Mensajero 247

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Año 9 / No. 247

Domingo 21 de enero de 2018

Un año marcado por la esperanza Pag. 3, 8, 9 y 13.

¿Un padrino para cada sacramento?

Solidaridad con la Diócesis de Ecatepec

Celebramo el tiempo ordinario

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Ya estamos en el 2018 Persona, imagen y semejanza de Dios. Desde esta perspectiva, ver el sentido de la persona, imagen y semejanza de Dios, que comporta la igualdad en la dignidad y, en consecuencia, con los mismos derechos y la misma responsabilidad para que, asumiendo nuestras diferencias de sexo, raza, cultura, por la complementariedad, construyamos una nueva sociedad. Esto no es algo que nos otorgue cualquier gobierno o institución, es nuestra existencia como hijos de Dios. Nunca mirar a la persona como objeto, como instrumento para provecho personal o de un sector (Cfr. CEC 356.357.360-362. 367; 369-373).

Hemos iniciado con el favor de Dios el año 2018 cargados de el gozo y esperanza de las que nos ha llenado la gran fiesta del nacimiento del Salvador caminando del Adviento como preparación, hasta la Navidad como Fiesta, meditando este gran acontecimiento, que nos impulsa a mirar nuestra realidad. Nos encontramos en el inicio de las precampañas de los precandidatos para los distintos cargos en el servicio público. Esperamos que esta etapa, y la siguiente de campañas de los candidatos ya definidos por cada partido, sean conducidas en el respeto en primer lugar a todos los ciudadanos, y de los contendientes entre sí. Que sean verdaderos foros de proyectos posibles y realistas, de acuerdo al momento histórico que vivimos como Nación al interno y en el consorcio universal. Es importante que meditemos y valoremos toda propuesta desde la perspectiva de discípulos misioneros de Cristo, testigos de Su Vida en nosotros, y continuemos participando en la construcción de nuestro México necesitado de paz, de desarrollo integral con justicia, en la concordia y complementariedad. Por tanto, urge que tengamos en cuenta algunos aspectos desde nuestra fe. Por esto cito el Catecismo de la Iglesia Católica (CEC), en donde se encuentran algunos de los principios que la Constitución reconoce como propios de la Iglesia Católica A. R. Trascendencia. Sabemos que no todo se resuelve aquí y ni lo más importante es lo material; urge trascender el marco limitado a lo material según los parámetros de la sociedad y sus exigencias, y descubrir el sentido definitivo de la existencia humana de la persona; es decir, construir el camino definitivo, que es el amor del Padre, en armonía y sin violencia de ningún tipo.

La familia. Para que la persona pueda desarrollarse, tengamos en cuenta que Dios nos ha creado para surgir de un matrimonio que forma una familia, integrada por el padre, la madre, los hijos; por eso el Hijo de Dios quiso encarnarse, nacer en el seno de una familia formada por Él con María y José, personas de fe. La dignidad de la persona individual implica la relación con su familia y en la sociedad, sin que los nuevos modelos que aparecen en la tendencia mundial la deformen, con presión de ideologías que son importadas de otras regiones. (Cfr. CEC 1655-1657). La Ley, la Educación y el Trabajo. Sabemos que una ley, con sus reglamentos y protocolos de aplicación, por muy bien elaborada que esté, no es suficiente para que al proclamarla sea cumplida. Esto supone un camino de educación integral que inicia en la familia, desde donde cada persona surge, de acuerdo a su vocación, para participar en la sociedad y ofrece a ésta la riqueza de sus habilidades a través del trabajo, su conocimiento y su capacidad de discernimiento en su participación en la política como ciudadano, corresponsable con la autoridad elegida. La ley ha de ser aplicada a todos por igual, sin distinción de personas (Cfr. CEC 1929-1931; 19351937; 1939-1941). Nuestra Madre de Guadalupe, que puso su pie en el Tepeyac para llamar a Juan Diego Cuauhtlatoatzin a ser protagonista en la construcción de una nueva Nación, y que visitó en el Barrio de Tlayacatl, Cuautitlán, a Juan Bernardino para intervenir en su salud como intercesora, revelando su nombre de “la que pisa la serpiente”, Guadalupe, nos anime y oriente para continuar la obra de nuestro Indio Santo, en el hoy de nuestra historia.

+Guillermo Ortiz Mondragón. Obispo de Cuautitlán

Directorio Emmo. Sr. D. Carlos Cardenal Aguiar Retes Excmo. Sr. D. Guillermo Ortíz Mondragón Obispo de Cuautitlán Excmo. Sr. D. Francisco González Ramos Obispo de Izcalli Excmo. Sr. D. Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, M.G Obispo de Ecatepec Excmo. Sr. D. Onésimo Cepeda Silva Obispo Emérito de Ecatepec Excmo. Sr. D. Guillermo Francisco Escobar Galicia Obispo de Teotihuacán Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez Obispo de Texcoco Excmo. Sr. D. Héctor Luis Morales Sánchez Obispo de Nezahualcóyotl Excmo. Sr. D. Víctor René Rodríguez Gómez Obispo de Valle de Chalco Excmo. Sr. D. Efraín Mendoza Cruz Obispo Auxiliar de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Jorge Cuapio Bautista Obispo Auxiliar de Tlalnepantla

DIRECTOR GENERAL Mons. Víctor René Rodríguez Gómez Presidente de la Comisión Provincial para la Pastoral de la Comunicación DIRECTORA EN TURNO Abril Villanueva DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO Jessica Vázquez COLABORADORES Equipo de la Pastoral de la Comunicación de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla

Registro en trámite.

Es una publicación catorcenal de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla. Se distribuye en la Arquidiócesis de Tlalnepantla y en las Diócesis de Cuautitlán, Izcalli, Ecatepec, Texcoco, Teotihuacán, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.

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2018: Un año marcado por la Esperanza Por: CODIPACS Texcoco

Te imaginaste estar a un par de años del año 2020. ¿Cuántos lo habrán imaginado? Los avances científicos y tecnológicos ya no solo indican un cambio, sino una transformación del modo en el que los seres humanos concebimos la vida en nuestro presente y nuestro futuro; y las generaciones adultas ven con extrañeza y anhelo tiempos más adecuados a la realidad de un mundo mejor transitable y apto para la relación humana. Un mundo del cual esperaron el avance de la sociedad, del progreso y el desarrollo, pero sobretodo, de un mundo marcado por la paz, la justicia y la solidaridad. Un mundo sin distinciones ni divisiones, sino de unidad y fraternidad. Muchos pagaron con la propia vida tales ideales. Para nuestro pueblo mexicano, parece inconcebible que el año pasado se hayan registrado más muertes violentas que en periodos pasados. Tuvimos un 2017 marcado por el fratricidio, a causa del narcotráfico, el secuestro, el robo a mano armada. Vivimos con dolor en un país que sin estar declarado en un estado de guerra, la muerte violenta es su diario vivir. Y parece que en México no pasa nada. Sin embargo, este 2018 se caracteriza ya por las grandes oportunidades que nos brinda, y no solo por las próxima elección presidencial, sino porque se nos han dado motivos para vivir con

entusiasmo y alegría la Esperanza, de un pueblo que busca sus más profundas transformaciones: de un México corrupto, a un México honesto, de un México violento a un México en paz y con dignidad para todos, de un México impune a uno donde impere el Estado de Derecho y se destaque por su impartición de la justicia; un México desquebrajado por uno solidario, participativo y con oportunidades para todos. La garantía de esta transformación social está en sus ciudadanos, en las familias y en su esencia católica de la mayoría de ellas, que siendo conscientes de su fe, reconocen, valoran y aceptan, en el seguimiento de Jesús, que Dios nos quiere libres y con vida abundante e integral. Es el mexicano creyente que insemina esta transformación en el ser humano honesto, digno, pacífico, legal, justo, solidario, participativo y emprendedor. Mujeres y hombres en búsqueda incansable de la verdad y del bien común. Nuestra esperanza puesta en el Señor nos dicta que esto posible, en ti catequista, ministro de la comunión, predicador, misionero, evangelizador, agente laico, en ti, y por ti, en tu familia y comunidad. Seamos valientes y enfrentemos esta crisis nacional con nuestra oración, con la enseñanza y práctica de los valores evangélicos para la humanización de la sociedad. ¡Sí se puede!

