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Pablo García, Director General Gesgraph

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FERIAS

FERIAS

PABLO GARCÍA,

Director General Gesgraph “BUSCAMOS SER EL SOFTWARE

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MEJOR VALORADO Y POR ELLO NUESTRA ADAPTACIÓN ES MUY RELEVANTE”

¿Qué ofrecen de nuevo los flujos de trabajo a los impresores? Los flujos de trabajo cada vez están más automatizados y controlan más datos consiguiendo centralizar en un mismo sitio muchísima información. En la práctica, esto puede cambiarles la vida a los impresores porque con esta tecnología, es el dato el que viene a la persona y no al revés, mejorando, no solo la eficiencia sino la toma de decisiones en tiempo real basadas en datos. Definitivamente, las empresas que apuesten por desarrollar esta tecnología serán mucho más competitivas.

¿Cuáles son las demandas más habituales de los usuarios respecto al flujo de trabajo? Varía un poco según el perfil del cliente, pero principalmente nos encontramos con dos situaciones, clientes que buscan un sistema de presupuestación ágil y un control de producción simple para poder organizarse rápidamente o clientes que buscan un control absoluto de todos los procesos que se desarrollan en la empresa, esto eso, presupuestación, producción, planificación, compras, almacén, facturación, control de costes, etc.

¿Qué tipo de problemas pueden aparecer si el flujo de trabajo no es el adecuado? Lo que nosotros hemos observado es que se suelen producir dos problemas, por un lado, la lentitud a la hora de gestionar los procesos porque hay que duplicar los mismos, porque falta información para llevarlos a cabo o porque dicha información todavía no ha llegado; y por otro lado errores en esos procesos tanto en procesos administrativos como productivos. Obviamente todo esto acaba repercutiendo en la reducción del margen de la empresa o incluso en pérdidas. Son estos unos de los principales problemas que desde Gesgraph buscamos solucionar adaptando nuestra aplicación a las necesidades de cada cliente mediante una labor de consultoría especializada. Al fin y al cabo, la tecnología es un medio, si no se usa correctamente no se consiguen resultados. ¿Qué beneficios ofrece su flujo de trabajo respecto al de la competencia? En Gesgraph, entendemos que el core de las empresas de artes gráficas son los presupuestos que es donde están en juego los beneficios de la empresa y donde se originan los datos que luego serán gestionados en las diferentes áreas de la empresa. Por ello, uno de los grandes valores de Gesgraph es que tenemos un sistema de presupuestación basado en algoritmos de cálculo muy potentes que buscan la máxima eficiencia además de llevar un control muy exhaustivo de los costes. Ambas cosas, permiten, en los momentos posteriores, llevar un control pormenorizado de todos los procesos que se deben realizar evitando la pérdida de información y las incongruencias en las áreas de producción, planificación, compras y almacén. Además, en Gesgraph, buscamos ser el software mejor valorado por el sector de las artes gráficas y por ello nuestra labor de investigación, mejora y adaptación es muy relevante. Por último, Gesgraph es un software 100% basado en web que se accede desde explorador web (p.e. Google Chrome) lo cual facilita o elimina la gestión de servidores y es más flexible. Esta es la tendencia actual y futura del sector TIC.

¿Qué deben de tener en cuenta las imprentas que quieran mejorar su flujo de trabajo a la hora de elegir uno nuevo? La clave del éxito en un proyecto de este tipo es la capacidad del proveedor para entender las necesidades del cliente y de convertirse en un aliado estratégico a largo plazo. Para determinar esto, son tres los criterios que hay que valorar: en primer lugar, la tecnología, es decir, qué funcionalidades cubre el software, cómo es de flexible, si la interfaz del usuario es intuitiva, que arquitectura de datos maneja y qué capacidad de mejora tiene. En segundo lugar, los servicios, esto es, el nivel de especialización y capacidad del equipo humano, la garantía de resultados de proyectos similares y el grado de satisfacción actual de los clientes. Y por último, basándose en los dos puntos anteriores, el precio del software. Hay que tener en cuenta que en este punto no hay que valorar de forma directa el precio, la clave es si la utilidad del software que el cliente va a conseguir va a ser rentable para él.

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