Cortesía
DOMINGO 11 de marzo de 2018 / Núm. 356
En proceso “Tobías en el fin del mundo” POR ESTEFANIA IBAÑEZ PÁGINAS 4 Y 5
EL LOUVRE DE PARÍS
Por José Carrillo Cedillo* Página 2
DOMINGO 11 de marzo de 2018
2
El Louvre de París
Por José Carrillo Cedillo*
C
umpliendo la promesa de escribir más ampliamente del museo van mis impresiones. Se podría decir que el Louvre de París es el museo de pintura más famoso del mundo occidental. Sí, y una razón es la fama lograda por los impresionistas franceses que deslumbraron a los artistas de su época. Los atraía como moscas de
todos los rumbos cardinales, lo que demuestra su importancia cultural y también el que albergue milenios de cultura y su visita deje al que lo disfruta un sentimiento de satisfacción de ser humano. Pocos museos pueden presumir un contenido tan rico y variado como este museo, pues reúne obras desde el siglo XIII hasta el XIX de todos los géneros y dimensiones.
“En los años setenta del siglo XX se demostró que la afluencia de visitantes se había incrementado considerablemente pasando obras al Museo de Orsay a la orilla opuesta del Sena e inaugurado en 1986”. *Artista plástico y docente con más de 30 años de trayectoria.
Espacio único
Fue fundado en 1793 tras el Ashmolean Museum de Londres. Aunque el edificio que lo alberga es más antiguo y fue modificado a lo largo de siglos por órdenes de los diferentes reyes que gobernaron Francia y llenaron con obras adquiridas por ellos para su goce personal todas las salas. Al triunfo de la revolución la galería real se convirtió en nacional se requisaron obras de iglesias y particulares para enriquecer aún más su acervo. En 1798 llegaron de Italia verdaderos tesoros y también flamencos y holandeses por lo que el museo era considerado una institución nacional. Se consiguieron obras renacentistas y de Egipto por el famoso Jean Francois Champoleon en 1826. Es importante mencionar que las diferentes salas se construyeron con iluminación cenital. En los años setentas del siglo
Cortesía
XX se demostró que la afluencia de visitantes se había incrementado considerablemente pasando obras al Museo de Orsay a la orilla opuesta del Sena e inaugurado en 1986. Después de la Segunda Guerra Mundial en 1984 se comenzaron con las obras para el Grand Louvre, su superficie actual es de 40 hectáreas y 60 mil metros cuadrados para las salas de exposición. La cereza del pastel y símbolo del nuevo museo es la pirámide de cristal que fue inaugurada en 1989 y que se alza en medio del patio Napoleón y que fue proyectada por el arquitecto Leoh Ming Pei. Visítalo no te arrepentirás.
Suplemento Cultural de Periódico
Dirección General Ignacio Solorio Arroyo Gerente Administrativo Alfredo Tapia Burgoin Director Editorial Enhoc Santoyo Cid
“Fue fundado en 1793 tras el Ashmolean Museum de Londres. Aunque el edificio que lo alberga es más antiguo y fue modificado a lo largo de siglos por órdenes de los diferentes reyes que gobernaron Francia y llenaron con obras adquiridas por ellos para su goce personal todas las salas”.
Gerente comercial Oralia Tinoco González Coordinadora de publicidad Luz Mar Bárcenas Editora Estefania Ibañez Coordinadora Diseño Ana Salgado de Anda Diseño Lydia Sánchez Olachea Críticos / Colaboradores Hugo García Michel, Minerva Muñoz, Gerardo Sánchez, Rolando Ísita Tornell, Marco Moreno Corral, Miguel Nuñez, José Carrillo, Isaac Rosas, Rodrigo Cardoza, José de la Rocha, Sofía González, Liz Durand, Álvaro Díaz, colaboradores de la UNAM, Rod Moro y Lesli Mejia. Correo electrónico palabra@elvigia.net Teléfonos para publicidad 120.55.55, ext. 1030 publicidad@elvigia.net Ensenada, B.C. México.