¡Muchas gracias! Al inicio del presente año 2018, vendrán varios eventos para nuestra Nación. Uno de ellos desde la Iglesia que camina en este pueblo bendecido por el Señor con la presencia maravillosa de nuestra Madre de Guadalupe. En el caminar de la Iglesia, está la transición del Custodio de la bendita imagen de nuestra Señora del Tepeyac. Después de 22 años de ministerio de Su Eminencia el Señor Cardenal Norberto Rivera Carrea, llega, para iniciar ese mismo ministerio Su Eminencia el Señor Cardenal Carlos Aguiar Retes. El Señor me ha concedido caminar como miembro de la Iglesia en la Arquidiócesis de México durante mis años de seminario, presbítero, obispo auxiliar. Pude ver la transición de este ministerio de Su Eminencia el Señor Cardenal Miguel Darío Miranda y Gómez al Señor Cardenal Ernesto Corripio Ahumada; del Señor Cardenal Ernesto Corripio Ahumada, al Señor Cardenal Norberto Rivera Carrea. La Arquidiócesis de México abarca todo y únicamente el Distrito Federal, decíamos hasta hace un año; ahora nos referimos a La Ciudad de México (CDMEX). Una gran Arquidiócesis con larga historia, de la que se han desprendido varias de las actuales Arquidiócesis y Diócesis. Por su ubicación, de gran relevancia en las relaciones Iglesia Estado, aún antes de la formalización de éstas en el 1992. He admirado a cada uno de los Señores Cardenales Arzobispos que me ha tocado conocer, con quienes tuve la oportunidad de vivir experiencias pastorales de manera muy cercana. Con el Cardenal Miguel Darío por mi participación en el Equipo Arquidiocesano de Pastoral Juvenil, siendo estudiante de Teología en el Seminario Conciliar de México; con el Cardenal Ernesto por mi participación en el Equipo de Secretaría de la Misión Guadalupana, el Equipo para el diseño del Plan Básico de Pastoral, en la última etapa de preparación, la realización y continuidad del II Sínodo de la Arquidiócesis de México; con el Señor Cardenal Norberto como Vicario Episcopal de Laicos, Rector del Seminario, Obispo Auxiliar.

Desde aquí agradezco la gran labor que desarrolló el Señor Cardenal Norberto en la Arquidiócesis de México. Su preocupación por los sacerdotes, su apertura al diálogo, al deseo de trabajar juntos, su visión pastoral; así mismo, su dirección para la Universidad Pontificia de México. La Canonización de San Juan Diego Cuauhtlatoatzin. Reconozco su capacidad de diálogo con diversos sectores en la sociedad: religioso, empresarial, político, educativo, el de las familias y jóvenes y más; sobre todo, su valentía y firmeza ante ataques infundados que constantemente recibió y enfrentó con autenticidad y verdad. El Señor me ha permitido caminar como Obispo de Cuautitlán, Diócesis sufragánea de la Arquidiócesis de Tlalnepantla. Me concedió la gracia de conocer y trabajar de cerca con el Señor Cardenal Carlos Aguiar Retes, primero siendo él Obispo de Texcoco y después como Arzobispo de Tlalnepantla. Su experiencia en distintos campos, su capacidad de previsión y organización, su interés por servir a la Iglesia lo llevó a ser Secretario General y Presidente del CELAM, Secretario General y Presidente de la CEM. Su participación en la Congregación para América Latina y otros servicios, lo llevaron a estar dispuesto a estos dos últimos llamados del Papa, como Cardenal y como Arzobispo de la Arquidiócesis de México. Me da gusto poder hablar de ellos con libertad, con conocimiento de causa y decir, con toda conciencia a cada uno de ellos, ¡Gracias! Señor Cardenal Norberto, gracias por su entrega generosa a la Iglesia en la Ciudad de México y en todo el país, en la Iglesia Universal. Gracias Señor Cardenal Carlos Aguiar Retes por su total disponibilidad a la voluntad de Dios y por su obediente generosidad para ir a la Arquidiócesis de México. Nuestra Madre de Guadalupe, de cuya celestial imagen uno ha sido y el otro será Custodio, les acompañe siempre. Gracias. +Guillermo Ortiz Mondragón Obispo de Cuautitlán.


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¿Con Quién tengo Confianza? Encuentro de jóvenes con nuestro Obispo Por: Pastoral Juvenil Vocacional Misionera. El pasado sábado 13 de enero fuimos convocados por nuestro Obispo Don Guillermo Ortiz Mondragón, para tener nuestro primer encuentro del año, este se llevó acabo en la Catedral de San Buenaventura, bajo el lema: María Guardaba todo esto en su corazón (Lc2,19). Nuestro encuentro inicio con una reflexión sobre la pregunta ¿Con quién tengo confianza? Ya que la confianza es igual al abandono, es no poner resistencia sino simplemente confiar en la persona, el Señor Obispo nos dio diferentes ejemplos como: la confianza que uno tiene en el comerciante o la confianza en el trasporte que nos lleva a nuestro destino, así también nos invitó a confrontarnos como jóvenes ¿en quién hemos puesto nuestra confianza? Y

entonces nos puso un ejemplo en la persona de la Virgen María, nos invitó a leer el texto de Lc. 2, 1620 ya que la confianza implica el abandono en el proyecto de Dios para nuestra propia vida, y solo quien ha tenido esta confianza puede guardar diferentes emociones y sentimientos en el corazón, por eso María guardaba todos los acontecimiento en su corazón; y también nos entregó a todos, unos números del CEC que hablan del misterio de María y su relación con Jesús, como Madre de Dios y de la Iglesia. Animados por algunos miembros del equipo de la Pastoral Juvenil Vocacional Misionera (PJVM) seguimos con el estudio y asimilación del Documento de los Obispos (cuanto ama Dios a los jóvenes), vimos algunos números

del apartado, Fascinados Escuchamos la realidad (profundiza en Facebook PJVM Cuautitlán) donde comprendimos que nosotros como jóvenes tenemos dos cosas importantes: 1. Somos Riqueza para la Iglesia y 2. Semilla de Esperanza del anuncio del Reino, pero jamás

estamos solos pues la Iglesia nos acompaña y nos anima. Te invitamos a nuestro próximo Encuentro que llevará a cabo el 12 de mayo de 2018, a las 9 am. En Catedral de San Buenaventura ¡Agéndalo y No Faltes ¡

Nuestra meta es el Cielo Por: CODIPACS, Texcoco La diócesis de Texcoco realizó su Semana de Evaluación y Programación Pastoral 2018, de Vicarios, Decanos, Religiosos y Laicos de los Equipos Vicariales de Animación Parroquial (EVAP´s), con el objetivo de favorecer y fortalecer la aplicación de las tres líneas de acción del Plan Diocesano de Evangelización y Renovación Pastoral: sectorización, evangelización y consolidación de las estructuras, a fin de que todas las personas que en ella habitan, caminen hacia el Reino de Dios, experimentando un proceso de conversión e integración pastoral. Reunidos en el salón Gante de la Catedral de Texcoco, Mons. Juan Manuel Mancilla Sánchez, Obispo de Texcoco, compartió cada día una enriquecedora reflexión durante la meditación de la Lectio Divina en las que invitó a todos los presentes a trabajar de la mano de Jesús, abriendo el cielo desde la tierra, desde los que son, piensan, siguen, actúan y obede-

cen a Jesús: “Queridos hermanos y hermanas muy queridas de los EVAP´s, señores decanos y vicarios, todos nosotros, alegrémonos con los trabajos de esta semana, porque al final, este es ya nuestro proyecto íntimo, es nuestro proyecto comunitario, es nuestro proyecto estructural y pastoral. Un proyecto que “desde nuestra presencia en nombre de Jesús, el cielo se movilice, se vacíe hacia su Iglesia, sus discípulos, sus instituciones, sus organismos, sus actividades. Porque nuestra meta es el cielo, desde la tierra”, señaló.

El Obispo invitó también a comprometerse con las estructuras sociales, educativas y de servicios, a eliminar de la vida todas esas actitudes negativas, como los miedos, la flojera y el pesimismo, y que por el contrario, haya apasionamiento por la enseñanza: “que nadie descuide la enseñanza a imitación de Jesús y como don de Dios… que ese sea el gozo de los sacerdotes y agentes de pastoral, enseñar… porque de la enseñanza viene la vida, de la enseñanza viene la salud, viene la santidad, la comunión; de la enseñanza vienen

las fortalezas interiores”. El Obispo de Texcoco señaló que sufren más las personas por ignorancia. Encomendó a Dios la jornada de trabajo de la semana: “Que sea nuestro Señor, sea su Espíritu, sea su doctrina, sea su santidad, sea su verdad y sabiduría infinitas, las que resplandezcan para nuestra diócesis”, comentó. Señaló que el reto de nuestra Iglesia es que donde quiera que se encuentre se haga casa que descanse, cobije y alegre en Jesús. La Iglesia tiene el deber de hacer de la Palabra una narrativa para que quien reciba el Evangelio experimente en su vida el proceso histórico del amor de Dios. “La Palabra no es estática, la Palabra fluye, es transcurrente, dinámica y transformadora. La Palabra que se encarna se hace historia”, puntualizó. Jesús incorpora la novedad en el lenguaje, en las relaciones y en las situaciones concretas de la vida del hombre.


