Año 9 / No. 256
Domingo 10 de junio de 2018
Sagrados corazones de Jesús y María Pag. 7
Una catequesis para adulto
¿Cómo viven la fe los jóvenes?
¿Cómo pasar de los valores a las virtudes?
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Amor y compromiso cristiano
Directorio Emmo. Sr. D. Carlos Cardenal Aguiar Retes Excmo. Sr. D. Guillermo Ortíz Mondragón Obispo de Cuautitlán Excmo. Sr. D. Francisco González Ramos Obispo de Izcalli Excmo. Sr. D. Oscar Roberto Domínguez Couttolenc, M.G Obispo de Ecatepec Excmo. Sr. D. Onésimo Cepeda Silva Obispo Emérito de Ecatepec Excmo. Sr. D. Guillermo Francisco Escobar Galicia Obispo de Teotihuacán
Queridos hermanos y hermanas: La fiestas pascuales de cada año concluyen con la solemnidad de Pentecostés, pero como una grande estrella de luz, va dejando, por así decirlo, un destello que la hace especial, ilumina la oscuridad de la noche y, además, alegra el corazón de sus espectadores; algo similar sucede con las fiestas y solemnidades que se derivan de la Pascua del Señor resucitado, tales como la solemnidad de la Santísima Trinidad, Jesucristo sumo y eterno sacerdote, Corpus et Sanguinis Christi y el Sagrado Corazón de Jesús. Estas fiestas, de alguna manera, nos hacen saber que la luz pascual permanece viva y latente en la Iglesia y en todo el orbe, y que Dios se sigue revelando cercano y misericordioso con el hombre de todos los tiempos. Este año, la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, en unidad con las demás festividades, será una oportunidad para renovar el amor de Dios en nuestras vidas, pues si una cosa podemos decir con profunda fe, junto con san Juan es que, Dios es amor (1 Jn 4, 16), y en la convencionalidad de los signos y de los símbolos, el corazón es el que mejor hace referencia al amor; y es que, en el corazón de todo ser viviente, reside el motor que genera la vida. Al irrigar la sangre a través de todo el cuerpo, el corazón se convierte en un órgano fundamental para que los vivientes tengan vida. Desde esta perspectiva, el corazón, órgano vital, es el mejor emblema del amor, pues así como es fundamental el corazón para tener vida, así es de fundamental el amor en la vida del hombre. Sin embargo, cuando Jesús cita en el evangelio el mandamiento del amor (Cfr. Mt 22, 37) ya conocido desde el libro del Deuteronomio (Cfr. 6, 5), particularmente para hablar del amor a Dios, no sólo hace referencia al corazón, sino que dice,
“amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”. ¿A qué se refiere? En el mundo de la Biblia, estas tres realidades: corazón (kardia), alma (psijé) y mente (dianoia), hacen referencia a los tres elementos constitutivos del ser humano, mismos que san Pablo enunció como cuerpo, alma y espíritu en la primera carta a los cristianos de Tesalónica (5, 23). De forma que, el amor no sólo está en el campo de las emociones y sentimientos que provocan los sentidos en el cuerpo, sino que va más allá; el amor tiene que ver, también, con el alma y sus capacidades intelectivas y volitivas, de otra manera, el amor estaría reducido a un mero sentimiento y por ende sería pasajero. Pero el amor, no tiene que ver sólo con el cuerpo, con la inteligencia y la voluntad, el amor tiene, también, que ver con el espíritu, realidad que nos pone en comunicación y en comunión con Dios, de forma que, el amor también es el resultado de un encuentro constante con Dios que tiene como fruto amar como él ama. Así, al celebrar la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, y al renovar el amor de Dios en nuestras vidas, no sólo estamos llamados a “sentir bonito” en el interior, sino que, además, estamos llamados a elegir y querer amar, aun cuando “no sintamos bonito”; y todavía más, estamos llamados a una profunda relación de encuentro con Dios de manera que podamos aprender a amar como él nos ama. En este sentido, la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús, no es sólo un acto de piedad de unos cuantos, sino un compromiso serio de todo cristiano, compromiso que repercute en su vida, en sus acciones, en su conducta, en sus elecciones, en su voluntad. Cosa seria, pues en un mundo y en una sociedad donde la violencia impera, sólo el amor puede cambiar la realidad.
+ Francisco González Ramos Obispo de Izcalli
Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez Obispo de Texcoco Excmo. Sr. D. Héctor Luis Morales Sánchez Obispo de Nezahualcóyotl Excmo. Sr. D. Víctor René Rodríguez Gómez Obispo de Valle de Chalco Excmo. Sr. D. Efraín Mendoza Cruz Obispo Auxiliar de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Jorge Cuapio Bautista Obispo Auxiliar de Tlalnepantla
DIRECTOR GENERAL Mons. Víctor René Rodríguez Gómez Presidente de la Comisión Provincial para la Pastoral de la Comunicación DIRECTORA EN TURNO Abril Villanueva DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO Jessica Vázquez COLABORADORES Equipo de la Pastoral de la Comunicación de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla
Registro en trámite.
Es una publicación catorcenal de la Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla. Se distribuye en la Arquidiócesis de Tlalnepantla y en las Diócesis de Cuautitlán, Izcalli, Ecatepec, Texcoco, Teotihuacán, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.
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No. 256
Recomendaciones para ejercer un voto razonado Por: Luis Antonio Hernández A prácticamente 20 días de la jornada electoral más importante de la historia de México, la confusión y polarización acerca de quién puede representar la mejor opción para nuestro país, crece exponencialmente. Cada día resulta más frecuente escuchar la pregunta ¿Por quién debemos votar los católicos?, ¿Quién es el mejor candidato?, asimismo también es frecuente presenciar encarnizadas discusiones enfocadas más en denostar y destruir la reputación de aquellos candidatos con quienes por alguna razón no se coincide, que a proporcionar una información objetiva acerca de quién puede ser una buena alternativa para el momento histórico que vivimos. Parece ser que se nos han extraviado las premisas básicas que la Conferencia del Episcopado Mexicano y algunos de nuestros Obispos, nos obsequiaron al inicio del proceso electoral, y que más que recomendaciones electorales, debiéramos asumir como lineamientos de vida: Participar para transformar y buscar el mayor bien posible. A la luz de la realidad hoy pareciera que la recomendación fue “busquemos los mayores defectos posibles”. Ante esta circunstancia es indispensable rectificar el camino, comprender que después del primero de julio, independiente del resultado de la elección presidencial, volveremos a ser simplemente habitantes de este gran país, mexicanos, hermanos Que necesitaremos estar unidos para impulsar y concretar los grandes cambios que necesita nuestra nación, el más importante tal vez nos corresponda a nosotros, que consiste en voltear a hacia los demás, buscar el bien del prójimo, poner en el medio de nuestros afanes al ser humano. La mejor manera de hacer frente a la elección del domingo pri-
mero de julio, es sin duda emitir un voto razonado, en conciencia, producto del discernimiento personal y familiar, acerca de quien es la persona que de cara a nuestra propia vivencia de los principios y valores de la Doctrina Social de la iglesia y analizando sus propuestas, plataforma política y declaraciones en temas esenciales, representa el mayor bien posible, la mejor opción de futuro para nuestros hijos, para México. Con este propósito te sugerimos estos cinco puntos que te ayudarán a cuidar el sentido de tu voto y a razonar tu decisión. 1.- Identifica a los candidatos a la Presidencia de la República, así como a los de tu Estado y Distrito Electoral. 2.- Busca información acerca de su trayectoria personal, profesional y política 3.- Indaga sobre sus posturas públicas en temas fundamentales, como: • Vida • Dignidad de la Persona, • Familia y matrimonio • Derechos de los Padres • Libertad Religiosa • Congruencia de vida. A este respecto es oportuno señalar que www.votocatolico.mx, te ofrece información y datos que pueden resultarte de gran utilidad. 4.- Al momento de decidir toma en cuenta sus propuestas, valores, experiencia. Participar en política es un además de una obligación ciudadana, un deber moral de todo católico. Busquemos el mayor bien posible.
