El mineral noviembre

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EL MINERAL

Noviembre de 2013

Año 2 Número 15

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DE ACONCAGUA

“Yo Vivo”: agrupación para niños con capacidades diferentes

La entidad nació en la comuna de Panquehue como una necesidad de los padres para que sus hijos tuvieran un lugar donde ir al cumplir la edad en que deben egresar de las escuelas especiales. La organización ha podido mantenerse y equiparse gracias al compromiso del municipio panquehuino y empresas como Anglo American. (Páginas 4 y 5)

Niños de Panquehue, Catemu y Llay Llay celebraron Navidad con obras de teatro

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Catemu y Panquehue Escuelas que aplican ECBI comenzaron a 8 efectuar “Clases Magistrales”

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Profesores de Las Compuertas educan con 6 vocación de servicio y cariño

Provincia de San Felipe

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Catemu

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Macarena Bordali

Editorial

Docente de manualidades y artista plástica.

Las funciones de los talleres de manualidades Hace cuatro años que imparto talleres de manua-

importante, lo que se traduce en una mejora de la calidad

lidad en las distintas localidades de Catemu, siendo uno

de vida familiar. Es importante destacar que ellas también

de los talleres más antiguo el de Telar y en donde feliz-

se capacitan en temas administrativos, lo que les permite

mente le he enseñado a muchas mujeres el arte de tejer,

poder manejar su propio negocio.

teniendo varias satisfacciones al ver cómo ellas van per-

La otra función que a mi parece es muy importan-

feccionándose e involucrándose cada vez más en esta

te es que los talleres son un foco de encuentro, donde las

técnica.

mujeres se sienten cómodas, relajadas y felices, gene-

Durante todo este tiempo, he ido observando que

las mesas de trabajo cada vez se van fortaleciendo más y las mujeres van empoderándose de su conocimiento, atreviéndose a hacer, mostrar y comercializar sus distintos productos. Me parece muy valorable el compromiso y responsabilidad que cada una de ellas tiene con los talleres, más aún si tomamos en cuenta que también deben cumplir otros roles en sus hogares que absorben gran cantidad de tiempo.

Desde mi perspectiva, creo que los talleres de

manualidades tiene una doble función, por un lado está

rándose lazos afectivos muy interesantes. Se desarrolla a través de la manualidad y la comunicación grupal una instancia terapéutica que ayuda a las mujeres a conectarse con ellas mismas y a compartir sus experiencias personales en torno a la creatividad. De cierta manera, estos grupos se van transformando en una red de apoyo fundamental, que no solo se observa en el desarrollo de los talleres, sino que también en otras instancias cotidianas potenciándose la comunicación y ayuda entre ellas.

Me siento muy feliz de ser parte de estos talleres

la posibilidad de adquirir conocimientos y aplicarlos en

y poder aportar en el crecimiento personal de cada una

la realización de productos artesanales, generando pe-

de las alumnas, al principio son alumnas tímidas y con

queños y medianos emprendimientos, los cuales, con

muy poca confianza en sus habilidades y a medida que

esfuerzo y persistencia, van desarrollándose dentro de

va avanzando el taller ellas van cambiando su mirada so-

sus comunidades. Cuando las alumnas tienen esta mo-

bre ellas mismas y se transforman en mujeres creativas,

tivación sus ingresos económicos sufren un incremento

seguras y entusiastas.

El Mineral de Aconcagua, es una publicación mensual de Anglo American, editada por la Empresa Periodística “El Observador”. Se distribuye como suplemento de la Edición Aconcagua del diario “El Observador”. Contáctenos: elmineral@observador.cl - (34) 2343712 - (9) 2829202

Comité Editorial Francisco Ibañez Pamela Quinteros Tomás Puente

Periodista Paula Helo Malebrán

Coordinación Jasna Cisterna Correa

Diagramación Pamela Pérez Rojas

Impresión Editorial e Imprenta “El Observador”