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Ordenaciones Diaconales en la Diócesis de Valle de Chalco Por: CODIPACS, Valle de Chalco “Que todos reverencien a los diáconos como a Jesucristo, como también al obispo, que es imagen del Padre, y a los presbíteros como al senado de Dios y como a la asamblea de los apóstoles: sin ellos no se puede hablar de Iglesia” (San Ignacio de Antioquía, Epistula ad Trallianos 3,1) El pasado 06 de enero del 2018 en la Parroquia de Santiago Apóstol en Chalco, se realizó la recepción de las Ordenes Sagradas. Este día en que la Iglesia celebra la Epifanía del Señor, S.E. Mons. Víctor René Rodríguez Gómez confirió la Ordenación Diaconal a Mario Ponce Ramos y Alfonso Velázquez Reyes. El Rector del Seminario Mayor Juan Pablo II, Pbro. Mario Ramón Zacarías, Vicarios Episcopales y Sacerdotes de la Diócesis de Valle de Chalco estuvieron presentes en la solemne Celebración Eucarística, en la que también se encomendaron los Ministerios de Lectorado a Erick Rodríguez Mirafuentes, Francisco Vargas Rosales, y Marcos Galindo Vargas y de Acolitado

a Pedro Rivera González, Eduardo Arenas Cruz y Erick David Herrera García, Seminaristas que continuarán con su formación para en el futuro ser ordenados Diáconos y finalmente Sacerdotes.

Retomando nuestra formación Por: CODIPACS Izcalli Renovados y con mucha alegría después del santo tiempo de navidad, en el Seminario Diocesano de Izcalli, retomamos la formación que se vio interrumpida por los días de descanso que pasamos con nuestras familias. La tarde del domingo 7 de enero, en la capilla del Seminario reunidos en oración, cantamos las vísperas solemnes de la Epifanía del Señor con las que imitando a los magos venidos de oriente a adorar al Mesías, regresamos a nuestra vida ordinaria en el Seminario, por otro camino, con otra actitud, con mayores deseos de formarnos como sacerdotes de Cristo (Cfr. Mt 2, 12). El lunes, el Seminario se convirtió en un festín de escobas y cubetas con el aseo de la casa, momen-

tos que nos invitan a la higiene, al servicio, y también, a la fraternidad, promueven la convivencia y fortalecen el espíritu de compañerismo; el martes y el miércoles, Dios nos concedió la oportunidad de hacer retiro espiritual, así que, dejando aún lado la dispersión de los días de descanso, nos encontra-

mos con el Señor en la meditación, el retiro lo dirigió el padre Christian Eduardo de los Operarios Diocesanos, que nos habló acerca de la alegría en la vida cristiana y particularmente en nuestra vida de seminaristas, aspirantes al sacerdocio ministerial. Mientras nosotros, los seminaristas del mayor

estábamos en estas actividades, nuestros hermanos del Curso Introductorio también hacían retiro, pero ellos sobre el camino de los magos como un camino de búsqueda y encuentro con el Señor. El jueves, los seminaristas del mayor y también los del Curso Introductorio, retomamos las clases de manera habitual, y así recomenzó nuestra vida cotidiana en la formación, en medio del encuentro con el Señor, en el retiro, la limpieza de la casa, la convivencia y las clases. Les pedimos a todos los lectores del Mensajero, no dejen de orar y pedir a Dios por nosotros y por todos los seminaristas en la Iglesia. Feliz inicio de año para todos y un buen regreso a sus labores cotidianas.


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Visita Pastoral, Decanato 1 Por: CODIPACS Ecatepec La visita pastoral es un acto de pastoreo, por el que el Obispo, en nombre de Cristo, se acerca a las diversas comunidades cristianas de su Diócesis para conocerlas, mostrar su solicitud por todos, especialmente los más necesitados de misericordia y aliento, escuchar y atender fraternalmente a sus hijos, llevar el mensaje del Buen Pastor, y en su nombre, a traer a los dispersos y alejados. La Visita pastoral del Obispo es un evento de gracia que refleja en cierta medida aquella especial visita con la que el “supremo pastor” y guardián de nuestras almas, Jesucristo, ha visitado y redimido a su pueblo. Nuestro obispo Mons. Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, M.G., es un pastor que desde su llegada a nuestra diócesis de Ecatepec se ha mantenido muy cercano a cada comunidad parroquial, ya que hace presencia en su labor pastoral, desde las confirmaciones, bendiciones especiales, consagración de altares, etc. Sin embargo, ha querido hacer una visita pastoral donde pueda entrar en contacto con cada agente de pas-

toral en las distintas comunidades. Ha comenzado esta visita pastoral en el Decanato 1, en donde el Pbro. Alejandro Leal (Parroquia San Andrés), Pbro. Álvaro Solano (Parroquia Ntra. Sra. de la Merced), Pbro. Antonio Luna (Parroquia Jesús Resucitado), Pbro. Edgar Pérez (Parroquia San Miguel Arcángel), Pbro. Fernando Correa (Parroquia de Santiago Apóstol y Ntra. Sra. del Refugio), Pbro. Juan Carlos Lucas (Parroquia de San Mateo Apóstol), Pbro. Antonio Jiménez (Decano, Parroquia de San Juan Bosco). Ha sido un momento de encuentro en el Señor, desde el momento de oración en cada comunidad

parroquial donde cada Sacerdote junto con la comunidad han recibido con mucha alegría a nuestro Padre y Pastor Mons. Roberto, posteriormente un momento donde cada comunidad ha mostrado su realidad (a través del modelo de situación), posteriormente escuchando a los miembros de la comunidad, para terminar con un mensaje a cada comunidad. Para terminar la visita pastoral que se llevo acabo en varios días, se reunieron en la Comunidad de San Juan Bosco para poder celebrar todos como una sola comunidad y como discípulos misioneros la Eucaristía, en donde nuestro obispo Mons. Roberto les

ha exhortado a “meditar la escaza conducta cristiana que tenemos, por lo que muchos hermanos y hermanas se alejan al no conocer y experimentar la verdad de Dios, presente entre nosotros y lo que cuesta ser discípulo misionero de Jesús, iniciando por dedicarle tiempo para conocer su palabra, conocer su persona, estudiar la fe, vivir la fe, buscar momentos para orar y estar dispuesto para no comprometer la integridad como creyente cuando no vivimos tal como el Señor nos pide…”, llamado que hace para todas las comunidades.

Plan Diocesano y campañas electorales, dos realidades del 2018 Por: José Luis Ramírez / Diócesis de Nezahualcóyotl No podía haber un inicio de año ordinario más complicado que este 2018 y no necesariamente por las alzas de los costos en alimentos, transporte, entre otros; por las cada vez más caóticas campañas electorales, sino por la enorme cantidad de trabajo que espera a todos los sectores que integran a nuestra Iglesia en general y en particular a la Diócesis de Nezahualcóyotl. Una de las primeras tareas esenciales será la de darle un seguimiento a los trabajos consignados en la XIII Asamblea Diocesana, celebrada del 20 al 23 de noviembre pasado, a través de la identificación de los elementos del Modelo Operativo, es decir la programación de objetivos parroquiales y pastorales para todo este año. Esa primera tarea, pareciera en un principio no tener mayor problema, pues se tratará nada más, ni nada menos, de trabajar juntos,

alcanzar un andar evangelizador entre todos los actores que desarrollan esta actividad casi a diario. Sin embargo, esto es más complicado de lo que parece y se trata de conjugar la manera de trabajar tradicional, toda esa experiencia de años en esa noble tarea evangelizadora, con la aplicación de nuevas maneras de realizar tales tareas. Así como los integrantes de la vida consagrada reciben la tarea de dedicarse a las cosas de Dios, así los laicos, como lo indican los objetivos de la Asamblea Diocesana, deben participar en el discernimiento, la toma de decisiones, la programación y la ejecución del Nuevo Plan Diocesano. De hecho, este plan exige un seguimiento constante por parte del obispo, los sacerdotes y los agentes pastorales y como quedó plasmada en la Asamblea, debe ser con una actitud flexi-

ble “que les permita mantenerse atentos a la escucha de los reclamos de la realidad siempre cambiante”. Así de este modo estaremos en la disyuntiva de estudiar y aplicar esa renovación pastoral o quedar expuestos a la lluvia electoral y con esa simulación a la que llaman precampañas cuando en realidad ya son campañas electorales y con ello el gasto discrecional del erario. Cada realidad tiene sus implicaciones y dificultades, pero lo peor será quedarnos en la expectativa y sin actuar. En nuestra Iglesia, trabajar en esa nueva manera de evangelizar y en la otra quedarnos solo a la espera de que gane el mejor y que nuestro país siga el mismo rumbo de deterioro y solo nos quedemos con la queja de echar culpas, cuando nosotros no hicimos nada al respecto.


