LIBRO 4 BRUMM TAKATÁ
Hola, hola, hola… Aquí, LÍA, una de las cavernícolas que forma parte de la tribu de KAI; tribu porque somos un grupo de personas, y de KAI, porque nuestra líder, que es la fuertota que está detrás de mí, se llama así.
KAI
Los demás también tienen su propio nombre: de izquierda a derecha, están LOE, KIRIM, KRHU y BAS, que es el que te guiña un ojo. Delante de nosotros está SULA, una anciana muy sabia y un poco mentirosilla que se unió a la tribu el día en el que el mundo que conocíamos desapareció para siempre.
KIRIM
BAS
KRHU
ANTES DEL CAPÍTULO 1
Un mundo paradisiaco que no lo es tanto
Bueno, antes de empezar, por si no recuerdas lo que pasó la última vez que nos vimos, te voy a hacer un pequeño resumen, para que te pongas al día.
Por desgracia, habíamos descubierto que el nuevo mundo en el que todo era tranquilidad, ese lugar en el que las montañas no escupían fuego, la tierra no temblaba, los animales no tenían dientes de dos metros, y en el que las plantas, en vez de querer
comerte, te perfumaban con aromas fresquísimos, no era tan paradisiaco, ni tan solitario, ni tan seguro, ni tan nada como creíamos. Más bien era «muy» todo lo contrario.
¿Por qué? Pues porque enseguida supimos que no estábamos solos y que, al otro lado del desfiladero rocoso que flanqueaba nuestra playa, vivía otra tribu de cavernícolas. Eso, de entrada, podía haber sido una cosa ilusionante, ya sabes, socializar, hacer amigos, aprender otras costumbres… Pero resultó ser un problema; incluso te diría más: fue un gran hipermegasuperproblema enorme.
De nuevo te preguntarás: ¿por qué?
Pues porque nuestros vecinos ERAN CANÍBALES, o sea, que eran de ese tipo de personas que cuando te invitan a cenar no te ven como un invitado, sino como el plato principal del banquete.
A estos vecinos zampacavernícolas, solo los vimos una vez, pero fue más que suficiente para comprender que el mundo en el que vivíamos era
demasiado pequeño para compartirlo. Estaba claro: ellos o nosotros, y, siendo realistas, nosotros teníamos todas las de perder. Éramos muchos menos, y además no nos comíamos a seres que tuvieran nombre propio.
Como ves, esto de vivir en la prehistoria es tener siempre el corazón en un «ay».
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LIBRO 2
EL NUEVO MUNDO EL NUEVO MUNDO
LIBRO 1
LA DANZA DEL CUENTACONMIGO LA DANZA DEL CUENTACONMIGO
UNA SENSACIÓN QUE DA BOCADOS
BRUMM TAKATÁ
BRUMM TAKATÁ
La vida de una niña cavernícola no es precisamente lo que suele llamarse un paseíto por la prehistoria.
Sula, con sus ideas estrambóticas, asustó a los peligrosos caníbales del nuevo mundo y la tribu de Kai se salvó por poco de convertirse en su cena. Pero pronto se empieza a escuchar un sonido de tambores que no augura nada bueno…
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LIBROS LIBRES DE CO2
ISBN 978−84−10090−67−5
ISBN: 978-84-10090-67-5