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Casa 38 de Chagres, un lugar para la comunidad El lugar de encuentro de Chagres con sus vecinos es este espacio que poco a poco se ha ido transformando en lugar de reunión. Con el objetivo de tener un lugar de encuentro y que las comunidades cercanas a su operación Chagres -Llay Llay, Catemu y Panquehue-, lo sintieran como propio, la empresa Anglo American habilitó la Casa 38 del antiguo campamento, como la Casa de Comu-

La Casa de Comunidades también fue el escenario para que los profesores de la comuna de Catemu aprendieran sobre agricultura orgánica.

nidades. “Necesitábamos un lugar para hacer reuniones y capacitaciones que no dependiera de otras disponibilidades y horarios, puesto que muchas de las actividades con las comunidades son en horarios distintos del administrativo”, explica Pamela Quinteros, encargada de Desarrollo Social y Relaciones Comunitarias de Chagres. De esta manera, “el uso de esta propiedad es parte de los Programas de Relaciones Comunitarias y de Inversión Social de Anglo American y por estos motivos se tomó la decisión de habilitar la propiedad para este fin”, acota Carlos Salvo Provoste, gerente de Sustentabilidad de Chagres. Pamela explica que como operación “la visualizamos como un lugar para desarrollar muchas de las actividades que desarrollamos en el área, tales como nuestras Tertulias Ambientales mensuales con profesores y educadoras de párvulos de Panquehue, Catemu y Llay Llay, que son parte de nuestro Programa de Educación Ambiental o los talleres de microemprendimiento, de artes manuales, reuniones con las Mesas de Trabajo, capacitaciones sobre diversos ámbitos, talleres de huerto, reuniones de planificación con los equipos de trabajo y hasta el Mercadito, que pretende ser una instancia para exponer y vender los productos de microemprendedoras locales, que ven en esta instancia una forma de promover y vender sus productos”.

El Mercadito es una instancia en la cual las microemprendedoras pueden vender sus productos y estrechar lazos con los trabajadores de la operación Chagres de Anglo American.

En la Casa de Comunidades también funcionan las oficinas de Sinapsis Comunicaciones, empresa colaboradora que forma parte del equipo de Relaciones Comunitarias e Inversión Social de Chagres. A las actividades mencionadas, también se agregan las reuniones que sostiene Chagres con las brigadas de emergencia de las comunas de Catemu, Llay Llay y Panquehue. “Nos encanta ver la casa llena de actividades, sentimos que es un espacio compartido, productivo y que está cumpliendo con el objetivo de ser un punto de encuentro para nuestros vecinos y comunidad en general”, indicó Pamela. El lugar también se ha hecho cercano a las mujeres de las mesas de trabajo de las comunidades vecinas, a los dirigentes, profesores, entre otros actores sociales, que sienten cercanía con la empresa debido al acceso que tienen hacia los trabajadores a Chagres en este lugar. Un caso ejemplificador es el de las mujeres microemprendedoras de las mesas de trabajo que participaron en el taller de gestión y que ahora, los primeros viernes de cada mes, ofrecen sus productos a trabajadores, supervisores y gerentes de la operación Chagres en el Mercadito, instancia en la cual, de manera más informal, pueden sostener conversaciones con los ejecutivos de la empresa, lo que las ha hecho sentirse parte de la operación y a la vez, estrechar lazos.

Las tertulias ambientales que se realizan con los profesores y educadores de las comunas vecinas a Chagres se hacen en la Casa de Comunidades.

En la Casa de Comunidades también se conformó la Red de Ecoeducadoras.

Las reuniones para coordinar emergencias con los equipos de Catemu, Panquehue y Llay Llay se hacen en este punto de encuentro.

