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Colectivo Rita Lambert

Mi nuevo gallo

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Según me iba acercando a la pequeña puerta del corral veía más claro que el gallo había adoptado una postura que solo podía responder a dos cosas. Pudiera ser que el gallo estuviera ensayando una difícil postura de ballet o que se hubiera muerto. Cuando por fin estuve junto a él, pude comprobar que la extravagante postura se debía a la segunda posibilidad.

Mi gallo había estirado la pata. Como había tenido poco tino al elegir el lugar donde expirar, las gallinas que oyeron como yo me acercaba sospechando que iba a llevarles la comida, salieron disparadas hacia mí y pasaron por encima de él pisoteándolo sin comedimiento.

Sí, a él que había sido el rey y manda más en el corral. A partir de ese momento se tendrían que apañar ellas solas pues no había otro gallo más. Y aquí es donde empieza realmente lo interesante de toda esta vivencia.

A los pocos días de la muerte del gallo empecé a notar algunos cambios en una de las gallinas. He de decir que las gallinas eran todas del mismo color y de la misma edad. Ponían huevos hacía ya tiempo y lo que yo no podía saber es si todas ellas cumplían con sus obligaciones avícolas. Cada día que pasaba eran más evidentes los cambios que experimentaba mi gallina. La cresta empezó a crecer la papada ya no era la de antes. A continuación cambió el color de las plumas y al poco tiempo al amanecer aquel gallo -gallina empezó a cantar. Es cierto que al principio muy desafinado pero tardo pocos días en aclarar la voz y perfeccionar el canto. Ya estaba desempeñando perfectamente su papel, poniendo a cada una en su sitio y mandoneando a sus anchas. No tardé en ver a mi gallo con pasado de gallina montando sus antiguas compañeras de sexo. Lo único que no ha experimentado un cambio espectacular son los espolones que sigue conservando los de su vida anterior, casi imperceptibles. En un nuevo ataque de feminismo me da por pensar la valía de este nuestro sexo débil. Si hay que aguantar al macho se le aguanta. Pero si hay que sustituirle se le sustituye.

Luz Artesana COLECTIVO RITA LAMBERT

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