DOMINGO 11 de marzo de 2018
Por Rolando Ísita Tornell*
M
araña Cósmica, el ocurrente título de mi columna de los lunes en el diario El Vigía, tiene su épica, su leyenda, su narrativa ligada al reto y fascinación por compartir la sorprendente ciencia, las maravillas de la naturaleza, la vida, el cosmos; además de las emocionantes aventuras de los científicos -mujeres y hombresy su astucia para arrancarle secretos a la materia y la energía, a lo vivo y a lo inerte; sin dejar de lado lo que nos hace humanos: la palabra, el lenguaje. Según mi criterio como divulgador de la ciencia, la forma más idónea para enterarse cómo funciona la ciencia, cómo le hacen los investigadores para indagar en la intimidad de la materia acusadamente invisible para nuestra mirada, es metiéndose a sus facultades, escuelas, centros o institutos de investigación. Igual que si quieres conocer un país y sus habitantes es mejor habitarlo que visitarlo, subirse a sus transportes, comer sus alimentos, adquirirlos en los mercados, las plazas, sobrevivir como ellos cada día, meses, años. La ciencia había entrado a la agenda de la opinión pública en México, se promulgó la Ley de Ciencia en el umbral del neoliberalismo, el fantasma del financiamiento público sólo a la ciencia que “resolviera problemas nacionales” recorría los colegios, los pasillos y los seminarios. Quien plantease tal despropósito estaría expresando su ignorancia de cómo funciona la ciencia, esa forma especial de ver, pensar, entender, explicarse y a veces reproducir la naturaleza, el mundo, la vida, el cosmos, que nos ha permitido adaptarnos y sobrevivir como especie. Más que nunca, la ciencia pedía a gritos el apoyo social al
3
más humano y útil de los quehaceres y, a su vez, despertar la conciencia de la responsabilidad social de los investigadores devolviendo con generosidad y gratitud ese patrimonio humano a la sociedad que la sostiene con sus impuestos. Mi olfato periodístico consideró a la astronomía la disciplina más amenazada, “esa no resuelve problemas del planeta, vaya, ni del Sistema Solar”, su objeto a investigar está a miles, millones y miles de millones de años luz distante de nosotros”. El reto novedoso e innovador Se presentó una feliz coincidencia, un buen amigo astrofísico y roquero requería apoyo periodístico para celebrar un international workshop, un taller especializado sobre el Gran Telescopio de Canarias, el telescopio óptico más grande del mundo (10.4 metros de diámetro en su espejo primario), y sus primeros instrumentos de detección habían sido diseñados y construidos por astrónomos y técnicos mexicanos de la UNAM y un tecnológico de Conacyt, ganando licitaciones internacionales. Se haría en un lugar muy público, en el emblemático Castillo de Chapultepec, porque ahí estuvo el primer observatorio astronómico nacional, y se convocaría a todos los medios de comunicación posibles a su inauguración, esto último era mi trabajo. El evento tuvo éxito mediático y terminé invitado a hacerme responsable de una oficina de información para el público en el Instituto de Astronomía durante seis meses, que se convirtieron es seis años. El reto fue novedoso, innovador, hacer público el quehacer de la astronomía de forma profesional y de tiempo completo,
no “ahí cuando tenga tiempo” y no sólo cuando se descubra algo (lo cual no sucede con frecuencia, aunque se quiera). Proyectos estratégicos, de oportunidad, departamentos y líneas de investigación, atención a los medios y al público, conferencias de prensa, entrevistas a investigadores, historia de la astronomía mexicana para el público (que tiene mucho de épica, de gestas), actividades públicas, escribir artículos, comunicados, notas informativas y, lo mejor de todo, recibir clases personales de astrofísica casi a cualquier hora y momento por los actores del descubrimiento (si lo había) o “por pura curiosidad”. Origen del nombre Una de las liebres brincó: astrónomos del instituto detectaron materia perdida, poco densa y caliente en el espacio intergaláctico, además obtuvieron indicios que se trata de átomos de carbono, nitrógeno, hidrógeno y oxígeno (¡elementos precursores de la vida!, pero muy poquitos y separados unos de otros), el descubrimiento fue publicado en revista astronómica internacional de gran prestigio. Es materia conocida, no la exótica “oscura”, estaba perdida porque en los inventarios de lo conocido, 5 por ciento de todo el Universo, teníamos un faltante ¿dónde está? Entre las galaxias parece no haber nada, todo negro, y la única forma de saber si ahí hay algo es que emita ondas de luz o partículas de energía. ¿Qué tal si observamos uno de esos chorros de luz y energía poderosos que lanzan al espacio objetos como los cuásares, que el chorro transite por ese espacio y venga en dirección a nosotros? La física que conocemos nos dice que si detectamos que ese haz de luz que viajó miles de millones de años luz disminu-
