6 minute read

Rafael Andarias Estevan

¿Es posible ver Argelia desde el Cabo de La Nao?

Rafael Andarias Estevan

Advertisement

| Foto 1

Hace unos años, charlando con Antonio Fontes, farero del cabo de San Antonio (impulsor para que se convierta en un centro de interpretación y no en un hotel) y del de la Nao, me comentó que, en cierta ocasión, hará unos treinta años, pudo divisar desde este último la costa de Argelia, en compañía de otros seis adultos críticos, es decir, sensatos y no influenciables. Me confesó que se quedó tan impresionado que buscó en un atlas y hasta en una carta náutica y que encontró dos picos en el Rif de unos 2.000 m y que, tal vez, y más si estaban nevados, fuera estos accidentes orográficos lo que vio o creyó ver. Pero la duda que seguía teniendo desde entonces era saber si eso era posible o si había sido un espejismo o un efecto óptico, y también me dijo que no lo había vuelto a ver de nuevo, aunque admitía que tampoco se pasaba el día mirando. (Es sabido que los días claros se divisa con nitidez Ibiza y que cuando se dan determinadas condiciones atmosféricas, incluso, la Sierra de Tramuntana de Mallorca). Me quedé con la misma duda, pero sin saber a quien preguntársela, hasta que el pasado mes de mayo cuando acudí a la Feria del Libro de Madrid, para firmar ejemplares de mi novela, tuve el privilegio de que se acercara Pere Planesas, a quien invité a mi caseta para saludarlo personalmente. En su día, me dirigí a él cuando era miembro

| Foto 2

| Foto 3 | Foto 4

destacado del Observatorio Astronómico Nacional (ahora es recién jubilado) para consultarle un asunto relativo a la hora republicana y nacional durante la Guerra Civil (un tema muy complejo que no se encuentra en Internet) que me era necesario conocer para el desarrollo de la trama. Antes de continuar debo aclarar que el Dr. Planesas es una autoridad científica de reconocido prestigio internacional en diversas áreas, entre ellas “la hora oficial en España y sus cambios a lo largo de la historia”, incluyendo la controvertida cuestión del horario adoptado en 1940 para que coincidiera con el establecido durante la Segunda Guerra Mundial en Reino Unido, Portugal y Francia, no con el de la Alemania nazi como erróneamente se suele afirmar. A partir de ahora verán que siempre que surja el tema del cambio horario cara al verano o el del cambio de hora para revertir el que se realizó hace casi ochenta años, aparece Pere Planesas en cualquier medio, incluyendo telediarios, y podrán decir con todo orgullo: “¡Yo sé quién es: es Pere Planesas!” Pues volviendo a mi encuentro de Madrid, mantuvimos una interesante charla que se deslizó por diversos derroteros (es una persona muy inteligente y de conversación brillante) hasta que, en un momento dado, me acordé de la duda de Antonio y se la planteé. Pere se quedó pensativo, con esa mirada de curiosidad que solo se puede vislumbrar en los científicos, ante un reto que les surge. Unos días más tarde recibí este correo:

No me he olvidado de tu pregunta acerca de la posible visibilidad de las montañas de Argelia desde el faro del Cap de la Nao, en Xàbia. Mi conclusión es que solo en unas condiciones excepcionales, de una fuerte inversión térmica en la zona de las montañas, sería posible verlas desde el faro.

