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SOS Ucrania Aurelio Maroto
L
a Solana escenificó su rechazo frontal a la guerra en Ucrania el pasado 3 de marzo, justo una semana después del comienzo de la invasión rusa contra su histórico vecino eslavo. La pequeña colonia de ucranianos residentes en nuestra localidad sintió así el apoyo moral de un pueblo en el que llevan media vida. Es el caso de Anna Karpinska, que llegó a La Solana a principios de siglo con su marido Sergio y su hija Caterina, entonces una niña de muy corta edad. Después vendría Martin, que ya nació aquí. Desde entonces, la familia de Anna ha progresado a base de trabajo, sacrificio y no pocas dificultades, como sucedió con su hermana Helena, que también vive en La Solana junto a su familia. Lo de menos es cuántos son, sino lo que sienten en este momento de zozobra. Viven estos primeros días de guerra con estupor y un enorme sentimiento de impotencia. “Cuando esto empezó era como un sueño que no podía estar pasando”, ha declarado a GACETA. “Los ucranianos no hacemos nada malo, solo queremos paz y libertad, y me da mucha pena que tengamos que
Anna Karpinska, con más de 20 años en La Solana, leyó el manifiesto a favor del pueblo ucraniano.
pagar nuestra libertad con tantas vidas”. Aunque Anna es natural de Leópolis (Lviv), ciudad al oeste de Ucrania y relativamente lejos de las ciudades más castigadas en el inicio de la invasión, la angustia es la misma que si viviera en Kiev o Járkov, por ejemplo. La concentración celebrada en la carpa de carnaval era toda una ironía. Pocos días antes había sido centro neurálgico de fiesta y alegría, y para
Carteles de apoyo a Ucrania en la concentración del 3 de marzo.
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colmo, a esas horas caía lluvia mientras en Ucrania caían bombas. Unos doscientos solaneros apoyaron el simbólico acto, algunos con pancartas que incluían lemas tan contundentes como No a la guerra o La Solana con Ucrania. “El apoyo moral hace muchísimo”. “Siempre me he sentido muy acogida en este pueblo y me está llamando gente que hacía mucho tiempo que no había visto; eso te da fuerza y ánimo”, reconocía Anna. El alcalde, Eulalio Díaz-Cano, pronunció unas palabras en nombre de la Corporación Municipal, representada por todos los grupos políticos, y de todo el pueblo en general. “Quiero que la comunidad ucraniana de La Solana sepa que su Ayuntamiento se va a volcar para prestar la ayuda y atención humanitaria que requiere la situación, ayudando en iniciativas de recogida de material, y cuando llegue el momento, que llegará, atendiendo a las personas refugiadas”. “Un país democrático ha sufrido una agresión por parte de un gobierno encabezado por un líder autoritario, y se trata de defender la democracia”. Ya han sido muchas las instituciones, asociaciones, pequeñas empresas o personas a título particular que han dado un paso al frente para ayudar. Pero el alcalde aclaró que conviene canalizar todo ese caudal solidario a través de los cauces que garanticen una buena coordinación y la seguridad de que todo el material llegará a su destino. Gaceta de La Solana