La fiesta del Corazón de Jesús es la fiesta del amor La celebración litúrgica del Sagrado Corazón de Jesús en la Iglesia es el mejor motivo para hablar del amor, una realidad difícil de definir en el mundo contemporáneo, pues para empezar, el amor es confundido con un sentimiento, y si esto es así, el amor entonces será pasajero, y no es eso lo que en esta festividad la Iglesia celebra, pues el amor de Dios es eterno. En razón a esta gravísima confusión, existen diversos conceptos respecto del amor que usamos en la vida cotidiana y que van definiendo nuestro camino en él, por ejemplo, se habla del amor platónico, es decir, de una relación amorosa y sentimental imposible o no correspondida, o en otras palabras, un amor que no existe y que no existirá. Hablamos también, del amor a primera vista, un amor que ocurre de manera inmediata, casi mágica y que tiene que ver más con la atracción que con el amor verdadero. Igualmente y sobre todo en los últimos tiempos se habla del amor propio, no desde el Evangelio, sino como una forma de superar desamores, como quien anima a otro haciéndole saber que la persona afectada debe amarse más que a aquella que se ha ido; o
bien, se habla de amor propio en el sentido de superaciones escolares o laborales, como un tipo motivación para no quedarse estancado. Y junto a estas expresiones, existen otras tantas que cada uno de nuestros lectores podría agregar a esta lista. Pero la idea no es hablar de este amor pasajero, sino del amor eterno e incondicional que Dios tiene por cada uno de nosotros, no importando la raza, condición social o económica, religiosa, etc. Este amor es aquel que ha movido a miles de hombres y mujeres a andar por las vías de la santidad, de la entrega y del martirio, porque cuando se experimenta tal amor, no hay más consecuencia que la entrega total del alma y del cuerpo. Y nuestro deseo desde el editorial de esta publicación es que, cada uno de ustedes, nuestros lectores, experimenten vivamente este amor divino que expresa la solemnidad del Corazón santo de Jesús, nuestro Dios y Señor, y que la experiencia de ese amor, los haga necesitar amar a los demás de manera que podamos construir un mundo más amable y más justo, donde reine la paz.
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Encuentro de las familias: Fortaleciendo la familia Por: CODIPACS Ecatepec En el marco del año de la familia, en nuestra Diócesis de Ecatepec, se ha realizado el encuentro donde se busca el fortalecimiento de las familias como el motor fundamental de nuestra sociedad. Por ello se necesita conocer y respetar las normas de Dios que nos ayudan a fortalecer la familia para soportar las presiones, cada esfuerzo por agradar a Dios ayudan a comprobar la necesidad de solución espiritual y así contrarrestar los múltiples problemas. Para poder tener una buena relación con Dios es muy importante poder escuchar la voz de Dios a través de la Sagrada Escritura, la Tradición y el Magisterio. Las familias pueden ser felices cuando se esfuerzan por hacer la voluntad de Dios, experiencia que edifica una familia cristiana. Esta experiencia marcada por la vivencia de fe que nos permite distinguir siempre las maravillas que Dios va presentando en nues-
tro caminar, fe que compromete a cada miembro de la familia a convertirse en signo vivo de la presencia de Cristo en el mundo. Siendo matrimonios de fe, están llamados a mirar la vida con esperanza, paz, alegría y sin temor, ya que Jesús esta siempre en la barca de la vida, mirando la realidad de cada familia, en donde ayuda a enfrentar lo que pasa cada día, y hace que se provoque el cambio profundo en la vida familiar. Cuando miramos la vida desde la perspectiva de la fe, como creyentes que somos en un Dios que es amor y que sólo quiere nuestro bien, podemos descubrir que el Señor tiene un plan de amor para nosotros y que desea hacernos felices para siempre, ya desde ahora, solo necesitamos abrir los oídos y los ojos para apreciar cómo el Señor está permanentemente actuando en la vida de cada uno; Dios está realmente presente en cada cosa que nos pasa cada día.
Por eso, él es la fuente de nuestra seguridad y alegría. La fe en Cristo es el motor de la familia que da sentido a todo su existir y lleva a las familias a vivir en esperanza que ayuda a confiar más plenamente en el Señor, a ver
la vida diaria con ojos de creyentes y a no desesperarnos ante las dificultades y sufrimientos de esta vida. Dios siga bendiciendo a todas las familias de nuestra Diócesis.
Recepción de sotanas en el Seminario de Izcalli Por: CODIPACS Izcalli
El pasado 28 de mayo, fiesta litúrgica de la Santísima Trinidad, cuatro jóvenes que han concluido su formación en el Curso Introductorio en nuestro Seminario Diocesano, recibieron su sotana, signo distintivo de los jóvenes que quieren hacer un serio discernimiento sobre la vocación específica al sacerdocio y que forman parte del Seminario. La celebración Eucarística en la que recibieron la sotana se llevó a cabo en la Catedral de Santa María de la Anunciación, en la colonia
Atlanta, y fue presidida por nuestro Obispo, Mons. Francisco González Ramos, quien además de agradecer a las familias de los cuatro seminaristas, invitó a los jóvenes a no tener miedo a escuchar la voz de Dios que no quita nada y lo da todo. En la homilía, el Obispo haciendo referencia a la Trinidad Santa, comentó: “el sacerdote está llamado a la vida en comunidad a imagen de la Trinidad; su comunidad es la Iglesia, y en ella encuentra a Dios, y en ella transmite a
Dios”, además, “el sacerdote, y ya desde ahora el seminarista, está llamado a vivir en la unidad, y no precisa y únicamente con aquellos que le son afines y empáticos, sino sobre todo, con aquellos que le son distintos, porque su ministerio es la caridad, y la caridad no es resultado de la empatía”. La celebración, además de rica por sus contenidos litúrgicos y teológicos, estuvo llena de emociones, sobre todo cuando los mismos padres de familia de los seminaristas, los revistieron con la sotana, mientras se escuchaba un canto vocacional; entonces, no sólo se veía la felicidad en sus caras, también lágrimas de emoción corrieron por las mejillas de varios de los ahí presentes. Para la comunidad cristiana, la celebración de la recepción de sotanas es un motivo de esperanza y de compromiso en la oración, pues aunque pocos, la comunidad ve en estos jóvenes a sus futuros pastores, por quienes se siente comprometida a orar, tal y como lo pide Jesús en el Evangelio (Cfr. Mt 9, 38).
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Obispo de Valle de Chalco encabeza la Misa por la Paz y la Reconciliación Por: CODIPACS, Valle de Chalco “Encontrarnos con Cristo es una motivación para encontrarnos entre nosotros. El domingo es el día para glorificar a Jesús, para darle gracias y acercarnos a Él, pero también es el día para la caridad, la atención de la familia, la comunidad. Es el encuentro con Dios, pero también el encuentro con la familia, es la motivación para acercarnos entre nosotros y limar las asperezas, a veces hasta en el interior de nuestras parroquias, nuestras comunidades y familias… Que el Señor nos conceda reconciliarnos con nosotros mismos, ya que a veces traemos algunas divisiones internas. El pecado nos divide.” Esto fue parte del mensaje que S.E. Mons. Víctor René Rodríguez Gómez, obispo de la Diócesis de Valle de Chalco, dirigió a quienes se congregaron este domingo 03 de junio en el atrio de la Parroquia de Santiago Apóstol, en el centro de Chalco, Estado de México.
Convocados a participar de este encuentro litúrgico de unidad y oración, provenientes de las parroquias y comunidades de la región, varias familias y fieles se dieron cita para participar en la “Misa por la Paz y la Reconciliación”. En punto de las dos de la tarde dio inicio la celebración eucarística presidida por el
episcopo del lugar, quien abrió este encuentro con un cordial saludo y un mensaje de reflexión hacia la importancia de dedicar el día domingo a Dios, sin descuidar la relación con la familia, resaltando que la paz, el diálogo y la reconciliación nacen desde el seno familiar.” El Señor Obispo se refirió tam-
bién al actual proceso electoral en donde existe el riesgo de las fricciones que pueden llevar a la discordia, incluso hasta en la familia, mencionando que “Cada quien puede seguir su preferencia electoral, participar y votar con entusiasmo y responsabilidad, al final de lo cual debemos reconfortarnos en la unidad, la reconciliación y la paz, sobre todo con nuestros familiares, amigos y conocidos, que así es como se construye una sociedad más fuerte.” Al concluir la celebración el Pbro. Rogelio A. Zamora Rosales, Vicario Episcopal de Pastoral de la Diócesis, encabezó una oración por la paz y por el proceso electoral, y agradeció la presencia de la comunidad, religiosas y sacerdotes asistentes, así como del Obispo.
