Red diocesana 99 2014

Page 1

dev

BOLETÍN INFORMATIVO – DEL 06 al 12 de octubre – No. 099

La vida es una misión A muchos les gusta improvisar y cada día hacen "lo que les resulte", una especie de aventura sin fin ni finalidad. A otros les gusta planear todo, buscando lo que se han propuesto hasta lograrlo para dar otro paso, así pueden presentar unos resultados concretos. Desde luego que es muy importante elaborar proyectos y más si se trata de la propia vida. Puedo hacerlos centrándolos en mí mismo: lo que me conviene, lo que me gusta, lo que más me produce... Pero si he dado un paso de madurez verdadero, pienso en los demás, no me dejo marcar por el egoísmo. Y si el paso es más profundo en reflexión y espiritualidad, pienso en Dios. Descubro que se invierte el orden: primero Dios. Desde antes de crearme tiene un proyecto amoroso, el más conveniente para que yo haga de mi vida lo mejor. Es el buen padre, mejor que mis propios padres, quienes al yo nacer pensaron tantas cosas bellas para mi vida. No vine este mundo por una casualidad y por ello el Señor

pondrá los medios para que yo pueda hacer de mi vida una obra maestra. La primera preocupación mía debe ser: "¿Qué quiere hacer Dios con mi vida?, es decir, con su Palabra, la oración y los buenos consejos, orientarla según su voluntad. En segundo lugar tener en cuenta a los demás. Conocemos la frase de Jesucristo: "No vine a ser servido sino a servir". Tomar la ruta del amor verdadero que motivará todo lo que yo emprenda marcándolo de bondad, de tratar de hacer siempre el bien a los otros. Esto me hará feliz, porque lo seré tanto cuanto amo. Este es el signo de verdadera madurez humana. En tercer lugar mi propia conveniencia. Conociéndome, qué capacidades tengo, posibilidades, qué me gustaría realizar. Esto me pone en la realidad según lo que soy y las circunstancias que vivo. Con los dos pasos anteriores y en plena libertad, emprendo el camino del resto de mi vida. Quisiera realizar el proyecto de Dios porque es lo mejor como respuesta

a su amor paternal, marcando mi vida por el amor en obras para el bien de los demás, desplegando todas mis iniciativas y capacidades. El Papa Francisco dice: "La vida es una misión". Desde antes de crearnos Dios ha tenido un plan amoroso con nosotros, no nos ha dejado a la deriva en el tiempo. Quiere que seamos santos, es decir, que con su ayuda paternal unidos a Jesucristo su Hijo y guiados por el Espíritu Santo, llenemos nuestra vida de mucho amor. Pero no es una consideración piadosa, no puedo olvidar que me deja en plena libertad, y por ello es una responsabilidad de la que se me pedirá cuenta. Mi vida es importante para mí mismo y para muchos otros. Qué bueno asumirla con madurez, consciencia, alegría, iniciativa... Ofreciéndola a Dios como el sacrificio de mí mismo, así como lo hizo Jesucristo. + Hernán Giraldo Jaramillo Admon. Apostólico de Magangué Tomado de: http://www.cec.org.co/opinion/3486-lavida-es-una-mision


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.