos de dificultad o de sequedad espiritual permanezcan firmes. Por este motivo, podemos decir que la expe-
riencia espiritual puede comenzar en los sentidos pero tiene que crecer y madurar para sustentarse en la fe del Hijo de Dios. En un segundo momento, hay que conservar el ánimo de la experiencia que Dios regala y las luces recibidas con la finalidad de ajustar y transformar la propia vida. Para esto se requiere elaborar un plan de vida donde la persona ponga en concreto los cambios que hay que realizar y lo primero es ubicar de dónde se parte, es decir, contemplar la propia pobreza, carencia, incapacidad y debilidad
de cada uno, para abrir paso a la Gracia de Dios. No como una experiencia de masoquismo sino de amor de Dios por el hombre. Este plan de vida tiene que ser plasmado en papel y evaluado por un director espiritual para que el camino recorrido sea fundado en el amor a Dios y no en la soberbia de la conquista personal. Joven, eres privilegiado por Dios. Permanece fiel en la batalla del Espíritu, que Dios va a tu lado. ¡Ánimo!.
14 de noviembre a la Insigne y Nacional Basílica de Santa María de Guadalupe. Peregrinamos como Iglesia en desagravio del atentado de 1921, para agradecer al Señor las bendiciones recibidas y para pedir con humilde oración los favores del cielo para una diócesis empeñada en su conversión y renovación pastoral. Somos un pueblo profundamente religioso que sabe profesar libremente su fe en Jesucristo. Provenimos de una tierra de misión, tierra de evangelización, orgullosos de pertenecer a la Iglesia Católica, de ser católicos como nuestros padres y abuelos. Ahora, en nuestro Décimo Aniversario de la proclamación del Plan Diocesano de Pastoral, acudimos al amparo de la Virgencita del Tepeyac para que ella, primera discípula misionera de nuestro Señor Jesús, nos muestre el camino, nos acompañe en nuestra intención y aliente el corazón perseverante Desde hace 57 años la Iglesia diocesana de en la conversión, convicción y compromiso esTexcoco peregrina presurosa y jubilosa cada piritual por la comunión en la experiencia de
nuestras relaciones eclesiales y la vivencia de los valores evangélicos. Presentamos a los pies de la Morenita nuestra acción pastoral y la consolidación de las estructuras de renovación de la Iglesia, el dinamismo y vitalidad de los sectores parroquiales y el bien mayor que queremos alcanzar con el proceso de evangelización. ¡Vamos al Tepeyac! La cita es a las 7:30 am en la glorieta de Peralvillo, la Santa Misa se oficiará a las 10 am. presidida por Mons. Juan Manuel Mancilla Sánchez, Obispo de Texcoco, junto con su Presbiterio, en compañía de los Seminarios, Comunidades de Vida Consagrada, agentes de pastoral y fieles. Posteriormente se realizará la convivencia diocesana, a apartir de las 2 de la tarde, en el parque Ecológico Alameda Oriente, en Av. Bordo de Xochiaca S/N esquina Prolongación Periférico, col. Arenal 4ª sección, Delegación Venustiano Carranza, Ciudad de México.
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El proyecto de Dios está en manos de la familia Por: Seminarista José Rodrigo Medina Arredondo Del 24 al 28 de octubre, se realizó en las instalaciones de la Curia la semana de formación permanente del clero acerca de diversos aspectos relacionados sobre el tema de la familia y el matrimonio. La etapa de Configuración con Cristo de nuestro Seminario asistió a este evento, con el objetivo de reflexionar y conocer sobre algunas líneas de acción pastoral inspiradas en la exhortación apostólica postsinodal Amoris Laetitia. El Sr. Arzobispo Carlos Aguiar Retes inició con la conferencia inaugural, donde explicó tres temas que engloban el mensaje tanto del Sínodo como de la exhortación: la íntima relación entre la familia y la Iglesia, la urgencia de una educación sexual y las acciones pastorales de discernimiento en la familia. De esta manera, dio paso a una serie de conferencias impartidas por especialistas provenientes del Pontificio Instituto Juan Pablo II y por presbíteros del clero de Tlalnepantla. Algunos temas que se presentaron versaron sobre el cambio de época y la repercusión en la
familia, la familia a la luz de Amoris Laetitia, las acciones pastorales específicas, el acompañamiento como itinerario de la pastoral familiar, la identidad sexual, las teorías e ideologías de género, las expresiones jurídicas del matrimonio, el matrimonio canónico y consentimiento matrimonial, la capacidad y habilidades para el matrimonio y el proceso de nulidad. En la conferencia inaugural, Mons. Carlos Aguiar señaló que “El proyecto de Dios está en manos de la familia y el proyecto de redención se encuentra en Cristo a través de su Iglesia”, invitando a mirar dicha realidad actual de la familia con ojos de pastor y atendiendo cada situación particular orientando responsablemente. Sin duda fue una semana de reflexión, concientización y motivación pastoral para el cuidado de la familia señalando la labor primordial que tiene el presbítero de anunciar la alegría del amor y buscar el mayor acompañamiento posible con aquellos fieles que tiene encomendados.
