Soy tu madre

Soy tu madre, sí… La que un día te parió. La que el cambio de figura lo más mínimo importó. Por eso fueron mis pechos los que a ti te amamantaron. Y no sabes cuántas noches, mis ojitos te velaron.

Soy tu madre, sí… Quien día a día te vio crecer. Quien sufrió tantos percances hasta hacerte una mujer. Y aunque hoy ya lo seas, siempre mi niña vas a ser.

Soy tu madre, sí… La que de ti se preocupó. En que tuvieras enseñanzas y con su esfuerzo te educó. La que te dio una bofetada, y en silencio la lloró.

Soy tu madre, sí… La que enfermaste y te cuidó. Y aunque estuviera cansada ella nunca se durmió. Cuántas veces te destapaste, y fui yo quien te tapó.

Soy tu madre, sí… La que siempre te guió. Pa’ que anduvieses buen camino, y del malo te apartó. Y fueron muchas las plegarias, que yo le recé a mi Dios.

Soy tu madre, sí… La que apenas se maquilló. La que si había poca comida un vaso de agua se bebió. Y con sus tripas gruñendo, más de una noche se acostó.

Soy tu madre, sí… La que tanto trabajó. Y gracias a tantas horas a ti nada te faltó. Aunque hoy mi cuerpo pague, por lo mucho que luchó.

Soy tu madre, sí… La que hoy toda arrugada, se pone toda impaciente esperando tu llegada. Y viendo que no viniste, llora y llora desconsolada.

Soy tu madre, sí… Y no llego a comprender, por qué siendo buena madre, no se sabe agradecer.

Manuela Santillana