Una experiencia de fe, en la feria del Seminario Mayor Por: Sofía L. Godínez
Tulantongo, Texcoco, Méx. 2-3 de junio de 2018. Las instalaciones del Seminario Mayor de Texcoco acogieron a cientos de visitantes durante la celebración de la XVIII Feria del Seminario. En punto de las 18:00 horas del sábado 2 de junio, el Pbro. Salustio Santamaría Romero, rector del Seminario, declaró formalmente inaugurada la Feria, de esta manera se dio paso a la Fiesta de la Misericordia en la cual Mons. Jorge Cuapio Bautista, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Tlalnepantla, compartió su enseñanza en la conferencia “Juventud y misericordia”.
Una experiencia que vale la pena resaltar fue la grata presencia de Mons. Jorge Cuapio y su participación con un valioso mensaje, quien iluminado por la Carta del Apóstol San Judas, reflexionó sobre las características de los jóvenes y sus retos en la familia y en la sociedad para lograr una consolidación en la fe y en su persona: “…el tema juventud es un tema que tiene relación más que con el individuo, con la circunstancia por la que atraviesa no solamente el individuo, fíjense, también hablamos de una familia, también debemos hablar de una comunidad, pode-
mos hablar de una parroquia, una Iglesia, todo aquello que no se ha consolidado por el tiempo suficientemente, tiene esta característica de «juventud»… el joven como no está consolidado, como tiene todas las potencialidades, y ante su mirada se abren muchos caminos o muchas posibilidades; el joven tiene la grave responsabilidad de hacer opciones en su vida. Hacen opciones, ¿cómo vas a ser en tu edad adulta?... Un hombre de ciencias, elige estudiar; un hombre sin ciencia, elige desgarriates, pero no te quejes después. Cómo cada opción determina un rumbo de la vida. El pri-
mer universo de relaciones que nos acoge, que nos sostiene, que nos enriquece y que nos proyecta hacia la plenitud de nuestra vida se llama familia, hay que saber recoger, queridos jovencitos, hay que saber asumir que sin tu familia nunca conservarás tu vida, y lo segundo que debes saber escoger o discernir dentro de tu familia es cómo vivir tus relaciones…”, expresó. El domingo 3 de junio, desde muy temprana hora los asistentes a la Feria del Seminario tuvieron oportunidad de conocer los carismas de algunas comunidades religiosas en el Pabellón Vocacional, y de disfrutar de la diversidad de actividades que se desarrollaron en torno a la Feria en un ambiente festivo y familiar; además de la atención personal de los jóvenes seminaristas y del Equipo de Formadores que en todo momento se desvivieron por hacer de la Feria una experiencia única, en el contexto juvenil y vocacional.
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Renovación y actualización permiten la evangelización Por: Ma. Eugenia Lira Morales /Diócesis de Nezahualcóyotll parroquiales de animación litúrgica y a los interesados en estos temas celebrativos. Ya en el 2016 realizaron tres talleres, lo mismo en el 2017 y en este año 2018 serán 5. La asistencia en las tres vicarías que hasta ahora, en el 2018, han tenido esta experiencia ha oscilado de 30 a más de 100 personas quienes reciben el material preparado para participar de manera activa. La diócesis de Nezahualcóyotl con estos talleres sobre formación en liturgia y otros en animación pastoral está en una constante renovación y actualización que permite, tanto a sacerdotes como laicos, una evangelización de la realidad y, con ello, resolver el problema fundamental que presenta nuestra sociedad. Persona y dignidad, Evangelio para nuestra sociedad.
Obtener una visión profunda de la Eucaristía a partir de la Sagrada Escritura, Tradición y Magisterio, su desarrollo teológico y litúrgico en la historia, al distinguir las partes que la integran y sus principales elementos celebrativos a fin de obtener la participación más consciente en su celebración, es el objetivo de los talleres que se realizan en las cinco vicarías. “La Eucaristía: una aproximación lirtúgica”, ha sido el tema desarrollado por especialistas como el padre Ricardo Valenzuela, conferencista invitado y Enrique Juárez, además el padre Felipe Salazar, quienes forman la Comisión Diocesana de Liturgia, han organizado estos talleres de 5 días, dirigidos a los laicos comprometidos, sacristanes, agentes de pastoral, equipos
Ministerios Instituidos en la Diócesis de Cuautitlán Por: Pbro. Didier Munsiensi M. /Codipacs Cuautitlán Los servicios de los cristianos se fundan en los sacramentos de iniciación y en los dones del Espíritu Santo. Estos confieren la responsabilidad de cada cristiano, que se refleja en la capacidad de vivir en comunión con los demás, y por medio de los dones del Espíritu, participar en la misión de la Iglesia. A parte del servicio, que es común para todos los bautizados, existen en la Iglesia los ministerios instituidos y reconocidos. La diferencia entre el servicio cristiano y el ministerio se debe al hecho de que el ministerio implica siempre una representatividad (mayor o menor) de toda la Iglesia y un compromiso de las autoridades eclesiales correspondientes respecto a la persona que lo ejerce. En su libro ministerios laicales y ministerios ordenados, Mons. Dn. Tomás Guzmán afirma que la naturaleza misma de la tarea exige que un ministerio esté instituido, conferido o reconocido. La Iglesia tiene dos tipos de ministerios laicales que son: los dos ministerios instituidos el Lectorado (servidor de la Palabra) y Acolitado (servidor de la Eucaristía). Estos dos ministerios pueden ser conferidos por el Obispo a un laico mediante la liturgia prevista en el ritual. El otro tipo de ministerios son reconocidos o confiados, que en una palabra se dice Extraordinarios. Son reconocidos porque vienen de la iniciativa de una persona o de su comunidad
respectiva que, luego, los pastores de la Iglesia reconocen y avalan su desempeño para el bien de la Iglesia y de sus miembros. El gozo más grande lo vivimos en el seno de la diócesis de Cuautitlán, porque el pasado domingo 3 de junio, se vivió la institución de cuatro seminaristas como acólitos y de seis como lectores. El Señor Obispo Don Guillermo Ortiz Mondragón, relevando la importancia de los ministerios que estos jóvenes van desempeñar en la Iglesia, les llamó a tomar consciencia de su proceso de formación y de la grandeza del ministerio que les espera en el futuro. Recalcó mucho el senti-
do del sacerdocio, pidiendo a todos saber dejar a la familia para dedicarse plenamente al servicio de la Palabra. También resaltó la importancia de convertir a las familias de los sacerdotes en campos de evangelización, donde cada miembro se involucra al servicio del Evangelio y se hace apoyo al servicio de su hijo sacerdote. Oremos para que el Señor bendiga a nuestros lectores: Emanuel Neftalí, Alejandro, Isau, Eder, Iván, y de la misma manera ilumine a nuestros acólitos: Ricardo, José, Hugo Daniel y Diego Daniel.
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Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús Por: Codipacs Texcoco mi refugio, mi única esperanza. Tú eres el remedio para todas mis miserias, mi consuelo en todas mis angustias, la reparación de todas mis infidelidades, el suplemento para todas mis deficiencias, la expiación por todos mis pecados, y la esperanza y fin de todas mis oraciones. Tú eres el único que nunca se cansa de mí y el único que puede soportar mis defectos, porque Tú me amas con un amor infinito. Por lo tanto, Oh Dios mío, ten piedad de mí, de acuerdo tu gran misericordia, y haz de mí, y para mí, y en mí, lo que sea que Tú quieras, porque yo me entrego enteramente a Ti, Corazón divino, con la plena confianza de que Tú nunca me rechazarás. Amén.
