La sinergia de micronutrientes ayuda a optimizar los beneficios para la salud

La sinergia de los micronutrientes ayuda a optimizar los beneficios para la salud

El término “micronutrientes” va más allá de las vitaminas y los minerales e incluye numerosos componentes vegetales activos, aminoácidos y otros metabolitos con un papel fundamental en el metabolismo celular. A continuación se presentan los amplios efectos que ejercen sobre la salud específicos micronutrientes probados en sinergia.

La vitamina B6, la vitamina C y el yodo son importantes para apoyar el funcionamiento normal del sistema nervioso e inmunitario, siendo el yodo necesario para la actividad de la tiroides y la producción normal de hormonas tiroideas.

El selenio, el ácido fólico y la vitamina C

son importantes para apoyar la función del sistema inmunitario. Las vitaminas B5, B6 y C contribuyen a reducir el cansancio y la fatiga al aumentar la utilización de la glucosa para impulsar la producción de energía.

La vitamina B6 es necesaria para metabolizar las proteínas y ayuda a producir neurotransmisores. Entre ellos se encuentran el ácido gamma-aminobutírico (GABA), la dopamina y la serotonina. También afecta a la actividad de los receptores de esteroides (estrógenos) en las membranas celulares. Por lo tanto, el estado de la vitamina B6 puede influir en el riesgo de desarrollar enfermedades provocadas por las hormonas esteroides, como el cáncer de mama.

La vitamina B6 y la colina, junto con el ácido fólico o la vitamina B12 son importantes

para mantener niveles saludables de homocisteína, un aminoácido que se encuentra normalmente en nuestra sangre. Las deficiencias de estas vitaminas aumentan el nivel de homocisteína, un factor de riesgo independiente para las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares.

La vitamina E, la vitamina C y el selenio son potentes antioxidantes que protegen las células contra el estrés oxidativo que subyace a numerosos problemas de salud.

La vitamina C es el antioxidante más importante de la sangre, un nutriente esencial para la producción de colágeno y tejido conectivo, así como de bioenergía. Un colágeno sano es necesario para mantener unos vasos sanguíneos fuertes y elásticos y un funcionamiento óptimo del sistema cardiovascular, la piel, el aparato reproductor, los huesos y los cartílagos, entre otros. La vitamina C contribuye a una inmunidad sana y al equilibrio hormonal.

La colina, el inositol y la fosfatidilserina trabajan juntos en nuestro organismo, especialmente en el metabolismo de las grasas y en las funciones del sistema nervioso. La colina y la fosfatidilserina son nutrientes esenciales producidos en nuestro cuerpo en cantidades limitadas e insuficientes para satisfacer las necesidades de nuestro organismo. La colina es un precursor de la acetilcolina, necesaria para la función cerebral. El inositol (también denominado vitamina B8) es un tipo de azúcar que ayuda a dar estructura a nuestras células como parte de los fosfolípidos que construyen nuestras membranas celulares. Unas membranas sanas son esenciales para asegurar el transporte óptimo de nutrientes dentro y fuera de las células. El inositol también puede mejorar la resistencia a la insulina y la función de los mensajeros químicos en nuestro cerebro y nervios. Estos nutrientes son importantes para el crecimiento saludable de las células, el metabolismo de los lípidos y la función del hígado, ya que ayudan a eliminar las toxinas y favorecen la fertilidad y el desarrollo saludable del embarazo y del bebé.

Las isoflavonas de la soja, clasificados como fitoestrógenos poseen propiedades tanto de agonistas estrogénicas como antagonistas. Están presentes como glucósidos - moléculas unidas al azúcar (es decir, genistina, daidzina y glicitina) y como agliconas individuales llamadas genisteína, daidzeína y glicitina. La ingesta elevada de isoflavonas procedentes de los alimentos de soja se ha asociado a la reducción del riesgo de cáncer de mama, osteoporosis y enfermedades cardiovasculares. Las isoflavonas de soja se han aplicado como una alternativa segura a la terapia hormonal sustitutiva para reducir los síntomas relacionados con la menopausia, incluidos los sofocos y los sudores nocturnos.

La baya del árbol del casto, también conocida como pimiento de los Monjes es rica en antioxidantes y otros nutrientes y se ha