El mensaje de la Iglesia sobre la familia radica en volver la mirada en Jesús, que es camino, verdad y vida. Sólo en Él se encuentra la solución para volver a unir las familias y la sociedad. Sólo en Cristo se puede redimir toda problemática familiar. Sólo en Jesús se encuentra nuestra esperanza para reparar el tejido social en que vivimos. Como seminaristas nada humano resulta indiferente pues el corazón de buen pastor que se va desarrollando en el proceso formativo late con todas sus fuerzas para seguir transmitiendo la alegría del Evangelio y la alegría del amor a toda la humanidad.
Congreso Guadalupano de la Misericordia, en Tulpetlac lugar de la Quinta Aparición Guadalupana Por: CODIPACS Ecatepec
Antes de cerrar el año jubilar de la Misericordia, la Diócesis de Ecatepec, en unidad con la Confraternidad de Operarios del Reino de Cristo, nos hemos reunido para celebrar un Congreso Guadalupano de la Misericordia. Ha sido un fin de semana lleno de bendiciones, ya que se han dado cita para este congreso los siguientes expositores: Mons. Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, Obispo de Ecatepec, Mons. Faustino Armendáriz, Obispo de Querétaro, Mons. Juan Manuel Mancilla, Obispo de Texcoco, Mons. Eduardo Carmona CORC, Obispo de Parral, Pbro. Prisciliano Hernandez CORC, Pbro. Gustavo Wattson, Mons. Eduardo Chávez, Pbro. Esteban Alcocer CORC, Pbro. Leonardo Barragán y el Dr. Fernando Ojeda; en donde, a través de toda una reflexión teológica, histórica, científica, piadosa, nos han ayudado a reflexionar sobre el acontecimiento Guadalupano en su Quinta Aparición a este pueblo de Tulpetlac. En cada uno de los escritos históricos, se nos ha presentado todo el signo y misterio de la Misericordia a través de la Quinta Aparición en Tulpetlac desde la visión teológica del templo vivo que es Santa María de Guadalupe, ayudándonos a contemplar el papel del laico como testigo de la misericordia, hemos
reflexionado desde los términos básicos del Nican Mopohua, así como desde la tradición oral de los antiguos, que fundamentan históricamente la Quinta Aparición Guadalupana. Hemos contemplado lo que las ciencias exactas nos hablan de Tulpetlac como acontecimiento Guadalupano, para caer en la cuenta de nuestra devoción guadalupana como motor de la civilización del amor, y así poder contemplar a Santa María de Guadalupe como salud de los enfermos. Durante estos días, presidieron la Eucaristía Mons. Juan Manuel Mancilla, Obispo de Texcoco, el Excmo. Cardenal Alberto Suarez Inda, Arzobispo de Morelia y nuestro Padre y Pastor Mons. Óscar Roberto Domínguez Couttolenc, donde nos han invitado a reflexionar en el amor Misericordioso que Dios ha tenido a través de la Siempre Virgen María de Guadalupe, en la sierva humilde la esclava del Señor que nos ha dado ejemplo de cómo servir con agrado y entrega. Cabe mencionar que también se han realizado dentro de este Congreso Guadalupano de la Misericordia: El rezo del Rosario del Amor Misericordioso, peregrinaciones desde el Santuario de la Quinta Aparición en Tulpetlac hasta la Catedral en San Cristóbal Ecatepec;
se han realizado también actos penitenciales, oración y unción de enfermos de nuestra Diócesis. Ha sido un fin de semana muy bendecido por la presencia de Dios en la vida de cada uno de los que hemos participado en este Congreso que nos prepara para la recta final de este año jubilar de la Misericordia.