María siempre nos lleva a Jesús
La Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús se celebra 19 días después de Pentecostés y a pocos días de Corpus Christi. Esta fiesta se estableció en el calendario litúrgico en 1856. El signo esencial de esta solemnidad es la devoción al amor, compasión y paciencia del corazón de Jesús a la humanidad entera. El Papa Clemente XIII reconoció y aprobó oficialmente la devoción en el año 1765. En 1856 el Papa Pío IX extendió la fiesta a la Iglesia universal y el 11 de junio
1899 el Papa León XIII consagró toda la humanidad al Sagrado Corazón de Jesús. La propia familia puede quedar consagrada al Sagrado Corazón de Jesús, haciendo todos juntos y con fe la oración siguiente:
Oración a Sagrado Corazón de Jesús Yo vuelo a Ti, Sagrado Corazón de mi Salvador, porque Tú eres
Junto a Jesús siempre está María, Madre de nuestro Señor y Madre nuestra. La devoción al Inmaculado Corazón de María se celebra al siguiente día de la Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús. Esta festividad del Corazón Inmaculado de María es una devoción que ayuda a los fieles a confiar en el amor de la Madre del Señor para acudir a ella en cualquier necesidad. Oración de Consagración al Sagrado Corazón de María Oh Corazón Inmaculado de María, por tu perfecta comunión de amor con el Corazón de Jesús, eres la escuela viviente de total consagración y dedicación a Su Corazón. En tu Corazón, Oh Madre, queremos vivir para aprender a amar, sin divisiones, al Corazón de Jesús; a obedecerle con diligencia y exactitud; servirle con generosidad y a cooperar activa y responsablemente en los designios de Su Corazón. Deseamos consagrarnos totalmente a tu Corazón Inmaculado
y Doloroso que es el camino perfecto y seguro de llegar al Corazón de Jesús. Tu Corazón, es también refugio seguro de gracia y santidad, donde nos vamos liberando y sanando de todas nuestras oscuridades y miserias. Deseamos pertenecer a tu Corazón, Oh Virgen Santísima, sin reservas y en total disponibilidad de amor a la voluntad de Dios, que se nos manifestará a través de tu mediación maternal. En virtud de esta consagración, Oh Inmaculado Corazón, te pedimos que nos guardes y protejas de todo peligro espiritual y físico. Qué nuestros corazones ardan con el fuego del Espíritu como arde tu Corazón. Qué unidos a Ti, que eres la portadora por excelencia de Cristo para el mundo, y ungidos por el poder del Espíritu Santo, seamos instrumentos para dar a un mundo tan árido y frío, el amor, la alegría y la paz del Corazón de Jesús.
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Consideraciones éticas sobre el actual sistema económico y financiero Por: Patricia Ynestroza La Santa Sede presentó el documento “Oeconomicae et pecuniariae quaestiones” (Consideraciones para un discernimiento ético sobre algunos aspectos del actual sistema económico y financiero). En rueda de prensa Mons. Luis Ladaria y el cardenal Peter Kodwo Turkson, Prefectos de la Congregación para la Doctrina de la Fe y el Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral respectivamente, dieron a conocer algunas propuestas para alcanzar un camino de bienestar del hombre que sea real e integral, unido a una clara fundación ética y a la necesaria unión entre el saber técnico y la sabiduría humana. En su introducción, el texto recuerda que las cuestiones económicas y financieras “atraen nuestra atención, debido a la creciente influencia de los mercados sobre el bienestar material de la mayor
parte de la humanidad. Esto exige, por un lado, una regulación adecuada de sus dinámicas y, por otro, un fundamento ético claro, que garantice al bienestar alcanzado esa calidad humana de relaciones que los mecanismos económicos, por sí solos, no pueden producir”. Precisamente en este contexto se manifiesta el vínculo necesario entre el conocimiento técnico y la sabiduría humana, “sin el cual todo acto humano termina deteriorándose y con el que, por el contrario, puede progresar en el camino de la prosperidad para el hombre que sea real e integral. La promoción integral de cada individuo, de cada comunidad humana y de todas las personas, se lee en el texto, es el horizonte último de este bien común, que la Iglesia pretende lograr como «sacramento universal de salvación»”.
El amor al bien integral, insepaRefiriéndose a la Encíclica Laudato sí, del Papa Francisco, en el rablemente del amor a la verdad, es documento se subraya que el amor la clave de un auténtico desarrollo. a la sociedad y el compromiso por el bien común son una forma excelente de la caridad, que no sólo afecta a las relaciones entre los individuos, sino a “las macro-relaciones, como las relaciones sociales, económicas y políticas”. Por eso, la Iglesia propuso al mundo el ideal de una “civilización del amor”».
Hacia el cambio en México Por: Julieta Appendini / Directora de ACN-México Faltan pocos días para acudir a las urnas y decidir por el futuro de México. Ya en la CV Asamblea General de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), los obispos expresaron a los candidatos su anhelo de una Nación en la cual se respete a plenitud todos los derechos humanos fundamentales; de un México más justo, solidario y participativo. Además de un sistema económico humano, capaz de impulsar a todos, a través del empleo digno y la promoción humana; de un Estado de Derecho fuerte, justo y promotor de la dignidad y de una educación de calidad, para promover una cultura solidaria. Por otro lado, el Consejo Nacional de Laicos de México emitió en Monterrey un pronunciamiento en donde recuerda que el derecho a votar es libre y que el ejercicio de ese derecho implica tomar una decisión que fortalece la democracia y que por ello, es recomendable evitar
anular el voto o dejar la boleta en blanco. Y pone en consideración algunos aspectos ante la elección de algún candidato o propuesta, como que los candidatos a gobernar deben tener un proyecto que implique un cambio para una verdadera participación ciudadana y que nuestro voto debe contemplar aquellas propuestas que garanticen el respeto a las libertades particularmente las de expresión, de pensamiento, de conciencia, de prensa, de empresa, de religión, entre otras.
Medios hay muchos para informarnos, prepararnos y emitir nuestro voto ajustado a los lineamientos de nuestros valores, deseos y creencias para poder cambiar el rumbo de México, que clama a gritos paz, reconciliación y misericordia para los que sufren. A lo largo de nuestro andar por el mundo hemos sido testigos de que la participación ciudadana es valiosísima para el cambio de regiones que gracias al trabajo en equipo y buenas decisiones han logrado cambiar su circunstancia, a pesar incluso de la guerra, los desastres naturales y las epidemias. Sin embargo, el futuro de México debe definirse por nosotros; es decir, si queremos verdaderamente cambiar el rumbo de este país, se dará partiendo del actuar de cada uno. La suma de acciones positivas, solidarias, de compromiso, contra la violencia, corrupción, serán las que permitan desde la participación ciudadana, el cambio que necesita
México. Esta acción colectiva será la única que haga presión contra el actuar de cualquier candidato que quede al frente. Pidamos a Dios nos dé la sabiduría no solo para votar por el mejor candidato, sino para que nos dé fuerza en ser cada uno promotores del cambio. Debemos estar seguros que la oración transforma y logra milagros y que junto con la oración nuestra participación ciudadana es definitiva para la construcción de un país diferente. Ayuda a la Iglesia Necesitada-México, Calle San Juan de Dios 222 Col. Villa Lázaro Cárdenas, Tlalpan 14370, México D.F. Tel. 55 4161-3331 Correo: info@acn-mexico.org Sitio web: www.acnmexico.org Face: @ainmexico Twitter:@ACNMex
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Volcán de Fuego Fuente: Prensa CEM Nos unimos al dolor y al desafío por la emergencia del volcán de fuego, en nuestra vecina nación de Guatemala. 4 de junio del 2018. Con motivo de la tragedia que vive nuestro país vecino del sur, Guatemala, la Conferencia del Episcopado Mexicano expresa su solidaridad y apoyo hacia las víctimas de este desastre natural en un comunicado firmado por José Francisco Cardenal Robles Ortega, Arzobispo de Guadalajara y Presidente de la CEM, y Alfonso G. Miranda Guardiola, Obispo Auxiliar de Monterrey y Secretario General de la CEM, cuyo contenido compartimos con ustedes: “Con sentimientos de solidaridad y cercanía, los Obispos de México, expresamos nuestras condolencias por aquellos hermanos que lamentablemente han fallecido por la erupción del volcán de Fuego, sabemos que estos fuertes fenómenos
