Una larga historia de sobornos, mezquindades e intereses económicos en la que se vieron implicadas muchas personalidades del régimen franquista. El proceso judicial se prolongó hasta el polémico fallo del Tribunal de la Haya (1970). Juan Antonio Suanzes, dos veces ministro de Industria, cuya intervención fue decisiva para que FECSA se quedara con Barcelona Traction.