¡
Extrae la Ruleta de Supervivencia de aquí.
Debes cuidar con esmero este elemento, ya que es esencial.
¡Tu vida podría depender de él! Los buenos exploradores cuidan su equipo...
ADVERTENCIA!
Estelibrosolodebeusarsecomofuentedeinformacióngeneral entrañarydeentretenimiento.Lasinstruccionesquedetallapueden realicenriesgos,porloqueserecomiendaqueloslectoresno estas actividades en la vida real. Ni la editorial ni el autorgarantizanlaexactitudnilaexhaustividaddelcontenido responsabilidaddellibro;además,declinandeformaexpresatodaporlesionesodañosderivadosdelarealización eldelasactividadesmencionadasenestelibro.Sobretodo,usa sentidocomún,siguesiemprelasprecaucionesdeseguridad ydéjateaconsejarporadultosresponsables.
Con un especial agradecimiento a William Costello y Sam Corcoran.
E. H. Para mis padres.
¡Pero los mejores saben cómo adaptarse! Si se te pierde la ruleta, construye otra: despliega el extremo de un clip, mete la punta de un l piz en el bucle, apoya el clip en una superficie y hazlo girar.
Título original Spin to Survive - Frozen Mountain
Asesoramiento en supervivencia Megan Hine
Proyecto Katy Flint
Edición Georgia Amson-Bradshaw
Diseño Myrto Dimitrakoulia
Traducción Antonio Díaz Pérez
Coordinación de la edición en lengua española
Cristina Rodríguez Fischer
Primera edición en lengua española 2025
© 2025 Naturart, S.A. Editado por BLUME Carrer de les Alberes, 52, 2.°, Vallvidrera
08017 Barcelona
Tel. 93 205 40 00 e-mail: info@blume.net
© 2021 Quarto Publishing Plc, Londres
© 2021 del texto Emily Hawkins
© 2021 de las ilustraciones R. Fresson
ISBN: 978-84-10268-93-7
Depósito legal: B.20472-2024
Impreso en China
Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra, sea por medios mecánicos o electrónicos, sin la debida autorización por escrito del editor.
WWW.BLUME.NET
14-15, 1978 © Kishore/AP/Shutterstock • 18-19, 2003 © Cavan/Alamy Stock Photo • 20-21, 2003 © Moviestore Collection Ltd/ Alamy Stock Photo • 22-23, 1935 © Bettmann/Contributor/Getty Images • 34-35, late 1900s or early 1910s © PhotoQuest/Getty Images • 36-37, 2008 © Johner Images/Alamy Stock Photo • 46-47, 2014 © Niranjan Shrestha/ AP/Shutterstock • 56-57, 1985 © Jaan Künnap • 58-59, 1924 © Royal Geographical Society/Contributor/Getty Images • 62-63, 2015 © Lindsey Wasson/The Spokesman-Review C122384
sobrevive en la
textos Emily Hawkins ilustraciones R. Fresson
SOBRE TU AVENTURA
¡Te damos la bienvenida, valiente! Estás a punto de embarcarte en una peligrosa aventura en un paisaje agreste y escarpado. Deberás decidir qué ruta tomar y a qué peligros enfrentarte. La Ruleta de Supervivencia determinará tu destino. En cada página hay una decisión que tomar. En ciertos momentos, tendrás que elegir en qué círculo poner la Ruleta de Supervivencia y hacerla girar para ver dónde te lleva tu aventura.
En la montaña, una mala decisión puede abocarte al desastre... ¿Tienes la suerte, los conocimientos y la habilidad necesarios para sobrevivir?
LEYENDA
¡Conseguido! Sigue adelante.
Sigues con vida... aún.
Vuelve a intentarlo.
¡Has muerto! ¡Vuelve al comienzo!
PERDIDO EN LA MONTAÑA
¡Qué vistas! Estás sobrevolando los Alpes en helicóptero. La piloto, Sofía, te ha recogido en el aeropuerto de Turín, y ahora vas de camino para reunirte con el abuelo Harry en su campamento alpino. Entre el estruendo de las palas del rotor, le cuentas a Sofía los planes de tu viaje. ¡Pam! El helicóptero tiembla. Miras por la ventanilla y ves que hay una nube de humo detrás.
—¡Mayday, Mayday, Mayday! —repite Sofía por radio mientras agarra con fuerza la palanca de control—. ¡El motor ha explotado! —Nos hemos quedado sin potencia. Voy a intentar aterrizar, pero no sé si lo lograremos—. Señala hacia la parte trasera del helicóptero.
—Rápido, agarra un paracaídas. Tienes que saltar.
Te metes en la parte de atrás y, con las manos temblorosas, empiezas a abrocharte un paracaídas. Lo has visto hacer antes, pero los recuerdos que tienes son vagos. Esperas haberte atado bien las correas. —¡Ahora! —dice Sofía—. ¡Es el momento!—. La compuerta se abre y te encuentras con una visión vertiginosa. Agarras tu mochila, buscas la cuerda del paracaídas y saltas...
Lo primero es calmarse. Hay que controlar la respiración y el ritmo cardíaco. Ten presente que muchas personas han sobrevivido en situaciones parecidas.
Ser consciente de que se est perdido en la naturaleza puede asustar, pero es importante que no te entre el p nico, ya que te puede llevar a tomar decisiones arriesgadas. Antes de precipitarte, haz un STOP:
EN CABEZA
Intenta pensar con calma: el cerebro es la principal herramienta de supervivencia. Cada situación de supervivencia es distinta. ¿De qué dispones que pueda resultarte útil?