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Día de muertos y tradiciones
Por: CODIPACS Izcalli
Durante los días en que conmemoramos la fiesta de todos los santos y de todos los fieles difuntos, tuve la oportunidad de constatar la enorme proliferación de personas, en su mayoría niños y jóvenes, que buscando mantener vivas las “tradiciones” de nuestros pueblos, han salido a la calle o asistido a los festivales de las escuelas disfrazados y caracterizados de una manera espectacular, haciendo alusión a la muerte y a otros entes sacados de películas hollywoodenses. Creo que la intención es bastante buena y aceptable, pues mira hacia el deseo de mantener viva una tradición que predominó en nuestra tierra, incluso después de la Conquista. Sin embargo, creo que esta tradición ha sufrido con el tiempo una mezcla con otras culturas e ideologías que nos hacen perder el sentido de lo que nuestros antepasados vivieron y nos heredaron. Para las culturas prehispánicas, la muerte era considerada un viento realmente importante en la existencia del ser humano, pues no significaba el término de la vida sino un medio para permanecer en comunión eterna con el Supremo Creador. Por eso, para
nuestros antepasados, había necesidad de preparar a los muertos con comida, perfumes en forma de incienso, flores y otros muchos elementos significativos; además, la creencia de que los muertos tenían vida en otra instancia, los hacía recurrir a ciertas tradiciones como la visita a las tumbas, su propio arreglo y las ofrendad tan actuales en nuestros tiempos. Pero estas costumbres y creencias no eran un juego o una forma de ridiculizar el evento de la muerte sino una ocasión para dar, al que ha muerto para éste mundo pero vivo para el Creador, un poco de lo mucho(os) dioses daban a los mortales y que era del gusto de los que ya no estaban aquí. En este sentido, las fiestas prehispánicas de los difuntos era cosa seria, de respeto, de oración y sobre todo, de encuentro comunitario. Eran días no laborables con ocasión de poder honrar a los difuntos. La Iglesia, con el tiempo, reconociendo la riqueza de esta tradición, quiso conservarla y unir a ella la oración por los difuntos, sabiendo que gozan de la eternidad, gracias a la resurrección de Cristo el Señor, y a lo largo de los años, ella misma enseña a no olvidar a
quienes muertos para este mundo gozan de la presencia del Señor. Por eso, creo que esta fiesta que en la actualidad busca perpetuar nuestras tradiciones, la hemos, sin querer, convertido en una fiesta del ruido juvenil, no sólo lastimando su esencia, sino además heredando a los más jóvenes una idea equivocada de lo que nosotros los adultos recibimos de nuestros padres. Ojalá que muchos jóvenes que, deseosos de conservar estas hermosas y ricas tradiciones, den el sentido auténtico a lo que nuestros antepasados y la Iglesia han querido regalarnos.
Los jóvenes, esperanza presente
Por: Lic. Carlos Aguirre Marín / Diócesis de Nezahualcóyotl
La juventud es, sin duda, una de las etapas más bellas que el ser humano puede tener. Según el Centro de Integración Juvenil en Nezahualcóyotl, la población joven de 10 a 24 años de edad es del 25.88%, en una entidad que
cuenta con un total de 1,110,565 habitantes, en donde el 51.65 % corresponde a población femenina y el 48.35% a población masculina. Los jóvenes que viven en nuestra diócesis sufren el mismo con-
flicto que el grueso de la población mundial. Viven en la impresionante carretera de información virtual, con necesidad de lo inmediato, con un creciente deseo de ser conocido, pero sin el sentido de lo trascendente, sus valores se relativizan, dependen de su experiencia personal más que de su formación y conocimientos. Son jóvenes con muchas expresiones afectivas y sexuales, pero carentes del profundo sentido del amor. Estos jóvenes quieren menos palabras y más testimonios, quieren elementos prácticos que les lleven a su objetivo, sin pasar por el punto de la reflexión y el estudio, la responsabilidad y el compromiso. Están metidos en las redes sociales, con muchos amigos virtuales, pero carentes de amigos reales. Necesitan de manera urgente, el testimonio y ejemplo de sus padres, de algún sacerdote, de su obispo, de los dirigentes de grupo.
