COLABORACIÓN
El álbum carnavalero de
María Ramírez
La fotografía ilustra un momento de la actuación de Locas por el carnaval (2007). Una agrupación que tenía tres años de vida, tras la desaparición de Las Turuteras. Para la agrupación, fue un concurso inolvidable, pues pasaba a la final por primera vez en su historia. A nivel personal, fue un reto especial pues, por necesidades del personaje, tuve que estar toda la actuación sin moverme y con una camisa de fuerza puesta (de las de verdad). Este montaje de cuatro fotos representa, para mí, el comienzo en el concurso del carnaval, con la agrupación infantil Las Turuteras. Aunque yo ya había participado antes en la fiesta disfrazándome con mi familia. El collage es una especie de recuerdo de los distintos escenarios que he pisado en estos años de carnaval. El año 1993, de Pingüino fue en el Cine María Luisa, y el de Sumo fue la última vez que pisé esas tablas. Bueno, yo y el resto de carnavaleros. De Surfista, canté en el Centro Cultural Alcazaba. Los años en el concurso infantil supusieron una auténtica escuela de carnaval y de la vida que me han servido en años sucesivos, principalmente cuando tomamos la decisión de subir a adultos. Los recuerdos de los primeros años, han sido imborrables por todas las anécdotas vividas con los otros grupos infantiles. Hoy en día, todavía tengo compañeras a mi lado que también vivieron esos primeros pasos en la fiesta.
Esta fotografía es muy especial porque representa lo que hemos ido sembrando como familia. De lo que más orgullosa me siento es que mis padres me metieron el veneno del carnaval y, ahora, somos nosotros los que se lo hemos inculcado a nuestros hijos para que lo vivan con pasión y responsabilidad, como una forma de vida, desde el primer día de ensayo hasta el entierro de la sardina. Por cierto, el Martes de Carnaval… festivo siempre.
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