naturales nos desafían a todos a responder con generosidad y rapidez, pues implican el desplazamiento de poblaciones enteras, su atención emergente, al igual que la reconstrucción de ciudades enteras. A través de Cáritas Mexicana hemos iniciado un esfuerzo de reflexión y acción para ver cómo sumarnos al apoyo internacional y ayudar a solventar las necesidades más inmediatas. Ante esta situación, rogamos sumarse, con gesto misericordioso, espíritu generoso y fraterna caridad, a la colecta especial a favor de nuestros hermanos de Guatemala, para socorrerlos y acompañarlos ahora y en las siguientes fases de rehabilitación y reconstrucción. La mejor forma de acercar nuestra ayuda es a través del recurso económico que facilita y reactiva la economía local. Encomendamos a nuestra Cáritas Mexicana la misión de recibir y transferir los fondos. Ponemos a su
disposición los datos bancarios: Cáritas Mexicana IAP Banco: Bancomer Cuenta: 0123456781 Clabe interbancaria: 012 180 00123456781 5 Para que le sea extendido su recibo deducible es importante que informen sus datos fiscales y envíen la imagen de su ficha de depósito al correo: emergencias@ceps.org.mx
Tel/Fax: 01800-685-27-28; (0155) 5563 6543/5563 1604 Imploramos la protección maternal de Santa María de Guadalupe, Emperatriz de América, confiando plenamente en que todas las acciones solidarias a favor del cuidado y protección de la vida humana, sean expresión de la más alta caridad, que solo proviene del amor de Cristo, Señor y Maestro. “
Obispo de Escuintla, bendice a los rescatistas tras erupción del Volcán de Fuego en Guatemala Por: ACI Prensa Luego de la explosión del volcán de Fuego en Guatemala El Obispo de Escuintla Mons. Víctor Hugo Palma Paúl, ha mostrado su cercanía llenando de esperanza y reconfortando cercanamente a las víctimas de esta catástrofe natural. Mons. Palma bendijo a los rescatistas que trabajan en la zona para ayudar a las víctimas de la erupción del Volcán. Se presentó el 05 de junio, para rezar por los siete fallecidos cuyos cuerpos fueron encontrados por los rescatistas y depositados en la morgue improvisada en una estación de bomberos. Las víctimas que pertenecen a la localidad El Rodeo, son una mujer de 44 años, un joven de 18 y cinco menores de edad. El Obispo ha estado hecho lo mismo con todos los cuerpos. Estuvo atento, y cada vez que anun-
ciaban que traen un cadáver, salía y realizaba este rito en voz baja y luego bendecía a los rescatistas. Uno de los bombero que participan las labores de rescate y que se declara católico practicante, dio testimonio que les ha impactó escuchar a Mons. Palma decirles “que
Dios los bendiga y los guarde”. El Obispo de Escuintla, cuya diócesis está en una de las zonas más afectadas, expresó en un comunicado publicado el 4 de junio su cercanía a las víctimas. La erupción del Volcán de Fuego en Guatemala, ocurrida el 3 de
junio, ha dejado hasta el momento 72 muertos, 46 heridos y unos 1.7 millones de afectados. Los departamentos más castigados son Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez. Además han sido evacuadas más de tres mil personas.
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El futuro de las familias está en nuestras manos Por: Lic. Whitney Astrid García Herrera, Pastoral Familia y Vida, Diócesis de Valle de Chalco. Todos los días vemos o escuchamos en los medios de comunicación, redes sociales, spots publicitarios, memes y más… sobre qué candidato nos llevará a la miseria o a la riqueza, se habla de dinero y corrupción, pero nunca se habla de conciencia, de ser fieles a la verdad. ¿Qué nos hará crecer como nación? Y aseguro que como lectores de este periódico lo sabemos: La cuna y base de la sociedad, la fuerza de toda nación es la FAMILIA. El candidato que defienda y procure a las familias no tiene que ganarte con despensas o promesas de becas sin restricción alguna, por que trabajará para darte un mejor sueldo y así estarán bien los integrantes de tu familia, y no te conformarás con lo que te den, si no con lo que tú puedas adquirir justamente con tu esfuerzo. El candidato que se incline por la familia legislará para su bien. Quiero que piensen en estas últimas décadas, las familias se están
fragmentando, la juventud se desestabilizada, se vive la destrucción del cimiento de una buena sociedad, nos hemos dejado envolver por ideologías, el relativismo y una falta de criterio moral. Somos administradores de la tarea implícita de educar y proteger, de ser formadores de conciencias; no tomemos a la ligera esta tarea de soberanía, votar no solo es un derecho, es un deber que repercu-
tirá no unicamente seis años si no más generaciones. Como Iglesia debemos hacer valer la palabra del Padre y elegir al candidato apegado a sus principios, que no te de miedo alzar la voz, exigir lo que hoy todos tienen miedo, exigir la protección de la familia tradicional, proteger los derechos del concebido, proteger la infancia, la inocencia de nuestros hijos. No queremos las cosas
gratis, queremos calidad de vida, queremos que se dignifique a cada una de las personas de nuestra comunidad. En la Exhortación Apostólica Postsinodal “Amoris Laetitia” en al Capitulo 2, no. 33 nos dice: “hay que considerar el creciente peligro que representa un individualismo exasperado que desvirtúa los vínculos familiares y acaba por considerar a cada componente de la familia como una isla… el ritmo de vida actual, el estrés, la organización social y laboral, porque son factores culturales que ponen en riesgo la posibilidad de opciones permanentes…Podemos destacar también un loable sentido de justicia; pero, mal entendido, convierte a los ciudadanos en clientes que sólo exigen prestaciones de servicios” Como miembro de la iglesia y parte de esta sociedad los exhorto a votar por quien nos garantice esa fuerza, por quien luche y defienda a NUESTRA FAMILIA.
¿Sabes cómo pasar de los valores a las virtudes? Por: Silvia del Valle / @SilviaMdelValle / @smflorycanto / www.tipsdeunamamade5hijos.blogspot.com Mucho se habla de que es necesario educar a nuestros hijos en valores, pero se ha dejado de lado la parte de las virtudes, que no es otra cosa que hacer vida los valores, por eso hoy te dejo 5Tips para pasar de los valores a las virtudes. PRIMERO. Decide qué virtudes quieres vivir y qué valores te llevan a ellas. Es importante tener bien claro para donde queremos que camine nuestra familia. Y es más fácil si tenemos un proyecto de vida familiar, y dentro de él, tener en cuenta las virtudes que como familia vamos a vivir. Para hablar de virtudes es importante también tener en cuenta los valores que te llevan a ellas. Así que hay que hacer también, la lista de los valores que vamos a fomentar en la familia. Además es bueno aprender un poco de ellos, para poder compartirlos con nuestros hijos.
SEGUNDO. Arma una estrategia familiar. Es importante hacer una estrategia para vivir los valores y llevarlos al grado de virtud, de otra forma solo nos esforzaremos sin llegar a nuestro objetivo. Como quien camina sin saber a dónde ir, solo dará vueltas y caminará en círculo, llegando siempre al lugar de donde partió y terminará agotado. De la misma forma la familia cuando va por la vida sin un plan de vida familiar, se deja llevar. TERCERO. Pon en práctica la estrategia junto con tus hijos. Los pequeños también están incluidos. ¡¡Claro!! Desde el más grande hasta el más pequeño deben participar y tener actividades adecuadas a su edad. Es por esto que hablamos de una estrategia. Y es muy bueno ponerla en papel, en un lugar visible para que todos podamos consultarla y no la olvidemos. Es importante hacer conciencia
de que todo debe ser poco a poco. De otra forma, sufriremos mucho ya que nos sentiremos frustrados por no avanzar tan rápido como planeamos. CUARTO. Cuando se logre una virtud no la dejes nunca. Es muy importante que las virtudes sean acumulativas, es decir, que cuando logres formar una virtud no la dejes de practicar. Entonces debemos ir sumando actividades para mantener esta virtud y otras para obtener una nueva. De esta forma lograremos ser una familia virtuosa y podremos dar testimonio de que aún se puede hacer las cosas conforme lo marca la moral y la ética, que es lo que necesita nuestra sociedad. Y QUINTO. La vivencia debe ser en familia. ¡Pon el ejemplo! Para que una virtud sea virtud, debe estar llevada a la práctica en la vida cotidiana, tanto personal como fami-
liarmente. Con mi familia intentamos vivir una virtud al mes, y conforme se presentan las cosas les vamos explicando a nuestros hijos algunas otras virtudes; por ejemplo, si por las circunstancias que se presentan en el equipo de futbol de mis hijos, es necesario vivir la templanza, pues les explicamos lo que es y les decimos cómo ponerla en práctica, aunque estemos practicando el orden. Las virtudes se necesitan a lo largo de la vida, y es mejor que las empecemos a vivir en familia, así nos podemos apoyar y será más fácil comprenderlas y llevarlas a la práctica. Está de moda el dicho “¿Tienes el valor o te vale?” Yo te pregunto hoy, “¿Eres valiente para ser virtuoso? ¡Tu familia te necesita virtuoso!
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¿Cómo viven la fe los jóvenes? Por: Pastoral Juvenil, Valle de Chalco La pastoral de jóvenes es de las más comunes en las parroquias. En esta pastoral se brinda acompañamiento a uno de los grupos poblacionales más importantes. Las condiciones de vida como pobreza, bajo nivel educativo, empleos precarios afecta con mayor seriedad sobre este sector de la población. Son muchos los jóvenes que crecen sin supervisión y acompañamiento adecuado. Ante este panorama las diversas parroquias no han respondido con suficiencia a brindarles atención. Es común recoger historias en las diferentes parroquias en las que recuerdan testimonios y casos de éxito al contar con buenos coordinadores que se encargaron del grupo. En otras se pueden observar grupos grandes y activos pero que parecen depender en exceso de alguna persona. En algunas parroquias se les proporcionan espacios para sus actividades, o se les ayuda a organizar pláticas o temas de apoyo en temas de sicología, orientación vocacional,
matrimonial y autoestima, entre las diferentes opciones. En algunas se les invita a vivir una vida en Dios desde lo cotidiano, respondiendo a sus inquietudes y se les invita a que vivan su fe mediante rosarios, formación, participación en horas santas, entre otras actividades. La cantidad de jóvenes involucrados suele ser de entre 10 y 60; los problemas a los que se suelen enfrentar son la falta de interés, poca participación y falta de constancia. Los jóvenes son la fuerza renovadora y transformadora de la Iglesia,
es por eso que la pastoral juvenil busca que el joven siempre se encuentre con Cristo, joven y alegre como ellos. La pastoral juvenil anuncia el Reino de Dios y denuncia también todo aquello que oprime y esclaviza a los jóvenes y a la sociedad. El ideal es que los jóvenes alcancen la madurez humana y espiritual y se comprometan abiertamente con el mensaje de Jesús. Desarrolla en la juventud sus virtudes y capacidades, para que ellos puedan descubrir su vocación o inclinación profesional. Impulsa el interés por relacionase
con otros jóvenes por medio de actividades sanas y propias del joven como la música, el deporte, la pintura (grafiti), los cuales amalgama de manera perfecta con la formación espiritual y social. Cada parroquia cuenta con varios grupos juveniles que se reúnen de acuerdo a sus dones y carismas y dinamizan la comunidad y adquieren una conciencia crítica sobre los antivalores que el mundo les ofrece, al procurarles una formación integral y específica de sus agentes. Los padres están unidos a sus hijos junto con el grupo juvenil y el párroco, todos forman una comunidad cristiana llena de amor y fraternidad. En las parroquias los niños y los jóvenes se sienten atraídos por el uso adecuado de la tecnología y redes sociales, fomentamos valores humanos y cristianos, a través de las artes, y se tienen encuentros deportivos por lo menos dos veces por año.
Que arda e ilumine el Año de la Juventud en México Por: Codipacs Texcoco La inminente Jornada Electoral tiene una diversidad de propuestas, simbolismos y significados para la Juventud Mexicana. Los denominados millennials y centennials -de los que se dice, son la fuerza para cambiar el mundo- han adquirido, de muchas formas, enorme importancia y cualidades, y también atribuido de varias maneras, dotes de esperanza, armonía y transformación. A estos jóvenes, contabilizados en millones en nuestro país, una parte de la sociedad los supone en la escuela, miles de ellos en las universidades, en el trabajo informal, en la empresa, en la fábrica, en las academias de artes, en el deporte, en la calle; una buena parte en su casa, en espera de las oportunidades, pero, y… ¿en la parroquia? La participación juvenil en el ámbito de la pastoral parroquial, ¿es real? o solo es la experien-
ñor Jesús renueve en la adolescencia y juventud católica mexicana la grandeza del alma. Un don que nos impulse a reconocer las metas más grandes de la vida humana, inspiradas siempre por su amor; que nos inspiren la determinación por la verdad, bondad y justicia para nuestro pueblo que, bajo la ayuda de la gracia divina, nos ayuden alcanzar la paz tan anhelada y llene nuestros corazones del gozo que sólo Jesús cia de una juventud católica que se Obispo Auxiliar de Monterrey y puede dar”. desborda esporádicamente, como por ejemplo, en la Jornada Mundial de la Juventud. La DEMPAJ (Dimensión Episcopal Mexicana de Pastoral de Adolescentes y Jóvenes), comunicó con fuerza el Año de la Juventud Mexicana a finales del 2017, y en una carta, con motivo del Día de la Juventud Católica Mexicana, Mons. Juan Armando Pérez Talamantes,
responsable de la DEMPAJ, señaló:
“Los jóvenes llevan en el corazón el deseo de un mundo mejor, más digno de la vida auténticamente humana, llena de alegría y esperanza. Este deseo encuentra el camino de cumplimiento en el Señor Jesús, Amigo que nunca falla, que nunca decepciona, que siempre está, que siempre atiende, que siempre comparte la vida de todas las hijas e hijos de Dios”, y pidió porque “el Se-
Que en el Año de la Juventud sigamos con el propósito de abrir espacio a los jóvenes, tomarlos en cuenta, atenderlos, escucharlos, compartir con ellos y valorar su participación en la Iglesia. No solo los esperemos, salgamos a su encuentro y demos señales de que se les quiere y que se cuenta con ellos en la Construcción de la Civilización del Amor.
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Preseminario, el primer encuentro sacerdotal Por: Seminarista Moisés García / Diócesis de Ecatepec A lo largo de la historia de la salvación que se verifica de una manera muy concreta en la Biblia, nos damos cuenta de que, cuando Dios llama, lo hace con personas concretas, y con el fin de realizar una misión determinada en beneficio de su pueblo; Dios habla y llama a través de las necesidades y acontecimientos, de manera que, toda vocación es la respuesta a las necesidades de una comunidad. Por eso, un objetivo primordial del Preseminario en cada Diócesis, es ayudar a esclarecer las inquietudes que manifiestan los adolescentes y jóvenes por la vida sacerdotal y consagrada. La vocación desde el ángulo de la fe, es dejarse llamar a la vida en plenitud por el mismo Dios conforme a un proyecto realizado por Cristo y manifestado en la Iglesia. El preseminario convoca a quienes creen que sienten este llamado al servicio de sus semejantes.
Para ello, se ofrecen elementos que ayudan al crecimiento cristiano que irá despertando en los pre-seminaristas las bases para ingresar, debe ser una oportunidad para que los jóvenes compartan sus inquietudes, sueños e ideales que glorifican a Dios y ayudan a su realización y crecimiento personal. El preseminario será el primer encuentro con la experiencia sacerdotal, primer momento para iniciar el discernimiento, el cual no será de forma personal, sino con un acompañamiento eclesial, ya que está inmerso en la misma realidad de la Iglesia y se requiere el apoyo de los miembros de la Iglesia. El preseminario es la puerta de este proceso que llevara al joven a un discernimiento apropiado para la vocación sacerdotal, la cual es la semilla de vocación que es la realidad en proceso que comporta
crecimiento y necesidad de formación, llamado de la providencia de Dios y debe ser considerado como relación de la vida cristiana recibida desde el día del bautismo, vivencia profunda de la fe, el sentido eclesial y capacidad de compromiso en clima que propicie la vocacional sacerdotal y preparen al futuro candidato para aceptar el proyecto de vida que comporta el sacerdocio y ejercicio del minis-
terio. La vocación sacerdotal nueva gracia de Dios que exige distintas y propias tareas para preparar una respuesta adecuada de la persona a esa llamada específica. Este proceso de formación deberá englobar desde el principio, con el desarrollo de la vocación cristiana, un proyecto integral de vida que tiene como meta el sacerdocio ministerial.
Cultivar la semilla de la vocación Por: Lic. José Luis Villafaña Para nuestros días es de vital importancia, fomentar y cuidar las vocaciones sacerdotales, vocaciones que son fruto del amor de Dios con su Iglesia. Se trata de un proyecto divino en beneficio de los hombres, por ello desde el evangelio encontramos fundamento de este llamado. El reino de Dios se parece a un hombre que echa simiente en la tierra Mc 4, 26). La palabra seminario hace referencia a estas palabras de Cristo. El término latino seminarium proviene de semen, la semilla. Jesús, a propósito de la semilla arrojada a la tierra, dice que brota y crece, tanto cuando el hombre vela como cuando duerme: brota y crece de noche y de día. La tierra va produciendo la cosecha ella sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano. (Mc 4, 28). La analogía con la vocación sa-
cerdotal se impone por sí misma. Es como la semilla de Dios, arrojada en la tierra del alma humana, que crece con una dinámica propia. Pero la semilla, para que crezca, debe ser cultivada. El hombre debe sembrar, y también velar para que se desarrolle la semilla: Es preciso impedir que las fuerzas contrarias, personas malignas o calamidades naturales, destruyan las plantitas que están creciendo. Y cuando han madurado, el hombre debe tomar la hoz, como afirma Cristo, pues el campo está listo para la siega. (cf. Mc 4, 29). En otra circunstancia Jesús afirma: La mies es mucha y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a sus mies (Mt 9, 37-38). También estas palabras hacen referencia al seminario, lugar donde se forman los obreros para la gran mies del reino de Dios, que se extiende a
todos los países y continentes. Es conveniente que, al final del curso volvamos a escuchar hoy esta parábola de Cristo. Oremos por la vocación y san-
tificación de los trabajadores de la mies, para el dueño les llene de sabiduría y fortaleza en el llamado al que han respondido con valentía.
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De la época independentista a las reformas de Benito Juárez Por Pbro. Israel Mendoza Tinoco/Cuautitlán Con la Revolución francesa, y la independencia de los Estados Unidos en 1774, el continente americano, sufre el influjo de las ideas ilustradas, tanto de los racionalistas franceses, como de los empiristas ingleses. Este influjo trajo consigo la formación de una nueva conciencia nacional, los criollos españoles primero y los mestizos después que conformaban el territorio nacional, se veían a sí mismos en condiciones para iniciar una nueva identidad. Es así que comienza el proceso de independencia de la Nueva España de la corona española, en este proceso la Iglesia no es ajena, pues tendrá en figuras como Miguel Hidalgo, Morelos, Mariano Matamoros entre algunos, hombres de iglesia comprometidos con la situación social, que veían en la realidad un argumento convincente para romper con esa situación de injusticia y explotación que vivían la mayoría de los pobladores de estas tierras, que hacían de sostén de la España de entonces.
Con este rompimiento de la corona española, se consuma este proceso en 1821, teniendo como primer Emperador de México a Agustín de Iturbide, que supo unir a las diferentes facciones de los insurgentes, y que hace saber a España que no podría más detener los aires de libertad y soberanía que los mexicanos tenían como motivaciones para constituir un nuevo país. A ello colaboró sin duda la serie de jesuitas que el siglo XVIII habitaron nuestra patria, hombres de la talla de Francisco Clavijero, que se le considera el primer historiador de México, con sus obras y escritos, sembraron la construcción de la conciencia nacional, no de en balde los jesuitas en ese momento ocupaban un puesto en la vanguardia educativa, y fue por ello que se ganaron la envidia de muchos sectores de la sociedad. En este clima, políticamente se generan dos grupos que se disputarán los hilos del destino del país. Estos dos grupos son los conservadores
que tenían en Santa Ana una de sus figuras más representativas, y en el grupo liberal está Benito Juárez con el cual se inicia la separación formal de la Iglesia y Estado como instituciones. Esta separación se concreta y se expresa en las leyes de reforma de 1857, leyes que restan el poder eclesial y que estipulan las funciones del Estado. Si antes la Iglesia tenía en sus manos los eventos más importantes de la persona, como lo eran el nacimiento, el matrimonio
y la muerte, ahora el Estado legisla esos momentos fundantes de la persona humana, dejando a la Iglesia y sus sacramentos como sus fiestas al ámbito privado. Así Juárez y el grupo liberal, sientan las bases de esta separación, que en un primer momento puede ser tenida como una distancia sana y necesaria para ambas instituciones, pero que con el tiempo esta separación se transformará en una persecución hostil. Continuará…
Las fiestas patronales, Cultura que se festeja Por: Gilberto Enríquez / CODIPACS Ecatepec Dentro de la amplia variedad de fiestas que existen en el calendario litúrgico, las fiestas patronales constituyen un momento importante para las comunidades parroquiales, ya que con características propias, llenas de un tinte religioso y marcadas con el sello particular de cada comunidad parroquial, enriquecen la cultura de nuestras comunidades. Las fiestas patronales, como cualquier otro tipo de fiestas, despliegan una amplia gama de elementos en un espacio y tiempo concreto, es el momento preciso que da ocasión a la expresión de ritmo y color, emotividad, gastronomía, fiesta donde se baila, se canta, se vive un ambiente familiar y festivo con los grupos, mayordomías, comisiones que hacen de las fiestas patronales, momentos de cultura y tradición en los pueblos y comunidades. Las fiestas patronales son prácticas de religiosidad local, que enriquecen los pensamientos y praxis propias de la Iglesia católica con contenidos y expresiones que dan culto y forman parte de la cuestión litúrgica. Cada comunidad se ha apropiado de sus
fiestas, ritos y propias tradiciones (en algunos momentos se han cristianizado algunas tradiciones paganas que el mismo pueblo tiene), actos sagrados revestidos de el espíritu religioso heredado por los primeros evangelizadores. La recuperación de los ritos en las fiestas patronales nos hace más humanos y nos recuerda que somos parte de la misma comunidad, con mismos usos y costumbres y festividades que nos ayudan a enriquecer la cultura de nuestras comunidades.
Las distintas festividades hacen que sean accesibles para todos, son incluyentes no excluyentes, no son fiestas selectas, son manifestación de la cultura del hombre que se alimenta con la autenticidad, que le da el valor puro a dicha festividad. La historia de cada pueblo no se escribe porque sí, sino que se escribe a partir de los hechos en el tiempo transcurrido, sagrado, inmortal. En conclusión, las fiestas patronales muestran la gran diversidad de cultura que tiene nuestro pueblo, demuestra que los sucesos del pasado que fueron importantes siguen vigentes en nuestro corazón y hacemos estas fiestas en su honor. Estas fiestas también son una prueba de la gran cantidad de mestizaje cultural, porque todo tipo de personas se reúnen para celebrar. En estas fechas, en muchas partes, hay fiestas patronales, en honor de la Santísima Trinidad, Sagrado Corazón, Corpus Christi, y en las distintas comunidades se llenan de gran gozo y entrega como comunidad manifestando la gran riqueza que tiene cada comunidad y pueblo.
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Sagrado Corazón de Jesús La solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús se celebra el primer viernes del mes de junio, pero la Iglesia dedica todo ese mes al Sagrado Corazón. La devoción al Corazón de Jesús es de origen medieval, existen escritos muy antiguos de algunas santas que
la fuente más importante de la devoción, en la forma en que la conocemos actualmente, es santa Margarita María Alacoque (Francia 1647), de la Orden de la Visitación de Santa María, a quien Jesús se le apareció varias veces.
dan testimonio de ello. Sin embargo,
En dichas apariciones, Jesús le dijo
que quienes oraran con devoción al Sagrado Corazón, recibirían muchas gracias divinas. Los jesuitas extendieron la devoción por el mundo a través de los miembros de la Compañía, y sus libros.
