Uno de los mejores jugadores de fútbol que han pasado por la historia del CD Olvera ANTONIO PÉREZ GUERRERO

Uno de los mejores jugadores de fútbol que han pasado por la historia del CD Olvera

El equipo de casa está formado por: Antonio Sánchez, Enrique Salas, Victor Calvo, Montero, Clavijo, Pepe Villalba. Agachados: Bernal, Pastor, Manolo Palma, Hernández y David.

Enrique Pastor Martínez: hijo de Vicente y Dolores, nació en Morón de la Frontera el día 1 de Enero de 1928 y falleció el día 26 de Agosto de 2014 en su mismo pueblo natal.

Fruto de este matrimonio nacieron tres varones Vicente, Antonio y Enrique, siendo el más pequeño este último, de familia humilde, hornada y trabajadora. Sus padres viendo que era muy buen estudiante decidieron mantenerlo en el colegio hasta alcanzar bachillerato, él aprovecha esta herramienta para trabajar durante gran parte de su vida laboral como administrativo en distintas empresas. En 1952 a sus 24 años contrae matrimonio con su novia la Señorita Maria Angeles Escobar Lucena. De este matrimonio nacen 5 hijos, dos hembras y tres varones, Dolores, Ángel, Moisés, Vanesa e Iván.

Su vida deportiva ha sido más bien prospera pues siempre le aportó una ayuda económica a su familia ejerciendo lo que más le gustaba que no era otra cosa que el fútbol.

Siendo muy joven ya debutó en el equipo de sus amores, el Morón. Después jugó en varios equipos como el Utrera, Marchena, Arcos de la Frontera y Tánger, incluso fue llamado a la prueba con el Sevilla FC.

Asimismo, fue emigrante y llegó en su estancia en Alemania a jugar en el filial del Club Koln. A su regreso a España un buen día el Notario, y a la vez presidente del CD Olvera, el Señor Juan Acevedo Illana acompañado de su entrenador Jose de la Rosa se desplaza hasta la ciudad de Morón de la Frontera y se entrevistan con Don Enrique Pastor Martínez. Acevedo le presenta su gran prometedor proyecto a largo plazo, él lo estudia durante unos días y se pone en contacto. Pastor se desplaza a Olvera y estampa con su firma su ficha federativa con el club deportivo Olvera. jugador que pronto va a convertirse en el santo y seña del fútbol de nuestra ciudad.

Fue un futbolista llamado a ser un líder, poseía carisma, empaque, y una seguridad en sí mismo envidiable. Técnicamente como jugador tenía buen control tanto del juego como con el balón. Tuvo la gracia de contactar muy rápidamente a la afición y siempre fue un líder para sus compañeros,tanto dentro del campo como en los vestuarios, dando buen ambiente y aire fresco. Este buen ambiente también fue alimentado por compañeros suyos como Manolo Palmas, Enrique Salas, Paco Rocha y un futbolista que llegó a su mano, “Alcalaita”

El mismo ambiente que se creó entre jugadores y cuerpo técnico también fue refrendado tanto por el club como por la afición.

En aquel tiempo el fútbol en Olvera se vivió con gran euforia. Tanto fue así que a los trabajadores que iban a faenar el campo, para poder ir al partido que se jugaba a las cinco de la tarde, se les dejaba entrar con sus escardillos y a los cavadores con su legón, cosa que hoy sería imposible. Aún recuerdo que en el campo no cabía ni un alfiler. Todo esto fue dirigido y orquestado por Don Juan Acevedo Ilana y como no a los 71 compromisarios a quienes siempre estaremos agradecidos todos los olvereños/as. Esos 71 compromisarios que hicieron posible realizar una obra, un poco faraónica, exponiendo parte de su patrimonio, con un montón de metros de tierra que mover, pero que también sirvió para darle vida a nuestro pueblo y nos dejaron un lugar para el disfrute de muchísimos deportistas que han pasado por este estadio. Han pasado muchos grandes jugadores, incluyendo a los nombrados con anterioridad, como son Pepinillo Villlaba, Antonio Sánchez “El campero”, Cazalla, Paquín, Gabriel el Mosco, Juan Perchi, Beroni, Paco el Cabrero, Pacio el Lirio, José Guerrero, Francisco Párraga, José Cot, Paco Menacho, Manuel Flores y el ultimo que nos dejó, Antonio el Moro. Estos nombres son para refrescar la memoria de nuestra tierra.

Enrique Pastor Martínez regentó el “Bar Pastor” en el centro de nuestro pueblo, en la calle Llana, formaba parte del Rancho Grande, esquina con la Calle Los Cantillos.

Yo era un niño pero recuerdo ese Bar, no se vaciaba nunca. También conocí un grupo de unos 16 o 20 amigos y fieles clientes. Recuerdo a algunos de ellos, el coki, el taxista, Paco Guerrero, Joseito el culón, Pepe, el maestro Recio y los hermanos Corrales, entre otros. Fueron muy buenos amigos y alguno de ellos ayudó al CD Olvera, como Joseito Salas que llegó a ser presidente.

Deseo que la historia que he escrito haya sido de vuestro agrado. Mi intención no es otra que dar las gracias a todos los que han hecho algo bueno por nuestro pueblo. Muchas gracias a todos los lectores y lectoras, Soy vuestro paisano. Siempre llevaré en mi alma a nuestra bendita Tierra y a nuestra patrona la Virgen de los Remedios.