Necesitan sentir cercano a cada uno de ellos, aprender el valor del silencio, el sentido trascendente de la vida, que se logra mediante el estudio, la disciplina, la voluntad, el trabajo, la templanza y no solo en tener experiencias de sentir “bonito”. Hoy más que nunca, los jóvenes necesitan a Cristo, necesitan un Cristianismo como nos lo decía el Papa Paulo VI: “El cristianismo es una palestra de energía moral, es una escuela de autodominio, es una iniciación en el coraje y en el heroísmo, precisamente porque no teme educar al hombre en la templanza, en el propio control, en la generosidad, en la renuncia, en el sacrificio, y porque sabe y enseña que el hombre verdadero y perfecto, el hombre puro y fuerte, el hombre capaz de actuar y de amar es alumno de la disciplina de Cristo, la disciplina de la Cruz”.
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Mantener la casa en orden y sin estrés Por: Silvia del Valle / @TipsMama5Hijos / www.tipsmama5hijos.com La mayoría de las veces, nosotras las mamás nos estresamos porque la casa no está limpia y no sabemos qué hacer y por lo mismo nos ponemos de malas. Aquí les dejo 5 tips para lograr tener nuestra casa en orden. PRIMERO. SE TOLERANTE Es muy importante que definamos prioridades. No se trata de “conformarnos” y no hacer las cosas, sino de no frustrarnos y de no robarles tiempo a los niños por estar empeñadas en ir a “limpiar”. Hay que lograr hacer hábitos y no trabajar compulsivamente. En mi caso le dedicó tiempo a una zona por día y a lo demás, sólo le doy una pasadita. ¡El perfeccionismo es nuestro enemigo! SEGUNDO. SIMPLIFICA Y AGILIZATE Las rutinas siempre son buenas pero debemos aprender a hacerlas lo más fáciles que se pueda. Hay tareas que podemos hace dos o tres veces por semana y algunas que de verdad se requieren a diario. Es muy bueno identificarlas y programarlas para realizarlas adecuadamente y sin presiones. Simplificar significa ponerme como meta lavar los trastes del de-
sayuno y no más. Y agilizar signi- CUARTO. LAS LABORES DE LA CASA, TAMBIÉN SON fica hacerlo en diez minutos y bien FORMATIVAS hecho. Con esto ahorramos tiempo para pasarlo con nuestros hijos. Si pensamos un poco, nos podemos dar cuenta que pedir a nuestros hijos que nos ayuden en las TERCERO. REVISA labores de la casa es bueno ya que TUS RUTINAS A veces creemos que lo que hemos sus habilidades se desarrollan y se hecho por años y años, es lo mejor, forman hábitos. Con mis hijos les voy cambiando pero debemos adecuar las rutinas conforme a nuestras necesidades. la labor cada semana o cada quinPor ejemplo antes lavaba la ropa ce días, para que no se aburran y un día a la semana y dedicaba aprendan cosas nuevas. Para esto todo el día a eso. Ahora separo la hago un rol de las labores y luego ropa por colores y la voy lavando las distribuyo entre todos los miemdurante la semana para no desper- bros de mi familia, incluyendo mi esposo. Él me ayuda también. diciar tanto tiempo. Antes, yo les recogía los jugueY QUINTO. USA EL INGEtes a mis hijos, ahora les puse NIO PARA QUE SEA varias cajas de diferentes colores DIVERTIDO a su alcance, para que sean ellos quienes los cojan cuando termi- La manera de obtener cooperación de los niños no es a través de nen de jugar. Este punto les causo mucho conflicto a algunos miembros de la familia porque decían que esa era mi obligación, pero en realidad estaba logrando dos objetivos, formarles una virtud a mis hijos: la del orden y agilizar el trabajo de la casa. En realidad debemos hacer nuestras rutinas, sin que nos importe el qué dirán, porque solo nosotras conocemos nuestras necesidades.