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Celebramos el Tiempo Ordinario Por: Codipacs Texcoco

“Estén siempre alegres, oren sin cesar, den gracias a Dios en toda ocasión, esto es lo que Dios quiere de todos ustedes, en Cristo Jesús”. (1Tes. 5, 16-18) Entendemos por liturgia, el conjunto de signos y símbolos para la expresión religiosa y de culto a Dios, con miras a su adoración y alabanza, y de santificación de su Pueblo. La oración, sacramentos, santa misa, oficio divino, son acciones litúrgicas centradas en la Gloria de nuestro Señor Jesucristo, para alcanzar vida de fe en el Padre y por la fuerza del Espíritu Santo, la santificación de los fieles católicos que integran la Iglesia. Esta misma intención la comparte el Tiempo Litúrgico, que es el período cíclico anual en el que se celebra la Historia de la Salvación por los méritos de Cristo, distribuidas en solemnidades, festividades y memorias, y se distribuye en los siguientes momentos especiales: Adviento, Navidad, Cuaresma, Pascua y Tiempo Ordinario. Actualmente, acabamos de entrar en el Tiempo Ordinario que se distingue por una clara intención por encontrar a Dios en todos los acontecimientos de la vida diaria. Se lla-

ma Tiempo Ordinario para diferenciar este tiempo de los tiempos que llamamos “tiempos fuertes”, como es el Adviento, Navidad, Cuaresma y Pascua. El Tiempo Ordinario abarca 33 o 34 semanas, de las 52 que hay en el año. Se divide en dos momentos. El primero comienza después de la Epifanía y el Bautismo del Señor hasta el comienzo de la Cuaresma (Miércoles de Ceniza); y el segundo, después de Pentecostés hasta el Adviento, y tiene la particularidad de seguir a Jesús en su crecimiento y misión, donde en todo momento se desvive por hacer la Voluntad del Padre. Nosotros, en este Tiempo Ordinario, debemos esforzarnos por buscar, junto a Jesús, a Dios, crecer y madurar en la fe, frecuentar la Santa Misa y los sacramentos. Vivamos con intensidad este Tiempo de Gracia. Oremos a nuestro Señor: “Jesús quiero confiar en que la Luz que nos trajiste en la Navidad nos iluminará el camino a seguir durante este Tiempo Ordinario. Quiero ver las cosas extraordinarias en las cosas ordinarias de la vida, para así gozar de lo extraordinario que es todo lo que nos ofreces. Amén”.

OREMOS POR EL MINISTERIO EPISCOPAL DEL EMINENTÍSIMO CARDENAL CARLOS AGUIAR RETES QUIEN POR DECRETO DE S.S. EL PAPA FRANCISCO, EL PRÓXIMO 05 DE FEBRERO TOMARÁ POSESIÓN DE LA ARQUIDIOCESIS PRIMADA DE MÉXICO.


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“La Noche de los Testigos” este 2018 en México Por: Julieta Appendini, Directora de ACN-México. En este mes de febrero tendrá lugar en México “La Noche de los Testigos”, vigilia de oración, música y testimonios de la Iglesia que sufre persecución, necesidad o falta de libertad religiosa. En nuestro país, además, queremos hacer énfasis en el acrecentado derramamiento de sangre por la violencia. “La Noche de los testigos” será itinerante irá a Guadalajara, Morelia y Ciudad de México y habrá una eucaristía especial en la Catedral de Morelos y contará con testimonios de persecución y fe del Obispo de Homs, Jean Abdo Arbach, víctima de la persecución religiosa, y la religiosa María de la Luz Roa, Misionera Clarisa mexicana, quien ha sido testigo de la guerra civil de ese país y el sufrimiento por el Ébola. Además historias víctimas de la violencia en México Es necesario recordar que ACN lleva a cabo este evento en las diferentes oficinas del mundo desde hace 9 años, siendo Francia la precursora en la Catedral de Notre Dame, París. “La Noche de los Testigos” en México será una oportunidad para concientizarnos de la importancia de la oración para defender nuestra fe, encender una luz hacia la libertad religiosa y rechazar la violencia. Dichos eventos serán el

11 de febrero en la Catedral de Cuernavaca, 14 de febrero en la Catedral de Morelia y 16 de febrero en la Catedral de la Ciudad de México. Ayuda a la Iglesia Necesitada te invita a preparar tu corazón para poder seguir trabajando por la búsqueda de la paz y la reconciliación. Deseamos que “La Noche de los Testigos” pueda encender esa luz en México para proyectar el ejemplo de los que han muerto en nombre de Cristo o han luchado por la paz.

Ayuda a la Iglesia Necesitada-México, Calle San Juan de Dios 222 Col. Villa Lázaro Cárdenas, Tlalpan 14370, México D.F Tel. 5541613331 Correo: info@acn-mexico.org Sitio web: www. acn-mexico.org Face: @ainmexico Twitter:@ACNMex

“Acoger, proteger, promover e integrar a los emigrantes y refugiados” Por: CODIPACS Texcoco Este fue el tema elegido por el Papa Francisco para celebrar la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado 2018: “Durante mis primeros años de pontificado he manifestado en repetidas ocasiones cuánto me preocupa la triste situación de tantos emigrantes y refugiados que huyen de las guerras, de las persecuciones, de los desastres naturales y de la pobreza. Se trata indudablemente de un «signo de los tiempos» que, desde mi visita a Lampedusa el 8 de julio de 2013, he intentado leer invocando la luz del Espíritu Santo”. Sobre esta situación mundial el Santo Padre subrayó que “cada forastero que llama a nuestra puerta es una ocasión de encuentro con Jesucristo, que se identifica con el extranjero acogido o rechazado en cualquier época de la historia.

A cada ser humano que se ve obligado a dejar su patria en busca de un futuro mejor, el Señor lo confía al amor maternal de la Iglesia... Deseo reafirmar que nuestra respuesta común se podría articular entorno a cuatro verbos: acoger, proteger, promover e integrar”. Sobre un compromiso concreto, de parte de los países y sus gobiernos, “para incrementar y simplificar la concesión de visados por motivos humanitarios y por reunificación familiar” el Papa señaló: “espero que un mayor número de países adopten programas de patrocinio privado y comunitario, y abran corredores humanitarios para los refugiados más vulnerables… Las expulsiones colectivas y arbitrarias de emigrantes y refugiados no son una solución idónea, sobre todo cuando se realizan ha-

cia países que no pueden garantizar el respeto a la dignidad ni a los derechos fundamentales. Vuelvo a subrayar la importancia de ofrecer a los emigrantes y refugiados un alojamiento adecuado y decoroso”. El Papa Francisco enfatizó en su mensaje que por tradición pastoral, la Iglesia está dispuesta a comprometerse en primera persona para que se lleven a cabo todas las iniciativas a favor de los migrantes

y refugiados, y que este proceso durante “los próximos meses representan una oportunidad privilegiada para presentar y apoyar las acciones específicas, que he querido concretar en estos cuatro verbos. Los invito, pues, a aprovechar cualquier oportunidad para compartir este mensaje con todos los agentes políticos y sociales que están implicados, o interesados en participar, señaló.


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La Iglesia y su participación en la ONU. Construyamos caminos en favor de la Paz Por: Lic. Carlos Aguirre Marin Un espacio fundamental en donde la Iglesia tiene presencia y reconocimiento es en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que por medio de la Santa Sede, ha tenido una Misión Permanente de Observación desde el 6 de abril de 1964, sin embargo desde su fundación, en 1945 la Iglesia ha estado presente y desde entonces, participa en sus diversas organizaciones en Nueva York, Ginebra, Viena, Nairobi; la Unesco en París, la FAO en Roma, y otros organismos. La ONU, tiene cuatro principales objetivos en donde la Iglesia participa son: La prevención de las guerras y la promoción de la paz; el combate a la pobreza y el impulso al desarrollo; la defensa de la dignidad humana,

y apoyar a las naciones a mantener sus compromisos. La manera como participa la iglesia es la de ofrecer las declaraciones oficiales de la Santa Sede sobre los diversos temas que sostiene la agenda de la ONU, supervisar su participación en las negociaciones y debates, organizar y participar en conferencias y foros en los que la Iglesia puede compartir su experiencia sobre los problemas que enfrenta la

humanidad. Tiene derecho a participar y realizar intervenciones, así como hacer uso del derecho de réplica en la Asamblea General; lo que no puede hacer es votar ni presentar candidatos para las distintas oficinas. Desde el Papa Pablo VI, hasta el Papa Francisco, la Iglesia ha hablado en favor de la Paz, la vida, la familia, de la economía, la ecología, la política, la democracia, la

denuncia a la violación de los derechos humanos. Su intervención ha cambiado el rumbo de la historia como cuando San Juan XXIII evitó la 3ra guerra mundial, así como la caída del totalitarismo en Europa, por la voz y trabajo de San Juan Pablo II. Hoy la Iglesia en la figura del Papa Francisco, encabeza un proyecto, en donde el hombre con sentido trascendente, entiende que solo la fraternidad y el amor unirán a los pueblos, y que esta visión, se presenta ante la ONU, que visualiza un proyecto distinto y que a pesar de ello, la Iglesia trabaja convencida y con esperanza de que la auténtica Paz es posible.