Se constituyó Consejo Asesor Empresarial del Liceo Chagres Pedro Reyes Figueroa, gerente general de la operación Chagres de Anglo American, encabezará la mesa de trabajo. Con la presencia del alcalde de la comuna de Catemu, Boris Luksic; el director del Liceo Chagres, Fernando Silva; Félix Arévalo, jefe del Departamento de Educación de Catemu; Pedro Reyes Figueroa, gerente general de la operación Chagres de Anglo American; el empresario Luis Núñez Torres; Claudia Mora, representante de Chilquinta; Ricardo Campos Soto, administrador de la Sociedad Agrícola San Carlos y Andrés Hernández, empresario constructor, se constituyó el Consejo Asesor

Empresarial del Liceo Chagres. El consejo quedó conformado por Pedro Reyes Figueroa, como presidente; Luis Núñez Torres, como vicepresidente y Andrés Hernández Pizarro, como secretario. Este comité tiene por objetivo apoyar a la dirección del establecimiento para establecer políticas generales que evalúen y aporten al mejoramiento continuo del proyecto corporativo y educativo de la institución, incentivando a los distintos actores del proceso educativo y a las empresas, para generar una alianza permanente cuyo articulador principal deberá ser la dirección del Liceo Chagres, quien dará las orientaciones en la detección de necesidades y en la definición del perfil

técnico que se requiera en la sociedad, apoyando además las carreras técnicas de: Construcciones Metálicas, Laboratorista Químico y Electricidad. Para llevar a cabo esta tarea, el directorio acordó celebrar una reunión mensual donde el director expondrá las innovaciones realizadas, los proyectos en ejecución y por ejecutar. En la ocasión, Fernando Silva, director del liceo, además de agradecer a las autoridades y empresas que se reunieron, solicitó a los empresarios convocados, la colaboración en otorgar prácticas profesionales a los alumnos. Finalmente, se procedió a la firma del acta de constitución y a un recorrido por los distintos talleres del Liceo.

Pedro Reyes Figueroa, gerente general de la operación Chagres de Anglo American, fue electo como presidente del Consejo Asesor Empresarial del Liceo Chagres.


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“Yo Vivo” quieren decir los niños con capacidades diferentes de Panquehue Agrupación busca entregarles herramientas para que puedan desenvolverse en la sociedad y sean entendidos y respetados.

Participando del acto del Día del Carabinero.

Los jóvenes de “Yo Vivo” viendo un video.

“La discriminación es el principal impedimento de la discapacidad”, cuenta un proverbio que enmarca uno de los principales defectos de la sociedad a nivel mundial. También podría ser la premisa bajo la cual nace la Agrupación “Yo Vivo” de Panquehue, que integra a los niños con capacidades diferentes de la comuna, que por su edad ya no pueden seguir asistiendo a las escuelas especiales, que tienen como límite los 24 años edad. Pero, ¿qué puede hacer un niño con capacidades diferentes luego de

terminar la escuela? Ante esta interrogante, Enrique Flores, padre de una joven con capacidades diferentes, luego de asistir a una reunión que se hacía en una sala del gimnasio Los Libertadores de La Pirca, en la cual participaban padres de niños con discapacidades buscando ayudar a sus hijos, comenzó a evaluar el ambiente en el que se encontraban. Tenían un lugar amplio, con cuatro salas, baño y cocina y estaban al lado del estadio y el gimnasio, lo que les abría una enorme posibilidad: un lugar

donde sus hijos pudieran asistir, como una escuela y en donde pudieran entretenerse, sentirse útiles, queridos, y tal vez, aprender. El objetivo principal era darles una oportunidad para ser, para desarrollarse, para comunicarse, para compartir. “Yo estaba preocupado porque a mi hija ya la habían sacado de la escuela y un día que vine a reunión, pensé que el lugar estaba totalmente apto. Me acerqué a hablar con don Luis (Pradenas) y le expliqué las necesidades que teníamos. Ahí partimos, él tuvo toda la voluntad, pusieron gente especializada para trabajar con los niños. Don Luis se movió con el Ministerio de Educación y ahí partimos”, indicó Enrique, quien hoy es el presidente de la Agrupación “Yo Vivo”. Así, el lunes 4 de mayo de 2011, fue un día especial para cerca de una veintena de jóvenes con la puesta en marcha de un taller de manualidades para niños con capacidades diferentes. Los padres y apoderados de los niños recibieron con gran emoción y alegría el primer día de clases, en donde los alumnos fueron recibidos con una convivencia para comenzar de buena forma su terapia de grupo. En la ocasión, el alcalde Luis Pradenas manifestó que “esto me tiene contento, feliz, es una organización que nació bajo mi mandato, lo puedo decir con mucha franqueza, una vez que asumí como alcalde vi que en Panquehue había niños con diferentes capacidades. Aquí nace la futura escuela para niños con capacidades diferentes, para poder insertarlos a la sociedad y tener una mejor calidad de vida”, pensamiento que el edil aún mantiene ya que como municipio está constantemente apoyando a la organización. “Estamos muy contentos de poder ser parte de un sueño para varias familia de Panquehue”, expresó. UN SUEÑO HECHO REALIDAD Prontamente la agrupación obtuvo su personalidad jurídica y además del apoyo del municipio, contó con el apoyo del Cesfam de la comuna, quienes le otorgan la movilización a los jóvenes para que lleguen Enrique Flores cuenta que “de a poco nos fuimos armando y ganando proyectos. En Anglo American hemos ganado como tres proyectos que nos han permitido equipar la sede y, además, nos trajeron sillas para que los niños estuvieran más cómodos. Lo único que hoy nos faltaría para que los niños tengan buen material, serían mesones adecuados y firmes”. Con los Fondos Concursables de Anglo American, los apoderados han podido adquirir pizarras interactivas,

data show, filmadora, sillas de ruedas y material farmacéutico para formar un botiquín, el que cuenta con toma presión, silla de ruedas, termómetro, entre otros instrumentos. También tienen una impresora multifuncional, que le facilita el trabajo a la educadora diferencial a cargo del grupo, Ángela Alfaro Pastén. Además, la agrupación cuenta con material deportivo y educativo. “El municipio nos ayuda con lo que nos falte, porque don Luis se ha portado muy bien con nosotros”, indicó Flores. EL DÍA A DÍA DE LOS NIÑOS La Agrupación “Yo Vivo” funciona de lunes a viernes desde las 9 de la mañana hasta cerca de la 1 de la tarde. Está a cargo de la educadora diferencial Ángela Alfaro Pasten, quien trabaja con la fonoaudióloga Vanessa Manzano Gormaz y el profesor de Educación Física, Rafael Herrera, quien asiste a la educadora y además, ejercita a los jóvenes para desarrollar su motricidad. Si bien son más de 20 los integrantes, regularmente asisten a clases 15, puesto que los otros van a las escuelas especiales de San Felipe -ya que aún están en edad-, pero igual participan de las actividades de la organización. Tienen una rutina organizada que comienza con un agradecimiento y luego con un precalentamiento, porque es necesario activar su movilidad. Ahí los jóvenes se dividen en dos grupos, uno de lecto escritura y cálculo, y otro de manualidades. En el primero, hay 5 alumnos que están aprendiendo a leer, lo que ha costado bastante, pero lo están logrando debido al empeño que le ponen por ser mejores. En el segundo, los jóvenes aprenden técnicas que después les pueden servir para hacer sus creaciones y venderlas. De acuerdo al día, tienen clases de Educación Física con Rafael Herrera y los viernes tienen clases de Música con la profesora Jasna Provoste, quien está trabajando la obra “Cascanueces”, que quieren presentar el día 4 de diciembre en Zapallar, en un encuentro nacional de teatro de escuelas especiales. “El objetivo principal del taller es lograr la independencia de ellos y que puedan lograr sentirse niños útiles dentro de la sociedad. En vez de estar en sus casas vegetando, vienen para acá y se les pueden enseñar habilidades sociales, como cocinar, planchar, lavar, ya que muchos de ellos tienen padres ya mayores que en algún momento les van a faltar y ellos van a tener que saber desenvolverse”, explicó la educadora diferencial, quien añadió que la mayoría de los jóvenes son chi-

Los jóvenes de la Agrupación “Yo Vivo” en el desfile de Fiestas Patrias.

cos sobreprotegidos por sus familias, por lo que varios no sabían hacer las cosas de la casa. “Pero lo más importante es que los chicos sean felices, en la medida que se las da la oportunidad son muy felices”, indicó. Acerca del trabajo que hacen, Enrique Flores explica que “ellos hacen más manualidades. Por ejemplo, en el caso de mi hija es casi imposible que ella pueda aprender a leer o escribir, pero ha aprendido muchas manualidades y eso ha desarrollado mucho su personalidad. Lo más importante es que como grupo hacen hartas actividades, el año pasado abrieron el Festival de la Voz de Panquehue, lo que enorgullece a los papás, a las mamás y a ellos mismos”. Vanessa Manzano, fonoaudióloga del “Yo Vivo”, explica que su trabajo consiste básicamente en “mantener las habilidades comunicativas que ellos ya tienen, porque la mayoría son adultos. Hay dos pequeñitos, que aún están en edad escolar y con ellos trabajamos lenguaje. Es importante que ellos tengan estas sesiones, porque se les van atrofiando los músculos del habla y tienen trastornos del lenguaje, de la voz y del habla. Como ya yo llevo tres años trabajando con ellos, mi trabajo se ha ampliado mucho más allá de la fonoaudiología, porque existe mucho apego. Como profesional mi objetivo es que ellos puedan darse a entender, y para eso trabajamos harto con disertaciones y canciones, para que modulen mejor”.

Una salida a terreno para ejercitarse y conocer más de los animales

Rigoberto Herrera Pérez es uno de los integrantes de “Yo Vivo”.

El profesor Rafael Herrera constantemente los saca a terreno para inculcar la actividad física.

Angélica Foncea preparando una botella navideña.


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Escuela Rebeca Johnson de Las Compuertas: Este establecimiento tiene dos profesores de planta que trabajan en dos aulas con el sistema de multigrado. Trabajar en la Escuela Básica Rebeca Johnson de Las Compuertas no es fácil. Ya el sector es uno de los más alejados de la zona urbana de Catemu. El establecimiento se emplaza entre el camino y el cerro, en unos terrenos que fueron cedidos por la familia García Huidobro para que allí se construyera el colegio del sector. El terreno es disparejo, las salas de madera parecen duplicar los 38º Celsius que hacen en el exterior. Pero a Leonor Guajardo Ávila y Álvaro Carvajal Vilches, los docentes de la escuela, no les importa. Su compromiso por educar a sus niños va mucho más allá de las incomodidades que deben enfrentar a diario y es lo que significa vocación, término que proviene del latín vocatio y, para los religiosos, es la inspiración con que Dios llama a algún estado. En el establecimiento hay dos grados o aulas, por lo que trabajan con el sistema de multigrado. En una sala están los pequeños desde primero a tercero básico y en la otra desde cuarto a sexto. En total suman 13 alumnos, de los cuales un 90% son alumnos de integración, que significa que tienen necesidades educativas especiales. Hay tres profesores, de Educación Física, Religión y Música, que van una vez por semana a hacerles estas materias a los niños. El resto, lo hacen Álvaro y Leonor. Leonor es la docente que está a cargo de la dirección del establecimiento. La escuela está inserta en el programa de Escuelas Plus y de Aulas Multigrado del Ministerio de Educación, que traen programas educativos y programaciones transversales para los alumnos de cada aula. “Antes no era muy fácil hacer tres cursos en uno, ya en la planificación se complicaba. A veces uno quedaba contento porque había pasado ciertos contenidos y los niños habían adquiri-

do bien los conocimientos, pero también uno quedaba pensando que había quedado débil en otros. Con esto de las aulas multigrado, los contenidos son transversales”, explica Álvaro. Además, el establecimiento está en el proceso de conseguir la certificación ambiental. Como son tan pocos los alumnos, toda la comunidad es Forjadora Ambiental. Se han preocupado en un comienzo de limpiar el establecimiento de malezas, sacar las cañas del cerro que llegaban hasta el mismo patio. Los apoderados cooperan con plantas, almácigos, se acercan al colegio para ayudar a limpiar y plantar. “La idea es ir uniendo todo lo que nos sirve e ir por nuestros objetivos”, indica Leonor, quien se siente feliz de haber vuelto a este establecimiento en donde se inició como docente, para poder entregarle conocimientos a sus alumnos y las ganas, que comparte con el profesor Álvaro, de mejorar el establecimiento. Las clases de los alumnos son muy lúdicas, los profesores se preparan y buscan material para proyectárselos a los niños, utilizando todas las herramientas tecnológicas con las que cuentan. “Enseñamos lo mismo que en los otros establecimientos, pero mucho más fácil, lo que hace que los niños adquieran mucho mejor sus conocimientos. Tratamos de hacer clases lúdicas y en terreno”, explica la directora. IMPLEMENTACIÓN ECBI Este es el segundo año que la Escuela Básica Rebeca Johnson trabaja con el programa Enseñanza de las Ciencias Basado en la Indagación (ECBI), el que ha resultado muy favorable, a juicio del maestro a cargo del segundo ciclo básico, Álvaro Carvajal Vilches, puesto que “los niños han podido adquirir muchos más conocimientos de ciencias que en una enseñanza

Joaquina Aspee Olivares, Jesús Flores Salazar y Martín Barraza Espinoza son alumnos del primer ciclo básico.

regular, tomando en consideración que somos una escuela multigrado. El ECBI nos ha permitido ordenar un poco el tema de las ciencias. Cada módulo tiene lecciones y esas lecciones tienen cuatro etapas: focalización, exploración, reflexión y la evaluación; entonces, en cada clase uno evalúa a los niños y eso se hace replicable a otras materias también”. En este momento, los alumnos se están preparando para su Clase Magistral que será el 3 de diciembre, y que ya tienen lista. “La idea es que los niños se muestren en esta actividad y se luzcan en la presentación. Acá hacemos participar a todos los alumnos, que en su mayoría son de integración. Nuestros alumnos participan bastante, les damos el espacio para que ellos se expresen. En la feria científica, Martín, un alumno que tiene muchos problemas de pronunciación, se lució”, indica Leo-

nor, directora del establecimiento. Implementar el huerto, no fue problema para los profesores, puesto que los niños están muy comprometidos con sus plantas y esperan con ansias que las lechugas estén listas para poder comérselas. UNA ESCUELA CON CARIÑO “Hay muchos alumnos que vienen acá porque han sido trasladados por conducta, pero como acá tienen atención, dejan de portarse mal y se vuelven buenos alumnos”, explica el profesor Álvaro. Para mejorar el establecimiento, los apoderados y los profesores han postulado a los Fondos Concursables de Anglo American, en donde han ganado 4 veces. El primero les sirvió para implementar la sala de computación; el segundo, para comprar equipos de fútbol para el grupo de las mamás y de los niños; el tercero, para techar el

patio y el cuarto, para adquirir las máquinas de ejercicios. En Las Compuertas, el único lugar que tienen los apoderados y los niños para hacer actividades, es la escuela. Ahí llegan los niños para hacer tareas y usar Internet; las mamás para sacar trámites en línea, a hacer aeróbica, a usar las máquinas de ejercicios, etc. “A las siete de la tarde empiezan a llegar y generalmente nosotros nos quedamos acá planificando, así que somos una escuela abierta a nuestra comunidad. Somos una escuela pequeña, pero nuestros niños merecen las mismas oportunidades para aprender y siempre estamos preparándonos y estudiando para dar lo mejor de nosotros a nuestros alumnos. Como docentes, nos gusta estar aquí, estamos contentos y hacemos actividades porque nos gusta estar con nuestros alumnos, con nuestra gente”, cuenta

“Los profesores se dedican mucho a los niños”

Muriel Mesías Pérez,

apoderada y trabajadora de la escuela. “Yo vivo acá en Las Compuertas y mi hijo, que ya está en tercero básico, entró en primero a esta escuela. Creo que es muy importante que esté esta escuela en el sector, porque como son poquitos niños, los profesores se dedican mucho a ellos y les ponen mucha atención. Mi hijo sabe mucho y estoy muy contenta. La escuela tiene hartas deficiencias estructurales y como apoderados esperamos que se mejoren, así como esperamos que lleguen más niños, para que pueda ampliarse hasta octavo básico. Los apoderados estamos comprometidos con la escuela y eso importante”. Los alumnos de la Escuela Rebeca Johnson junto a sus profesores Leonor y Álvaro en el huerto escolar que incorporaron gracias al ECBI.


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un desafío diario para educar

Josefa Gutiérrez Pérez y Alejandro Tapia Maturana, trabajando en uno de los computadores del establecimiento.

Jesús Flores Salazar y Jonathan Ahfir Olguín.

Axel Jiménez Becerra, en una de las máquinas de ejercicios que consiguieron los apoderados de la escuela para poder ejercitarse.

Leonor, quien se siente comprometida con su establecimiento. “El gran problema que tenemos acá es la infraestructura, que no nos permite competir de igual manera con los otros colegios y mejorar nuestras matrículas”, acota Álvaro.

Álvaro y Leonor son un claro ejemplo de lo que es ser maestros por vocación, ya que no sólo se abocan a dar clases, sino que también martillan, arreglan, son enfermeros, sicólogos, entre otras actividades.

Los profesores y los alumnos en el jardín que con esmero han cuidado junto a los apoderados del sector.

Culminaron talleres de las Mesas de Trabajo de la Operación Chagres Seis comunidades se vieron beneficiadas con iniciativa financiada por Anglo American. Con el objetivo de potenciar los sectores en los cuales la operación Chagres de Anglo American tiene Mesas de Trabajo con los vecinos, a través de la Corporación Ciem Aconcagua la compañía minera implementó seis talleres en los cuales se capacitaron más de 125 personas. Los sectores escogidos en esta ocasión fueron Santa Isabel, Santa Margarita, Chagres y San José de la comuna de Catemu y; 9 de octubre y Lo Campo, de Panquehue. “Los talleres con las mesas de trabajo tienen como propósito principal instalar capacidades en estos grupos sociales y, para ello, se desarrollan talleres y charlas conducentes al perfeccionamiento. La idea es potenciar la identidad de las organizaciones y fortalecer las relaciones con Chagres, para finalmente desarrollar proyectos más difíciles y desafiantes con mayores beneficios comunitarios”, explicó el gerente de Sustentabilidad, Carlos

Salvo Provoste. En Santa Isabel y Santa Margarita, las vecinas accedieron a un curso de crochet, el que estuvo a cargo de la profesora Carmen Gloria Mery; en San José y 9 de octubre, aprendieron a confeccionar lámparas y en Chagres y Lo Campo, talleres de telar, avanzado y básico respectivamente. Todas estas clases fueron dictadas por Macarena Bordali. Que las personas del sector, se conozcan, compartan y se puedan fortalecer como organizaciones sociales es uno de los principales objetivos de estos talleres. Patricia Andwanter, una de las coordinadoras de la Corporación Ciem Aconcagua, entidad a cargo de impartir los talleres, explica que durante los meses en que las mujeres participan de los talleres, son unidas y se ven fuertes desde el tema organizacional, sin embargo, cuando éstos terminan, ella ve a través de los seguimientos de que la organización se debilita,

por lo que cree que es importante que ellas tengan una organización, como centro de madres, que las reúna semanalmente y así no se pierda la conexión lograda. LOS TALLERES La artista plástica y docente de distintos tipos de manualida-

des, Macarena Bordali, es quien imparte gran parte de los talleres, los que se han ido haciendo por cuatro años, y comenta que las alumnas quieren aprender diversas técnicas, son muy entusiastas, pero creo que lo que más las motiva es que en estos talleres encuentran un lugar y un ambiente

Alumnas de Lo Campo en su taller de telar.

donde ellas pueden desarrollarse y desconectarse de su rutina diaria. Hacen lazos con otras compañeras y, en algunas ocasiones, se han logrado organizar y poder mirar hacia la comercialización de sus productos”. La profesora, que es quien más comparte con las mujeres, explica que las alumnas de los talleres son vecinas del mismo sector desde hace mucho tiempo y se conocen, pero no ha visto que se organicen como agrupación. “Creo que muchas alumnas toman estos talleres como terapia, aspecto que es muy importante porque los talleres estarían actuando en la prevención de distintas psicopatologías muy comunes dentro de la comunidad femenina”. En los talleres, las alumnas avanzan de acuerdo a su propio ritmo, en las clases que son, en un 98%, prácticas. “Lo importante es que vayan desarrollando su creatividad, que tengan atención personalizada. Hay que incentivar a las alumnas a creer en sus capacidades y explorar materiales y diseños”, indicó la profesora.