gritos y golpes. Si buscamos alguna actividad o juego en donde nosotros también participemos, es más fácil que los niños nos ayuden. A veces les organizo carreras contra el tiempo para levantar sus juguetes, o les armo un rally para ir logrando varios objetivos y así al poco tiempo su cuarto esté arreglado. Esto es mientras se logra formar el hábito. Nuestros hijos poco a poco lo van a hacer por convicción. Si nuestra actitud es positiva seguro que logramos un ambiente lindo y de cooperación, pero, si nos estresamos solo lograremos enojarnos con todos y terminar muertas de cansancio y muy frustradas. Una sonrisa cambia las cosas y nos hace fácil el trabajo. Ojalá y puedan poner en práctica estos sencillos consejos.
Lo importante en el matrimonio Por: Lic. M. Antonio Camacho
El noviazgo Un noviazgo es la base para que el matrimonio sea solido. Se trata de un tiempo propicio para el conocimiento del otro. Es el tiempo de exponerse delante de la otra persona, conocer el plan de vida y los obstáculos que pueden afrontar. Sólo con plena convicción de que se quiere amar a una persona, es posible hacerle frente a los retos, y el noviazgo es el tiempo perfecto para conocer y discernir juntos el paso a dar. Aprender a tomar decisiones, con la cabeza al mismo tiempo que con el corazón, muchas parejas enamoradas se casan, pero cuando el efecto de ese enamoramiento termina, se encuentran frente a un totalmente desconocido, y corren un terrible riesgo de que el matrimonio colapse. Los novios deben ser como el hombre sabio del Evangelio, que supo construir su casa
sobre la roca, y aún a pesar de las tormentas y los vientos huracanados, la casa siempre se mantuvo en píe. Lo que Dios ha unido… Se trata de un sacramento irrompible. Es una decisión que te comprometerá por el resto de la vida, y estar conscientes de esto es primordial, pues, aunque en nuestros días la imagen de matrimonio se ha desvirtuado, los cristianos sabemos que se trata de algo sagrado, de una alianza indestructible. En la salud y en la enfermedad Se debe ser siempre consciente que el matrimonio, para quienes están llamados a él, traerá las alegrías más grandes de la vida, pero también les hará pasar por las pruebas más complicadas de la existencia. Saber que no se está solo en esas pruebas que se ha elegido por afrontarlas junto a quien más se ama, es indis-
pensable, como indispensable es estar siempre pronto para ser apoyo del cónyuge. Teniendo una sola razón para casarse La razón primera de un matrimonio debe ser el amor. La elección de estar siempre de forma incondicional para el ser amado, elegir, amar, cuidar y respetar el hogar, es la base, y fruto de ese amor son los hijos. Actualmente, muchas de las parejas se casan porque tienen hijos. Recordemos siempre que en las prioridades del matrimonio cristiano, la más importante es el amor y fruto de ese amor vendrán los hijos como una bendición. Desde la luz de la palabra de Dios, San Pablo nos enseña en su primera Carta a los Corintios, en el capitulo 13, cómo debe ser el amor.
Dejar de “vernos el ombligo” Por: Tomás Pichardo
Recientemente –en el mes de octubre- vivimos en la Diócesis de Nezahualcóyotl dos encuentros de laicos: uno diocesano y otro provincial. En ambos encuentros tuvimos la oportunidad de experimentar la espiritualidad de comunión entre los diferentes movimientos. En el octavo encuentro de laicos de la Diócesis de Nezahualcóyotl hubo dos exposiciones, en las cuales se habló de la responsabilidad que tenemos como laicos de afrontar desde nuestra fe los problemas que se viven en nuestra sociedad, además de realizar actividades dentro de la Iglesia. En este sentido, se abordó de manera específica la situación que hay respecto a la legalización del “matrimonio” entre personas del mismo sexo y la legalización de la adopción de niños por parte de estas parejas. En ambos casos, se recalcó la necesidad que hay de que los laicos estemos atentos a estas situaciones y las afrontemos por el bien de las familias de México. La segunda reunión fue el Primer Encuentro Provincial de Laicos, realizado el 30 de octubre a la cual fueron convocados los Consejos
de laicos de las diversas diócesis integrantes de la Provincia de Tlalnepantla. Los dirigentes expusieron la forma en que se coordinan y desarrollan su trabajo desde los Consejos Laicales. En ellos, pudimos ver la riqueza y variedad de carismas que existen en la Provincia de Tlalnepantla. El Padre Alberto Mondragón de la Diócesis de Cuautitlán desarrolló una dinámica mediante la utilización de textos bíblicos, con los cuales hizo notar que la Iglesia siempre ha vivido momentos críticos venidos de los ambientes en los que se desarrolla y la manera en que las primeras comunidades los afrontaron permaneciendo fieles al Señor. En este encuentro también nos acompañó Monseñor Héctor Luis Morales Sánchez, obispo de la diócesis anfitriona, quien reflexionó sobre las recientes enseñanzas del Papa Francisco acerca de la misión de los fieles en la vida pública de Latinoamérica. En su exposición Monseñor Héctor Luis hizo énfasis en la necesidad de que los laicos tomemos conciencia de nuestra importancia y papel dentro de
la Iglesia y la sociedad. Insistió en evitar que el clericalismo deforme nuestra identidad de laicos, aludió a las palabras del Papa que afirman que “Esta actitud no sólo anula la personalidad de los cristianos, sino que tiene una tendencia a disminuir y desvalorizar la gracia bautismal que el Espíritu Santo puso en el corazón de nuestra gente. El clericalismo lleva a la funcionalización del laicado, tratándolo como ‘mandaderos’, corta las distintas iniciativas, esfuerzos y, hasta me animo a decir, osadías necesarias para poder llevar la Buena Nueva del Evangelio a todos los ámbitos del quehacer social y especialmente político”.
El reinado de Jesucristo. Un rey reina. No es sólo rey y ‘está ahí’ Parece inútil hacer esta reflexión, sin embargo, da la impresión que los discípulos de Jesús nos quedamos así, con nuestra vida igual y con nuestro rey por enfrente, sin que haya más relación. ¿A qué me refiero con esto? Al hecho de que, si no nos hemos encontrado con Cristo de manera profunda, personal, y todo lo hemos dejado en cursos, pláticas, dinámicas, nada de Él nos afecta. Si aceptamos que Cristo sea nuestro rey, significa que estamos aceptado que Él sea quien reine en nuestra vida. ¿Qué es reinar? Lo podemos explicar con distintas palabras: gobernar, conducir, guiar, dirigir, organizar, asistir, apoyar, acompañar. Todo eso hace un rey. Y al súbdito le toca obedecer, imitar, colaborar y participar. Todo rey para gobernar debe establecer leyes, definir jerarquías, organizar a su pueblo, tener un espacio donde reunir a los suyos. ¿Todo esto lo tiene Cristo? Su ley es el mandato nuevo del amor: ámense como yo los he amado. Su organización es a partir del servicio humilde, expresiones del amor hasta el extremo. Los bienes de intercambio se dan por gestos de bienes espiritua-
les: comprender, acoger, servir, gratuidad. El dinero y demás bienes materiales están al servicio de estas actitudes. Su jerarquía está en la institución del ministerio de Pedro y de los doce, que tiene referencias a todos sus adeptos, y es, en la dinámica del servicio, la justicia en grado de misericordia. El espacio de su reino puede ser cualquier parte del mundo en la que los miembros vivan la cultura de la verdad y la civilización del amor, la unidad, y construyan la paz. Conviene que nos preguntemos si en los ambientes en que vivimos hace falta introducir estas actitudes, este estilo de vida del Reino. Si sólo nosotros, miembros del Reino, podemos hacerlo, o lo hacen otros. ¿Cómo trabajar y con quiénes, por la edificación del Reino en el mundo? ¿Celebramos a Cristo Rey, o aclamamos el reinado de Cristo? ¿Gritamos ‘viva Cristo Rey’ o anunciamos que Cristo Reina en nuestra vida? Todo esto ¿puede ser no ‘o’, sino ‘y’? +Guillermo Ortiz Mondragón Obispo de Cuautitlán.