OBSERVA
Observa con atención el entorno. ¿Hay algo que te resulte conocido? ¿Ves alguna carretera o algún río cerca?
PLANIFICA
Traza un plan de acción. Una vez que lo tengas, te ser mucho m s f cil centrarte y tener una actitud positiva.
PRIORIDADES DE SUPERVIVENCIA
LA «REGLA DEL TRES»
1.En entornos hostiles, se puede sobrevivir unas TRES HORAS sin tener un refugio ni protección contra el frío o el calor extremos. En la montaña, el enemigo es el frío.
2.Se puede sobrevivir unos TRES DÍAS sin agua. Esto no es más que una guía, y no debes tratar de forzar el cuerpo hasta llevarlo a este límite. Tras buscar refugio, la siguiente prioridad debe ser encontrar un suministro de agua limpia. La deshidratación puede matarte.
3. Se puede sobrevivir hasta TRES SEMANAS sin comida (si se tiene agua y refugio). Pero en entornos nevados, es importante poder comer para, así, darle al cuerpo el combustible que necesita para combatir el frío.
El aterrizaje es duro, pero estás de una pieza. Durante unos segundos se te se dispara el corazón: ¡has sobrevivido al salto! Pero entonces miras a tu alrededor: estás rodeado de picos nevados que se extienden hasta donde alcanza la vista. Te has quedado tirado: estás perdido y solo en una montaña helada. Respiras hondo e intentas no dejarte llevar por el pánico: sabes que tu abuelo Harry te diría que mantuvieras la calma. Ponderas la opciones que tienes. En muchas situaciones similares, lo sensato sería quedarse en el lugar y esperar a que te rescaten, pero no sobrevivirás mucho tiempo con ese frío.
¿Tal vez deberías ir cuesta arriba, en la dirección en la que ha caído el helicóptero? Has oído a Sofía enviar un mensaje de emergencia por radio, así que tal vez vaya un equipo de rescate al lugar del accidente. Además, Sofía puede estar herida y tal vez necesite ayuda...
¿O deberías adentrarte en el valle e intentar llegar a un pueblo de montaña? Ves un arroyo que podría conducir a la civilización; además, dado lo escarpado del paisaje, parece sensato ir cuesta abajo en lugar de cuesta arriba...
De repente, recuerdas que llevas en la mochila un mapa que te dio tu abuelo. ¿Tal vez la opción más inteligente sea usar el mapa para encontrar su campamento? Al fin y al cabo, no puede estar muy lejos... ¡Es hora de que tomes tu primera decisión!
Para subir a buscar el helicóptero, VE A LA PÁGINA 8.
Para ir río abajo hacia un pueblo, VE A LA PÁGINA 34. Para buscar el campamento de tu abuelo, VE A LA PÁGINA 28.
ENTRE LA ESPADA Y LA PARED
Al descender, notas que los efectos de la altitud no son tan extremos. Descansas un rato en un lugar soleado hasta que te sientes mejor. Al mirar a tu alrededor, ves un sendero que bordea la ladera de la montaña hacia el norte: parece ir más o menos en la dirección en la que cayó el helicóptero. Decides seguir el sendero, que esperas que sea una ruta más suave que la cresta de alta montaña.
Todo marcha bien al principio. El sendero es benévolo y no demasiado resbaladizo. Incluso encuentras un hilo de agua de deshielo, por lo que puedes llenar la botella. A tu izquierda, la pendiente desciende de forma brusca hacia un barranco, pero piensas que, mientras te mantengas en el sendero y no hagas ninguna tontería, estarás bien. Te sientes bastante bien. Entonces te encuentras con que el camino está cortado por un desprendimiento de rocas. Tu ánimo cae. Las piedras parecen traicioneras y no te apetece trepar por ellas: te ves resbalando y cayendo valle abajo. Podrías intentar escalar por el acantilado, por encima del desprendimiento de rocas, y atravesarlo y cruzar al otro lado. También puedes optar por dar marcha atrás y buscar otro camino. Aunque, en teoría, volver atrás puede ser lo más seguro, no tienes ni idea de si encontrarás otra ruta y, además, te arriesgas a perder un tiempo valioso. ¿Qué eliges?
¡Vaya!Selevantauna nevascaytepierdes porcompleto. VUELVEALAPÁGINA6.
RETROCEDER Y BUSCAR OTRARUTA
Teresbalasyte tambaleas al borde del barranco. VUELVE A GIRAR.
Porsuerte,consigues encontrar otra ruta porlaladeradela montaña. VEALAPÁGINA26.
ATRAVESAR EL ACANTILADO
Seteresbalaelpie ycaescientosde metros sobre las rocasescarpadas.
VUELVE A LA PÁGINA6.
Mientras escalas, cae unpequeño desprendimiento derocas,pero lograsaferrarte.
VUELVE A GIRAR.
¡Uf!¡Consigues llegar! VE A LA PÁGINA26.
SUPERVIVIENTES REALES
En 2003, el alpinista estadounidense Aron Ralston se encontraba explorando el cañón Bluejohn, en Utah. Estaba solo y no le había dicho a nadie adónde iba. Se cayó por una grieta y un pesado peñasco le encajó el antebrazo contra la pared. Estuvo atrapado durante seis días sin visos de que lo rescatasen, sin forma de mover la roca y con una pequeña cantidad de comida y agua. Al final, agotado y deshidratado, tomó una gran decisión: ¡usó una navaja desafilada para cortarse su propio brazo! Luego, salió del cañón y se puso a salvo.