ye su intensidad se debe a que ha sido absorbido por algo, y si la onda absorbida es la huella digital de algún elemento, sabremos qué es, ¡además su temperatura! Geniales, creativos, astutos los astrónomos, y en la charla explicativa surgió la “cosmic web”. Si nos alejáramos del Universo y lo viéramos desde afuera, percibiríamos una estructura parecida a una esponja, o como si nos hubiéramos metido al cerebro y viéramos el tejido neuronal, una maraña de fibras, nomás que de galaxias. “Red cósmica” no me convencía, una red nos da idea de una de pescar, o la de una cancha de tenis, la de la potería en el futbol. Además, red en inglés se escribe “net”, me parece más indicado “maraña”. -Si es para que entienda el público, ponle como te convenzaterció mi amigo el director del instituto. Más adelante surgió la oportunidad de colaborar con un blog en un diario nacional en su versión digital, que apenas comenzaba y pocos aceptaban colaborar. Los editores querían que fuera de todas las ciencias y no sólo de astronomía. Le venía bien a la estrategia de comunicación pública de la astronomía
“usar todos los medios y soportes posibles”. Si no podía tratarse sólo de astronomía, ¿cómo bautizarla “sexy”, que indique ciencia, y pueda habar de todas? Reflexioné que si el Universo, las estrellas, fabrican el material de lo que está hecho todo, hasta nuestros cuerpos, y en los recovecos de la “maraña cósmica” hay elementos precursores de la vida y hasta moléculas de agua, ¡llamémosle así a la colaboración periodística, y me permitirá hablar de cualquier disciplina científica! La historia se repite, a 2 mil 800 kilómetros de casa; de las inmensidades del Universo ahora son las inmensidades del átomo y sus partículas, pero también en lo que tiene que ver la ciencia con el arte, la historia, la sociedad, la economía, la política. La astucia de los investigadores y manipuladores de los átomos es diferente pero igual de sorprendente y creativa que los indagadores de los astros, y será un privilegio compartirlo en la Maraña Cósmica, ahora con los lectores de El Vigía todos los lunes. *Integrante del área de Comunicación de la Ciencia UNAM, Ensenada y divulgador de la ciencia desde 1982.
4
En proceso “Tobías en el fin del mundo” Es una obra original de Goyo Carrillo y dirigida por Michelle Guerra. Previo a su inauguración en abril de este año, desarrollan un trabajo arduo y una campaña de recaudación de fondos
DOMINGO 11 de marzo de 2018
Por Estefania Ibañez
D
ías tranquilos en gados con un poc fatalidad, es la trad ción de la vida de Tobías. É del puerto de Ensenada, t 30 años y trabaja en una titución pública. Un día cualquiera, mien come en un restaurante entera de que debe salva mundo. La historia transcurre t bién con Danika, una mot dora profesional aferrada idea de que Tobías es el ele para proteger a la humani pues el interpretador de ños, Onírico Hashmallim augura a la joven que esa tuación catastrófica la con rá a través de un sueño. Las hazañas que hará
Las personas interes se estrenará el viern Benito Juárez, pue página: http
La vida de los personaj
Con el interés de compar esencia de la puesta en escen sus personajes, la directora M lle Guerra, los actores Goyo rrillo (Tobías), Javier Balles (Onírico) y Daniela Pecont (D ka), expusieron algunos elem que forman parte de la pieza Ballesteros contó que On Hashmallim en la obra perte a un programa de televisión y vive de ilusionar a las pers “Desde joven tiene esa ide un vividor, un personaje que
DOMINGO 11 de marzo de 2018
5 Estefania Ibañez / El Vigía y Cortesía
nfanco de ducÉl es tiene ins-
ntras e, se ar al
tamtivaa a la egido idad, suem, le sa sinoceTo-
bías, los misterios que resolverá Danika y la personalidad de Hashmallim, lo descubrirá el público del estado en abril de este año, por medio de la puesta en escena “Tobías en el fin del mundo”. La pieza dramática es original de Goyo Carrillo y está dirigida por Michelle Guerra, quienes integran Colectivo de Teatro en Espiral, aunque previo a la inauguración han desarrollado un trabajo arduo y una campaña de recaudación de fondos. Acciones que realizan con honestidad para ofrecer a los bajacalifornianos un producto que se caracterice por la excelencia, provoque risas y reflexión, así como para establecer el nombre de Ensenada en el mapa teatral de México.