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Portarse bien con uno mismo: laicos que evangelizan y se auto-evangelizan Por: CODIPACS Izcalli En no pocos documentos de la Iglesia, y especialmente a partir del Concilio Vaticano II, se dice que hoy, la evangelización depende en mucho de los laicos, especialmente porque viven inmersos en las más acuciantes realidades de nuestros tiempos, y ahí donde está un laico comprometido hay posibilidades de evangelización, pero, antes de hablar de evangelización es necesario buscar evangelizarnos a nosotros mismos porque de otra manera, ¿cómo anunciar a Cristo?, ¿cómo anunciar su Palabra?. Ahora bien, ¿cómo evangelizar?, pero sobre todo, ¿cómo evangelizarnos a nosotros mismos?, Anselm Grün, teólogo alemán, en su libro “portarse bien con uno mismo”, habla de modos concretos para hacerlo, y queremos hablar de ellos, porque en la hermosa oportunidad de evangelizar, contamos con muchísimas personas buenas y de grande fe pero con muchas actitu-
des y acciones de auto destrucción en su propia vida. El primer ejemplo lo tenemos en aquellos que buscan “auto control”, en apariencia todo es perfecto, sin embargo, son personas que sufren por no tener el verdadero control de su vida, de sus emociones y de las demás personas; son personas que interiormente viven derrumbadas y sufren mucho, cuando la solución está en portarse bien con uno mismo, haciéndonos conscientes de que nunca tendremos al control de todo, ni siquiera de no-
sotros mismos, pues nuestra vida es un constante aprendizaje que tiene como medio el error y la crisis. Otro ejemplo es el de aquel que tiene ideales tan grandes que olvida preguntarse, ¿cuál es la voluntad de Dios en su vida?; y es que, algunos ideales le parecen tan atractivos y al mismo tiempo tan altos que, busca estirar lo que él mismo es para alcanzarlos, otros le parecen tan pequeños pero tan deseables que se acorta perdiendo muchas de las grandes cosas que ya posee; este tipo de personas sufren y poco se perdonan no ser como tal o cual persona, creen no tener tanta suerte como otros porque no hablan con la catequista, no sirven como el ministro, no cantan como fulana, etc., cuando en su vida, Dios ha puesto multitud de dones que ellos mismos entierran por sólo ver los de los demás. Otro ejemplo es el de aquel que no tolera que nadie lo aconseje y
además se obstina en tener la razón porque cree tener toda la experiencia en aquello que hace o se le encomienda; una persona así, no sabe trabajar en equipo, no ha caído en la cuenta de que él solo no es la familia, el grupo, la Iglesia, y que en cualquiera de estas realidades necesita de los demás. La idea es “portarse bien con uno mismo”, sin caer en los excesos a los que nos lleva nuestra misma historia o personalidad, sino estar abiertos a la novedad del otro, y especialmente a vivir conforme al Evangelio, de otra manera viene la autodestrucción, las crisis y el sufrimiento. Luego entonces queremos salir huyendo de la Iglesia y de sus filas porque ninguno nos comprende, ninguno nos ayuda, ninguno lo hace bien. Evangelizar, necesariamente significa hoy, evangelizarse, y junto a ello, portarse bien con los demás, pero también, portarse bien con uno mismo.
el primero, en referencia a las diversas funciones pastorales de la Iglesia (catequesis en perspectiva litúrgico sacramental: de acuerdo con la celebración comunitaria del año litúrgico; en el contexto de la iniciación sacramental, que puede ser a partir de la experiencia del catecumenado, de la re-iniciación cristiana, de la integración de los adultos con ocasión de la recepción de los sacramentos de los adultos. En el ámbito de la misión profética: catequesis de los adultos en las estructuras comunitarias de la Iglesia (nuevas comunidades, pueden ser las de base; reactivación en sentido catequético de las comunidades tradicionales, en el núcleo familiar o conyugal). El
segundo tipo según la naturaleza del acto catequístico: catequesis de los adultos de tipo enseñanza; catequesis de los adultos como iniciación o reiniciación; catequesis de los adultos de tipo educacional.
Una catequesis para adulto Por Pbro. Aarón Palma A./ Cuautitlán En la mayoría de las Diócesis de Latinoamérica, durante mucho tiempo, han centrado su atención en la catequesis de niños, apostando a que serán los cristianos adultos del mañana. La idea no está equivocada, el problema es que se ha descuidado la catequesis del adulto. No es raro ver que los adultos descargan toda la responsabilidad de la educación de la fe en el equipo de catequesis parroquial, cada día hay menos adultos dispuestos a colaborar en la catequesis. Sin descuidar los avances que se han dado en la catequesis de niños y adolescentes, es importante que se active la centralidad que se debe tener en el adulto, porque son ellos quienes pueden acompañar directamente el proceso de crecimiento de la fe de los niños, adolescentes y jóvenes, su madurez cristiana tradu-
cida en el testimonio de vida es la mejor catequesis que se puede tener. Alberich y Binz, expertos en la materia, nos ofrecen algunos ámbitos y modelos sobre los que se pueden proyectar una catequesis para el adulto. En relación con los destinatarios, puede ser privada y pública, espontanea e institucionalizada, sistemática u ocasional; puede tomar dos modalidades, catequesis de iniciación o formación permanente de la fe; la propuesta catequística que se ofrezca, no siempre corresponde a la edad evolutiva del adulto, lo que significa que no se debe dar por supuesto que el adulto es maduro en su fe; la catequesis de adultos no puede estar aislada de la realidad pastoral de la comunidad. En relación con los modelos, se pueden clasificar en dos bloques:
“Participar para transformar”. Mensaje de los obispos mexicanos Por: Griselda Mutual – Vatican News Por los obispos mexicanos, con motivo del proceso electoral 2018 El pasado mes de marzo los Obispos mexicanos emitieron un comunicado con motivo del proceso electoral invitando a la ciudadanía a participar en la vida cívica y política del país, considerando que “en el curso del presente año se renovarán más de 3 mil cargos públicos en 30 entidades federativas, incluyendo al Presidente de la República, a los Senadores, a los Diputados federales, a 9 gobernadores, a más de 1000 alcaldes y una parte importante de los diputados locales”. Por ese motivo los prelados compartieron algunos elementos para ayudar al discernimiento personal y comunitario que, tal como ellos escriben, cada fiel cristiano está llamado a hacer para cumplir con la obligación moral de elegir a sus gobernantes y legisladores. Oración comunitaria y en familia Los Obispos hacen presente, ante todo, que “la fe cristiana trasciende las propuestas políticas concretas”, y, recordando que “Jesucristo, núcleo central de nuestra fe, nos revela verdades fundamentales que también son accesibles a la razón humana y que ayudan a que la vida de todos sea más digna y libre”, enumeran algunas de ellas: el respeto que merecen las personas desde el momento de la fecundación y hasta la muerte natural; la importancia del matrimonio heterosexual y monogámico, entre otros. De ahí que exhortan a una participación activa, porque, señalan, “entre más ciudadanos participen organizadamente en las elecciones, más posibilidades habrá de que nuestra sociedad madure y sea corresponsable en la gestión del bien común”. Esto acompañado de la oración en familia y en comunidad, “para que la próxima jornada electoral se realice, en paz y armonía”, y se busque “el bien posible”, evitando elegir en base al “mal menor”, dado que “el principio del mal menor sólo aplica cuando los males en juego son de orden físico, no moral”. “Hacer el ‘bien posible’- subrayan - significa impulsar lo que aporte al bien común, a la paz, a la seguridad, a la justicia, al respeto a los derechos humanos, al desarrollo humano integral y a la solidaridad real con los más pobres y excluidos”.
Discernimiento y participación activa Los prelados exhortan también a “elegir a las personas”, es decir, a discernir por quién votar: “Lo prudente y responsable es buscar para cada puesto de elección popular a la persona más idónea y no dejarnos manipular para que votemos en bloque por un solo tipo de propuesta”, señalan. Por último, tras reiterar la importancia de la presencia participativa, afirman que “es tiempo de que los católicos, acompañados de todos los hombres y mujeres de buena voluntad”, trabajen con compromiso por un México “más próspero y pacífico, solidario y participativo, más atento al rostro de los más pobres y menos cómplice de quienes los olvidan, los manipulan o los marginan”, y piden por intercesión de Nuestra Señora de Guadalupe, “Madre del verdadero Dios por quien se vive y Patrona de nuestra libertad”, trabajar sin desfallecer por la unidad y soberanía del pueblo, la promoción y defensa de las comunidades y familias; y el reintegro en su dignidad a todos los que hayan sufrido alguna vejación, discriminación o inequidad.