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México y las cifras en el Informe de Libertad Religiosa en el Mundo 2016 Por: Julieta Appendini / Ayuda a la Iglesia Necesitada- México
En México, la violencia y el narcotráfico han dejado más de 130,000 muertos y cerca de 28,000 desaparecidos en la última década. La mayoría de los delitos están concentrados en 6 estados de la República (Guerrero, Michoacán, Estado de México, Tamaulipas, Veracruz y Ciudad de México). Una práctica cotidiana es que las pandillas cobran “honorarios de protección” o agregan su propio impuesto a productos y servi-
cios con la amenaza de violencia para aquellos que no pagan. Otros, amenazan a administradores del estado a aceptar prácticas corruptas. Las decapitaciones, el linchamiento, la tortura y el alto número de desapariciones forzadas, se han convertido en hechos de rutina en el país. La Iglesia ha sido una de las pocas instituciones que ha ayudado a los aterrorizados pobladores, sobre todo, en las comunidades aisladas. Esta situación ha desencadenado
una ola de crímenes contra sacerdotes y religiosos. El Centro de Comunicación Multimedial, dirigida por el P. Omar Sotelo, afirma que en los últimos 15 años se ha registrado la muerte de alrededor de 55 sacerdotes y religiosos, lo que coloca a México por séptimo año consecutivo, en el primer lugar de crímenes de odio contra sacerdotes, religiosos y laicos. En los últimos 4 años, se han registrado 15 homicidios y 500 extorsiones contra sacerdotes por el crimen organizado. El mes pasado murieron 2 sacerdotes en Veracruz y uno en Michoacán. La Iglesia ha denunciado la violencia y corrupción. Un caso concreto es el obispo Ramón Castro de Cuernavaca, quien ha denunciado este problema y ha encabezado marchas en Morelos contra la violencia en la región. Sin duda, México está viviendo una persecución religiosa, que se
ve reflejada en el Informe de Libertad Religiosa en el Mundo 2016, una investigación que realiza cada dos años la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada y que en este mes de noviembre será presentado. El Informe analiza la situación de persecución, discriminación y ataques islamistas radicales en 196 países que demuestran que la intolerancia religiosa se ha venido radicalizando y sus víctimas han sido niños, mujeres, ancianos y religiosos. En la próxima entrega, hablaremos de algunos casos específicos en el mundo.
La solidaridad del amor Por: Movimiento de Vida Cristiana
El ser humano no puede vivir sin amor. Sólo el amor colma de sentido las aspiraciones más profundas de la persona. Viviendo la dinámica del amor, el hombre se encuentra consigo mismo, descubre la excelencia de su dignidad, lo extraordinario de su vocación a ser libre y la grandeza de su humanidad (No. 10 Redemptor hominis de Juan Pablo II, 1979). Es en el encuentro personal con el Señor Jesús donde la persona percibe plenamente qué es el amor. Optar por el Hijo de Santa María es optar por el amor, porque Él mismo es Amor (1Jn 4, 8; 1Jn 4, 16), y nos enseña a amar de verdad, con toda la radicalidad que ello implica, con ese amor que no conoce medida, que llega al extre-
mo de dar lo más preciado, como No puede existir auténtico amor amor, así como el horizonte de la puede ser la propia vida (Jn 15, 13). humano si no es alentado por el exigencia que su vivencia implica. La opción por quien es Señor Espíritu del Señor. Sólo Él nos rede la Vida y del Amor nos mues- vela la hondura y la intensidad del tra, asimismo, la profundidad de nuestra propia realidad. En efecto, en aquella aspiración a vivir el encuentro personalizante con el Tú divino, descubrimos una análoga aspiración de apertura fraterna hacia nuestros hermanos humanos. “Éste es el mandamiento mío: que se amen los unos a los otros como yo los he amado” (Jn 15, 12). Estas palabras del Señor Jesús nos invitan a recorrer el camino del amor al hermano. Amar como Cristo nos amó es abrirse al dinamismo del amor, que desde nuestra propia realidad se prolonga hacia los hermanos humanos.