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Niños de Lo Campo expusieron en “Clases Magistrales” Iniciativa es la última fase del programa ECBI, que se implementó este año en la comuna. También en Catemu, los alumnos comenzaron sus exposiciones.

Las “Clases Magistrales” del programa de Enseñanza de las Ciencias Basado en la Indagación (ECBI), son la última fase de la iniciativa que fue implementada hace un par de años en las escuelas de Catemu y que desde este año se introdujo en Panquehue, gracias un convenio entre la Universidad de Chile, entidad a cargo del programa, la empresa Anglo American y los municipios respectivos. Cabe recordar que esta iniciativa busca promover en todos los niños(as) una mejor comprensión de la naturaleza, estimular su curiosidad y fomentar sus aptitudes científicas. En las “Clases Magistrales” los alumnos de enseñanza básica muestran a sus familias, compañe-

ros, docentes, autoridades y a toda la comunidad, los conceptos tratados en clases, aplicando la experimentación. Los menores invitan a los asistentes a los módulos para experimentar con vasos, pipetas y tubos de ensayos, maquetas, entre otras herramientas; hacen preguntas y entregan los conocimientos de las lecciones del semestre.

En la Escuela Fray Camilo Henríquez, los alumnos expusieron de la fotosíntesis, la semilla, la fuerza, el proceso del pan, entre otras temáticas. Los alumnos fueron un claro ejemplo de que la metodología utilizada en el ECBI los hizo comprender de mejor manera los temas y los apoderados quedaron muy contentos y orgullosos de las presentaciones que vieron.

Los alumnos de cuarto básico trabajaron masa y volumen del agua de acuerdo a la temperatura.

Los pequeños de primero básico mostraron a los apoderados el proceso del pan.

Los niños de tercero básico expusieron acerca de la semilla y la fotosíntesis.

Los alumnos de sexto básico mostraron los tipos de suelo y la erosión.

Los papás de quinto básico aprendieron acerca del aparato digestivo.

Una Navidad adelantada les dio Anglo American a los niños de Panquehue, Catemu y Llay Llay Dos funciones de teatro se realizaron en el patio de la Escuela María Teresa del Canto. La primera, El Flautista de Hamelin, fue para los niños del primer ciclo básico y para los de segundo ciclo, se presentó El Principito. Como parte del programa de Desarrollo Social de la empresa Anglo American, la operación Chagres ofreció a cientos de alumnos de las escuelas de Catemu, Panquehue y Llay Llay la celebración anticipada de Navidad, con la puesta en escena de dos obras de teatro.

“El Flautista de Hamelin” encantó a los más pequeñitos.

La actividad se efectuó el jueves 21 de noviembre. A las 10 de la mañana se dio inicio a la obra “El Flaustista de Hamelin”, que fue para los pequeños de los jardines infantiles, escuelas de lenguaje y alumnos del primer ciclo básico. Todos -grandes y chicos- se sorprendieron con la puesta en escena del

Absortos por la historia estuvieron los pequeñitos viendo “El Flautista de Hamelin”.

elenco de la compañía TeatroArt. Durante la calurosa tarde, los alumnos de quinto a octavo básico se deleitaron con la obra “El Principito”, la cual entregó el gran mensaje de SaintExupéry durante la presentación. Estas muestras artísticas llegaron hasta una gran cantidad de alumnos de la zona gracias a la gestión de Anglo American y su preocupación por permitir, a los niños y niñas, disfrutar de

espectáculos de gran calidad en la comuna, a los que comúnmente no tienen acceso. El público quedó realmente sorprendido y los pequeños estuvieron concentrados durante ambas funciones, manteniendo la atención y siguiendo las historias muy de cerca. El excelente resultado se vio al concluir ambas funciones, con la ovación de los presentes a ambos elencos.

Los asistentes quedaron sorprendidos con las puestas en escena.


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