Introducción

INTRODUCCIÓN Introducción

Granada es arte en estado puro. Su patrimonio monumental y artístico fruto de la influencia musulmana, judía y cristiana la hacen un destino inigualable de singular belleza. Visitar la Alhambra de Granada es uno de sus principales reclamos, sin embargo una vez que comience su visita a esta ciudad descubrirá que sus encantos van mucho más allá de este conjunto monumental creado a lo largo de más de seiscientos años. Granada se ha ido transformado a lo largo de la historia en una urbe dinámica y moderna pero ha sabido mantener el encanto y carácter de antaño; así junto a la Alhambra, el Generalife y el barrio del Albaicín, declarados Patrimonio de la Humanidad conviven otras riquezas patrimoniales entre las que podemos destacar su Catedral, Capilla Real, Monasterio de la Cartuja, Monasterio de San Jerónimo, Parque de las Ciencias y Museo Caja Granada. Los barrios desprenden el calor y la personalidad de sus gentes. Es todo un lujo pasear por el Realejo (barrio judio), el Abaicín, (barrio árabe), el Sacromonte, (barrio gitano) o el centro de la Ciudad. Su gastronomía y oferta culinaria es otro atractivo indiscutible que bien merece la pena descubrir, no en vano Granada es una ciudad en la que se “rinde culto” al “arte del tapeo” que da paso al disfrute de la buena mesa. Y por si todo esto fuera poco, además hay que sumarle el amplio abanico de ocio con el que cuenta la ciudad. Sus fiestas, sus tradiciones y festivales se desarrollan a lo largo del año haciendo que visitarla en cualquier fecha del calendario sea todo un acierto. Visitar Granada y estremecerse, es todo en uno. Un cúmulo de sensaciones se esconde en cada uno de sus rincones y dejan huella en el alma. Granada es el motivo para perderte, para vivir, para encontrarte...