Solidaridad con la Diócesis de Ecatepec. Comunicado de la Conferencia del Episcopado Mexicano Por: Mons. Roberto Domínguez Couttolenc. M.G. / Obispo de Ecatepec. Ciudad de México a 15 enero de 2017. Muy estimado hermano. Por medio de la presente te enviamos nuestros sentimientos de aprecio y cercanía ante los sucesos acaecidos el pasado 12 de enero del presente, en la Capilla de Nuestra Señora de Guadalupe, perteneciente a la parroquia de San Martín de Porres, de la diócesis encomendada a ti, donde un hermano, coordinador de pastoral, perdió la vida, y otros hermanos más resultaron heridos. Nos unimos a ti alzando fuertemente la voz, para condenar todo acto de violencia y todo atentado contra la dignidad de la persona, arrebatándole lo más sagrado que posee, que es la vida. Y al mismo tiempo exhortamos vehementemente a todos los que conformamos este pueblo de Mé-

xico, a trabajar sin desfallecer, redoblando el ánimo y la esperanza para recuperar el tejido social y construir juntos la paz que tanto necesitamos. Nos unimos al dolor de quienes, perdieron injustamente a un ser querido, un laico valioso comprometido con la Iglesia, y de la misma forma, a los familiares de los que resultaron heridos. Nos unimos también al clamor y al dolor, a través de nuestra oración y cercanía de corazón, de tantos que en múltiples incidentes, a lo largo y ancho de nuestro territorio nacional han sido víctimas o han perdido un familiar. Conminamos a aquellos que hacen el mal, o que pretenden hacerlo, a arrepentirse y acercarse al Señor. A deponer el odio, la crueldad y las armas, porque solo en Dios encontramos el perdón, la

paz y la salvación de nuestras almas. Rogamos a nuestra Santa Madre, nuestra Señora de Guadalupe, nuestro refugio y amparo, nos ayude a superar, imitando sus virtudes, el clima de violencia que tantos padecemos.

+Card. José Francisco Robles Ortega Arzobispo de Guadalajara y Presidente de la CEM +Mons. Alfonso Miranda Guardiola Obispo Auxiliar de Monterrey y Secretario General de la CEM


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¿Un padrino para cada sacramento? Por: Diego Pérez / Diócesis de Nezahualcóyotl • Haya cumplido dieciséis La elección del padrino no es una años, a no ser que el Obiselección menor, es una elección po diocesano establezca otra importante que han de hacer los edad, o que, por justa causa, padres de un niño y la finalidad es el párroco o el ministro conelegir a una persona, o matrimosideren admisible una excepnio que vea principalmente por ción; el crecimiento espiritual y en la fe • Sea Católico, esté confirdel apadrinado. mado, haya recibido ya el El código de derecho canónico santísimo sacramento de la nos dice: Eucaristía y lleve al mismo En la medida de lo posible, a tiempo, una vida congruente quien va a recibir el bautismo con la fe y con la misión que se le ha de dar un padrino, cuya sola madrina o uno y una. va a asumir; función es asistir en su iniciación Para que alguien sea admitido • No esté afectado por una cristiana al adulto que se bautiza como padrino es necesario que: pena canónica, legítimameny, juntamente con los padres, pre• Haya sido elegido por quien te impuesta o declarada; sentar al niño que va a recibir el va a bautizarse o por sus pa• No sea el padre o la madre bautismo y procurar que después dres o por quienes ocupan de quien se ha de bautizar. lleve una vida cristiana congruensu lugar o faltando éstos, por El bautizado que pertenece a te con el bautismo y cumpla fielel párroco o ministro; y que mente las obligaciones inherentes tenga capacidad para esta una comunidad eclesial no católial mismo. misión e intención de desem- ca sólo puede ser admitido junto con el padrino católico, y exclusiTéngase un solo padrino o una peñarla;

vamente en calidad de testigo del bautismo. (CIC, 872-874) Posteriormente no se habla de padrinos de primera comunión ya que se entiende que los padrinos de bautismo guiarán y acompañarán al niño durante toda su preparación, iniciación y vida cristiana es por ello la importancia de elegir bien y para toda la vida de un niño, es comprensible que las situaciones pueden cambiar por diversas circunstancias pero se debe procurar seguir al lado del ahijado a lo largo de su vida en un acompañamiento de caridad, el Código de derecho canónico habla de los padrinos de confirmación pero reitera que es deseable que éste sea el mismo del bautismo (CIC. 893, 2)

Que nuestros hijos aprendan a aprender Por: Silvia del Valle / @SilviaMdelValle / @smflorycanto Es muy común que nuestros hijos reaccionen de maneras muy variadas ante diferentes situaciones pero la mayoría de las veces les cuesta mucho trabajo razonar las cosas para actuar de la mejor manera posible. Ya que es mejor que actúen conforme a lo que el razonamiento lógico les dice, dejo mis 5Tips para que nuestros hijos aprendan a aprender.

plementar nuevas formas de actuar.

SEGUNDO. Que aprendan de los errores. Si queremos que nuestros hijos aprendan a pensar y razonar es indispensable que también aprendan a ver los errores. ¿Cómo nos hace pensar un error? Primero nos hace poner atención y reflexionar sobre nuestras acciones, después nos permite analizar si están encaminadas a la verdad y al bien; y por último, nos permite deliberar cómo debimos actuar y así sacar un beneficio de cada error. Esto también lo debemos entender los papás, ya que a veces no les permitimos que se equivoquen y queremos hijos perfectos, que saquen calificaciones de 10 en todo momento, sin darnos cuenta que les estamos quitando la posibilidad de aprender cosas muy valiosas y que además los hacen cada vez más humanos y los ponen en la realidad de la vida cotidiana.

PRIMERO. La verdad ante todo. Nuestros hijos deben aprender que debemos vivir de forma coherente. No podemos decir una cosa y hacer otra porque nuestros hijos aprenden muy rápido y nuestras acciones son más fuertes que nuestras palabras. La verdad debe tener el mismo valor siempre y debe ser algo que rija las acciones de nuestros hijos y lo deben vivir en familia. Ellos deben entender que aunque hagan algo malo, el decir la verdad es más importante que el castigo que pueda traer como consecuencia sus acciones. Si nuestros hijos TERCERO. La Inteligencia son pequeños podemos inculcarles Se Tiene Que Entrenar, Que todo esto desde el principio y si ya es- Aprendan A Tomar Decisiones. tán mayores, nunca es tarde para im- ¡Claro! nuestra mente es increíble y

tiene la capacidad de entrenarse a base de la repetición constante de las acciones que se quieren aprender. Esto se debe a que la inteligencia es el resultado de la cantidad de conexiones que se pueden hacer entre las neuronas que son como las raíces de un árbol. Es un error ayudar a nuestros hijos pequeños y adivinarles todo para que no lloren o sufran. Con esto los estamos acostumbrando a no pensar, ya que sólo tienen que estirar un dedo o hacer como que lloran para tener todo lo que necesitan. Para lograr tener más conexiones es importante jugar juegos de mesa didácticos, que estimulen el pensamiento y el razonamiento. CUARTO. Leer es indispensable. Se trata de que lean libros de calidad, si les damos a leer material tipo cómics o revistas, su vocabulario y su razonamiento serán cortos y limitados; pero si les damos a leer libros que les den cultura y que son clásicos de la literatura estamos aumentando su vocabulario y su capacidad de pensamiento. Una persona que no lee pierde la capacidad de razo-

nar. Otra forma muy buena de leer es que mamá y papá les leamos en voz alta para que ellos aprendan la entonación y la forma de pronunciar las palabras. Además, cuando nuestros hijos escuchan lo que les leemos tienen la oportunidad de imaginarse lo que están escuchando y así fomentamos su creatividad.

Y QUINTO. Los valores son importantes. Nuestros hijos deben tener un marco de referencia dentro del cual lleven a cabo las acciones. Nuestra labor como padres, más que enseñarlos a pensar es guiarlos y motivarlos para que razonen y piensen en cada situación. ¿Qué valores? La veracidad, la justicia, la responsabilidad, la laboriosidad, la obediencia, el orden, la prudencia, el respeto y muchos otros que nos ayudan a regular nuestra conducta. El patriotismo, la solidaridad y la subsidiariedad que nos ayudan a tener mejores relaciones sociales. No podemos olvidar que los valores se enseñan y se viven desde pequeños en la familia. ¿Y ustedes que piensan?


