Perros que dejan huella | La gran experiencia de tener una heroína canina en casa

La gran experiencia de tener una heroína canina en casa

Lic. María Fernanda Peña Hernández

Foto: Delco Fergo Editorial

La Federación Canófila Mexicana, A.C. ha organizado muy atinadamente, junto con la institución que antes se llamaba Policía Federal, una acción que en realidad fue excelente para cientos de perros que formaron Foto: María Fernanda Peña Hernández parte de la planilla de esta dependencia gubernamental, otorgándoles la oportunidad de ser adoptados por familias o personas que les dedicaran todo el cariño y amor en sus últimos días de vida, y después de haber entregado sus mejores años al servicio de nuestro país. Fue así que el 25 de noviembre del 2019 tuve la gran fortuna de recibir en casa a Indie, como un integrante más de la familia. Desde el primer día que la vi sé que hubo una conexión entre nosotras, misma que con el tiempo se transformó en un amor profundo y confirmé con ellos que fue lo mejor que pude haber hecho por esa Cobrador de Labrador color chocolate, que con cariño la bauticé como La Neni; he de confesar que al principio me costó trabajo entender lo que es tener un héroe

Foto: María Fernanda Peña Hernández

canino, ya que están acostumbrados a cierta rutina, disciplina, juegos y sobretodo siempre estar pendientes de su manejador…había tenido experiencias anteriores con perros machos (mascotas), pero al convivir con ella me di cuenta de lo extraordinarias que son las hembras.

Indie me enseñó esa gran fuerza de nunca darse por vencida ante cualquier adversidad, gran guerrera, maestra, compañera, amiga, sostén... a disfrutar cada paseo (era lo máximo para ella) el sentirse siempre útil y ocupada, en todo tiempo se buscaba una tarea, olía cada una de las hojas de cualquier planta, pasto y/o árbol, lo gozaba. El tener persistentemente un objetivo y no darse por vencida hasta cumplirlo (el ganarse SU pelota).

Y lo más impresionante: nunca dejó de estar pendiente de mí, siempre cuidándome, en las noches, cuando veía que ya por fin me metía a la cama, hasta ese momento se iba a descansar a la suya, pero nunca sin estar atenta a cualquier situación.

Desde el primer día le prometí que conmigo iba a pasar sus mejores últimos días, semanas, meses o años y disfrutamos cada uno de los días, aprendimos muchas cosas juntas, nos “reímos” y hasta lloramos, iba a sus clases de natación, peloteábamos hasta el cansancio, conocimos nuevos amigos; eso sí, era muy selectiva con la gente que se

le acercaba, hasta eso me enseñó la princesa, que no debemos creer siempre en personas que se acercan con una sonrisa.

En una de las jubilaciones posteriores a la de Indie, fuimos de invitadas a una ceremonia similar y me quedé impactada en el momento en que se encontró con sus excompañeros (humanos) y el gusto que manifestó cuando volvió a verlos; les “habló”, les brincó, los besó y ahí me di cuenta que realmente la trataban súper bien, pues “estaba como pez en el agua” con sus amigos.

El pasado 24 de marzo de 2021 cruzó al arcoíris de estos seres hermosos… aún no me acostumbro a no verla todos los días (desde que estuvo conmigo siempre fue mi despertador a las 6:00 a.m. sin importar que fuera sábado o domingo, porque era el horario que ella decidió para su desayuno, jajajaja), pero me quedo tranquila ya que un día antes de dejar este plano estuvo contenta, jugando, se ganó sus premios, siempre fuerte como una gran ¡¡Heroína Canina!!

Afortunadamente pudimos convivir dos años cuatro meses, los cuales fueron de calidad al 100 %.

No me queda más que agradecer por haber tenido esta gran oportunidad de convivir con una Heroína Canina en casa, de las mejores experiencias.

Hasta siempre mi ¡¡Gran Guardiana de Chocolate!!

Foto: María Fernanda Peña Hernández