Puebla de Lillo

La cercana localidad de Pue-

bla de Lillo alberga interesantes opciones para el ocio y la cultura. Una escapada a este enclave ofrece la posibilidad de saborear un buen

plato de cocina tradicional, conocer más en profundidad la esencia de estas monta-

ñas y hurgar en la historia que dio vida al futuro de estos valles.

La localidad ha vivido hasta hace bien poco principalmente de la ganadería, actividad que ha ido sustituyéndose por el incremento del sector servicios, derivado de la estación de esquí de San Isidro y el desarrollo del turismo. Como elemento dinamizador de esta nueva etapa destaca el Centro de Interpretación del Parque Regional de Picos de Europa, ubicado en el viejo torreón. El centro ofrece las alternativas de visita del Parque y describe mediante paneles y audiovisuales la idiosincrasia de estos parajes, desde el punto de vista ecológico y humano.

Un poco de historia

La Edad Media fue la época del florecimiento económico, demográfico y cultural de Puebla de Lillo. En el siglo XIV la localidad pasa al dominio de la poderosa familia leonesa de los Quiñones o Condes de Luna. Numerosos

fueron los privilegios de los que gozaron sus habitantes de antaño.

A petición del Conde de Luna, el rey Don Juan I les exime de portazgos para que puedan mercadear por todo el reino, privilegio que sería mantenido hasta la época de Felipe III. Precisamente de esta época de esplendor es el insigne torreón que preside la población, en la actualidad restaurado, y que fue por aquel entonces mansión señorial. El edificio es cilíndrico y consta de tres plantas sostenidas por muros de dos metros de grosor. De su patrimonio eclesiástico destaca la ermita de la Virgen de las Nieves, situada a la entrada del pueblo, que data del siglo XVIII. Fue construida con una combinación de estilos entre barroco y neoclásico por mandato del prior del Convento de San Marcos de León y visitador de la Orden de Santiago.

Junto a la iglesia parroquial, se conserva un antiguo arco de medio punto que corresponde a la fachada del antiguo y ya desaparecido hospital de peregrinos, en la ruta del norte que unía Oviedo con León.