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¿Compromiso en los jóvenes? Por: Seminarista José Antonio Mercado Barrera Los jóvenes no son sólo el futuro del país, sino más bien, son el presente. Mucho de lo que ellos puedan hacer por el país en sus años de adultos dependerá de lo que piensan, sienten y hacen hoy. Pero cabe resaltar que en este momento el país exige compromiso, algo que pareciera no se encuentra tan evidente en los jóvenes. Los jóvenes poseen unos conocimientos parciales, están en periodo de formación, crecen de manera intelectual y en la experiencia, y están constantemente ubicando este conocimiento en su mente. La realidad es que muchos de ellos se sienten, hoy, agobiados. Abarcan infinidad de sectores de aprendizaje. En una sociedad exigente, el listón está muy alto. Pide especialistas en todo y pensadores en nada. Los estudios cada vez más sofisticados y complejos;

el trabajo, inestable y mal remunerado. Los jóvenes perciben que todas las exigencias que les rodean no les permiten hacer un espacio en sus vidas, ¿cómo pedir un compromiso, estable y duradero, cuando se les pide estar en constante lucha para salir adelante? La inestabilidad, la fugacidad se convierte en forma de vida. En la actualidad existe una falta de compromiso ante cualquier realidad; un joven es capaz de

decir: ¡si, yo lo hago!, pero horas o minutos después abandonar tal proyecto. Actualmente se niegan a asumir un compromiso en el matrimonio justificándose con: ¿para qué? No necesito un papel, esto es más evidente en los grupos juveniles, pues los jóvenes no quieren comprometerse con las actividades del grupo. Ante esta realidad ¿qué hacer? ¿Cómo llegar a los jóvenes y trabajar con ellos hacia el compromiso totalizador? Se trata de un reto antropológico, según Aranguren tenemos la necesidad de configurar “un nuevo humanismo donde sea viable el desarrollo de sujetos autónomos, vinculados entre sí, y vertidos hacia un imaginario colectivo, justo y solidario”. ¿Cómo realizar esto? Los jóvenes exigen actividades claras, necesitan ser escuchados y que

sus ideas se consoliden y no únicamente se archiven; necesitan testimonio, testimonio no sólo del sacerdote, de los matrimonios, sino de la sociedad en general. Es necesario mostrar que el error puede ser el mejor maestro, pues no existe compromiso porque se tiene miedo a fallar, se tiene miedo a perder la situación actual. La realidad de la juventud que se ve de una forma excesivamente genérica no nos debe desanimar sino ser consciente de dónde incidir. No es difícil la atracción hacia el compromiso, sino la fidelidad creativa, descubrirlo como un valor constituyente y no una experiencia pasajera. El compromiso implica amor a sí mismo y los demás, implica dar lo mejor de sí mismo. El comprometerse implica un esfuerzo pero también crecimiento como persona.

Cristo ¡Vive! Síguelo y quédate con Él. Pre-pascua Juvenil Nacional 2018. #ExperienciaRie Por: Pastoral de Adolescente, Valle de Chalco Los asesores y coordinadores de la pastoral de adolescentes y jóvenes de las diócesis de México, fueron convocados a vivir la pre- pascua como un encuentro de formación- capacitación brindando así procesos de fe y espiritualidad a los participantes. La Pastoral Juvenil de nuestro país vive tiempos de gracia en este año de la juventud, teniendo este tipo de encuentros entre jóvenes, a manera de preparación al sínodo de los Obispos sobre: “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”, ya que esta experiencia de pre-pascua juvenil busca que los adolescente y jóvenes sean los protagonistas de la nueva evangelización y que anuncien con su vida la Buena Noticia. De ahí el tema de este año de la pascua; Cristo ¡Vive! Síguelo y quédate con Él, mismo que nos orienta hacia un discernimiento vocacional.

Sin duda alguna esta pre- pascua nos invita como asesores y coordinadores de la pastoral de adolescente y jóvenes hacer de una pascua con #ExperienciaRIE, elementos propios del discernimiento, que nos habla el documento preparatorio del sínodo, el Reconocer, el Interpretar y el Elegir. Reconocer, el joven reconocerá el amor de Dios en el acontecimiento de su vida, desde lo que escucha, lo que observa a su alrededor, las personas con las que se encuentra, lo que lee y lo que produce en su interior, desde: deseos sentimientos y emociones, para así descubrir lo más profundo que hay de él. Interpreta: el joven después de reconocerse como hijo y amado por Dios, tendrá que interpretar por medio del Espíritu a que está llamado a través de lo que esta suscita en él. Este trabajo de inter-

pretación se desarrolla en un dialogo interior entre el joven con el Señor. Es entender el origen y el sentido de los deseos y las emociones experimentadas y evaluarlas si están orientadas a una dirección constructiva o si de lo contrario a replegarnos de nosotros mismos, por ello se requiere escucha, paciencia vigilancia y acompañamiento de una persona experta. Elegir: una vez que el joven reconoció e interpreto el mundo de sus deseos y emociones podrá elegir dar respuesta a al llamado que dios le hace por medio de la

vocación, ya sea al matrimonio, ministerio ordenado, vida consagrada. etc. Es por ello la importancia que el adolescente y el joven viva con profundidad los procesos de evangelización, mismos que los llevaran a un encuentro profundo con cristo Resucitado, quien los ama y los llama a seguirle como discípulos- misioneros suyos, desembocando una propuesta vocacional, dando respuesta con conciencia, que estilo de vida está llamado a vivir su servicio y entrega en la iglesia.


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“Ya no los llamo siervos… ahora le llamo amigos” Jn 15, 15 Por; Diacono Alfonso Velázquez, Diócesis Valle de Chalco

El pasado mes de octubre, al publicar Mons. Víctor René Rodríguez Gómez, Obispo de Valle de Chalco, la convocatoria para las Ordenes Sagradas en el grado del Diaconado, un servidor, junto con Mario Ponce, nos encomendábamos a la Virgen María para los momentos que viviríamos junto con la familia y la comunidad parroquial. Los días transcurrieron, junto con los escrutinios, exámenes y nervios; hasta el día 07 de diciembre, cuando Mons. Víctor René, nos informó el

ser admitidos al Orden del Diaconado, con fecha de ordenación el 06 de enero. Teníamos un mes para organizar la Liturgia, los preparativos, pero sobre todo el espíritu por medio de los Ejercicios Espirituales, en los cuales descubrimos el gran tesoro que Dios nos daría por medio de la imposición de manos y todo esto con un fundamento, a su vez, en Hechos de los Apóstoles con la elección de 7 varones (cf. Hch 6), y también desde el “Siervo de Yahvéh” (cf. Is 49, 3.5.6;

53, 13; 53, 11, etc.). Respondiendo a ser imagen de Dios entre los hombres, de vivir el ministerio que nos ha dado, para el servicio de los hermanos, pero, sobre todo, recordar que seremos hombres de oración que conduciremos a los fieles al encuentro de Cristo, por los sacramentos que en nombre de Dios administraremos (Bautismo y Matrimonio). Que nuestra vida sea un motivo de alegría al anunciar el Evangelio de Cristo, que seamos quienes confortemos el dolor de quien perdiera algún ser querido, pero sobre todo de recibir y compartir las ofrendas del pueblo de Dios, con los necesitados. Llegó el día y en punto de las 11:00 horas en la Parroquia de Santiago Apóstol, Chalco, daba inicio la Celebración en donde también seis seminaristas fueron instituidos en los Ministerios del Lectorado y Acolitado. Durante la Homilía, nuestro Obispo recalco la importancia de saber transmitir la Palabra de Dios y sobre

Dios y con corazón generoso dijo SI a Jesús. Ella es la Beata Eugenia Ravasco, fundadora de la Congregación de las Hijas de los Sagrados Corazones de Jesús y de María. ¿Cómo inició todo? Una tarde pasando cerca de una Iglesia en Génova, Italia; estaba expuesto el Santísimo Sacramento, ella entró y al ponerse de rodillas para recibir la bendición, el sacerdote lanzó una pregunta: “¿no hay alguien

entre ustedes, que quiera dedicarse a hacer el bien por amor al corazon de jesus?”, ella se siente interpelada y dice: “Jesús si soy yo, mándame una señal”. La respuesta no se hace esperar, después de una semana llegan a tocar la puerta para invitarla a ser catequista, esta invitación es la confirmación del deseo que lleva en su corazón ser de Dios, ayudada por su director espiritual descubre que ha sido elegida a la edad de 23 años para empezar una nueva obra: hacer el bien por amor al corazon de jesus, encontrando su fortaleza en cada momento delante de Jesús Sacramentado. Jesús sigue llamando a jóvenes para estar con Él y ser de Él, dispuestas a responder con un corazón generoso, confiando en la gracia de Dios. Ya son 13 años que formo parte de está Congregación, y como hija de Madre Eugenia vivo con el

todo de ser hombres de la Palabra, como los profetas, los santos y que en ningún momento dejáramos de lado la Sagrada Escritura, también hizo mención de vivir con entusiasmo el Ministerio al servicio de la Iglesia. El momento más emotivo para nosotros, fue durante la postración, cuando la comunidad pedía la intercesión de los santos, debido a que cada uno recordó el motivo que nos tenía allí: las personas, los amigos, las comunidades parroquiales, pero, sobre todo, la familia. Fue recordar todo lo que éramos y sobre todo lo que deberíamos ser para la Iglesia. Ser Diácono, es saber entregarse en cuerpo y alma a los hermanos; es saber donarse a los niños, jóvenes y ancianos, pero sobre todo de encomendarnos día a día a la protección de nuestra Madre Santísima de Guadalupe, que con su sencillez y humildad nos enseña que debemos de hacer siempre la voluntad de Dios.

