2 minute read
IES Antonio Hellín Costa
IES ANTONIO HELLÍN COSTA 20 anos contigo. O tal vez más. ˇ
En septiembre de 1999 abría sus puertas el primer instituto de Secundaria de Puerto de Mazarrón. El centro, en aquel momento aún sin nombre, pretendía satisfacer las necesidades de una población en crecimiento, que debía trasladarse hasta Mazarrón para completar sus estudios de Secundaria y Bachillerato.
Advertisement
Tras un inicio complicado, el instituto se consolidó como institución educativa de la mano de un Claustro que, con ilusión y entrega, debía construir esa estructura invisible, más allá de muros y pilares, que sostiene realmente un centro: su comunidad educativa.
Si hay algo que define a nuestro IES, es su fuerte sentido de identidad y pertenencia. En muy poco tiempo -veinte años no es nada- hemos conseguido entre todos un espacio preferente, no solo en el imaginario del municipio, sino en los corazones de madres, padres, alumnos, PAS, profesores, amigos y vecinos. Quien lo probó lo sabe. Y tal vez, un hecho que pudo ser un mero trámite administrativo, escondía realmente ese espíritu que nos representa con fortaleza como una familia educativa. ginable un instituto de Secundaria en nuestra localidad, ya preparaba a los jóvenes de entonces para las pruebas de Bachillerato en Murcia. Incluso los desplazaba por sus medios a la capital, y ejercía de padre, maestro y psicólogo durante los exámenes.
Ese hombre, de naturaleza indudablemente bondadosa, se llamaba D. Antonio Hellín Costa. Y fue precisamente ese nombre el que varios miembros de ese Consejo Escolar, -algunos alumnos suyos de entonces- propusieron unánimemente como denominación de nuestro IES.
Es por ello que, quizá son más de veinte años los que de un modo u otro, D. Antonio Hellín Costa ha tenido el privilegio de servir a la educación en Mazarrón, y es por este motivo -tal vez- que nuestro centro tiene un significado especial para toda la comunidad educativa, y una fortaleza y resiliencia que lo hace único.
Desde aquí, solo nos queda compartir esta inmensa alegría con Mazarrón, y sumar esta celebración a sus Fiestas de la Purísima Concepción, con el ánimo de seguir siendo el lugar elegido donde modelar a los jóvenes del municipio, para prepararlos ante los grandes retos que les presentará con seguridad el futuro. Al menos durante otros veinte años. O tal vez más.
En el Consejo Escolar del día 15 de diciembre de ese primer curso, entre los puntos del orden del día, figuraba la elección de un nombre para nuestro IES. De entre varias propuestas, destacó rápidamente la que buscaba hacer justicia con la persona que antes de que fuese siquiera ima-