sadas en apoyar la obra que nes 13 de abril, en el Teatro eden hacerlo a través de la p://goo.gl/zKwrRa.
ajes
rtir la na y a Micheyo Casteros Danimentos za. nírico tenece n local sonas. ea. Es e hace
servicio emocional y la gente le suele creer, pero él sólo está enfocado en que le vaya bien”, subrayó el actor. Pecont dijo que a pesar de que Danika es joven, desde hace 20 años no puede soñar. Esto lo relaciona por la ausencia de su padre y una decisión que él tomó, pero que influyó drásticamente en la vida de ella. “Es motivadora profesional. Se involucra en ese tema para ayudar a las personas y evitar tragedias. “Ella no cree en charlatanería de
un interpretador de sueños, sin embargo, conoce a Hashmallim y este le dice lo del sueño, lo cual se hace realidad”, reflexionó Daniela. Entretanto, Goyo destacó que Tobías difícilmente sale de su zona de confort, prefiere no hacer actividades que posiblemente le generen una decepción. “La vida no lo ha tratado bien y sus días son rutinarios. Pero se envuelve en la aventura por el sueño de Danika, suceso que lo saca de su zona de comodidad y hasta lo invade”, refirió Carrillo.
Participación en equipo El guión de “Tobías en el fin del mundo” es creación de Goyo Carrillo, no obstante, para aprobar los ingredientes que hacen singular a la obra, todos los integrantes del colectivo se involucraron en la edición, lo cual ayudó a concretar un diálogo significativo que también se enfoca en destacar lugares de Ensenada y Mexicali. Al respecto Michelle mencionó que es satisfactorio coordinar una obra que contiene características del puerto y sus habitantes. “Nos identificamos por ser tranquilos; pero hay más detalles que queremos mostrar, como aspectos que hablen de la ciudad, por eso también decidimos que una de las voces de la obra será la de un reconocido locutor
de Ensenada”, explicó. Financiamiento del proyecto Este proyecto en el que participa también el iluminador Christian Rivero, de Merida, Yucatán, no tiene un apoyo económico específico, razón importante que motivó a los actores y a la directora, a programar un financiamiento colectivo por medio del sitio web Kickstarter. Lo recaudado ayudará a cubrir inversión de escenografía, vestuario, utilería, gastos de operación y promoción, y estará vigente hasta el 10 de abril. La puesta en escena tiene elementos que la hacen única, además de un gran trabajo en equipo, lo que se traduce a una invitación para descubrir la intrépida aventura que emprenderán los tres personajes.
DOMINGO 11 de marzo de 2018
6
ATERRIZAJES LOS LITERATOS COMPLEJOS O LOS COMPLEJOS DEL LITERATO Cortesía
La verdadera imaginación poética, (…) es siempre creadora de mitos. Octavio Paz
Por Adán Echeverría* ACTUALMENTE los jóvenes hablan de otros así: “Tengo un amigo literato”, “conozco a un filósofo”, “mi compa es psicólogo y te analizará”. Pero el primer ejemplo es de un recién graduado de la licenciatura en Literatura, el otro estudia su licenciatura en Filosofía y Humanidades y el último está por terminar Psicología. Cuando han abandonado la academia y desde corta edad han sobrevivido trabajando, dicen de ellos mismos, “soy periodista”,
Diferencias en trato
Recuerdo a un compañero, de esos que conmigo disfruta hacer versitos y participar en concursos y premios, perseguir becas, desanimarse, volver a animarse, y hasta caer en el clásico: “seguro está amañado este concurso”. Acudimos a una oficina a ver a una importante autoridad cultural y cuando el guardia de la entrada preguntó por nuestras generales, mi amigo dijo rápido “fulano de tal, escritor”, y levantó el mentón, como si el cielo se abriera y bajara Edgar Allan Poe en forma de
cuervo, mientras se escucha la voz de Carlos Pellicer decir “este chico es mi amado, en él quisiera poner mis confidencias”. Pero en vez de eso, el guardia de la entrada escribió en la hoja de registro: desempleado. Luego, carraspeando en el hartazgo, volteó hacia mí y dijo: - ¿Y usted? –solté mi nombre y recalqué, doctor en Ciencias. - Claro, doctor, -el guardia se enderezó en su asiento, cogió el teléfono muy derechito y apuntó- ahora lo comunico. Permítame un momento.
Desatino social
“Por eso me sigo preguntando si en verdad, como dicen los escépticos, los literatos somos gente compleja o acaso es que muchos “artistas” tienen complejo de literatos”. *Escritor y editor.
cuando hacen notas para el periódico local, “soy reportero”, de los que copian el boletín de prensa, “soy corrector de estilo”, pero trabajan de capturistas en alguna imprenta, “soy editor”, cuando pasan en un procesador de textos y arman lo menos en page-maker sus cuadernillos para imprimirlas en su impresora láser. “Soy columnista”, porque tienen su bitácora personal gratuita (blog). Hoy día los jóvenes suelen rellenar su currícula; fantasean acerca de sus publicaciones en portales del
Este desatino social entre enjuiciado y juez, tiene que ver con las múltiples oportunidades que se brinda a muchos de jóvenes y que luego son tiradas al caño. Cuántos de ellos reciben becas de arte y el recurso económico se les acaba consumiendo drogas o alcohol, para nunca publicar aquel poemario, aquel libro de cuentos, aquella novela. Una vez una amiga me contó que había conocido en una fiesta a un joven que consiguió un apoyo para pasar algunos meses en
Holanda para desarrollar un proyecto de creación artística. Cuando ella le preguntó qué tal era Europa, o qué le había gustado más de su estancia en aquel país, el joven contestó: - No tengo la menor idea. Estuve drogado todo el tiempo. Ahí las drogas son libres y nadie te juzga por mantenerte en el viaje. Y así se tiran a la basura las oportunidades. Se refuerzan los estereotipos que nos alejan de ser escritores respetados como lo fueron Guillermo Prieto, Manuel
internet, se enarbolan como personas de izquierda y dicen de todo aquel que les rodea:“Ese político es torpe, aquel es un seudo periodista, nosotros los editorialistas somos francotiradores, esa mujer ni sabe actuar, seguro que alguien le está dando alguna ayudadita para aparecer en el cine. “Con quién se llevará aquel para ser asesor del instituto de cultura, cómo puede tener un espacio en el periódico si no sabe poner las tildes en las palabras, cuál es su trayectoria”, denostando al otro.
No comprendo aún el significado del tipo diferente de trato que se dispensa a los compañeros que, como yo, nos dedicamos a la literatura (o a otra actividad artística), de los que abrazamos también alguna otra disciplina como carrera profesional. Generalmente la gente suele decir que los artistas que somos vagos, desempleados, mal vivientes. Quizá por eso el ideario, a manera de protección, de que muchos jóvenes digan de sus compañeros, “fulana de tal, lingüista”, por la estudiante de lengua y literatura, o “filósofo” al esAcuña, Alfonso Reyes, Federico Gamboa, Juan Díaz Covarrubias, Rosario Castellanos, Juana de Asbaje, Elena Garro, Fernando Benítez y Mariano Azuela, quienes desde corta edad trascendieron con su disciplina, sus lecturas, sus obras, su diario desenvolverse en la vida y el tiempo que les tocó vivir. Con disciplina, esfuerzo y dedicación. Por eso me sigo preguntando si en verdad, como dicen los escépticos, los literatos somos gente compleja o acaso es que muchos “artistas” tienen complejo de literatos.
Descalifican al contrario lo mismo que festejan el logro de un amigo, siendo ambos de la misma escuela, de la misma generación, de la misma edad, del mismo estrato social, poseedores de la misma cultura neocomunicativa (academia más internet). Lo real es que las palabras de Rubén Darío acerca del tesoro que puede ser la juventud, ha caído en la cursilería con destino al olvido. Ser joven se ha vuelto sinónimo de vago, y va junto con pegado a eso de pretender ser artista (en cualquiera de sus disciplinas).
tudiante de Filosofía y Letras o Filosofía y Humanidades. Recuerdo, por escritos del siglo XIX, cómo un estudiante de medicina que seguía siendo bachiller era respetado por la sociedad. Un ejemplo puede ser Manuel Acuña, quien se quitara la vida a los 24 años pero que, como estudiante de medicina, era respetado socialmente e invitado, por los maestros y las autoridades educativas, a dar lectura a sus poemas o a ser quien dijera los discursos en los eventos públicos o en los festejos del liceo.
DOMINGO 11 de marzo de 2018
7
Un sueño redondoo
H
abía una vez un niño que soñaba con ser mayor para conocer la respuesta de todas las preguntas. Y para que nadie volviera a decirle: —Ya comprenderás eso cuando seas mayor. El niño vivía en una casita que soñaba con ser un rascacielos, para que se mirara desde todos los lugares. Y para que en su interior habitaran cientos de personas. La casita se hallaba en un pueblo que soñaba con ser una ciudad para aparecer en todos los mapas. Y para recibir todos los años miles de visitantes. El pueblo pertenecía a una pequeña nación que soñaba con ser una gran nación, para que sus habitantes se sintieran orgullosos de vivir en un país poderoso. Y para que los demás países la temieran y la respetaran. La pequeña nación estaba en la Tierra, que soñ aba con ser el Sol para ser la reina del Sistema Solar. Y para que los demás planetas giraran a su alrededor. Pero había algo que, ni la pequeña nación, ni el pueblo, ni la casita, ni el niño sabían. No sabían que el Sol, la gran nación, la ciudad, el rascacielos y las personas mayores también soñaban. Él soñaba con ser la Tierra para estar repleto de vida. Y para saber qué es la noche. La gran nación soñaba con ser una pequeña nación, para que sus habitantes se sintieran orgullosos de vivir en un país que jamás se había aprove-
Ausente Por Jezz Ortega* “…Y ahora, en mi recuerdo, aparecen difusas ante mis ojos diversas figuras. Creo reconocer entre esos pliegues que se desgarran y se entretejen, a mujeres como estatuas en fuga, andamios, la rutilante blancura de la porcelana, peces que navegan en una falda ceñida, la salitrosa fachada de una iglesia que se derrumba, el rostro de un anciano en una nube, la huida sin sentido de un papel que de súbito se estampa, que imprevisiblemente retrocede, gira, se detiene y avanza. A mi derecha, palmeras carcomidas, la luz escurridiza de la tarde que exagera sus muecas; el chirrido de una cortina que desciende se funde con los ruidos de la ciudad, sus gritos; el viento. Y yo creo distinguir entre este farragoso tumulto de presencias, mis zapatos gastados, mis sentimientos encallados como instintivamente en la oquedad, en las calles empinadas y solitarias, en los pasajes del vicio donde se habita como en cloacas, en la visión casi cercana de la otra tierra…” Fragmento de cuento, incluido en la antología “El Enamoramiento”. *Escritor.
chado de los otros. Y para que los demás países la quisieran y la respetaran sin tenerle miedo. La ciudad soñaba con ser un pueblo para que todos sus vecinos se conocieran entre sí. Y para que se ayudaran unos a otros cuando lo necesitaran. El rascacielos soñaba con ser una casita, para ser el hogar de una familia que se encariñase con ella. Y para que esa familia la considerase parte de su vida por haberla ido llenando de recuerdos año tras año. Y la persona mayor soñaba con ser un niño, para seguir creyendo que todas las preguntas tienen respuesta. Y para que nadie volviera a decirles: —Eres demasiado viejo para comprender eso. Y también para que todas las noches, después de acostarse, su madre le leyera un cuento. Y luego soñar. Proyecto Cuentos para Crecer.
Voces en el jardín Por Liz Durand Goytia*
AQUÍ EL POEMA DE LAS CUATRO DE LA MAÑANA Quiero escuchar el rumor de la hierba cuando duerme mientras el viento cala llevándose hojas secas. Quiero esuchar palabras para ese colibrí que ronda y dice con su voz de plumas que empieza a amanecer, que la lluvia alimenta mis brotes para convertirme en ramo que se abre entre sus alas, prestándoles pasión.
Quiero escuchar al grillo que muerde los misterios y saber que estoy viva, estoy viva, estoy viva. *Poeta y promotora cultural.
8
DOMINGO 11 de marzo de 2018
Atardecer en Ensenada Jesús López Gorosave Las fotografías pertenecen al fotógrafo residente de Ensenada. Las realizó desde la Universidad Autónoma de Baja California (UABC), unidad Sauzal.
@jlgorosave