Ser de Dios Por: Sor. Estrella M. Peréz

Etimológicamente la palabra “vocacion”, viene de la palabra latina “vocare” que significa “llamado”. Es por eso que la vocación la entendemos como un llamado personal de Dios, es una elección libre y amorosa del Señor, es un don gratuito de su amor, Él ha tomado la iniciativa de elegirnos para ser de Él y estar con Él. Quiero hablarte de una gran mujer, que escuchó la llamada de

corazón agradecido por la enorme bendición de ser elegida a pesar de mis miedos, debilidades y pecados. Jesús me ha mirado con ternura y amor. Me ha dicho ¡VEN Y SÍGUEME!. Soy consciente que no son mis fuerzas sino su misericordia la que me sostiene para vivir con alegría y fidelidad el don de mi Consagración. Siempre llevo en mi corazón las palabras que Dios dijo al profeta Isaías, “no temas, yo te rescatado, te he llamado por tu nombre y eres mio”, en cada momento es Él quien precede nuestros pasos, y sin olvidar a María, que con su ternura maternal también me ha acompañado en este caminar por eso como ella, mi corazón se alegra en el Señor. Te invito a que no temas preguntarle al Señor ¿Qué quieres de mi? Piensa que como Padre amoroso, la unica respuesta que puede darte será la invitación al amor.


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Mensaje del Santo Padre Francisco con ocasión de su inminente viaje apostólico a Chile Y Perú Fuente: Vatican.va [15 - 22 de enero de 2018] Hermanos y hermanas de Chile y Perú: Ante la proximidad de mi Viaje a esas tierras los saludo afectuosamente. Voy hacia ustedes como peregrino de la alegría del Evangelio, para compartir con todos «la paz del Señor» y «confirmarlos en una misma esperanza». Paz y esperanza, compartidas entre todos. Deseo encontrarme con ustedes, mirarlos a los ojos, ver sus rostros y poder entre todos experimentar la cercanía de Dios, su ternura y misericordia que nos abraza y consuela. Conozco la historia de sus países, fraguada con tesón, entrega. Deseo, con ustedes, dar gracias a Dios por la fe y el amor a Dios y a los hermanos más necesitados, especialmente por el amor que us-

tedes tienen hacia aquellos que están descartados de la sociedad. La cultura del descarte cada vez nos ha invadido más. Quiero hacerme partícipe de las alegrías de ustedes, las tristezas, de sus dificultades y esperanzas, y decirles que no están solos, que el Papa está con ustedes, que la Iglesia entera los acoge, que la Iglesia los mira.

Con ustedes deseo experimentar la paz que viene de Dios, tan necesaria; solo Él nos la puede dar. Es el regalo que Cristo nos hace a todos, el fundamento de nuestra convivencia y de la sociedad; la paz se sostiene en la justicia y nos permite encontrar instancias de comunión y armonía. Hay que pedirla constantemente al Señor y el Señor la da. Es la paz del Resucitado que trae la alegría y nos impulsa para ser misioneros, reavivando el don de la fe que nos lleva al encuentro, a la comunión compartida de una misma fe celebrada y entregada. Ese encuentro con Cristo resucitado nos confirma en la esperanza. No queremos estar anclados a las cosas de este mundo, nuestra mirada va mucho más allá, nuestros ojos están puestos en Su miseri-

cordia que cura nuestras miserias. Solo Él nos da el empuje para levantarnos y seguir. Palpar esta cercanía de Dios nos hace comunidad viva que es capaz de conmoverse con los que están a nuestro lado y dar pasos firmes de amistad y de fraternidad. Somos hermanos que salimos al encuentro de los demás para confirmarnos en una misma fe y esperanza. Pongo en las manos de la Virgen Santa, Madre de América, este Viaje Apostólico y todas las intenciones que llevamos en nuestro corazón, para que sea ella, como buena Madre, quien las acoja y nos enseñe el camino hacia su Hijo. ¡Hasta muy pronto! Y, por favor, no se olviden de rezar por mí. ¡Hasta pronto!

Reforzar la cultura de los valores cristianos en nuestra sociedad actual Por: José Ramón / Diócesis de Ecatepec En una sociedad sumergida en una cultura del egoísmo, una cultura de la muerte, del poder desmedido, ante la perdida de valores, donde hoy en día hay mas división en las propias familias. Vemos como en nuestra sociedad la violencia es quien impera día a día, donde la inseguridad es el pan de cada día, tendríamos que preguntarnos ¿qué hacer ante la perdida de valores? Como cristianos es necesario revitalizar una cultura llena de valores, pero para ello debemos mirar el comienzo de la Iglesia en Pentecostés, en donde a través de la experiencia con el Espíritu Santo, en donde a través del mandato evangelizador, es necesario llegar a los hombres de todas las culturas. Por nuestra adhesión radical a Cristo en el bautismo nos hemos comprometido a procurar que la fe, plenamente anunciada, pensada y vivida, llegue a hacerse cultura. Así, podemos hablar de una

cultura cristiana cuando el sentir común de la vida de un pueblo ha sido penetrado interiormente, hasta “situar el mensaje evangélico en la base de su pensar, en sus principios fundamentales de vida, en sus criterios de juicio, en sus normas de acción” (San Juan Pablo II). Esta evangelización de la cultura, que la invade hasta su núcleo dinámico, se manifiesta en el proceso de inculturación, “centro, medio y objetivo de la Nueva Evangelización”. Los auténticos valores culturales, discernidos y asumidos por la fe, son necesarios para encarnar en esa misma cultura el mensaje evangélico y la reflexión y praxis de toda la Iglesia. La inculturación del Evangelio es un proceso que supone reconocimiento de los valores evangélicos que se han mantenido más o menos puros en la actual cultura; y el reconocimiento de nuevos valores que coinciden con el mensaje de

Cristo. Mediante la inculturación se busca que la sociedad descubra el carácter cristiano de estos valores, los aprecie y los mantenga como tales. Además, intenta la incorporación de valores evangélicos que están ausentes de la cultura, o porque se han oscurecido o porque han llegado a desaparecer. Consciente de la necesidad de seguir este camino, el cristiano se empeña en la formación de la

propia conciencia. De esta formación, tanto individual como colectiva, de la madurez de mentalidad, de su sentido de responsabilidad y de la pureza de las costumbres depende el desarrollo y la riqueza de los pueblos. La moral cristiana sólo se entiende dentro de la Iglesia y se plenifica en la Eucaristía. Todo lo que en ella podemos ofrecer es vida; lo que no puede ofrecerse es el pecado.


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Paz a todas las personas y a todas las naciones de la tierra. Hola amiguito, este mes de enero celebramos la Jornada Mundial de la Paz, dedicada a Migrantes y refugiados: hombres y mujeres que buscan la paz. Los conflictos armados y otras formas de violencia organizada siguen provocando el desplazamientos de población dentro y fuera de los países. Pero las personas también migran por «el anhelo de una vida mejor. Se ponen en camino para reunirse con sus familias, para encontrar mejores oportunidades de trabajo o de educación: quien no puede disfrutar de estos derechos, no puede vivir en paz.

Ilumina este dibujo con tus colores favoritos

Con espíritu de misericordia, abrazamos a todos los que huyen de la guerra y del hambre, o que se ven obligados a abandonar su tierra a causa de la discriminación, la persecución, la pobreza y la contaminación ambiental.


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El canto Gregoriano, participación de los laicos Por: Dimensión de música litúrgica / Diócesis de Ecatepec La Palabra no es un texto lleno de significado, sino es una realidad viva de inmensa grandeza, llena de plenitud de Amor y Vida que se comunica y entrega gratuitamente al hombre para su salvación. La Palabra eterna del Padre, el Hijo de Dios, desde la Encarnación haciéndose hombre, pasando por la Cruz y la Resurrección, ha querido quedarse con nosotros para siempre. El canto gregoriano como parte integral de la liturgia se subordina a ella misma con reverencia y santidad en su más profunda realidad sacramental, y posibilita en el corazón del hombre la captación de este movimiento de la Palabra eterna de Dios, desde la Encarnación hasta la Resurrección, que se auto-comunica por amor al hombre en su más profundo interior, en el tabernáculo de la presencia de Dios, elevado por el Espíritu Santo atrayéndolo hacia Cristo. Por ello, el canto gregoriano es parte del

Misterio de Dios, porque hace resonar aquello que no se ve, aquello que las palabras no pueden expresar, haciendo posible captar de una manera especial aquello que no se oye, que no se ve, en definitivas, posibilitando detectar y vivir por la fe el Misterio de dios que es el Misterio de Cristo que sigue entregándose por amor al hombre. El canto gregoriano hace realidad en el alma de todo hombre el

silencio, el recogimiento y la contemplación del designio de amor de Dios, uno y trino, en la unidad de la fe universal de la Iglesia de Cristo. El hombre tiene ahora más que nunca necesidad de la presencia maternal de Dio, pues la humanidad va por el camino del odio y de un obstinado rechazo de Dios y a su Palabra. Los signos de Dios no son captados, comprometidos ni acogidos.