| Foto 5

He realizado cálculos considerando la posición geográfica y la altura sobre el nivel del mar de la cabina del faro (122 m) y la posición y altura (2308 m) de la montaña más elevada de Argelia situada en la cadena costera (Tell Atlas), el pico Lalla Khedidja, que llega a estar nevado en invierno. La distancia sobre la superficie terrestre entre ambos puntos es de 434 km. La distancia del horizonte para alguien situado en el faro es de unos 43 km, suponiendo una atmósfera media normal La distancia del horizonte para alguien situado en la cima del pico mencionado es de unos 185 km, bajo la misma hipótesis. La suma de las dos distancias es de 43+185 = 228 km, alrededor de la mitad de la distancia geográfica entre ambos puntos. Por lo tanto, en condiciones normales no es posible ver el pico desde el faro. Cabe la posibilidad de que en circunstancias excepcionales la atmósfera no se comporte de manera normal. La refracción atmosférica puede desviar la trayectoria de la visual, como hace en el caso de los espejismos cuando el aire superficial muy caliente desvía la trayectoria de los rayos de luz hacia arriba. De modo contrario, si en un día de primavera grandes masas de aire caliente cubren las aguas todavía frías del mar, la luz puede ser desviada curvándose alrededor de la superficie terrestre de tal manera que recorre distancias más largas de lo normal y quizás podrían llegar a verse desde el faro las altas montañas costeras de Argelia. Adjunto un esquema explicativo. Es muy difícil de modelar

y hay que concluir que, en el caso de que ocurra, es algo excepcional. ¿En qué época del año dice el farero haber visto las montañas argelinas?

Me faltó tiempo para preguntárselo a Antonio que me dijo que lo vio de casualidad, sin buscarlo, y que sería por enero o febrero, al amanecer con el sol reverberando, cuando en esa época la atmósfera está limpia y sin humedad, lo que se dice por aquí “las calmas de enero”. Así se lo comuniqué a Pere que, enseguida, me contestó: Y concluyó Pere:

¡Ya tengo una anécdota más que contar en mis conferencias de divulgación! Hablando siempre se aprende.

Como te dije en el primer mensaje, el que se puedan ver esas montañases algo excepcional, que solo puede ocurrir en unas circunstancias atmosféricas muy determinadas. No sé si las que se dieron a principios de año las cumplían. En general, no debería ser así, pues a principios de año el Sol apenas calienta la atmósfera y menos aún al amanecer; salvo que una gran masa de aire caliente a baja altura llegue del sur. En cambio, en primavera y unas horas después del amanecer no se podría descartar.

Y unos días después me envío otro correo:

En conclusión, no sé lo suficiente del tema (ni conocemos las condiciones atmosféricas a lo largo de su visual en ese día) como para confirmar del todo o descartar del todo que efectivamente Antonio viese las montañas argelinas. En definitiva, dado el número de testigos y de que la teoría muestra que en circunstancias atmosféricas muy especiales es posible ver esas montañas que en condiciones normales están por debajo del horizonte, concluimos que Antonio está en lo cierto.

| Foto 7

Poco después, hice saber la respuesta de Pere a Antonio, alegrándose enormemente. De esta forma, quedaba aclarada la duda que arrastraba desde hacía treinta años y que, a buen seguro, cada vez que se asomaba desde lo alto del faro y miraba hacia Argelia lo asaltaría más de una vez

Nota del autor: Evidentemente, este artículo no lo podría haber escrito sin la colaboración de Antonio Fontes y Pere Planesas, que además revisó aspectos técnicos del mismo, por lo que debo mostrar mi más sincero agradecimiento a ambos. En realidad, pueden considerarse con todo el derecho coautores del mismo.

Las imágenes que ilustran el presente artículo son obra de los siguientes autores que las han cedido generosamente y dando su consentimiento: Foto 1 | Ibiza desde el cabo. Autor: Xàbia meravellosa Foto 2 | Mallorca e Ibiza desde el camí del Rebaldí. Autor:Toni Bolufer Foto 3 | Atardecer. Autor: Antonio Fontes Foto 4 | El faro en los años 30. Autor: Antonio Fontes Foto 5 | La roca en forma de nao. Autor: Antonio Fontes Esquema 6 | Esquema Faro de la Nao-montaña de Argelia. Autor: Pere Planesas Esquema 7 | Esquema Xàbia-Mallorca- Ibiza. Autor:Toni Bolufer •••

This article is from: