FELICIDAD, con prótesis impresa en 3D Su rostro lo decía todo, era un momento muy alegre para aquel niño de 5 años que veía y sentía que su vida tendría un cambio con aquella prótesis impresa en 3D.
Según la página Unocero, las impresiones 3D están tomando cada vez más protagonismo como soluciones a problemas que hasta hace pocos años no se pensaban. Una muestra es el carpintero sudafricano Richard Van As, quien creó la Robohand, un apéndice protésica de bajo costo mediante una impresora 3D.
Esta prótesis alternativa no tiene electrónica ni sensores, por lo que es más fácil de producir y mantener, tiene un costo aproximado de 150 dólares. “Se necesitan unos tornillos, tuercas y algunos cables, que se pueden obtener en cualquier tienda de hardware. La parte más costosa y difícil de hacer es el guante, que tiene que ser cuidadosamente ajustado a la muñeca.” Menciona Richard. Actualmente se a desarrollado una serie de prótesis en 3D, que a muchas personas han simplificado su vida, dando felicidad a aquel paciente, así como a su familia.