El hombre no sabe donde está su tesoro; ¿cuál es el tesoro de todo hombre?, la unión intima y eterna con el Dios inmortal por medio de su único Hijo Jesucristo. El Señor está a las puertas de esta generación, llamando con insistencia y con amor al corazón de todos los hombres de todo tiempo y cultura. El canto gregoriano es la voz sumisa que canta el Verbo de Dios, presta su sonoridad humana con humildad y santa reverencia a la Palabra Eterna que es Cristo, poder para la salvación de todos los que creen. Esta es la realidad y significado profundo del canto gregoriano, y por ello es accesible a todo el mundo pese a algunas opiniones contrarias, ya que su aprendizaje y ejecución no requiere grandes conocimientos musicales sino de un corazón abierto.

Busquemos políticos que estén al servicio de la vida, la dignidad humana y la familia Por: Luis Antonio Hernández/Director Voto Católico El 2018 pondrá a prueba la experiencia y aprendizaje que la sociedad civil, ha adquirido en los últimos años y exigirá de los ciudadanos, particularmente de los creyentes un esfuerzo adicional para hacer posible la incorporación de temas trascendentes para el desarrollo humano integral y el bien de todos, dentro de la agenda política nacional. Treinta días después del inicio de las precampañas, la percepción social es de profunda decepción y pena ajena, hasta el momento los aspirantes a la Presidencia de la República, así como los dirigentes de los partidos que los postulan, se han enfocado en desarrollar estrategias de manipulación emocional, encaminadas más vender los atributos personales de los abanderados, que su capacidad y propuestas

fundamentales. Aún cuando en la actualidad el derecho a la vida, la dignidad humana, el fortalecimiento de la familia y los valores del pensamiento social cristiano, son aspectos de la mayor relevancia para la mayoría de la población, los precandidatos han mantenido una inexplicable neutralidad en torno a ellos. Asimismo, la configuración de las coaliciones y alianzas políticas recientes han condicionado el silencio respecto de estos asuntos, vislumbrando con ello una perspectiva sumamente peligrosa para el bienestar de la familia y la niñez mexicana en los próximos años. Hace casi una década, Don Carlos Abascal Carranza, señalaba en el que sería su último discurso: “La vida pública requiere de mujeres y hombres de vigoroso carácter

moral, con una sólida formación espiritual y con un compromiso indeclinable de ser cristianos de tiempo completo y al servicio de la nación”, que estén dispuestos a defender las más altas causas sociales y humanas. Ese es el llamado que los católicos tenemos que atender durante las próximas elecciones, identificar y decidir por los perfiles que más se aproximen a esa definición, a nuestro pensamiento. La participación no debe limitar-

se al solo hecho de votar, además debemos involucrarnos, investigar, hacer todo lo posible por conocer más de cada uno de los candidatos a los diferentes cargos de elección, que se disputarán de manera concurrente, sus perfiles, trayectoria y planteamientos. Sobre todo, en lo relativo a su compromiso con la defensa de la vida, la dignidad de la persona, la familia, el matrimonio, la libertad religiosa, la corresponsabilidad y el bien común.


XVI Encuentro Nacional de Vicarios de Pastoral Por: Pbro. Lic. José Luis Ruiz Flores, Vicario Episcopal de Pastoral, Diócesis de Izcalli En la búsqueda de la colegialidad y la sinodalidad, es decir, de tener «un solo corazón y un mismo espíritu» (Hech 4,32), los obispos de México buscan constantemente trabajar en unidad, para lo que se reúnen de manera ordinaria dos veces por año en las llamadas Asambleas Plenarias de la Conferencia Episcopal Mexicana. Estas asambleas se realizan en la segunda semana de Pascua y en el mes de noviembre. En estas asambleas se proponen caminos, trabajos y proyectos para hacer realidad el Reino de Dios en nuestro país. La puesta en práctica de esos proyectos, no obstante, no es labor de sólo los pastores, es necesario el concurso de todos los miembros del Cuerpo Místico de Cristo —sacerdotes, religiosos y laicos—, que peregrina en esta bendita tierra. Desde hace tiempo, se ha considerado que los primeros que tienen el encargo de hacer operativos los trabajos proyectados son los vicarios de pastoral. Por eso es que, después de la Asamblea de los obispos, los vicarios de pastoral se reúnen para conocer, comprender e implementar lo que nuestros pastores proponen para el cumplimiento de la misión que como Iglesia hemos recibido de Nuestro Señor Jesucristo. Los días 9, 10 y 11 del mes de enero se ha llevado a cabo el XVI Encuentro Nacional de Vicarios de Pastoral en las instalaciones de la Casa Lago, en Cuautitlán Izcalli; con la asistencia de la mayoría de los representantes de las diócesis del país. El objetivo general de este XVI Encuentro fue: «Realizar como vicarios de pastoral aportes significativos al Proyecto Global Pastoral 2031-2033 y reflexionar sobre algunos temas actuales de interés pastoral común». Los objetivos específicos, siguieron a los temas tratados, los que fueron: 1. El Proyecto Global Pastoral; 2. El año de la juventud; 3. El Consejo Diocesano de laicos.

Así, los objetivos específicos también fueron tres: Ofrecer como vicarios de pastoral algunos aportes que enriquezcan el Proyecto Global Pastoral 2031-2033 en la etapa actual de su elaboración. Profundizar en el proyecto de revitalización de la pastoral juvenil y del año de la juventud. Reflexionar sobre el Consejo diocesano de laicos, a partir de la propuesta de la Dimensión de laicos. Coordinado por Mons. Alfonso G. Miranda, Obispo Auxiliar de Monterrey y Secretario General de la CEM; Mons. Carlos Garfias Merlos, Arzobispo de Morelia, 1er Vocal del Consejo presidencial y Coordinador General de las Comisiones Episcopales de la CEM; y el Pbro. Amado Ruiz Gordon, Vicario de Pastoral de la Diócesis de Coatzacoalcos, y coordinador del Equipo base de los Vicarios de Pastoral de México, el desarrollo del Encuentro fue dinámico y fructífero. El tema preponderante fue el del Proyecto Global Pastoral, al que se le dedicaron dos días enteros. Se nos informó que en la Asamblea pasada, los obispos revisaron Proyecto, hasta donde se tenía. Una opinión importante fue que el análisis de la realidad era demasiado pesimista; se fijaba sólo en lo malo y olvidaba lo bueno que Dios ha puesto en la creación y la

bondad que sí hay en el hombre. Se nos presentó, así, un trabajo corregido, con una visión más positiva del mundo y del hombre, aunque no ingenua. No se ignora ni se niega el mal que es real y doloroso y los retos o desafíos que eso nos presenta, pero se miran con esperanza. Una parte que se desarrolló más fue el tema de la redención realizada por Jesucristo, según el Plan salvífico del Padre y Movido por el Espíritu Santo. Los presupuestos teóricos para desarrollar el Proyecto son, principalmente dos: la crisis antropológica, en la que no se reconoce ni respeta la altísima dignidad del hombre, del que, en este proyecto, se afirma su bondad originaria; y la redención de Cristo en la Cruz, sólo como un momento central en el Plan salvífico, pero sólo como un momento inicial; el hombre debe, porque puede, hacer el resto en orden a la salvación de todos. Esto significa que aceptamos la llamada a trabajar por nuestra propia salvación, como personas y como nación. Finalmente, se pidió a los vicarios de pastoral que propusieran líneas de acción en cinco campos: Una Iglesia que anuncia y construye la dignidad y la comunidad humana. Una Iglesia comprometida en la construcción de la paz y las causas

sociales. Una Iglesia pueblo. Una Iglesia misionera y evangelizadora. Una Iglesia compasiva y testigo de la redención. El tercer día se nos informó de cómo se está preparando el Sínodo de los obispos, cuyo tema será el de «Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional», con un Año de la juventud, propuesto por los mismos jóvenes y declarado por los obispos de México. A este respecto, se nos entregó un documento que los obispos de México dedican a los jóvenes: Los jóvenes, destinatarios y protagonistas prioritarios de la Nueva Evangelización. Por último, se nos invitó a promover en cada diócesis el Consejo diocesano de laicos. Se nos habló del ser y quehacer de dichos consejos y de lo necesarios e importantes que son para la promoción del laicado comprometido con la Iglesia y con el mundo. Todo el trabajo estuvo siempre puesto en manos de Dios a través de la oración y de la Eucaristía. Terminó el Encuentro con una oración y una bendición. Se nos citó para el siguiente Encuentro en el mes de mayo, del 15 al 17 de ese mes.


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