¿Es lícito para un católico usar cenizas de un difunto en una “urna ecológica”? Por: Blanca Ruiz
ROMA, 06 nov. 16 / 04:05 pm (ACI). - Un experto sacerdote y consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe en el Vaticano explica que no es lícito para un católico utilizar las cenizas de un difunto en las llamadas “urnas ecológicas”, recipientes que actualmente ofrecen algunas empresas para conservar así los restos de los muertos. En los últimos tiempos, se ha puesto de moda diferentes modos de usar las cenizas de los difuntos: diamantes, objetos conmemorativos o recipientes ecológicos. Al respecto, el P. Ángel Rodríguez Luño, consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que presentó la instrucción Ad resurgendum cum Christo en el Vaticano el pasado 25 de octubre junto con el Cardenal Gerhard Müller, aseguró a ACI Prensa que “la Iglesia anima a que las cenizas se conserven en el cementerio o en un lugar sagrado”. Por ello, “la conservación en casas, esparcirlas en el mar o estos nuevos modos de hacer objetos decorativos o plantas con ellas no está de acuerdo con las enseñanzas de la Iglesia y no es coherente con la tradición cristiana”. Sobre la conservación de las cenizas en casas o su conversión en objetos decorativos, el consultor de la Congregación para la Doctrina de la fe dijo a ACI Prensa que lo que suele suceder es que “la primera generación lo guarda con gran cariño, pero para las siguientes generaciones el apego es menor y se convierte en algo parecido a una carga, y en muchas ocasiones las cenizas o los objetos acaban relegados o incluso perdidos”. Las urnas ecológicas se han puesto de moda a través de varias empresas funerarias que ofrecen estos servicios. Entre otros, se ofrece insertar las cenizas de la persona difunta en una urna o maceta que se deja en el mar o río para que se biodegraden con el tiempo. También hay urnas hechas de sales efervescentes que al contacto con el agua se disuelven con las cenizas del fallecido en su interior. Además, también existen otras que se ofrecen para insertar una planta dentro de la urna, que posteriormente se coloca en algún lugar para que se integre con la naturaleza. En ese sentido el P. Rodríguez Luño resaltó que “hay que tener en cuenta que la Iglesia no coacciona a nadie y respeta los modos de hacer, pero da las pautas y la información sobre
lo que es coherente y no con la tradición cristiana para que cada uno pueda elegir en consecuencia”. “La tradición cristiana desde siempre ha tenido muy en cuenta la sepultura, por eso los primeros cristianos se enterraban en las catacumbas”, aseguró y precisó la importancia de “tener un lugar físico para que los familiares y todo el que lo desee pueda ir a rezar por esos difuntos cuando pasen los años”. El P. Rodríguez Luño explicó que históricamente, en grandes batallas con cientos de fallecidos, “siempre se ha hecho un monumento a los caídos, y una vez al año se les lleva una corona de flores, se celebra una misa y se recuerda a aquellos cuyos cadáveres no se ha podido conservar”. El sacerdote insistió en que, al guardarse en un cementerio, columbario o lugar sagrado adaptado, facilita que se pueda ir a rezar ante el difunto y se trata “del modo más coherente con la tradición cristiana que guarda el sentido de la Resurrección”.
“la Iglesia no ve razones doctrinales para evitar esta práctica ya que la cremación del cadáver no toca el alma” ni tampoco niega “la doctrina cristiana sobre la inmortalidad del alma y la resurrección del cuerpo”. Esta instrucción también precisa que la cremación es lícita, pero las cenizas deben conservarse en un lugar sagrado y desde la Congregación para la Doctrina de la Fe insisten en que está totalmente prohibida “la conservación de las cenizas en el hogar”, algo que solo se permite “en casos graves y excepcionales circunstancias, dependiendo de las condiciones culturales de carácter local” y con el permiso del obispo. Las cenizas, recuerda el documento, “no pueden ser divididas entre los diferentes núcleos familiares y se les debe asegurar el respeto y condiciones adecuadas de conservación”. La Iglesia también insiste en que no puede permitir “actitudes y rituales que impliquen conceptos erróneos de la muerte, considerada como la anulación definitiva de la persona o como momento de fusión con la Madre natuInstrucción Ad Resurgendum cum Christo raleza o con el universo, o como una etapa en el proceso de reencarnación o como la liberaEl documento recientemente presentado sobre ción definitiva de la ‘prisión del cuerpo’”. la sepultura de los difuntos y la conservación de las cenizas en caso de cremación apunta que Fuente: www.aciprensa.com